Cronología del conflitco en Seral y el secuestro de Molaguero, según la Federación Anarquista del Uruguay
(Publicada en la revista Lucha Libertaria)
"Revista Digital Nodo50 - Territorio virtual para los movimientos sociales y la acción política
(con citas de "Marcha" del 7 de julio de 1972)
El secuestro de Molaguero
"Aquí empieza una historia de infamias, toleradas arriba y resistidas abajo, ejemplar de los peleados tiempos que vivimos. Durante muchos años el señor Molaguero ejerció en su fábrica de calzado de Santa Lucía un cacicazgo despótico, hecho de arbitrariedades chicas y felonías grandes. Impuso su ley agraviando de palabra a las mujeres trabajadoras, y sancionó a muchachos encerrándolos en un altillo cuya escalera desmontable hacía retirar, pretendiendo así convertir al castigado en hazmerreír de sus compañeros. Pagó los salarios que quiso (40% de los que correspondía), burlándose sistemáticamente de la ley y la equidad. Despidió gente cuya cara no le gustaba (así explicó el año pasado el despido de dos mecánicos)... despido a las mujeres embarazadas... Y amasó, como único dueño de SERAL una fortuna". 1
"Me aparece que va a ver que secuestrar a Molaguero, al hijo del dueño que también participa activamente en la Empresa y que ha estado insultando obreros y manoseando obreras y que es impulsor activo de la represión de los trabajadores de su fábrica. Este conflicto es posible que no lo podamos resolver sólo en el ámbito sindical". Con estas palabras aproximadamente, plantea León (el Loco) Duarte a la FAU la medida de apoyatura que estimaba debía tenerse preparada.
Se comenzaron las tareas correspondiente a la información. La cosa no resultaba fácil por la distancia y por la imprecisión inicial de los datos. Poco a poco se va emprolijando la cosa. Finalmente, después de cerca de 20 días, se ubican un par de lugares donde se podía hacer el "levante" de Sergio Molaguero. Se profundiza la información, se trata de confirmar bien los detalles. Se opta al final por hacer el operativo en la propia carretera en aquel lugar ubicado y por donde determinados días y horas regresaba Molaguero.
"Llegan los compañeros de FUNSA para ofrecer su apoyo y su experiencia en la formación del Sindicato de SERAL... Constituida la Unión Obrera de Seral con los 308 trabajadores de la fábrica, permanece junto a ella León Duarte, para aportar su experiencia en la conducción de un conflicto envenenado...
Molaguero acata el convenio durante nueve días. Después... amenaza con cerrar la fábrica si se le obliga a cumplir el convenio. Para ir haciendo boca, despide a treinta menores y a los dos mecánicos cuya cara no era de su gusto. Por primera vez se le enfrentan los trabajadores organizados, por primera vez estos tienen capacidad de respuesta. Al cabo de treinta y un días de huelga, todos los puntos del convenio son reiterados por las autoridades nacionales, con expresiones de asombro... por las utilidades que deja a su dueño la fábrica de calzados y por el desprecio de aquel hacia la legislación laboral que ampara al trabajador. Pero estos también son tiempos de desprecio: la ley que imponía deberes elementales a SERAL no se aplica, y en cambio los trabajadores empiezan a saber qué es ser perseguido por razones gremiales. Literalmente: en esferas oficiales se les da la razón, y en Santa Lucía marchan presos. Con firmeza insólita para un sindicato que contaba sólo con tres meses de vida, la Unión de Obreros de SERAL decide por unanimidad: "Entramos todos o ninguno"... Ejército y policía, que no eran entonces Fuerzas Conjuntas, se suman para una tarea que no los honra. En el saldo de los dolorosos episodios, quedan trabajadores baleados y campamentos arrasados. La respuesta de los obreros es la Marcha de la Dignidad".2
"¿Está todo pronto para el levante de Molaguero?" pregunta Gerardo Gatti en una reunión de Fomento (nombre con que se designaba la instancia mayor de FAU). "Todavía no, faltan algunos detalles que en estos días se concretan" le responde el encargado de la tarea de OPR. "Es que no hay duda que se acerca el momento de hacer esta acción política, se han tirado a reventar el conflicto y no podemos permitir esta derrota, es la derrota de este gremio y todas las consecuencias, tenemos que hacerlo lo más rápido posible", agrega. "Se estima que en un par de semanas se puede, el equipo a quien corresponde la acción está al firme", es la respuesta.
Nunca se le denomina comando, siempre equipo, la concepción libertaria como que lo impedía. Cuando se hablaba de Comando era en broma. Una gran mayoría, sino toda, gente de extracción obrera hacía lo que tenía que hacer, pero, la pomposidad hasta le daba vergüenza.
"Parten de Santa Lucía cuarenta compañeros de SERAL y ven engrosar la columna pueblo tras pueblo. Ven engrosar también el aparato represivo. En Las Piedras la marcha fue disuelta. Pero, atravesando campos, cruzando quintas y escondiéndose en los montes, los compañeros consiguen llegar hasta La Paz. Once son detenidos allí y brutalmente apaleados. Hay un gran despliegue militar y una orden bien clara: la marcha no debe pasar de La Paz. Pero pasa. A las sombras de la noche, otra vez atravesando campos, cruzando quintas y escondiéndose en los montes, los trabajadores que ya suman doscientos, llegan a Peñarol. Los acoge fraternalmente el glorioso sindicato de ferroviarios, que no escatima la solidaridad y el apoyo material, y el mismo día encaminan la marcha hacia el Cerro. A su paso cierran las fábricas, los compañeros del Portland deciden no trabajar y se incorporan a la columna. Cuando llegan a Carlos María Ramírez son cerca de mil. Allá instalan un campamento. Daba lástima verlo, la verdad que sí. No tenía árboles ni cobijo... Pero las fuerzas del orden resolvieron el problema arrasando las precarias instalaciones, destrozando todo y quemando hasta las zapatillas desflecadas a lo largo del camino". 3
"Acá se puede hacer el trabajo, este es el punto, mientras no llega nos escondemos en ese zanjón a la espera que el compañero del "boquitoqui" nos avise que viene". Estaban los compañeros del equipo haciendo observación del lugar del "levante" y viendo detalles concretos. Se preparaban las vestimentas de policía que usarían los que tenían que estar en la carretera en actitud de parar vehículos. Como en ese momento las "pinzas" abundaban se había estimado que este era el mejor método para parar un coche.
"Todas las puertas del barrio se abrieron entonces para los perseguidos, y éstos supieron otra vez de la solidaridad de sus iguales. Con los cacharros que encontraron, con arpilleras de los basurales y con carpas que se les allegó, levantaron un nuevo campamento en los fondos de la iglesia de San Rafael. Allí también fueron atacados. Se les baleó y prendió, llegando a 130 el número de los compañeros que en la Marcha de la Dignidad conocieron calabozos y hasta las mas infamantes vejaciones que pueda imponerse a un hombre. Tres de los que estaban libres inician una huelga de hambre..." 4
"Sí, puede ser nomás mañana de noche, ya está toda la cosa pronta" dice en la reunión de los responsables de OPR (Chola, como se le designaba para poder hablar públicamente, teléfono etc, de detalles de esta actividad) "el Abuelo". Coincidía el día con una reunión de los responsables de la parte pública de FAU: Alejandra (así se le designaba, también por razones de seguridad).
"Nos mantenemos en contacto, yo voy a estar en la reunión de Alejandra, el Loco está también ahí a la espera. Es fundamental que se dé en este momento. El gremio y la ROE trabajaron bien, la pelearon bien, pero, en este caso, si no media ahora la acción de Chola la cuestión se complica del todo. Hacemos lo siguiente, nos quedamos con el Loco y Mauricio esperando en un café después de la reunión y te vamos llamando", dice Gerardo.
Es la madrugada del día 11 de mayo de 1972. "Llamaron aquellos", pregunta Gerardo por teléfono. "No, todavía no, pero no estamos fuera de hora, llamá dentro de una hora y vemos". La espera es tensa, se habrá podido, no habrá pasado algo. Suena nuevamente el teléfono, una voz dice en tono jodón: "aquí Martín, estamos de garufa con Orlando, es loco por las guachas". Sergio Molaguero estaba en nuestro poder. Otra etapa del conflicto obrero se iniciaba, otras cuantas cosas se expresaban también a través de esta acción armada.
Después supimos, todo había salido bien, no había habido dificultades relevantes. Se paró el coche de Molaguero con los compañeros vestidos de policía y desplegados como correspondía. Molaguero no se había "mosqueado" inicialmente, cuando estaba ya con el coche parado y los compañeros encima recién pareció que sospechaba algo. Se le redujo con rapidez y se sacó el arma de la gaveta del auto. Se sabía que andaba armado. Después vinieron los traslados por las rutas antes establecidas. La calle no estaba fácil, había vigilancia policial bastante alta. Pero el operativo culminó sin problema y el "muela" -como después se le designaría- permitió que el conflicto de SERAL tomara otro rumbo al tiempo que se marcó un camino de incidencia política con luchas gremiales o populares que podían llegar a su límite.
Las exigencias planteadas a Molaguero padre
Al día siguiente, previa reunión para precisar detalles y movimientos a hacer, la Organización se puso en contacto con el Abogado de la Empresa Seral que además tenía amistad con Molaguero padre, cuya dirección ya se poseía para este caso.
La primer nota que le hicimos llegar, en lo fundamental, decía lo siguiente:
Montevideo, 12 de mayo de 1972
Dr.
El día 11 del corriente, telefónicamente nos comunicamos con Ud. Indicamos que teníamos retenido desde la madrugada de ese día a Sergio Hugo Molaguero Brescia, y el lugar (Baño de mujeres del Bar El Jaguel) donde se podía recoger la libreta de chofer perteneciente a dicha persona...
Anoche establecimos dos condiciones previas para poder entrar en el problema de fondo:
a) entrega de $ 20.000 a cada trabajador de la empresa Seral en Planillas a fecha 1º de agosto de 1971; dimos 48 horas de plazo para hacerla efectiva.
b) Entrega de materiales con destino a niños de la ciudad de Santa Lucía. Anunciamos que enviaríamos detalle de esto último. Pasamos a hacerlo:
( en 1) y 2) se detallan útiles para las Escuelas Nº 140 y Nº 156)
3) A los niños habitantes del Barrio El Abrojal 150 pares de zapatos de niños de todos los talles, 150 pares de medias de abrigo ídem, 150 pantalones vaquero ídem, 150 buzos de abrigo ídem, 150 túnicas escolares ídem.
4) A los niños habitantes del barrio "Atrás del Cementerio" 100 unidades de cada una de las mercaderías anteriormente mencionadas (zapatos, medias, vaqueros, buzos, túnicas) de todos los talles.
Se reitera que estas comunicaciones deben quedar exclusivamente entre Ud.,. Molaguero y nosotros.
Las mercaderías indicadas deben ser adquiridas en comercios distintos de la ciudad de Santa Lucía. Deben estar en poder de los niños de las Escuelas y barrios señalados el día martes 16 de mayo.
Se firma esta nota con el nombre que ha de usarse para las negociaciones en torno al tema que nos ocupa.
ORLANDO PIERI
Acto seguido se le hizo llegar otra circular conteniendo otros puntos. Dice lo siguiente:
CONDICIONES PARA LA SOLUCIÓN DEL PROBLEMA DE FONDO
1) Cese del conflicto en la firma Seral: acuerdo de la empresa con la Unión de Empleados y Obreros de Seral.
2) Publicación de un remitido en cuatro diarios de la capital y en cuatro diarios de Canelones (incluyendo Santa Lucía), dando a conocer los términos del acuerdo a que se ha arribado. Estos remitidos deberán ser financiados por la empresa, firmados por esta y gestionada, por ella la firma del sindicato. En la capital deberá ser publicado en la página 5 de los diarios Ahora (1/4 de página), El Día, el Popular y El Diario (1/8 de página).
3) Habiendo tomado conocimiento por nuestra parte de la publicación de esos remitidos, de inmediato le haremos llegar los detalles que deberá asumir la reparación económica que deberá pagar la empresa, tendrá un monto aproximado al que insumió el cumplimiento de las condiciones previas establecidas en nuestra primera nota.
4) Al reiniciarse el trabajo y cumplirse efectivamente y normalmente las cláusulas del convenio, la empresa deberá hacerlo así constar por la prensa y la radio.
5) Cumplidos el numeral 3 y el numeral 4, en un término de 72 horas cesará la retención de Sergio Hugo Molaguero Brescia.
Orlando Pieri
Nota: Se reitera el carácter estrictamente reservado entre Ud., su cliente y nosotros, de la existencia de estos trámites y sus términos.
Una nota del 12 de julio da cuenta de que Molaguero ha satisfecho las demandas exigidas hasta ese momento y agrega las condiciones finales que establece FAU. Damos un fragmento de ella.
Montevideo, julio 12 de 1972
Sr. José Hugo Molaguero.
Dado que:
1) Se cumplieron las dos condiciones previas establecidas -en nota del 12 de mayo de 1972- para poder entrar en el problema de fondo.
2) Se efectuaron las publicaciones que atestiguan el cese del conflicto en la firma Seral: Por lo tanto, de acuerdo a lo establecido, corresponde lo siguiente:
1) Al reiniciarse el trabajo y cumplirse efectivamente y normalmente las cláusulas del Convenio (con el Sindicato) la empresa deberá hacerlo así constar por la prensa y la radio.
2) Concreción de "la reparación económica que deberá pagar la empresa".
3)... Se deja establecido con absoluta claridad que el mecanismo de entrega de la reparación económica deber ser de conocimiento exclusivo del Sr. José Hugo Molaguero o en su defecto de su hermano, el Sr. Luis Molaguero.
7)...A partir del cumplimiento de estas condiciones, "en un término de 72 horas, cesará la retención de Sergio Molaguero Brescia.
Satisfechas todas las demandas: pago de jornales perdidos, acuerdo con el Sindicato, toma de todos los despedidos, reconocimiento del sindicato, donación a escuelas y niños de la zona, reparación económica a FAU, Sergio Molaguero es liberado poco después.
Fue el penúltimo secuestro realizado en el país. Todo ese tiempo que se retuvo a Molaguero fue de auge de la represión, las calles estaban erizadas de militares.
Decíamos penúltimo secuestro porque la FAU realizó un secuestro más, de una persona responsable de una agencia de noticias, para desmentir dichos de Molaguero.
Esto también, y vaya que sí, es parte de la rica historia de nuestra Organización.
1, 2, 3, 4 Marcha de viernes 7 de julio de 1972, Hugo Alfaro, "la lección de FUNSA ocupada".