(Emitido a las 9.25)

EMILIANO COTELO:
¿Quién es el coronel retirado Gilberto Vázquez? ¿Quién este hombre que se ha fugado y ha generado en estas horas este hecho político y militar tan serio que ocupa buena parte del debate nacional en el día de hoy?

Tiene 60 años, se lo conoce por distintos sobrenombres, "Judío", "Diente", "307". Ingresó al Ejército en el año 1961 en el arma de Caballería, a partir de 1971 actuó en Inteligencia del Regimiento de Caballería Mecanizada Nº 4 y en 1976 pasó al Servicio de Información de Defensa.

Según las denuncias que sobre él pesan, estuvo presente en detenciones e interrogatorios de los militantes del Partido por la Victoria del Pueblo (PVP) secuestrados en julio de 1976 en la República Argentina. Y según las denuncias presentadas por el Grupo de Familiares de Detenidos Desaparecidos, el coronel Vázquez fue uno de los principales eslabones en la cadena de militares, policías y civiles que intervinieron en el traslado de María Claudia García de Gelman desde la sede del Servicio de Información de Defensa hasta la base Valparaíso, de la que, se cree, era uno de los encargados.

Esta base Valparaíso era una casa de dos plantas ubicada en Francisco de Medina 1525 bis en el barrio de Villa Dolores. En ese lugar funcionó un centro de reclusión clandestino donde se supone que fue muerta María Claudia García.

En línea está el doctor José Luis González, abogado de la familia Gelman.

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Doctor González, yo daba estos tres o cuatro datos sobre el coronel Vázquez, pero me interesa que usted aporte un perfil más completo.

JOSÉ LUIS GONZÁLEZ:
Es bastante completo lo que usted dijo. Él estuvo hasta el momento del arresto como profesor de Estrategia en el Centro de Altos Estudios Militares (CALEM); se lo ha vinculado con la realización de cursos de inteligencia en la CIA; también se lo vincula con la logia ultranacionalista Tenientes de Artigas; y además, en lo que es particular del caso específico de María Claudia, en la denuncia que presentamos en el año 2002 se hace referencia a que junto con León Tabaré Pérez habría trasladado a otro centro clandestino de detención a María Claudia y Macarena, presuntamente a la base Valparaíso.

EC - ¿Qué testimonios o pistas hay que involucran al coronel Vázquez en la desaparición y muerte de María Claudia García de Gelman?

JLG - Todo el proceso de investigación que llevó particularmente Juan Gelman, y también un colega suyo, Roger Rodríguez, del diario La República, durante años, estuvo vinculado con testimonios desde la propia República Argentina donde María Claudia fue privada de libertad en su domicilio, luego los testimonios de personas detenidas en Orletti, también los de personas detenidas acá en el SID y una serie de datos que se les fueron brindando en forma reservada a los investigadores durante muchos años que los llevaron a concatenar cada uno de los pasos con diversas personas, muchas de las cuales actualmente están vinculadas con estos procesos.

EC - El coronel Vázquez en distintas apariciones públicas ha rechazado cualquier vinculación con ese caso en particular. Ayer en esta comunicación que aparentemente tuvo con periodistas de Canal 12 dijo que si él se hubiera enterado en su momento de lo que había ocurrido con la nuera de Gelman y la hija que luego tuvo habría colgado a los responsables del crimen.

JLG - Es difícil pensar que una persona que prestó servicios en el lugar donde estuvo detenida María Claudia ignorara lo que estaba ocurriendo allí. A partir de entonces, de una forma o de otra, siendo funcionario, no hay duda de que estaría enterado. Llama la atención este tipo de apreciaciones actuales.

EC - ¿Cómo observa usted lo que acaba de ocurrir? La pregunta puede ser obvia pero me parece importante hacérsela.

JLG - En primer lugar, es el único caso que recuerdo de fuga de una persona que está sujeta a una detención administrativa previa a un proceso de extradición. Normalmente las fugas, que las hay, las hay relativamente a diario, son de personas procesadas que se van del COMCAR, de Libertad, pero un hecho como este, que yo recuerde, es la primera vez. Y sobre todo tiene importancia analizarlo porque se trata de un preso especial, porque no estaba procesado sino en una detención preventiva, administrativa, en buena medida el gobierno, el Estado uruguayo se comprometió a ello merced al tratado que nos une con la República Argentina. De manera que ese es un primer campo, habría que tener en cuenta el tipo de preso de que se trata.

EC - ¿En su momento usted estuvo de acuerdo con que la custodia de en particular los cuatro militares que están involucrados en este pedido de extradición quedara a cargo del Ejército?

JLG - Eso fue y es una decisión política, en el momento se analizó la conveniencia de tener juntos en una misma celda, en una misma prisión o cárcel a funcionarios militares con funcionarios policías y un ex funcionario militar. En ese marco de la conveniencia se decidió trasladarlos a otros lugares, sobre todo porque este tema en particular de la detención de militares, sobre todo de alto rango, debe ser tratado con cautela, fue así que se planteó en ese momento. ¿Si yo estoy de acuerdo? Y sí, estoy de acuerdo en que lo hayan hecho, lo importante era que estuvieran detenidos y a disposición de la Justicia.

EC - Lo que se resolvió fue que el ex policía Ricardo Medina y el capitán en situación de reforma Ricardo Arab quedaran recluidos en Cárcel Central, dependiente del Ministerio del Interior; en cambio los otros cuatro fueron repartidos en dos dependencias del Ejército, les tocó a Silveira, Rama y Vázquez la División de Ejército I y a Gavazzo el Instituto Militar de Armas y Especialidades del Ejército. ¿Usted, como el diputado Rosadilla, no temía que esa situación pudiese propiciar una fuga o algún otro tipo de consecuencias?

JLG - No, francamente no, sinceramente no, no tenía ese temor, ni siquiera me lo había representado. Uno parte de la hipótesis de que se trata de presos especiales que deben estar con una custodia, quizás una custodia especial y nada hacía prever que esto podía ocurrir, desde mi punto de vista.

EC - Y ahora que ocurrió, por un lado se abre toda la discusión política a la que usted aludía cuando se mencionaban las responsabilidades por cómo se manejó la custodia, pero desde el punto de vista del trámite de extradición en curso, ¿cuáles pueden ser los impactos?

JLG - El primer impacto es que si se accede al pedido de extradición de Argentina de todos los funcionarios que están privados de libertad, obviamente no va a poder conducirse el de Gilberto Vázquez, y en el caso de que se ubique en el extranjero habrá que poner en funcionamiento todos los mecanismos legales para que vuelva al país y luego poder reenviarlo. Esa es una de las hipótesis o uno de los impactos, que va a generar una demora.

La otra posibilidad es que el propio gobierno argentino, de enterarse de que esté en otro país, le pida directamente la extradición a ese país, porque los delitos que se están reclamando tienen jurisdicción universal.

EC - Supongamos la otra posibilidad, que sea recapturado y vuelva a la cárcel acá, a cumplir el arresto preventivo acá. ¿De qué manera incidiría en su situación dentro del trámite de extradición este antecedente de la fuga?

JLG - No incide para nada, absolutamente para nada, son dos cosas absolutamente independientes.

EC - La intención o el firme propósito de terminar siendo juzgados en Uruguay que parece que varios de estos militares han manifestado en distintas actuaciones, tanto en el juzgado como con otros jerarcas del Ejército en conversaciones que han tenido en las últimas semanas, ¿qué posibilidad tiene?

JLG - En el caso de María Claudia ninguna, porque fue archivado el expediente y por lo tanto hasta que no se remueva el obstáculo que es la Ley de Caducidad no hay ninguna posibilidad de que se los juzgue. En algunos de los otros casos, por ejemplo en la denuncia contra los mandos que hemos presentado con un grupo de abogados hace muy pocas semanas, habrá que esperar conocer cuál es el alcance que el juez les da a los mandos, si efectivamente pueden entrar dentro de esa categoría. Quizás por esa vía podrían llegar a ser juzgados acá. Y después habría que ver eventualmente en algunos de los otros casos que también se están instruyendo si se los puede llegar a responsabilizar, porque los casos en el extranjero no son abarcados por la ley de caducidad, por lo tanto nada impediría que los pudieran citar como responsables de esos hechos. Depende de cuál sea el caso la posibilidad de que sea juzgado o no.

EC - ¿Y si son juzgados acá?

JLG - Entonces habrá que esperar que cumplan la eventual sentencia que se les imponga y recién después enviarlos al país que solicita la extradición, como ocurre normalmente.

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Edición: Mauricio Erramuspe