El curioso impenitente
Por Rosario Peyrou
(Publicado en EL PAIS CULTURAL, 26.01.07 )
SI ES CIERTO que Ruben Cotelo desplegó su talento y su curiosidad inagotable sobre todo en los medios periodísticos, también lo es que dejó páginas memorables y de particular agudeza, felizmente recogidas en libro, sobre la obra de Onetti (en el volumen colectivo En torno a Juan Carlos Onetti, F.C.U, 1970), William H. Hudson (prólogo a La tierra purpúrea, en la traducción de Idea Vilariño, EBO, 1992), Eduardo Acevedo Díaz (Capítulo Oriental No. 6, Cedal, 1968), o Felisberto Hernández (F.C.U, 1970). Tuvo especial interés por el trabajo y el talante intelectual abarcador de Carlos Real de Azúa, sobre quien publicó Carlos Real de Azúa de cerca y de lejos (Montevideo, Nuevo Mundo, 1987). El propio Real de Azúa, que había elogiado la "sustanciosa introducción y notas" de Cotelo a Narradores uruguayos: antología (Monte Avila, Caracas, 1969), lo defendió de las críticas "de una `intelligentsia` lectora de nivel literalmente parroquial, atraso bibliográfico de décadas y pereza intelectual perfectamente documentable", y afirmó que Cotelo "fue el primero en manejar seriamente el enfoque sociológico, el psicoanalítico, la crítica de `motivos` y de `arquetipos`, y otras direcciones que eran novedosas en los años cincuenta". Esa condición omnívora, y la necesidad que tuvo de mantenerse "al día" en una importante cantidad de temas, signaron también el trabajo de Ruben Cotelo de los últimos años. Y, -como podemos afirmar quienes tuvimos la suerte de tenerlo como colaborador- hicieron de su contacto y su conversación una experiencia disfrutable y siempre esclarecedora.