Hierro descartó la creación del Consejo Nacional de Economía

"Lo peor que le podría pasar al país sería cambiar de caballo en la mitad del río", dijo el vicepresidente de la República, Luis Hierro López, al ser consultado respecto a las propuestas realizadas por el Frente Amplio. Calificó al discurso de Vázquez de populista al tiempo que, recordando el caso de la reforma constitucional y de Ancap, dijo que es complicado llegar a acuerdos con la coalición de izquierda.

EN PERSPECTIVA
Miércoles 06.02.02, Hora 8.19.

EMILIANO COTELO:
¿Cómo se observa el discurso de Vázquez desde el gobierno, sobre todo sus planteos más resonantes?

Vamos a consultar al vicepresidente de la República, profesor Luis Hierro.

Hierro, ¿qué dice usted, por ejemplo, del reclamo de un cambio en la política económica, la remoción del equipo económico en la medida en que, según sostuvo Vázquez, no sería creíble que quienes llevaron adelante este rumbo condujeran uno diferente, para lo cual sería necesaria la convocatoria al Consejo Nacional de Economía en un diálogo con todos los sectores políticos y sociales?

LUIS HIERRO:
Lo peor que le podría pasar al país sería cambiar de caballo en la mitad del río. La conducción de la política económica tiene que ser coherente y persistente, tiene que tener perseverancia. Una mezcla de políticas económicas de líneas liberales y populistas podría ser precisamente lo que intentó Argentina en la última etapa de Cavallo y así terminó. Por un lado se aferró a algunas fórmulas que venían del pasado y por otro intentó un proteccionismo de la economía que hoy los países pequeños no pueden resistir. Eso terminó como terminó: con el corralito.

Lo que estamos haciendo en el gobierno es precisamente tratar de evitar las consecuencias de Argentina y alejarnos al máximo de lo que pasa en ese país.

Ese discurso de gravar las altas finanzas, etcétera, es como un discurso mágico. Por un lado se pide que bajen las tasas de interés y por otro se pide gravar al sistema financiero. Este discurso significa más gasto público, un gasto público descontrolado porque se piden subsidios para las personas desempleadas, etcétera, todo lo cual puede estar bien intencionado pero está muy mal orientado y dirigido en la medida en que hoy se exigen criterios de responsabilidad fiscal para abatir el déficit y evitar males mayores a la población. Desde ya que a nosotros no nos gusta poner impuestos a los sueldos, pero es la única forma que tenemos de achicar realmente el gasto del Estado.

EC - Se refiere al adicional al impuesto a las retribuciones personales en el caso de los funcionarios públicos. Usted dice que no hay que verlo como un impuesto sino como una forma de reducción del gasto.

LH - Hay que verlo como una forma de reducir el gasto, lo que nos permite controlar el déficit fiscal, impedir que siga aumentando la deuda externa y mantener nuestra calificación de riesgo. De otro modo el país ingresa en una espiral que podría ser, a nuestra escala, como la argentina.

EC - Vázquez dijo ayer que "continuar con la cultura del ajuste, esperando que amaine el temporal y el viento infle las velas de la prosperidad nacional, es utópico y acientífico. Puede ser muy placentero navegar a vela, pero también puede ser muy peligroso y en estas circunstancias no hay que arriesgarse. Encendamos el motor de la reactivación económica". En definitiva lo que el FA critica de la forma como se está encarando en este momento la coyuntura -más allá de la crítica a toda la política económica- es que no se ve en ellas motores de la reactivación y se piensa que al contrario, van a favorecer todavía más la depresión.

LH - Creo que con la política cambiaria que hoy tiene Uruguay, el sector exportador va a estar en condiciones de competir. No es lo que estábamos buscando, no creemos que las modificaciones cambiarias por sí mismas mejoren la competitividad, pero de hecho lo están haciendo. Habrá una mejora de la competitividad del 20%, lo que va a significar que las exportaciones uruguayas tengan una muy importante recuperación. Buena parte de las cosas que Vázquez dijo es lo que el gobierno está haciendo en la búsqueda de mercados.

El presidente Batlle no va a Estados Unidos a tomar café con el presidente Bush, va a abrir mercados. Allí tenemos una apuesta muy importante, que pensamos que va a repercutir rápidamente en el sector exportador. No hemos hecho una variación en la política cambiaria por nuestro deseo sino por las circunstancias, pero allí habrá, sin duda, una repercusión en el sector exportador, que notoriamente es el motor de la economía, porque con 3.000.000 de habitantes no vamos a apostar al mercado interno, hoy deprimido y con dificultades. Tenemos que apostar claramente a la exportación. El sector exportador está en condiciones de competir y seguramente habrá una repercusión muy fuerte allí, con consecuencias en el empleo, en la creación de dinamismo en la economía, que es lo que nos está faltando.

EC - Vázquez dijo: "No se nos puede 'ningunear', no se nos puede ignorar, no hay derecho a ridiculizarnos. Hemos hecho propuestas concretas, precisas, serias, responsables, creíbles, posibles".

LH - Como las de Ancap, por ejemplo.

EC - ¿Hay espacio ahora, en esta coyuntura tan especial, para un diálogo con el FA en torno a estas cuestiones?

LH - Y mi pregunta es: en un tema estratégico y fundamental para el país, como fue el de Ancap, los senadores frenteamplistas trabajaron en la búsqueda de soluciones comunes; las incorporamos y luego la mayoría totalitaria del FA vetó lo que habían hecho los senadores. ¿Hay espacio para negociar?, retruco.

EC - Un no viene implícito en su pregunta.

LH - Es muy difícil con una coalición que cambia de posiciones, como lo hizo el FA desde la reforma de la Constitución de 1996 hasta el proyecto de Ancap. Le puedo mencionar varios casos, pero no es el punto.

Es muy difícil, porque la coalición cambia de criterios pero también por lo que le decía inicialmente: mezclar las fórmulas económicas sería lo peor. Si ahora el gobierno incorpora partes del discurso populista del FA y empieza a dar subsidios, con lo cual incrementamos notoriamente el gasto público en vez de recortarlo, francamente estaríamos en una situación en la cual... ni chicha ni limonada. Estamos convencidos de que la política económica va a dar resultados, pese a la coyuntura externa tan difícil y complicada, pese a que cada día recibimos noticias más difíciles -el mercado argentino abría hoy, ahora abre mañana, etcétera-, hay que tener firmeza en la conducción económica. Empezar a mezclar fórmulas de otro lado, porque las mismas supuestamente representan lo que la población quiere, sería el final de la conducción económica. No tendríamos una política económica sino un montón de fórmulas acumuladas, que es lo que yo advierto que tiene el FA. Cada vez que habla lo hace de acuerdo a los auditorios.

El economista Cancela trató de explicar, traduciendo a Vázquez, que en realidad no se quiere pesificar, pero Vázquez dijo que había que hacerlo en forma gradual. Esto es una importación de lo que pasa en Argentina, cuando en Uruguay estamos en una situación completamente distinta. No hay que andar con términos de moda sino tener una conducción seria y responsable, aunque no haya dado resultados hasta ahora, como evidentemente no los ha dado la nuestra porque hemos tenido dificultades terribles. La materia económica es muy seria como para improvisar y andar lanzando en espacios públicos que son más bien de tribuna, no de estudios serios, propuestas que no han dado resultado en ningún lugar del mundo.

EC - Vázquez habló de dos tipos de cambios en la política económica: medidas de urgencia, atenuantes, de emergencia, que son las que de alguna manera recién eran motivo de la consulta al economista Cancela, y por otro lado un cambio más de fondo en el rumbo. Propuso la convocatoria al Consejo de Economía Nacional, de modo de consultar a los distintos sectores de la sociedad, en particular los sectores de la actividad nacional. ¿Qué dice el gobierno sobre esta última propuesta?

LH - La consulta se hace habitualmente en el sistema parlamentario, donde están todas las voces expresadas. Reitero: más allá de las consultas, que nunca están de más, el presidente Batlle -lo acompañé en esa entrevista- estuvo con Vázquez hace poco menos de un mes, el 7 de enero. Escuchamos largamente su propuesta. Pero una cosa es la consulta y otra la conducción.

Estamos con un lío muy grande en Argentina, se va a resolver aquí el tema del Banco Comercial -como estoy seguro- sin consecuencias para los bancos uruguayos, el país está negociando con el FMI, tenemos un paquete de responsabilidad fiscal importante que tenemos que negociar en la coalición de gobierno con responsabilidad y coherencia, tenemos que explicar esto a la población uruguaya que naturalmente está angustiada y lo comprendo... Si además tenemos que hacer una especie de concertación... No creo que hoy sea el momento para este tipo de Consejo de Economía o de consulta. Para eso está el Parlamento, donde ayer, por ejemplo, el FA propuso llamar al ministro de Economía, precisamente para dar información sobre el tema del Banco Comercial. Se votó negativamente porque se entendió que era inoportuno, dado que estamos en plena etapa de negociación al respecto. Ese tipo de concertación no tiene mucho sentido.

Repito: oportunidades de concertación siempre hay, pero me pregunto: ¿qué pasó con Ancap?, ¿por qué el FA no habla de este tema?, ¿por qué el doctor Vázquez no explicó bien qué pasó con Ancap? En definitiva el proyecto de ley contiene varias de las propuestas que nos hizo la oposición en el entendido de que eran buenas y de que estábamos a punto de lograr un acuerdo realmente importante en un sector estratégico del país. Y luego, como siempre, se cambió de opinión en la última instancia y se nos dijo que no.

Vázquez se opuso al ajuste de la coalición y planteó la alternativa frentista
Entrevista con el economista Walter Cancela, asesor de la Presidencia del Frente Amplio

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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Mauricio Erramuspe