El ex vicepresidente Luis Hierro y el ex Ministro de Economía Isaac Alfie, enviaron una carta al embajador de España en Uruguay en la que refutaron las expresiones del presidente del Gobierno español en el sentido de que en marzo de 2005, Uruguay se encontraba en escombros.

Sostuvieron en la misiva que el propio Gobierno del Frente Amplio reconoció en la Rendición de Cuentas respectiva que en 2004 el país creció 12.3%, que se crearon 63.000 nuevos empleos y que los ingresos familiares aumentaron 3%, por lo que la afirmación de Rodríguez Zapatero no tiene fundamento.

Hierro y Alfie explicaron que pese a la crisis Uruguay recibió las inversiones más importantes de su historia; que mantuvo todos sus servicios sociales – pasividades, salud, enseñanza, atención al menor y dotaciones de alimentación – y que en 2003 se aumentaron las asignaciones familiares, ingresando 130.000 niños y universalizándose el sistema.

A su vez y reconociendo que la crisis agudizó los factores de pobreza, refutaron las cifras manejadas por Rodríguez Zapatero, a quien señalaron como " más realista que el Rey", ya que manejó números de disminución de la pobreza que resultaron más auspiciosos que los ofrecidos por el propio presidente Vázquez. El presidente del Gobierno español dijo que los pobres bajaron de 1 millón a 500.000, pero el presidente de Uruguay dijo que había "300.000 pobres menos". Con todo, concluye la carta, la dirección de Estadísticas informa que entre 2004 y 2006 hay en Uruguay 165.000 pobres menos.

A continuación se transcribe la carta enviada al embajador de España Fernando Valderrama:

Montevideo, 21 de setiembre de 2007
Sr. Embajador de España
Don Fernando Valderrama
Presente

De nuestra consideración:

Hemos oído y leído, con asombro, que el señor Presidente del Gobierno español acaba de afirmar que en marzo de 2005 el Dr. Tabaré Vázquez recibió "un país cercano a los escombros sociales y económicos", lo que significa un desconocimiento muy grave de la realidad uruguaya y una interpretación sesgada y tendenciosa.

Deseamos interponer las siguientes consideraciones:

1) La afirmación del señor Rodríguez Zapatero no coincide con las expresiones del actual Gobierno uruguayo, que reconoció, hasta en los textos legales, que el país estaba en crecimiento en marzo de 2005. La Rendición de Cuentas respectiva, preparada por el actual gobierno y votada por los legisladores oficialistas, informa que en 2004 hubo un crecimiento del 12.3% del PBI, se crearon 63.000 nuevos puestos de trabajo y el salario promedio aumentó 2.9%. El actual ministro de Economía Cr. Astori ha reconocido reiteradamente esa situación.

2) Es de esos años, 2002 a 2004, la puesta en marcha de las inversiones extranjeras más importantes que el país haya recibido en su historia, como las verificadas en las plantas de celulosa – una de ellas de origen español, luego postergada – y en otros rubros forestales, industriales y de infraestructura. Todavía hoy el país crece al influjo de aquel impacto.
También es de esa época la llegada al país, por gestión oficial, del Instituto Pasteur, que instaló su primera filial latinoamericana en Uruguay, a través de un novedoso proyecto de cambio de deuda externa por educación. 
Si el país hubiera estado en escombros no se habrían confirmado esos positivos extremos, reveladores de confianza.

3) Uruguay no entró en default, pese a que así lo impulsaban algunos técnicos del Fondo Monetario Internacional y el entonces líder opositor Dr. Tabaré Vázquez. Por el contrario, pudo reestructurar su deuda externa y el riesgo país ya se normalizó en 2003. Es más, en octubre de ese año, Uruguay se constituyó en el primer país "emergente" que logró una colocación de deuda global registrada en su propia moneda. Los países en escombros no logran el reconocimiento de los mercados financieros tan rápidamente.

4) Sin desconocer el impacto negativo que en materia social tuvo la crisis de 2002, cabe recordar que no se recortaron ninguna de las partidas presupuestales destinadas a las políticas sociales, las que significan una porción mayoritaria del gasto público. No hubo cambios en la prestación de las pasividades y seguros sociales, en la Salud Pública y en la Enseñanza, en los servicios de atención a los menores ni en los servicios de alimentación públicos.

5) Es un hecho que la crisis de 2002 provocó un crecimiento de las personas pobres en Uruguay, pero debe tenerse presente que nuestro país se caracteriza por su vasta red de contención e integración social, la que sin duda contribuyó a amortiguar el impacto. Las coberturas sociales fueron además explícitamente extendidas, ya que se reformuló en 2003 el servicio de asignaciones familiares para incluir a 128.667 nuevos niños beneficiarios, lo que significó un aumento del 32% en el sistema, que pasó a ser universal.

6) El señor Rodríguez Zapatero sostuvo que el Gobierno de Tabaré Vázquez logró reducir el número de personas pobres de un millón a 500.000. Ocurre que el presidente del gobierno español ha sido más realista que el Rey, porque el señor Presidente Vázquez informó en su discurso del 7 de setiembre pasado que hay 300.000 pobres menos. Pero ambos números son erróneos. Según la metodología internacional de la CEPAL, entre el 2004 y 2006 el total de pobres se redujo en 150.000, mientras que, según la metodología del Instituto de Estadística local, la reducción fue de 175.000. Nosotros entendemos que esos bienvenidos resultados, alentados por el inmejorable escenario internacional, son insuficientes y pueden ser transitorios y no permanentes, en la medida en que las actuales políticas son asistencialistas y no de fondo, pero esa es una discusión que nos reservamos para el debate interno.

7) En definitiva: no se puede considerar un país "en escombros" a aquel que en esos dos años, y entre otras muchas cosas, creó más de 120.000 puestos de trabajo, casi eliminó la emigración neta, creció al 12%, redujo la tasa de desocupación del 19% al 11,8%, aumentó los ingresos de las familias, batió récord de exportación, recibió las mayores inversiones de su historia, eliminó la totalidad de los impuestos extraordinarios que debió imponer en la crisis y en los últimos meses de su gestión, abatió la inflación a 0% y logró prácticamente el equilibrio de sus cuentas públicas.

8) Por lo tanto, lamentamos profundamente que el señor Rodríguez Zapatero haya incurrido en el error de dejarse llevar por sus simpatías de comité, olvidándose de las obligaciones de su investidura y distorsionando groseramente la verdad histórica.

Solicitamos al señor Embajador que ponga esta carta en conocimiento del Gobierno y de los partidos políticos españoles y le saludamos muy atentamente

Luis Hierro López                                   
Ex Vicepresidente de la República                                               

Isaac Alfie
Ex Ministro de Economía y Finanzas