(Emitido a las 8.48)

EMILIANO COTELO:
Una amenaza de bomba obligó a suspender anoche la sesión del Senado en la que se discutía el proyecto de Ley sobre Salud Sexual y Reproductiva, que incluye el polémico artículo sobre despenalización del aborto en determinadas circunstancias.

Un llamado anónimo realizado sobre las 20.00 horas al despacho del presidente de la Cámara, Rodolfo Nin Novoa, advirtió sobre la supuesta colocación de un explosivo en el recinto. El edificio fue revisado cuidadosamente, no se encontró ningún artefacto sospechoso, pero cuando se estuvo en condiciones de reanudar el debate se entendió que lo mejor era pasar a un cuarto intermedio y retomarlo hoy a las 10.00 de la mañana.

En cuanto a la discusión del proyecto, según lo que más temprano especificaba Virginia Ruglio, la cronista especializada de El Espectador en asuntos parlamentarios, el Senado está dividido en partes iguales a la hora de tomar una decisión: 15 legisladores están dispuestos a respaldarlo, todos ellos del Frente Amplio (FA), y 15 votan en contra. El senador del Foro Batllista Washington Abdala anunció que se retirará de sala. Si se mantienen estas posiciones, el resultado es un empate y la iniciativa no será aprobada.

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EC - Estamos con la senadora Mónica Xavier, del Espacio 90, FA.

Usted es una de las votantes a favor del proyecto. Ha sido una de las impulsoras de este tipo de iniciativas ya desde hace años. Entonces, ¿qué dice a propósito de cómo están dadas las posturas y ese panorama de empate que conduce a un rechazo del proyecto?

MÓNICA XAVIER:
Efectivamente, es como usted dice. La única variante puede ser que alguien se sume a la salida de sala. Si no, el capítulo que tiene que ver con la despenalización del aborto no prosperaría en el Senado.

EC - Tendría que salir de sala uno de los dos senadores del FA que han dicho que votan en contra, Carlos Baráibar y Alberto Cid, o uno de los senadores colorados que han dicho que votan en contra.

MX - Hipótesis que es difícil.

EC - Se especula mucho con lo que haga Juan Justo Amaro, que podría ser el quincista que saliera de sala.

MX - Fue muy categórico ayer en que iba a votar en contra; más allá de que se corría la voz de que iban a votar a favor él y otros legisladores. Estas cosas siempre ocurren. Hay especulaciones sobre un tema en el que así como la ciudadanía está definida a favor y en contra, en un porcentaje que prácticamente siempre es el mismo, los legisladores seguramente ya tienen desde hace mucho tiempo una posición respecto de este tema. Pero estas cosas pasan, lamentablemente.

Lo que tendría votos para pasar a la Cámara de Representantes es el primer capítulo, sobre el cual el PN ya ha anunciado que haría varias enmiendas.

EC - Es interesante esa observación. Capaz que estábamos un poco distraídos y nos perdíamos el conjunto de la evaluación. Hay toda una parte del proyecto que sí tiene los votos.

MX – Efectivamente. Eso fue aprobado por unanimidad en comisión. Se le hicieron modificaciones al capítulo original, que fueron muy buenas. El PN anunció que haría enmiendas a ese capítulo, cosa que veremos hoy. Estamos casi seguros de que los votos dan para que eso pase a la Cámara de Representantes.

EC - Entonces, si se da el panorama de votos que mencionamos, el proyecto se aprobaría parcialmente, sin los artículos que incluyen la despenalización del aborto en determinadas circunstancias y pasaría a la Cámara de Diputados. ¿Ahí van a volver a intentar que los artículos más polémicos salgan?

MX - Ahí existen dos posibilidades. No tenemos injerencia los senadores, pero seguramente quienes defienden el proyecto plantearán esa incorporación. Si luego viene al Senado con elementos incorporados que tengan que ver con la despenalización, la Cámara tiene dos posibilidades, votar a favor o votar en contra. Si vota a favor, se aprueba de esa manera. Si vota en contra va a la Asamblea General, por lo que eso se estaría dirimiendo en ese ámbito. Pero el panorama es aún incierto.

EC - El panorama es incierto y complicado. Porque - en la mejor de las hipótesis- pende sobre este proyecto la advertencia del presidente Tabaré Vázquez, que ayer confirmó su intención de vetar la ley. El veto obligaría votar en la Asamblea General, donde se requerirían tres quintos.

MX - Tres quintos de cada cámara. De todas formas, yo les planteaba a los colegas que insisten en que no quieren definir ahora, que querrían que fuera la población la que definiera, que si eventualmente la ley sale afirmativa y el presidente veta, el Parlamento tiene el recurso de levantar el veto. Y a nivel parlamentario existen mecanismos que sin expedirse sobre el fondo del tema habilitan el pasaje de palabras a determinados lugares, se vota el trámite, el mecanismo y no el fondo. Nada está descartado.

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Edición: Ma. Eugenia Martínez