(Emitido a las 8.45)

JOSÉ IRAZÁBAL:
El intendente de Durazno, Carmelo Vidalín, aseguró ayer que Lacalle no es el mejor candidato del Partido Nacional (PN). "Lacalle fue el mejor presidente del siglo pasado, pero hoy no sería el mejor candidato". Dijo que las actuales condiciones no son las mismas que las que existían en los años noventa, cuando aún regía la Ley de Lemas.

En entrevista en el programa Quién es quién, que trasmite Diamante FM, dijo que "para que el doctor Lacalle sea el candidato de nuestro partido tiene que ganarle al sector de Larrañaga, y lamentablemente en ese sector están todos aquellos que se juntaron contra él".

Estamos en comunicación con el intendente de Durazno.

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Intendente Vidalín, ¿qué condiciones se tienen que dar para que usted sea candidato en las internas del PN?

CARMELO VIDALÍN:
Debo decir que cada vez que tocamos estos temas lo lamento, porque implica un adelantamiento de los tiempos electorales, no de los tiempos políticos, porque quienes estamos en esta actividad estamos ejerciendo esta loable función con alegría y entusiasmo.

Pero reiterando lo que decían ustedes en la introducción, Lacalle fue, sin lugar a dudas, el mejor presidente del siglo pasado, y la nota del diario que acabo de leer está recortada, porque agregué que sería un gran presidente. Pero no es el mejor candidato para lograr el triunfo de mi partido, el PN.

JI - ¿Le preocupa que Lacalle no haya tomado una definición clara a esta altura del partido? Porque más allá de que usted diga que no son tiempos electorales, esa no definición interfiere incluso en la opinión pública. En la Encuesta de Factum, Luis Alberto Lacalle, con 21% de intención de voto, sigue apareciendo en el segundo escalón, debajo de Larrañaga, que tiene 51%, y usted aparece con 7%. Lacalle no dice que va a ser candidato, eso complica bastante las cosas.

CV - Cada encuesta tiene sus numeritos, tengo otras dos en las que estoy con porcentajes mucho más elevados, en una no figura el doctor Lacalle porque seguramente no lo han nombrado. La indefinición del doctor Lacalle indudablemente complica, porque además los pequeños arbustos que queremos crecer debajo del gran árbol, no crecemos por su sombra.

EMILIANO COTELO:
Pero concretamente, ¿cuál es su actitud? Una pregunta que desde hace tiempo se hace dentro del Herrerismo. En principio, usted está compitiendo por la precandidatura del Herrerismo con Chiruchi y Heber.

CV - Sin duda. ¿Me permite hacer una introducción para explicar esto?

EC - Preferiría que fuera concretamente al punto.

CV - Para llegar concretamente al punto tengo que hacer una introducción, porque en lo personal ustedes saben bien el aprecio que tengo por el doctor Lacalle, que es uno de los dos referentes vivos que tengo en el PN, por lo tanto si no realizara una introducción mis palabras podrían ser hirientes. Y yo no hiero a los que amo, al contrario, trato de acariciarlos y mimarlos.

Digo que el doctor Lacalle fue el mejor y sería el mejor, pero no es el mejor candidato, porque las reglas de juego no son las mismas de 1990. En aquel momento sumábamos todos los blancos aunque no estuviéramos de acuerdo, la reforma constitucional nos hizo mal, porque, lamentablemente, luego de una elección interna quedan heridas abiertas, y frente al doctor Lacalle hay otro líder, el doctor Larrañaga, que logró aglutinar a todos aquellos que están en contra de Lacalle. Y es difícil que esos que se juntaron por estar en contra de Lacalle sumen luego para que este hombre sea el candidato que conduzca al PN al triunfo.

Porque lo importante es ganar, no ser oposición. Yo no sé hacer oposición, hago una oposición constructiva, porque la gente no me eligió para hacer oposición sino para gobernar, por lo tanto trato de aportarle a este gobierno, como al gobierno del doctor Batlle, ideas para darle soluciones a la gente. Ser oposición no sirve, y además de tener que ganarle al doctor Larrañaga dentro del partido, también tenemos que ganarle al Frente. Y para ganarle al Frente tenemos que sumar, tenemos que transcurrir con la puerta abierta para que vuelvan al partido todos aquellos ciudadanos que votaron fuera de él y hoy están arrepentidos, a los cuales tenemos que tratar como al hijo pródigo, abrazarlos, abrirles la puerta, darles nuestro cariño y aprender con ellos sobre la base de la experiencia negativa que han recogido votando a un partido que prometió un cambio y ese cambio en lugar de ser progresivo ha sido hacia atrás.

El doctor Lacalle, cuando dio ese paso al costado en aquellas circunstancias, abriendo la puerta para que tres candidatos compitieran, nos ilusionó. A mí personalmente me ilusionó porque pensé que actuando de esa manera podría ser un tutor importante, ese palito firme que está al lado del arbolito que está creciendo para que no se tuerza y alcance las alturas.

EC - Vidalín, vamos a la pregunta concreta, ya hizo la introducción que tenía que hacer. Le planteo dos hipótesis para que usted conteste qué hace en cada caso. Hipótesis número uno: el Herrerismo hace una interna en la que compiten Chiruchi, Heber y Vidalín.

CV - La voy a ganar, pero si no la gano, me alineo detrás del ganador y soy el primer soldado en la primera línea de batalla.

EC - Si hay interna entre Chiruchi, Heber y Vidalín y usted pierde, usted acepta el pronunciamiento y no se larga por su cuenta.

CV - Los hombres deben tener palabra comprometida, que no necesariamente debe estar escrita.

EC - Hipótesis dos: no hay competencia interna en el Herrerismo porque Lacalle resuelve a comienzos del año próximo que él va a ser el precandidato. ¿Qué hace usted en ese caso?

CV - Dos respuestas. Si el doctor Lacalle me demuestra que está en condiciones de ser el próximo presidente de los orientales, es decir, de ganar la interna nacionalista y luego ganarle al Frente, incidiría directamente en mi grupo político para acompañarlo. Es difícil, yo soy un hombre con los pies en la tierra y con sentido común...

EC - Ya dijo que eso no le parece viable. Entonces...

CV - Entonces, con la firmeza y con la convicción de que podemos ser una buena alternativa, de que estaría ayudando a mi partido, al partido de la Nación, a ser gobierno, formaríamos un sector nuevo para darle más fuerza, más energía y más entusiasmo, ese vigor que se necesita para ser gobierno, porque yo estoy convencido de que mi partido, el partido de la Nación, va a hacer un gobierno para enmendar todos los errores que ha cometido el actual gobierno, incluso los errores históricos que ha cometido.

EC - Pero hablemos de la interna, no se vaya del tema. Si Lacalle decide por sí mismo ser el precandidato del Herrerismo, usted va a ser precandidato también, encabezando otra corriente dentro del PN. Esa es la situación.

CV - Sin duda, como capitán de un equipo, porque los hombres solos no hacemos nada.

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Edición: Mauricio Erramuspe