EMILIANO COTELO:

Hay una imagen que probablemente venga a la cabeza de todos los que recuerden la elección interna del Partido Colorado (PC) de 1989. Es la del entonces senador Jorge Batlle lamentando que quien era en ese momento presidente, Julio Sanguinetti, hubiera decidido respaldar a Enrique Tarigo como candidato presidencial de lo que entonces se llamaba Batllismo Unido.

Batlle dijo en ese momento que con esa decisión de Sanguinetti sintió que le habían "arrancado un brazo sin anestesia". Esa frase inspiró una serie de caricaturas de Arotxa realmente inolvidables. Desde entonces, cada tanto, se la invoca como señal bien clara de la distancia que llegó a separar a los dos líderes, en un enfrentamiento que derivó en una elección interna con Batlle y Tarigo compitiendo por la candidatura, y en la que finalmente hubo dos grupos diferentes, porque Batlle retuvo la marca de la vieja lista 15 y Sanguinetti creó el Foro Batllista (FB) lista 2000.

Sin embargo, después de cuatro elecciones nacionales y de otros dos gobiernos colorados, todo indica que Batlle dejó de sentir aquel dolor.

Ayer les informamos que hace pocas semanas Batlle le solicitó a Sanguinetti que fuera el candidato de consenso del FB y de la Lista 15 para las próximas elecciones internas.

Ese dato seguramente llamó la atención, por lo cual nos proponemos avanzar en esa información y darle el contexto correspondiente. Elena Risso, ¿pudiste averiguar algo más sobre ese planteo de Batlle?

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ELENA RISSO:

Hace alrededor de un mes, Batlle y Sanguinetti coincidieron de manera casual en un evento. Según las fuentes que consulté, se produjo el siguiente diálogo:

-Julio, vos tenés que ser el candidato.

-No, Jorge, no tengo ganas ni voluntad.

-Julio, vos sos el único que puede con esto.

EC - ¿Y así quedaron las cosas?

ER - No, porque Batlle insistió en su idea y la retomó en posteriores conversaciones telefónicas que mantuvo con Sanguinetti. Es más, Batlle le dijo a Sanguinetti que si aceptaba, él encabezaría la lista al Senado de la 15 y llevaría adelante una activa campaña.

EC - Lo llamativo es que la lista 15 proclamará oficialmente su precandidato en un congreso de delegados que ya tiene fecha fijada: sábado 17 de mayo. Se da como un hecho que el postulante será José Amorín Batlle.

ER - Sí, pero hay que recordar que cuando la lista 15 decidió promover a Amorín, Jorge Batlle pidió que primero se resolvieran las propuestas programáticas del grupo y luego el candidato, idea que fue rechazada por el resto del sector.

EC - Como quien dice, Amorín no terminaba de conformar a Batlle.

ER - El problema no es Amorín. De acuerdo con las consultas que estuve haciendo, hay que tener en cuenta que con la aparición de un precandidato de la lista 15, esa persona asumiría un protagonismo mayor que el de Batlle. Y si bien el ex presidente habla de abrir espacios a nuevas generaciones, llegado el momento siempre sale a la opinión pública a hablar de los distintos temas.

Además, a fines del año pasado, mientras la dirigencia de la lista 15 se preparaba para lanzar la precandidatura de Amorín, Batlle y Sanguinetti comenzaron a hablar de un candidato de consenso.

Por eso, primero intentaron que quien tomara la posta fuera Alejandro Atchugarry –un clásico que siempre surge en estas conversaciones–, pero Atchugarry no aceptó. Ante esa negativa, el ex senador de la lista 15 Juan Adolfo Singer fue en nombre de ambos a ofrecerle la candidatura al ex ministro de Economía Luis Mosca.

EC - Que, por lo visto, tampoco aceptó.

ER - Efectivamente, Mosca también rechazó el ofrecimiento.

Pero Batlle no fue el único que emprendió estas gestiones por su cuenta, al margen de su grupo, en el Foro Batllista sucedió algo similar.

EC - De todos modos, en el Foro hay tres precandidatos: el ex vicepresidente Luis Hierro, el diputado Washington Abdala y el intendente de Rivera, Tabaré Viera.

ER – Eso es en lo formal, pero Sanguinetti y otros dirigentes advierten que ninguno de los tres logra consolidarse en la interna partidaria. Por eso, el líder forista maneja ahora otro nombre como posible candidato de consenso: el ex canciller Didier Opertti. De todas maneras, para Sanguinetti la mejor opción sigue siendo Atchugarry.

EC - Si miramos todo este cuadro desde fuera, da la impresión de que se está tratando de armar un bloque para contrarrestar la candidatura de Pedro Bordaberry, que encabeza el grupo Vamos Uruguay.

ER - Algo de eso hay, y ellos no lo niegan en las conversaciones en privado. Pero aclaran que no necesariamente es una operación contra Bordaberry. La preocupación es, sobre todo, que Bordaberry crece en la interna pero el partido como tal no crece. Incluso, según las encuestas, el Partido Colorado pierde votos con respecto a la última elección, en la que alcanzó apenas el 10% de los votos.

EC - Pero, ¿Batlle cree que Sanguinetti puede hacer crecer a los colorados?

ER - Según las fuentes que consultamos, el líder de la lista 15 y otros dirigentes del FB entienden que al menos Sanguinetti tiene un "piso" de votos que puede mejorar el resultado electoral. Ojo, ninguno habla en serio de ganar la elección.

EC - Entonces, a partir de estos antecedentes, pasemos a lo más reciente, a lo que motivó ayer la curiosidad de todos. Con todo esto que ha venido pasando, ¿qué lectura puede hacerse de la presencia del ex presidente Batlle en un acto del Foro Batllista en Maldonado el sábado pasado?

ER - Lo que pasó ese día sorprendió a muchos. Hay quienes dicen que ni siquiera Sanguinetti sabía y que Batlle, como él mismo aclaró, fue a título personal.

EC - Vamos a recordar lo que dijo Sanabria al ver llegar a su tambo –ahí fue el acto– al líder de la lista 15.

(Audio Wilson Sanabria.)

(Fin.)

EC - ¿Sorpresa?

ER - Para Sanabria la sorpresa fue entre comillas. De acuerdo con las consultas que realicé, fue él quien invitó a Batlle.

Es cierto que Batlle tiene un estilo muy particular, muy fuera de protocolo, pero cuesta un poco imaginar que el sábado se haya levantado con ganas de ir a una reunión de otro grupo sin estar invitado.

Además habló, y en su discurso se encargó de mencionar expresamente a Sanguinetti. Vamos a escuchar un tramo de su intervención.

(Audio Jorge Batlle.)

(Fin.)

ER - Batlle le pidió a Sanguinetti que convocara a "todos los dirigentes colorados" en esa campaña contra el IRPF, algo que parece ser el caballito de batalla del PC para la próxima elección.

Al ser consultado sobre su presencia en el acto ayer por El Espectador, Batlle dijo que fue a impulsar esa movilización y a convocar a destacadas personalidades del partido para elaborar un programa de gobierno batllista. Y agregó que había llevado su discurso escrito para que no se le escapara "ninguna barbada".

EC - Interesante, porque no es común que Batlle lea sus discursos. ¿Hay que interpretar que quería contenerse, que no quería pasarse de determinada raya?

ER - Él mismo ha hecho referencia muchas veces a que no puede contenerse.

Otro apunte sobre el encuentro del sábado. Vale la pena escuchar de qué manera se dirigió Sanabria al público presente en el momento en que Sanguinetti y Batlle se dieron un abrazo.

(Audio Wilson Sanabria.)

(Fin.)

EC - ¿Cómo ven esta situación los dirigentes del FB y de la lista 15 que promueven la renovación?

ER - A ese nivel también hay consultas para llegar a un posible acuerdo. Pero la idea es otra: que el 17 de mayo se lance formalmente la candidatura de Amorín, que se defina el postulante del FB, y recién después, sobre fin de año, evaluar si se puede mejorar la situación unificando los dos sectores.

EC - La idea es que primero cada uno de los dos grupos tenga su candidato.

ER - No quieren que sean los líderes los que definan la candidatura y ponen como antecedente lo que pasó en 2004, cuando Batlle y Sanguinetti definieron la candidatura de Stirling y el PC tuvo la votación más baja de su historia.

EC - ¿Qué se puede esperar de ahora en adelante?

ER - Todo indica que Batlle va a seguir insistiendo en un candidato conjunto. En su discurso habló de un Partido Colorado batllista, algo que sorprendió a los asistentes.

EC - ¿Qué tiene eso de llamativo?

ER - En mayo del año pasado, Sanguinetti se reunió con Abdala, Hierro y Viera, los tres postulantes del Foro, y ahí se evaluó que si Sanguinetti no era candidato –como se encargó de aclarar–, el FB perdía su razón de ser, y que lo mismo le pasaría a la lista 15 sin Batlle.

Por eso desde el FB se promovió la idea de armar un "nuevo batllismo" como forma de reeditar el Batllismo Unido con el que el PC ganó la elección de 1984. Lo curioso es que en ese momento el que puso el grito en el cielo en contra de la propuesta fue Batlle. Ahora, sin embargo, es el propio líder de la lista 15 el que apunta en esa dirección.