Mailhos: asistimos a un "gran ajuste de cuentas" contra los empresarios
Las críticas de los trabajadores en este 1° de Mayo estuvieron centradas en las cámaras empresariales, a quienes trataron de "terroristas verbales". Estas son solo "unas tristes manifestaciones", aseguró Juan Mailhos, asesor de la Cámara de Comercio y Servicios, quien mostró la preocupación de su sector por la falta de techo en las pautas para los Consejos de Salarios. "Sin anunciar ningún tipo de catástrofe, visualizamos condiciones que no son las más adecuadas", sostuvo, y aseguró que existe "un gran ajuste de cuentas contra el sector empresarial" de parte del gobierno y los sindicatos.
(Emitido a las 7.42) JOSÉ IRAZÁBAL: "Terroristas verbales": esa fue una de las expresiones que se escucharon ayer en el acto del 1° de Mayo del PIT-CNT. Uno de los dirigentes que hablaron ayer en el acto calificó de ese modo a los representantes de las cámaras empresariales no a los empresarios, según se aclaró expresamente- que se convirtieron en el gran centro de críticas en el Día de los Trabajadores. En su discurso, sobre el estrado instalado a un costado de la plaza Mártires de Chicago, frente al Palacio Legislativo, el integrante del Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT Fernando Pereira consideró que los dirigentes empresariales deberían ser "más claros" sobre los intereses que defienden, porque, aseguró, "los de la central sindical son muy claros". (Audio Fernando Pereira). "Somos una central de izquierda, somos una central progresista, no nos escondemos para decirlo, nos miramos a la cara y lo decimos. No nos van a callar ni con los gritos de la derecha ni con los gritos de la izquierda; si están incómodos, que se compren sillas; si se sienten mal, que tomen calmantes. Acá hay un movimiento obrero independiente, autónomo, pero desde ningún punto de vista indiferente. Nunca vamos a ser indiferentes, ni a la democracia ni a los cambios, pero, por sobre todo, a la gente, a la gente a la que respondemos. A todos los que estamos acá nos han votado miles y miles de trabajadores. Yo me pregunto: a los dirigentes de las cúpulas empresariales, ¿quién los vota?, ¿a qué partido representan?, ¿de dónde salieron? ¿Qué les hace tener ese terrorismo verbal?, ¿qué les hace tener ese odio por el pueblo uruguayo? (Fin) JI - Pereira reconoció que la situación ha cambiado con respecto a años anteriores, que hoy los sindicatos tienen mayor peso en las negociaciones laborales, pero pidió que no se desviara la atención diciendo cosas que no son ciertas. (Audio Fernando Pereira) "Emplean el peor terrorismo verbal, añorando la década del noventa, de desregulación, flexibilidad, de despido antisindical, del vale todo, de años sin dar aumentos salariales. Por suerte la democracia entró en Uruguay, por suerte hay democracia laboral, y a los avances les vamos a llamar avances y a los acuerdos les vamos a llamar acuerdos. Pero hacen terrorismo, no se firmaron acuerdos en 10 lugares pero se firmaron en 200 y dicen que la negociación colectiva falla. No hablan nada y se dedican a hablar de cuatro o cinco ocupaciones, que nosotros defendemos, pero que no han sido el centro de las movilizaciones del movimiento sindical, no han sido ni de cerca el centro". (Fin) JI - Pereira puso un ejemplo para mostrar cómo los dirigentes han intentado tergiversar la realidad. (Audio Fernando Pereira) "Ahora estos terroristas verbales les echan la culpa de la inflación a los que ganan 3.000 pesos, se han transformado en inhumanos, tienen que tener sensibilidad, tienen que tener humanidad. Ningún trabajador que gane 3.000 pesos puede generar empuje inflacionario. Habrá que preguntarse qué pasa con la verdura, que sale de Playa Pascual a un precio y llega cinco veces más cara al supermercado. Seguramente en esa intermediación se van a encontrar muchas de las causas de esta alza inflacionaria, de este empuje de precios." (Fin) JI - ¿Cómo responde el sector empresarial a estas consideraciones que hizo el dirigente sindical ayer en el acto del 1 de Mayo? Para hablar sobre este tema, estamos con el doctor Juan Mailhos, asesor legal de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios del Uruguay. ¿Cuál su primera lectura? *** JUAN MAILHOS: No nos corresponde contestar manifestaciones públicas realizadas en un estrado, no es nuestro estilo ni nos parece que sea lo más conveniente abrir polémica sobre dichos expresados en un acto público como el de ayer. Indudablemente tenemos visiones de la realidad bastante diversas. Y nos duele que quienes invocan la democracia descalifiquen a los demás cuando piensan distinto. Es el único comentario, no nos vamos a referir puntualmente a esas manifestaciones, que nos parecen sumamente infelices. JI - Usted dice que son dichos expresados en un acto público, sin embargo esos dichos son la parte visible de una visión del PIT-CNT sobre el sector empresarial. JM - No me voy a referir a la visión que tiene el PIT-CNT del empresariado, no nos parece adecuado descalificar a la otra parte porque piense distinto. Somos pluralistas y nos vamos a mantener en eso. No sé a qué se refieren con epítetos tan gruesos como "terrorismo". Son unas tristes manifestaciones y no voy a hacer referencia puntual a ellas, no voy a contestar. JI - Esto forma parte de un clima en el que se llega a los próximos Consejos de Salarios, que puede llegar a entorpecer las cosas. Uno se imagina que si se llega con esta tensión después va a ser muy difícil sentarse a conversar en una mesa y definir cosas en común. JM - Ese es el riesgo que le veo a todo esto. Por eso no queremos echarle más leña al fuego y calificar manifestaciones sumamente infelices que se hacen más que nada para la tribuna. Corresponde analizarlas con mucha cautela y no darles más trascendencia que esto. JI - Pereira decía, refiriéndose a la negociación colectiva, que el nivel de acuerdos alcanzado en el último período fue altísimo. JM - Es verdad, lo hemos dicho, el nivel de acuerdos ha sido altísimo. Y hay que analizar los motivos, por qué ha sido tan alto: porque el sector empresarial ha puesto su grano de arena para que esto fuera así y el Poder Ejecutivo también, fijando pautas que tuvieron notas de moderación y de convicción a las partes. Y eso es lo que reclamamos para esta negociación. O sea, si hay una pauta moderada y flexibilidad, como se reclama, llegamos a niveles de acuerdo que superan el 90%. Eso fue en el pasado, pero nos preocuparía mucho que se concretaran los anuncios que conocemos a través del PIT-CNT de que la pauta para la negociación que viene no tiene techo. Allí pueden surgir reclamos exorbitantes ya hay algunos indicios, que nos van a dejar sin posibilidad de acordar. Sabemos cuál es la reacción posterior a la falta de acuerdo. JI - Va a ser fundamental cómo se pare el gobierno. JM - Sí, lo hemos dicho. Si el gobierno se limita a hacer una convocatoria, deja una pauta sin techo y además deja que transcurran algunos hechos a vista y paciencia, sin realizar absolutamente nada... JI - ¿A qué hechos se refiere? JM - Me refiero directamente a las ocupaciones y a todo tipo de manifestaciones de conflicto. No sé para qué está la función del gobierno en este caso. JI - Habrá que negociar en condiciones muy particulares, ya que se nos viene un año electoral en el que no va a haber posibilidades de acuerdo, entonces va a haber que tener pautas a más largo plazo, a dos años. JM - No estamos augurando que no vaya a haber condiciones de acuerdo, decimos que para que las haya debe haber pautas claras, como ha habido hasta el presente, y un espíritu de moderación. Queremos y pretendemos llegar al máximo nivel de acuerdos, como hasta ahora. Porque así como el sector sindical negocia para tener un mayor nivel de ajuste salarial, lo que es legítimo, el sector empresarial negocia para tener la paz laboral necesaria para que las empresas desarrollen su actividad y paguen lo que se acuerde en los Consejos de Salarios. Si este círculo virtuoso no se cumple y el Poder Ejecutivo, no colabora con las partes para que esto sea así, allí comienzan las disfunciones. Sin ser agoreros ni anunciar ningún tipo de catástrofe, visualizamos condiciones que no son las más adecuadas para que esto sea de esta manera. JI - El punto central en el cuestionamiento del sector empresarial es que no haya un techo para la negociación. JM - No solamente. Tendríamos que ver qué grado de recuperación está en juego, si la pauta va a ser un elemento al cual las partes deban constreñirse, como hasta el presente, o no y también habrá que ver qué va a hacer el Poder Ejecutivo con la homologación. Hay sectores de actividad que están bien y otros que no están tan bien, entonces veremos de qué manera se va a apreciar esa diferencia. Hay mucho para conversar. Insistimos: nos parece bien negociar salarios con un horizonte de dos años, no nos hacemos los distraídos, sabemos lo que pretende el gobierno cuando nos plantea una negociación a dos años poco antes de iniciar la carrera electoral. Estamos dispuestos a colaborar en ese sentido, para darle condiciones de tranquilidad y de certidumbre a la vida cotidiana del país. Vamos a hacer el aporte, vamos a concurrir por allí se ha dicho que de repente no concurriríamos a los Consejos de Salarios con la mejor de las voluntades, pero advertimos que algunas condiciones de esta negociación que pueden distorsionar lo que se ha dado desde el año 2005. JI - ¿Cuál es la mejor forma de negociar, según los empresarios?, ¿por ramas de actividad o directamente por empresa? JM - Esa es una discusión bastante larga. Nosotros pensamos que es mejor negociar desde las empresas, que desde la unidad de producción es que se conoce con más detalle y de manera más específica las condiciones que se tienen para dar ajustes salariales lo conocen los trabajadores y el propio empresario y de allí ir hacia arriba. La estructura sindical en este caso con un decidido apoyo del gobierno establece el sentido inverso, privilegiar la negociación por ramas sobre la negociación por empresas. Eso genera todo lo que la gente conoce de las dificultades de los descuelgues y las dificultades que algunas empresas tienen para cumplir con los objetivos alcanzados en el Consejo de Salarios. JI - El proyecto de ley de negociación colectiva parece ser otro punto de discordia, de tensión entre las partes. ¿Cuál es su visión? JM - Es un punto, no digo de discordia, sino de diferencia. Entendemos que esta ley como todas las leyes aprobadas en este período de gobierno sobre los temas laborales, que han sido pocas pero de cambios profundos se ha hecho sin tener en cuenta al sector empresarial. Eso nos parece complejo. Ayer se hablaba de la posibilidad de realizar ajustes de cuentas, y estamos asistiendo a un gran ajuste de cuentas contra un sujeto equivocado, que es el sector empresarial. JI - Ajuste de cuentas ¿de quién?, ¿del gobierno? JM - Del gobierno y de los sindicatos, encontramos una gran identidad ideológica entre el gobierno y los sindicatos en este sentido. Eso es manifiesto y nadie lo discute, estamos asistiendo a una cantidad de leyes que han sido impuestas al sector empresarial. Nos preocupa esto y nos preocupa mucho más cuando se trata de una de las últimas leyes importantes de este período, y que involucra tanto, como el hecho de establecer un sistema de negociación colectiva. Creemos que debe haber consenso en estas normas, tenemos que abandonar aquello de ganadores y perdedores, debería haber consenso, acuerdo en estas normas tan importantes. Eso se pretendió en los años 96 y 97, cuando el Poder Ejecutivo de la época nos convocó a trabajar sobre una ley de negociación colectiva. Se trabajó en una mesa, cara a cara, empresarios, trabajadores y gobierno, y se llegó a un proyecto de ley consensuado. Esa es una alternativa real, concreta, que está en la mesa, redactada y que es mucho mejor que el proyecto de ley que se pretende llevar adelante, que además de establecer soluciones favorecedoras de las tesis del sector sindical, establece la legitimación de las ocupaciones. Y es una gran insensibilidad del gobierno plantear esto por ley, cuando hay un decreto que ha sido impugnado por más de 200 gremiales empresariales y empresas. JI - ¿Hay algún tipo de espacio que dé la posibilidad de que el proyecto se rediscuta con la participación de todos los sectores? JM - El Poder Ejecutivo se hace el distraído y pasa el tema al Poder Legislativo. No sé, nosotros tenemos pedida una entrevista con las más altas jerarquías, pero no está en nuestras manos. Esperamos que se encuentren las vías para negociar de una manera adecuada estas normas. Si no es así, haremos los reclamos ante los órganos nacionales e internacionales que sean del caso, porque es una ley que, así como viene barajada, no solamente es violatoria de la Constitución de la República, sino también de los convenios internacionales que ha adoptado el país. JI - Ayer al mediodía hablamos con Juan Manuel Rodríguez, especialista en temas laborales, que desde hace unos cuantos años está en el Departamento de Modernización de las Relaciones Laborales de la Universidad Católica, y nos decía que en su opinión las políticas de este gobierno habían equilibrado la balanza, después de las políticas de los años noventa, cuando se habían flexibilizado demasiado las relaciones laborales. Según él, se habría llegado a un punto de equilibrio. ¿Ustedes hacen la misma lectura? JM - No, discrepamos buenamente con el amigo Juan Manuel, con quien hemos discrepado muchas veces. El péndulo se ha pasado bastante del punto muerto del cero, todo este tipo de normas genera una gran inclinación hacia los sindicatos. Incluso, hay cosas que llaman la atención: se establece el descuento de la cuota sindical y se anuncia que hay 280.000 trabajadores sindicalizados. Si pusiéramos una cuota de cinco dólares por trabajador (que son apenas 100 pesos), eso daría la idea del poderío del PIT-CNT en materia económica, que recibe entre un millón y un millón y medio de pesos por mes. Hay que ver las garantías pretendidas por el fuero sindical, que se extienden a todos los trabajadores por el simple hecho de estar sindicalizados. Este sería un buen momento para regular los sindicatos, ahora que tienen poderío económico, ahora que demandan legitimación exclusiva para celebrar convenios colectivos. Ya tienen una enjundia y un protagonismo que hacen necesario que estén regulados, como las cámaras empresariales, para hacerse responsables de sus actos. JI - Usted se refiere a una personería jurídica. JM - Hasta un club de bochas tiene personería jurídica. Sin ir más lejos, la propia central sindical carece de personería jurídica y eso les da a muchos dirigentes impunidad respecto de sus actos. Son ideas que manejamos, lo mismo que la regulación del derecho de huelga, que está establecido en la Constitución en el artículo 57. Hagamos un debate sobre qué alcances tiene que tener, porque así, sin ningún tipo de regulación, no sé dónde están los terrorismos. Repito lo del principio: no hay que contestar estas cosas que se dicen para la tribuna. No hay que ocultar que hay diferencias de opinión, de esto se trata la democracia y nosotros respetamos la posición de todos.