Entrevistas

Gallinal: en la coyuntura actual, Lacalle está mejor que Larrañaga

Gallinal: en la coyuntura actual, Lacalle está mejor que Larrañaga

Luego de dejar el Herrerismo en 1999, Francisco Gallinal vuelve a apoyar a Luis Alberto Lacalle para las internas del Partido Nacional. "En la coyuntura que atraviesa el país, Lacalle está en mejores condiciones", explicó al ser consultado sobre por qué retiró el apoyo de las últimas elecciones a Jorge Larrañaga. Y a pesar de que muchos le dijeron "mirá que la encuesta dice que gana Larrañaga", aseguró: "no podía aparecer ante el congreso nacional y decir "vamos a votar a Juan Pérez porque las encuestas dicen que gana". Para Gallinal, el país empieza a revalorizar "la figura de quien hizo el mejor gobierno desde que se instauró la democracia hasta hoy".

(Emitido a las 9.02)

EMILIANO COTELO:
Correntada Wilsonista (CW), el sector que encabeza el senador Francisco Gallinal, concretó el sábado pasado algo que se rumoreaba desde hace varios meses: el respaldo a la precandidatura presidencial de Luis Alberto Lacalle. De esta manera, el espectro de precandidatos blancos quedó acotado a tres nombres: el líder de Alianza Nacional, Jorge Larrañaga, el intendente de Durazno, Carmelo Vidalín, y Lacalle, con el apoyo de Gallinal.

En los últimos meses CW padeció varios alejamientos de dirigentes. ¿Es por esa razón que Gallinal abandonó el proyecto de ser él mismo uno de los precandidatos nacionalistas?

En 1999 Gallinal había sido electo diputado y senador bajo el ala del Herrerismo, grupo del que se apartó poco después de asumir su banca. ¿Por qué vuelve a aproximarse hoy a su movimiento original?

En las internas de 2004, pese a que Lacalle también competía, Gallinal respaldó la precandidatura de Larrañaga, argumentando que representaba la renovación. ¿Por qué ahora da marcha atrás?

Para hablar de estos y otros asuntos, estamos con el senador Francisco Gallinal. En la elección interna pasada CW respaldó a Larrañaga con el argumento de que apostaba a la renovación. No queda claro qué pasó para que ahora ustedes consideren que Lacalle es el mejor candidato.

***

FRANCISCO GALLINAL:
Lo que pasó fue que la renovación se concretó. En la elección de 2004 el partido necesitaba un aire nuevo, un aire fresco, un cambio, como consecuencia de los terribles enfrentamientos a los que se había visto sometido en la elección de 1999. En aquella ocasión, antes de llegar a la elección nacional ya estaban hipotecadas la suerte y la posibilidad del Partido Nacional (PN), porque nadie está dispuesto a votar a un partido que se enfrenta como se enfrentó el PN. Vamos a no entrar a buscar ahora responsables, porque ese tiempo ya pasó y porque además se ha consolidado la unidad. Pero la renovación se logró, no solamente aparecieron nuevos dirigentes en la vida del PN, sino que ha habido un cambio cualitativo en el relacionamiento interno, la unidad es hoy un valor fundamental, y los blancos hacemos permanentemente el esfuerzo –si aparece alguna chispa– para evitar que se produzcan nuevos enfrentamientos.

Además la renovación no es un fin en sí misma, en este caso es un instrumento para fortalecer a una colectividad política de cara a las próximas instancias, y es un elemento de carácter permanente, que no termina en nosotros, sino que hay que continuar y buscar que siga adelante.

EC - Pero si en 2004 Lacalle no era renovación, hoy, cinco años después, menos renovación debe ser.

FG - La renovación es un concepto que todo partido necesita incorporar para tener continuidad. Yo soy históricamente wilsonista, y Wilson murió hace 20 años y la única vez que fue candidato fue en 1971. Eso no quita que mi profunda identidad wilsonista no me haga un dirigente convencido de la necesidad de renovación permanente.

¿Qué pasó en el transcurso de estos cuatro años desde 2004 hasta hoy? Un elemento que no le escapa a Emiliano Cotelo como a ninguno de los oyentes de En Perspectiva: llevamos tres años y medio de un gobierno del Frente Amplio (FA), que accedió por primera vez, que ha transformado los tiempos del país y lo ha hecho de una forma que genera alarma y preocupación, porque cuando desde el Poder Ejecutivo se golpea fuertemente al Poder Judicial está en juego la institucionalidad. Además está en riesgo la tranquilidad de la familia, porque hay un clima de inseguridad pública creciente como consecuencia de que el gobierno no sabe cómo encarar la temática y no tiene claro a quién tiene que defender, si a los que estamos en libertad o a los que están privados de ella, y porque hemos tenido un crecimiento económico que quizás sea el más grande de los últimos 50 o 60 años y lamentablemente se tradujo en una andanada de impuestos sobre la población, incluso sobre los sectores menos pudientes.

Entonces el país empieza a cambiar su visión de qué necesita para los próximos tiempos y empieza a revalorizarse la figura de una persona que fue presidente de la República, que hizo el mejor gobierno desde que se instauró la democracia hasta hoy, que tiene claros los conceptos de autoridad y de orden, y que además ha cambiado. Yo he conversado largo con él, esta tarde le voy a trasladar un conjunto de propuestas programáticas de CW que, a nuestro juicio, tiene que incorporar a su futura acción de gobierno y a su discurso para que se ejecute la decisión asumida por el congreso el pasado sábado.

EC - A partir del diagnóstico que usted hace de lo que implica el gobierno del FA, ¿por qué el mejor candidato para el PN es Lacalle y no Larrañaga? ¿Por qué no Larrañaga?

FG - Larrañaga tiene enormes condiciones para ser el candidato del PN y el futuro presidente de los orientales.

EC - ¿Qué le falta?

FG - No creo que le falte, pero en las circunstancias que estamos viviendo, por la coyuntura que atraviesa el país, Lacalle está en mejores condiciones. Esto no es un pensamiento nuevo, yo planteé este tema en CW en mayo del año pasado, aunque recién ahora –como dije el sábado en el congreso– puedo hablar con la prensa libremente, antes estaba en un proceso de consulta interno y me debía a todos los compañeros. En enero usted me preguntó en caso de elegir otro candidato quién iba a ser, y yo le decía que esa era la sellada, que no estábamos en condiciones de definirlo. Llegué al congreso del CW del sábado sin haber dicho una sola vez públicamente, en ninguna de las entrevistas que se me realizaron, a quién iba a proponer en el congreso.

EC - Pero muchos lo intuían, entre otras cosas por alejamientos que ha habido en Correntada, que se produjeron porque venían venir esto, que implicaba regresar al Herrerismo, con el que se había roto en su momento.

FG - Por eso le cuento cómo fue el proceso. Muchos lo intuían no: muchos lo sabían, porque en las conversaciones mano a mano con los dirigentes se lo decía. En mayo del año pasado dije que como CW teníamos que construir una alternativa dentro del PN, que el partido necesitaba una alternativa. Es un partido de polarización, de competencia, y la competencia nos nutre y en tanto sea respetuosa nos da fuerza para ganar la elección nacional después. Como pasó en la elección anterior.

¿Quién iba a ser el candidato? Podía ser Gallinal, podía ser otro compañero de los que estaban sentados en el Senado o podía ser un compañero que en ese momento no advertíamos, pero la propia gente nos lo iba a decir. Sorteamos las distintas etapas, yo asumí y se lo dije muy claramente a todos los dirigentes: "Si algo aprendí de Wilson es que estoy para ser dirigente, no dirigido, yo voy a hablar con todos". Y hablé con las 63 agrupaciones que el sábado estuvieron representadas en el congreso.

EC - ¿En ese caso qué implicaba ser dirigente? Convencer.

FG – Convencer. Y si uno se encuentra ante una realidad adversa, no tiene que adaptarse a ella sino transformarla.

EC - ¿Cuál es la realidad adversa ante la cual se encuentra?

FG - La realidad adversa que vive el país, la realidad adversa que algunos nos señalaban: "Mirá que la encuesta dice que gana Larrañaga". Pero yo no podía aparecer ante el congreso nacional de un movimiento nacional como es CW y decir: "Vamos a votar a Juan Pérez porque las encuestas dicen que gana". Vamos a votar a quien estemos convencidos de votar y con los lineamientos programáticos que entendamos que son los que corresponden.

Y además, hacerlo a cambio de nada. Cuando empezamos a llegar a la conclusión de que el candidato era –es– el doctor Lacalle, algunos compañeros dijeron, sanamente: "Hay que pedir la Vicepresidencia en caso de que Lacalle no gane la interna". Y yo dije: "No, yo no voy a un proyecto para perder, no me sumo a un proyecto en el que lo que más me conviene es perder para ser el vicepresidente del otro. No quiero la Vicepresidencia, quiero aportar con nuestras propias listas en todo el país, como lo hicimos en la elección anterior, para tomar esa definición".

EC - ¿Y ese factor traumático de regresar a un grupo del que se habían ido?

FG - No regresamos a ningún grupo.

EC - Se acercan nuevamente al Herrerismo.

FG – No. Primero, vamos a no establecer que el Herrerismo es mala palabra, que hay que llevarlo al potrero donde están los que padecen alguna enfermedad. Pero ese no es el tema, no viene al caso. Yo me alejé definitivamente del Herrerismo y salí a construir mi propio espacio, no salí de aquí para incorporarme allá, construí dentro de las filas del PN.

En mayo del año pasado les decía a los compañeros que teníamos que construir una alternativa. Construir una alternativa significa generar un espacio dentro del partido que nos ubicara con un candidato a presidente que estuviera cada vez más por encima de los sectores del partido. Porque el país necesita cada vez más un presidente de todos los uruguayos, que no gobierne solamente para los suyos. Por eso participo totalmente de la idea de conformar un espacio que pretende poner al candidato por encima de los sectores.

EC - Incluso apelando a votantes colorados, Lacalle ha sido bastante insistente en eso.

FG - Apelando a todo el que vote, estamos habilitados para votar unos 2,5 millones y el voto de ese colorado, de ese frenteamplista o de ese independiente vale tanto como el mío o el del propio doctor Lacalle. Apelar a los demás significa darles un mensaje muy claro, como el que le está dando el doctor Lacalle al país hoy: va a ser un presidente que no va a ser rehén ni de lo que le exija CW, ni de lo que le exija el Herrerismo ni de lo que le exija este nuevo espacio, sino que va a gobernar en función de lo que el país necesita. Ese es el problema del doctor Tabaré Vázquez hoy: en varias de las decisiones más importantes que ha tenido el país ha sido rehén de su propia fuerza política, como pasó con el tratado de libre comercio.

***

EC - Al pasar dijo que el apoyo de CW a la precandidatura de Luis Alberto Lacalle es "a cambio de nada". Se refería a que era un apoyo que no se daba a cambio de posiciones, de cargos, de tal o cual lugar en la fórmula presidencial, etcétera. Pero sí hay una negociación detrás de este apoyo: CW va a confirmar el acuerdo con Lacalle cuando se redondeen con éxito unas negociaciones de tipo programático, a las que su sector irá con una serie de planteos que definió como de "fuerte cuño wilsonista". ¿Podemos ver algunos ejemplos de esos puntos?

FG - Primer punto, gobernabilidad. En el Uruguay de hoy significa tener la más plena disposición a la negociación –en caso de ganar las elecciones– con el FA, por ejemplo, que tendrá que conformar las mayorías junto con nosotros para definir las políticas de Estado que el país necesita como nunca. Aquellos acuerdos programáticos que firmamos en 2004, actualizados, son un instrumento fundamental. Gobernabilidad significa diálogo con los sindicatos –lo hablé anoche con el doctor Lacalle–, los convenios colectivos serán una necesidad, los Consejos de Salarios, quizás con pautas diferentes.

EC - Casualmente, los Consejos de Salarios se desarticularon durante el gobierno de Lacalle.

FG – Exactamente, ahí está el cambio que el propio Lacalle tiene que tener, que tiene que estar dispuesto a llevar adelante para imprimirle a la acción de gobierno un sello diferente, más allá de las virtudes que pueda heredar del anterior. Mucha pérdida de poder adquisitivo salarial se produjo porque durante los últimos años no existieron Consejos de Salarios, eso se lo tenemos que reconocer a la actual administración.

EC - Usted habla de unos Consejos de Salarios reformulados.

FG - Estamos trabajando con laboralistas para ver de qué forma el Estado puede terminar laudando para que exista un fallo que contemple las aspiraciones de las distintas partes. que proteja por sobre todas las cosas las fuentes de trabajo y la generación de trabajo, que es otro elemento fundamental.

La gobernabilidad va a jugar un rol fundamental, en el gobierno del doctor Lacalle el FA no estuvo representado en los entes autónomos y servicios descentralizados...

EC - ¿Ustedes van a reclamar que haya presencia de la oposición en los entes?

FG - Sí, y el doctor Lacalle me contestó anoche que está totalmente de acuerdo. Más aún, hay un proyecto de ley que yo presenté hace ocho años, en función del cual aumentamos la integración del directorio del Banco Central de tres a cinco miembros para que haya dos lugares para los dos principales partidos de oposición. Ese es el concepto gobernabilidad.

En política económica hay que desterrar toda posibilidad de introducir nuevamente el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF), que ha caído en desgracia, este gobierno le dio partida de defunción.

EC - Usted habla de eliminar el IRPF en su conjunto, no solo a las pasividades.

FG - No solo el actual, sino que tiene que venir un tiempo diferente. El IVA tiene que ser declarado el enemigo público número uno de la economía familiar y doméstica.

EC - Si va a eliminar el IRPF y además va a bajar el IVA, ¿cómo va a compensar la caída de los ingresos?

FG - Hay que buscar caminos alternativos. Pero también hay un exceso de ingresos y egresos del Estado como consecuencia de un manejo demagógico en algunas etapas de la economía nacional. Consideramos que los planes de emergencia deben permanecer, habrá que ponerles un límite temporal, habrá que establecer un cambio cultural, buscar una contraprestación de carácter laboral para dignificar la acción, pero el próximo gobierno no podrá quitar los planes de emergencia hasta tanto no se supere definitivamente la emergencia social que las propias estadísticas denuncian que se ha profundizado en el gobierno del FA. Eso es una base programática sobre la que aspiramos a tener una respuesta del doctor Lacalle.

En materia de derechos humanos, no se puede dejar de reconocer que se avanzó durante estos años en algunas áreas, en otras quizás no.

EC - Usted se refiere a las investigaciones sobre violaciones a los derechos humanos durante la dictadura.

FG - No solamente a las investigaciones, le digo una posición personal que comparten los compañeros de CW: más allá de la base que tengan los pronunciamientos judiciales, que siempre hay que respetar, en el fondo me produce satisfacción que el señor Gregorio Álvarez y el señor Juan María Bordaberry estén presos por el terrible daño que le hicieron a la sociedad durante todos esos años. Eso no arregla nada, no compensa el dolor y el sufrimiento de miles de familias, pero si hubo avances hay que respetarlos, sobre todo si es el Poder Judicial el que está detrás de ellos.

Hoy estamos en la misma posición que el doctor Vázquez, creemos que hay que preservar la Ley de Caducidad porque fue un instrumento muy útil y seguramente eso lo compartimos con el doctor Lacalle. Hay que seguir adelante con la aplicación de la Ley de Caducidad por el Poder Judicial libre e independiente. Estamos en la posición del doctor Vázquez, con una diferencia: ahí estoy con mi hermano, mi hermano está de acuerdo conmigo y el doctor Vázquez no tiene ese privilegio. Eso también lo compartimos con el doctor Lacalle.

Esos son los grandes temas. Y otros, como la modernización del Estado, la filosofía de la ley de Ancap, que nosotros impulsamos y que luego fue derogada, que busca la asociación del Estado con los particulares.

EC - Al escucharlo detallar los capítulos programáticos que CW va a negociar con el doctor Lacalle para concretar el apoyo surge una pregunta: si Lacalle acepta esos puntos de puño wilsonista tan fuerte que usted marca, se limarán varias de las aristas más duras del perfil tradicional de Lacalle, se puede decir que desde el punto de vista programático quedará más cerca de Larrañaga. Entonces, ¿qué va a pasar?, ¿los blancos van a tener que optar simplemente por una cuestión de nombres y estilos personales?

FG - Que los blancos estemos cerca unos de otros me parece una virtud, no un defecto.

EC - Puede ser visto así, pero se van a achicar las diferencias programáticas entre Lacalle y Larrañaga.

FG - Las personalidades son muy distintas y además hay concepciones diferentes. Vamos a achicar las diferencias dentro del partido, porque vamos a terminar con un único candidato y un único programa que todos vamos a respaldar y al que todos vamos a dar nutrientes, elementos que lo fortalezcan. Para nosotros es fundamental que el doctor Lacalle haga suyas estas propuestas, algunas de las cuales en los últimos días hemos conversado y ayer le trasladé la base fundamental de todas ellas.


En materia de derechos humanos incluimos especialmente el diseño de un plan nacional de seguridad ciudadana, porque ahí es donde aparece el doctor Lacalle en condiciones de darle a la ciudadanía las garantías de la paz, la tranquilidad pública y las certezas que lamentablemente este gobierno no ha dado. Le vamos a pedir al doctor Lacalle –que lo tiene más que asumido antes de que se lo digamos– tolerancia cero en áreas de estas características. Los perfiles, los estilos de los candidatos son diferentes, cada uno con sus virtudes y sus defectos. Los defectos de los candidatos dentro y fuera del PN se remedian con una buena compañía, un buen equipo técnico y un buen conjunto de ideas.

En junio el Instituto Aportes, de CW, va a hacer un seminario con la presencia del doctor Lacalle y los técnicos que quiera llevar para explicitar muy claramente los puntos programáticos en función de los cuales CW adhiere a la candidatura del doctor Lacalle.

EC - Por lo que deja entrever, la negociación está muy avanzada y usted ve factible que haya acuerdo en torno a esos puntos.

FG - Lo veo muy factible porque les hace mucho bien al partido y a la candidatura del propio Lacalle. Él va a responder en el transcurso de los próximos días.

***

EC - El momento en el que CW toma esta decisión de respaldar la precandidatura de Luis Alberto Lacalle tiene sus complicaciones desde el punto de vista interno. Por ejemplo, los últimos hechos judiciales en el departamento de Flores, que tienen que ver con presuntas irregularidades durante el período del gobierno municipal anterior, cuando era intendente Carlos Mazzullo, ahora diputado y notorio dirigente de CW. El jueves, 48 horas antes del congreso de CW, la justicia penal dispuso el procesamiento sin prisión de Alessandro Mazzullo, hijo de Carlos y ex secretario de la Intendencia de Flores, por un delito de fraude. Y por otro lado se resolvió abrir una pieza aparte para investigar la actuación del propio Carlos Mazzullo como intendente, lo que seguramente llevará al juez a solicitar al Parlamento el levantamiento de sus fueros. ¿Cómo se plantan ustedes frente a esta situación delicada?

FG - No hay dudas de que los hechos suceden en un momento especial.

EC - Si viene una solicitud de desafuero, ¿qué hacen los parlamentarios de CW?

FG - Vamos a ver si viene y en qué condiciones. Adelantarme a los tiempos sería pronunciarme como juez, y no lo soy.

EC - Desde el Herrerismo se le trasmitió a CW que si llegaba el pedido de desafuero lo iban a votar.

FG - No se nos trasmitió absolutamente nada, ni desde el Herrerismo, ni desde Alianza Nacional, ni desde ningún sector del partido.

EC - La información que nosotros obtuvimos de fuentes herreristas dice eso.

FG - A mí nadie me trasmitió absolutamente nada. Más aún: hemos conversado el tema en la bancada de senadores, donde estamos todos los sectores representados, y hemos estado de acuerdo en que cuando lleguen los pronunciamientos, si llegan, se tomarán las definiciones que se tengan que tomar. También se habló durante muchos meses de que estaba pedido el desafuero y no era así, recién ahora se habla de esa posibilidad. Esa es la forma en que hay que actuar, tenemos un Poder Judicial independiente y hay que respetarlo. No tenga ninguna duda absolutamente nadie, ni dentro ni fuera de CW, de que vamos a estar a la altura de nuestros antecedentes y vamos a proceder de la forma en que sinceramente entendamos que tenemos que proceder.

EC - Usted no pone las manos en el fuego por Carlos Mazzullo.

FG - Carlos Mazzullo es un amigo.

EC - Se lo pregunto a partir de la actitud que usted acaba de describir.

FG - Usted me pide que diga si voy a votar el desafuero condenándolo o que lo declare inocente, y yo no soy juez. Carlos Mazzullo es una persona de bien, como toda su familia, tiene una larguísima trayectoria en la vida política y en la vida política del departamento, fue intendente durante 10 años y ahora se lo acusa de que se gastaron 17.000 pesos en arreglar el auto de su hijo que estaba al servicio de la Intendencia Municipal y no sé qué otra cosa menor. Al hermano también se lo acusaba pero al final se archivaron las actuaciones por considerarlas improcedentes.

Si me pregunta si pongo las manos en el fuego por mis amigos, por supuesto, porque a mis amigos los acompaño en las buenas y en las malas. Y si en alguna oportunidad me tengo que quemar las manos, me las quemo, si fue por amigos, bienvenido sea. Pero yo confío en que este ciudadano actuó honestamente, más allá de circunstancias o errores que se puedan haber cometido. Veremos, dejemos actuar al Poder Judicial, no lo presionemos también nosotros.

EC - El otro elemento complejo de la interna son los alejamientos que ha tenido CW. En las últimas elecciones el grupo obtuvo dos senadores y ocho diputados y de esos ocho diputados se fueron cuatro: Beatriz Argimón y Álvaro Delgado de Montevideo, Federico Casaretto de Maldonado y Adriana Peña de Lavalleja. ¿Cómo juegan esas decisiones?, ¿por qué se dieron?

FG - Se dieron por una serie de circunstancias, la mayoría de ellas vinculadas con la decisión que se acaba de tomar. Evidentemente prefirieron tomarla antes y no someterse a lo que el congreso estaba por resolver. Electoralmente no nos afectan, por una razón muy sencilla: los dos diputados de Montevideo y la diputada de Lavalleja fueron electos como suplentes de quien habla, que fue quien encabezó esas listas y en quien la gente depositó su confianza. En todo caso, la diputada Beatriz Argimón fue la más notoria, no puedo dejar de reconocer que trabajó y peleó por ganarse esa banca, pero los otros casos se resolvieron por mi voluntad.

De modo que hagan lo les parezca, eso no nos afecta electoralmente; el cerno, las columnas que conformaron CW están presentes. Hoy el senador Antía en las encuestas ocupa el primer lugar para ser el intendente municipal de Maldonado, porque también el PN está para ganar. Y estamos muy fuertes en Lavalleja, en Flores, en Florida, en Treinta y Tres, en Montevideo. En Canelones sacamos 15.000 votos en la última elección, CW está entera, tiene un prestigio cualitativo y cuantitativo, ha sido un sector muy coherente, ponderado, sensato, ha aportado mucho al país y lo va a seguir haciendo. Si no, habríamos buscado un acuerdo, habríamos pedido, pero decidimos ir con nuestras propias listas a las próximas elecciones internas.