Entrevistas

Gandini: el tema de los narcos en la política "involucró a más de un gobierno"

Gandini: el tema de los narcos en la política "involucró a más de un gobierno"

El diputado del Partido Nacional Jorge Gandini dijo a En Perspectiva que le "sorprendieron" algunos de los casos de contactos entre políticos y narcotraficantes denunciados por Julio Guarteche. Manifestó que estos contactos se hacen "básicamente" con "políticos que están en el gobierno", pero aclaró que en todos los casos que llegaron a la Justicia "quedó despejada la responsabilidad de estos jerarcas". Agregó que las escuchas telefónicas –con orden de un juez– sean, quizá, "el precio que tenemos que pagar para asegurar un poco más la tranquilidad en el país".

(Emitido a las 7.49 horas)

EMILIANO COTELO:
"Narcos intentaron asociarse a Pluna y terminal portuaria". Ese es el título principal en el diario El Observador esta mañana. También tiene que ver con el mismo tema, el título que publica el diario El País, pero como enfoque secundario, no es el más destacado en tapa: "Investigaron a legisladores y ministros".

Jorge Vázquez ha hablado de estos temas también. Dijo, en estas horas, algo que ha sido citado varias veces. "Alguno puede ponerse nervioso. El sector político en general no tiene por qué ponerse nervioso frente a las investigaciones vinculadas al narcotráfico, aunque tal vez sí alguno en particular se puede poner nervioso", dijo ayer el prosecretario de la Presidencia, en su comparecencia en el Parlamento, en su carácter de presidente de la Junta Nacional de Drogas (JND).

Por allí vienen algunos de los encares de esta noticia. El diario El Observador, en páginas interiores titula: "Narcos querían asociarse a Pluna y a terminal del puerto".

El director de la Brigada Antidrogas, Julio Guarteche, informó ayer en el Parlamento que los narcotraficantes estuvieron interesados en ingresar al negocio de la empresa Pluna y también en el de la terminal de contenedores del puerto. Y advirtió a los políticos que "tengan cuidado cuando hablan con un empresario porque puede tratarse de un delincuente bien vestido. Ahora hay una tercera generación de narcotraficantes que no usan cadenas de oro, son formados en universidades de Estados Unidos, tienen postgrados, son empresarios serios que pueden hablar con los políticos sin despertar sospechas", dijo Guarteche ante la comisión de la Cámara de Diputados para la investigación del lavado de activos.

Guarteche había sido citado para que explicara por qué dijo que el narcotráfico busca infiltrarse en el poder político. Lo acompañaron la ministra del Interior, Daisy Tourné, y los jerarcas de la Junta Antidrogas, Jorge Vázquez y Milton Romani.

Fuentes parlamentarias dijeron a El Observador que el jerarca no se anduvo con vueltas y luego de pedir que se interrumpiera la versión taquigráfica, narró casos concretos de políticos sorprendidos en su buena fe, que sin querer hicieron contactos con narcotraficantes.

Guarteche insistió en que existe un cambio cualitativo en el funcionamiento del narcotráfico que lo ha hecho evolucionar como nunca antes, por eso le pidió a los políticos estar alertas. Dijo que investigaciones de la Brigada Antidrogas permitieron saber que una organización de narcotraficantes colombianos, que luego cayó en el operativo "San Francisco" realizado en Salto, estuvo cerca de pujar para quedarse con acciones de la empresa Pluna.

Además recibió información del exterior, donde escuchas telefónicas, que terminaron en la operación "Chimé", con varios narcos detenidos en Montevideo, revelaban que los delincuentes se lamentaban por haber llegado tarde para participar en la explotación de la terminal de contenedores del Puerto de Montevideo.


***


EC – Estamos con el diputado de Alianza Nacional, Jorge Gandini, que integra esta comisión especial de la Cámara de Representantes.

¿Usted había convocado a estas autoridades a comisión?

JORGE GANDINI:
Convocamos al inspector Guarteche porque hizo algunas declaraciones en un seminario internacional que organizó el Banco Central, donde dijo algo diferente a lo que dijo ayer en comisión. Se ha referido a que los narcos intervienen en la actividad política, se dedican a la actividad política, intervienen en actividades menores como la de los ediles, y también mayores.

Eso generó cierta preocupación en la comisión -que por unanimidad aceptó esa propuesta-, para que aclarara a qué se dedicaban, o si se dedican y apoyan –dijo también- la actividad política. Qué quiere decir, que financian campañas, o que son ministros o senadores o diputados, porque él decía "actividades políticas mayores".

Ayer el inspector Guarteche confirmó una vez más que es un muy buen profesional; pidió disculpas a la comisión por esa generalización, por la forma en que generó todo este mal entendido, y explicó esto que usted estaba relatando. Explicó que esta generación de narcos quiere acercarse a la política para protegerse con ella, y lo hace sorprendiendo en su buena fe a muchos jerarcas, a muchos políticos, básicamente políticos que están en el gobierno, que tienen capacidad para tomar decisiones, y de esa forma beneficiarse, ya sea con la impunidad o con algunos aspectos que le permiten penetrar las áreas vulnerables del Estado para hacer sus negocios.

EC – Veíamos recién, al repasar esta crónica, que en determinado momento Guarteche pidió que se suspendiera la versión taquigráfica de la sesión y mencionó una serie de casos concretos ¿Dio nombres y apellidos?

JG – Dijo básicamente lo que está en la prensa -no hay nada más público que lo secreto-. Ayer pidió que esa parte no se incluyera en la versión taquigráfica -no pidió el compromiso de que fuera reservado- y explicó cómo funciona y qué es lo que quiere decir. Para hacerlo dio estos ejemplos de situaciones en las que algunos jerarcas del gobierno se vieron sorprendidos en su buena fe...

EC – Por ejemplo, hizo mención a un asesor de un ex subsecretario del Interior y también a un ex director general del Interior. Parece que un allegado a este ex director general fue procesado por drogas y según Guarteche los narcos se contactaban con este gobernante para pedirle pequeños favores. El jerarca de la época desconocía de quiénes se trataba. También relató que el triunfo electoral del Frente Amplio en Maldonado fue celebrado en un hotel en el que pusieron dinero empresarios vinculados con la droga. ¿Este tipo de situaciones son las que estuvieron en la mesa?

JG – Sí, exactamente. Las que a mí más me sorprendieron, por el volumen que tienen, son las que efectivamente recoge la prensa, [por ejemplo la] de que uno de estos grupos, que el inspector Guarteche dice tener perfectamente identificado y que opera en la región, intentó -aunque luego no concretó- participar en la compra de Pluna. Claro, uno se imagina un grupo de esta naturaleza, con este volumen, con ese poderío, propietarios de una empresa aérea en sociedad con el Estado... sería para la empresa un arma estratégica muy importante; y uno recordaba también que en Pluna habían existido pilotos que luego terminaron procesados precisamente por el tráfico en las aerolíneas uruguayas.

Contó también que en otra ocasión un grupo se lamentaba por no haber llegado a tiempo a la subasta de la terminal de contenedores, otro punto estratégico: el puerto.

Nos afirmó en todos los casos que ellos tienen medios técnicos para saber que los jerarcas fueron sorprendidos en su buena fe...

EC – ¿Cómo que tienen medios técnicos para saber eso?

JG – No entramos en detalle, pero uno tiende a imaginarse que en la investigación que hacen de estos grupos o de estas personas, pudieron saber que estas personas utilizaban a los jerarcas del gobierno con los que entraron en contacto sin que éstos supieran su vinculación a estas actividades ilícitas.

Guarteche dio total seguridad, y dijo además, que en todos los [casos] que llegaron a la Justicia quedó despejada la responsabilidad de estos jerarcas. Contó incluso que algunos ministros de este gobierno recibieron narcotraficantes en sus despachos, pero los recibieron como inversores, vinieron a plantear inversiones de cuantioso monto en Uruguay, pidieron entrevistas con los jerarcas del gobierno y los recibieron como lo hubiéramos hecho cualquiera de nosotros; luego uno se entera a quién recibió.

Y esto es lo que nos quería trasmitir, que hay que tener mucho cuidado, porque disfrazados de importantes inversores, gente con título, gente que está graduada y que tiene documentos que acreditan volúmenes económicos importantes y "bien habidos", llega al país.

Empezó contando una cosa muy interesante. Él dijo que lo primero que hacen es mandar expertos al Uruguay, esos expertos llegan, se instalan, y durante un tiempo hacen un informe completo de cómo funciona el sistema en todos sus aspectos. Cuando detectan las áreas vulnerables las comunican y es allí –sobre las áreas vulnerables- donde el grupo comienza a actuar. Y entonces ahí intentan penetrar las áreas sensibles, en las que puede haber no sólo jerarcas de gobierno: en una aduana por dónde es más sencillo, en un banco cuál puede ser el funcionario más fácil para conversar con él, etcétera.

Pero primero, antes de llegar, toman contacto con esa realidad, se asocian –y esto para mí también fue novedoso- con las redes del contrabando; redes que ya están instaladas y que se utilizan para ingresar el tráfico de drogas y además para vestir el tráfico de drogas de contrabando, una actividad que tiene menos inconvenientes que el narcotráfico.

EC – ¿Pepe, tú tenías alguna pregunta para formularle al diputado Gandini?

JOSÉ IRAZÁBAL:
Sí, me gustaría saber si Guarteche citó en el tiempo este fenómeno. Estamos hablando de administraciones recientes, se habla de algún ministro actual que recibió a narcotraficantes "disfrazados" de empresarios, pero también se hace referencia a algunos cargos altos o a algunos jerarcas de alguna pasada administración.

JG – Él dijo: "estoy desde el 2000 en este cargo, tengo que decir que tengo una muy buena opinión del sistema político, nunca recibí de ningún gobierno una presión para que parara, o interviniera de manera diferente en un operativo de los que yo tengo que realizar, pero también en todo este tiempo hemos visto que pasan esas cosas". Y citó a este propio gobierno y en todos los casos deslindó responsabilidades de las personas que citaba. Así que yo creo que es un fenómeno de los últimos tiempos, que involucró  a más de un gobierno obviamente.

EC – En definitiva, ¿cómo califica usted el saldo de esta sesión de la comisión?

JG – El hecho infeliz que provocó esta convocatoria, y las aclaraciones que en ella se hicieron, nos llevó a conocer el tema un poco más a fondo y a darnos cuenta que hay que tener mucho cuidado, todos.

EC – Por lo menos de la lectura de algunas de las crónicas de prensa, me pareció ver que en algún momento surgió preocupación por los métodos de investigación y seguimiento que se están usando. Por las escuchas telefónicas, por ejemplo, si estas podían llegar a abarcar incluso a parlamentarios o jerarcas de gobierno... ¿Este tema estuvo arriba de la mesa?

JG – No puntualmente, estuvo implícito. Pero es obvio, si la Brigada Antinarcóticos cuenta con tecnología para grabar llamadas, hacer seguimientos, si con autorización del juez están siguiendo un posible narcotraficante y éste se comunica con personas, esas personas también quedan en la grabación, y esas personas pueden ser cualquiera, incluso cualquiera de nosotros. Por eso decía Guarteche "sabemos que fueron sorprendidos en su buena fe", bueno, tendrán los elementos para saberlo ¿verdad?

Yo prefiero que estas cosas -si está el juez atrás obviamente- sean así y que todos seamos tratados igual. Es la única manera que tenemos de blindar un poco más el país frente a estos nuevos grupos delictivos que actúan con enorme poderío económico y con enorme poderío tecnológico, en los cuales el Estado siempre va atrás para defenderse.

EC – Jorge Vázquez, que también habló de estos temas, hizo alguna puntualización en este sentido: "De más está decir que todo lo que se ha hecho en cuanto a la represión del narcotráfico y el lavado de dinero, fue con total respaldo del Poder Judicial".

JG – Sí, por eso, si no fuera así entonces sí tenemos un problema. Serían escuchas clandestinas, estarían violándose derechos fundamentales y tendríamos otro tipo de problemas que afectarían no a los diputados o políticos que pueden ser escuchados, sino a cualquier ciudadano. Sin orden del juez eso es una violación de una garantía constitucional, pero mientras está el juez atrás tenemos que permitir que se haga. Quizás ese es el precio que tenemos que pagar para de alguna manera asegurar un poco más la tranquilidad en el país.