Entrevistas

Diputada del PCU: la ley de educación debe ser conocida por los que la van a aplicar

Diputada del PCU: la ley de educación debe ser conocida por los que la van a aplicar

El proyecto de ley de educación impulsado por el gobierno se aprobó en la Cámara de Diputados. Sin embargo, la diputada comunista Alicia Pintos votó en contra. Consultada por En Perspectiva, Pintos aclaró que "el Congreso del PCU realizado en octubre había definido el rechazo a esta ley" y que su sector exige que los principios de "autonomía y cogobierno" estén presentes en el proyecto. Agregó que "la ley debe ser conocida y manejada por aquellos que la van a llevar adelante" y subrayó que su partido pidió "libertad de acción para poder fundamentar" su voto, pero "lamentablemente" no fue concedida.

(emitido a las 7.50 hs.)


EMILIANO COTELO:
Si vamos al terreno político, lo que más sobresale esta mañana es el episodio parlamentario de ayer, que culminó en realidad a altas horas de la noche cuando se aprobó -no sin idas y venidas, no sin tensiones, no sin polémica fuerte y de distintos tipos- el proyecto de ley de educación impulsado por el Poder Ejecutivo.

"Ley de Educación: desacato del Partido Comunista al gobierno" es el título con el cual encabeza su crónica el diario El País.

Por su lado La República dice que "El debate fue extenuante, la sesión comenzó a las 10.07 y finalmente se votó a las 21.57". El título: "La mayoría del Frente evitó una derrota de la ley de Educación". La crónica de La República comienza diciendo que "Tras doce horas de extenuante debate, se aprobó en general el proyecto por 50 votos en 69 diputados presentes en sala. En el Frente Amplio (FA), los diputados Darío Pérez y Alicia Pintos lo hicieron en contra" (Darío Pérez en realidad salió de sala en el momento de votar). "La iniciativa contó, además, con la oposición de blancos y colorados, así como de algunos sectores de los gremios de la educación. El Nuevo Espacio pidió ‘mandato imperativo’ para la bancada. Hubo disturbios, golpes y forcejeos de estudiantes que quisieron ingresar al Palacio", y la nota se acompaña con fotografías de lo que fue el entorno del Palacio Legislativo ayer donde, por ejemplo, se observan en primer plano neumáticos que están siendo quemados sobre el pavimento como parte de las manifestaciones de los sindicatos que se oponían a este proyecto.

Vamos a la crónica de El País: "El Partido Comunista del Uruguay (PCU) desacató al mandato imperativo de la bancada del Frente Amplio y votó en contra de la ley de Educación ayer en diputados, la misma actitud adoptará en el Senado", anticipa este artículo. "Pese al desacato, los integrantes del FA esconderán esta nueva crisis en la interna del gobierno hasta que se realice el Congreso de la coalición de izquierda el 13 y el 14 de diciembre que definirá el tema de la candidatura. ‘La intención es no tensar más la caldeada interna’, dijeron fuentes oficialistas".

"‘Soy representante de un partido arraigado en la clase obrera y el pueblo y me tiembla hoy la voz pero no me temblará el brazo al no votar esta ley’. Las expresiones de la maestra y diputada comunista Alicia Pintos pronunciadas con más sentido político que docente, tuvieron doble efecto; -dice el artículo- detonaron la violenta reacción de los ocupantes de las barras en la Cámara de Diputados que debieron ser desalojados y a la vez sumieron al Frente Amplio en un nuevo desconcierto. La Cámara de Diputados sesionó en medio de una gran tensión y con la atenta y hasta entonces silenciosa mirada de los asistentes a las barras. ‘El proyecto no es el que la sociedad y el país reclaman. Lástima que no haya habido un consenso nacional, sobre todo con los actores de la educación. Queremos cambiar la ley, pero así no, así no’, subrayó la diputada Pintos. La maestra sustituía ayer al titular de la banca de la 1001, Doreen Ibarra, que viajó a Panamá a una reunión del Parlamento Latinoamericano".

"Durante toda la jornada, el resto de la bancada del FA intentó que cambiará de posición y votara la ley, o al menos que se retirara de sala, como hizo el diputado Darío Pérez. Incluso trataron de que no pronunciara su discurso, que había traído al Parlamento escrito a máquina en tres hojas. Cuando se le dio la palabra, el silencio fue casi sepulcral. La diputada venía mandatada por la dirección del PCU de votar en contra, sin importar las consecuencias en el FA".

"‘Somos conscientes de nuestros actos, y estamos dispuestos, como Partido Comunista, a transitar todas las instancias orgánicas’, dijo Pintos".
"La legisladora hizo fuertes objeciones a la ley y dejó claro de qué lado estaba. Reconoció que intentó persuadir sin éxito a las autoridades frenteamplistas para que no la obligaran a votar y se preguntó: ‘¿cómo levantar la cabeza para mirar a los padres y maestros que nos acompañaron en las luchas pasadas, y a los trabajadores y estudiantes que rodean el Palacio, o al Congreso del Pit-Cnt, todos quienes refrendaron su rechazo a este proyecto de ley?’".

"La barra estalló en un solo grito. Sus integrantes, todos sindicalistas de la enseñanza, lanzaron volantes con consignas en contra de la ley, y cantaron: ‘¡Se escucha, se escucha, arriba los que luchan!’, ‘¡A la enseñanza la defiende el pueblo!’, y ‘¡El pueblo unido jamás será vencido!’. Mientras eran invitados a abandonar el recinto, algunos gritaron ‘¡Traidores!’ a los diputados frenteamplistas y hacían otro tipo de gestos".

"Tras los incidentes y el desalojo, el FA pidió interrumpir la sesión por una hora y media. Los integrantes de los sindicatos se agolparon en la puerta del Palacio Legislativo aguardando la salida de los legisladores. La policía forcejeó con algunos manifestantes que intentaron ingresar por la fuerza al Palacio y se cerró la puerta de acceso al edificio".

"Más tarde se reanudó la sesión. La diputada Pintos entró en sala y votó en contra de la posición de su bancada".



***


EC – Estamos justamente con la diputada Alicia Pintos, maestra jubilada, integrante del Comité Ejecutivo y el Comité Central del PCU, ex presidenta de la Asociación de Maestros del Uruguay (Ademu).

Cuéntenos en pocas palabras dónde están sus objeciones, o las del PCU, a este proyecto de ley. ¿Por qué se llega al extremo de desacatar una resolución tomada por la Mesa Política del Frente Amplio y también por la bancada del oficialismo?

ALICIA PINTOS:
Es una larga historia y no desconocida porque el Congreso del PCU realizado en octubre había definido el rechazo a esta ley. Y no somos los únicos. Ese "así no, así no", realmente lo tomo de unas largas hojas del maestro Miguel Soler de crítica para reformar la ley que en ese momento estábamos discutiendo.

El Congreso del mismo FA –el congreso "Líber Seregni"- que no llegó a acuerdo, no llegó a los dos tercios para definir sobre el tema educativo, eligió una comisión -en la que entre los integrantes estaba también yo- de sectores del FA presidida por el ingeniero Brovetto. Trabajamos muy bien, pero a pesar de que hicimos todo el esfuerzo para mejorar en lo posible y cambiar la ley, nosotros tenemos sobre todo - más allá de que es una larga historia de los docentes del Uruguay- la exigencia de autonomía y cogobierno. Si leemos los congresos de los sindicatos, por ejemplo, ese pedido de autonomía y cogobierno está aún antes de nuestra dictadura y después de la dictadura se retoma...

EC - ...¿qué implica, en este proyecto concreto, "autonomía y cogobierno"? ¿Qué es lo que le falta al proyecto según ustedes?

AP – Es un proyecto largo, complejo, porque para quién... Hacemos una ley para que realmente la educación, que tiene grandes dificultades, mejore. Entonces los primeros que tienen que estar de acuerdo en cualquier cambio educativo, para que realmente se refleje después en cambios en el hecho educativo, son los actores de la educación. Para nosotros era importantísimo lograr metodológicamente que no sólo sindicatos sino los gremios, tendría que haberse logrado... así como el gobierno -nuestro gobierno, porque eso es lo que más nos duele- abrió a la discusión de toda la sociedad en 2007 y se hizo el congreso "Maestro Julio Castro", donde ahí sí el gobierno convocó y pudieron participar todos los que quisieron. Yo personalmente preparé en mi zona –vivo en Pocitos- en las escuelas, logramos el local, abrimos, trabajamos para que la gente pudiera ir.

EC – Pero en el proyecto concretamente, ¿qué es lo que ustedes reclamaban? ¿Qué es lo que no está en el proyecto?

AP – Una de las cosas es la autonomía y el cogobierno. Hay determinados lineamientos que el congreso del FA "Líber Seregni" determina que deben salir de ese congreso...

EC - ...mi pregunta es, para que el oyente entienda, ¿el tema es para ustedes la integración de los consejos de la enseñanza? ¿Ustedes entienden que los consejos de la enseñanza deben estar integrados solamente  por representantes de los órdenes relativos a la educación? No debe haber representantes designados por el gobierno...

AP – ...eso es lo que siempre han pedido los gremios de la enseñanza, de educación. Pero no es eso lo único que tenemos en contra de la ley. La ley debe ser conocida y manejada por aquellos que la van a llevar adelante. Nosotros pedíamos un nuevo contacto, la participación real de los educadores, los funcionarios, aquellos que van a tener que hacer que esta ley se conozca y sea viva, ¿y qué sucedió? Que eso muy bueno que hicimos al principio como gobierno se cortó después, y si no no se hubieran dado los rechazos que se vienen dando en los sectores que tendrían que ser nuestro apoyo en estos momentos.

EC – Con su voto negativo ayer permaneciendo en sala y votando en contra, el PCU desafió de manera importante a la estructura del FA que había resuelto que había un mandato para votar esta ley. ¿Cómo evalúan esos riesgos de lo que viene ahora?

AP - Me gustaría que entendieran que no fue una actitud del momento. Nosotros -porque somos respetuosos del FA- hemos ido informando constantemente hasta con las resoluciones en el congreso del partido. Cuando se resolvió en los distintos comités centrales, -que desde octubre acá hubo por lo menos dos-, en los comités ejecutivos, donde yo llevaba la preocupación de revisar y de estudiar el tema educativo dentro de nuestro comité Ejecutivo Nacional, siempre el compañero ingeniero Brovetto estuvo informado de esos pasos, y no sólo él sino los compañeros que integrábamos la Comisión.

Y otra de nuestra preocupaciones es que el 50% del FA, lo que nosotros llamamos bases pero que integran la dirección del FA -los comités, las coordinadoras- no tenían un conocimiento de esa ley, y son ellos, por estatuto, el 50% de la dirección del FA.  Ahí en esos comités, en las coordinadoras, también hay miembros, hay maestros, hay profesores que si hubiéramos hecho un trabajo en profundidad de hacerlos participar, de hacerlos conocer –cuando digo nosotros digo el FA- no hubieran pasado las cosas que nos pasaron ayer... Lamentamos enormemente en tanto este es nuestro gobierno también, no es el gobierno de los otros. Nosotros queríamos prever reacciones de los sindicatos y pretendíamos más tiempo y lograr...

EC – ...pero usted sabe que ahora con el voto negativo el PCU corre el riesgo de ser pasado a Tribunal de Conducta Política.

AP – Nosotros somos fundadores del FA y fuimos parte de la resolución de nuestro estatuto frenteamplista, así que somos plenamente conscientes y lo fuimos cuando pedimos libertad de acción. Nosotros pedimos libertad de acción para poder fundamentar nuestro voto y bueno... no sé lo que hubiera pasado en las barras pero si hubiéramos tenido libertad de acción otras cosas se hubieran decidido y lamentablemente -lo digo sinceramente lamentablemente- esa libertad de acción que fue pedida en tiempo y forma, que fue pedida a la bancada frenteamplista no nos fue concedida.


***


EC – La forma como finalmente se votó el proyecto de ley de educación -este hecho de que finalmente tuviera sólo los votos del oficialismo con algunas ausencias incluso dentro del propio FA- implica algunos cambios en el texto del proyecto.

Los 50 votos a favor de la ley impidieron que se crearan como entes autónomos el Instituto Universitario de Educación y el Instituto Terciario Superior, que requerían dos tercios de los presentes. Por eso, y como ya se había anticipado, ante la negativa de la oposición a acompañar esos artículos, el FA promovió una modificación del texto creando esos nuevos organismos dentro del nuevo Sistema Nacional de Enseñanza Pública; así se llamará lo que hoy se conoce como ANEP (Administración Nacional de Educación Pública). O sea, no serán ya institutos autónomos, entes autónomos, como se buscaba en la iniciativa original.

Dicen las crónicas esta mañana que el FA aseguró que en estos dos años se consultó a las fuerzas políticas y a los actores sociales, mientras la oposición se quejó de que no se les dio participación en la elaboración de la iniciativa y planteó además, con disconformidad, que cuando se hizo público su contenido el paquete ya estaba cerrado.

¿Por qué la oposición termina en esta postura? ¿Por qué el senador Jorge Larrañaga anuncia –como dijo ayer- que a esta ley le quedan nada más que 15 meses de vida, y que será una de las que derogará el Partido Nacional si llega al Poder Ejecutivo luego de las próximas elecciones? Con esos otros puntos de vista volveremos un poco más tarde, hoy en Perspectiva.