Entrevistas

Astori se presenta como "continuidad" de Vázquez

Astori se presenta como "continuidad" de Vázquez

El ex ministro de Economía dice que seguirá la línea de "transformación" del gobierno actual. Aseguró que será una administración "de izquierda", pero consideró "peligroso" utilizar "etiquetas". El líder de Asamblea Uruguay prefiere no manejar nombres para posibles cargos hasta "ganar la interna". Consideró que la posición de Lacalle sobre el FMI es "contraria al interés nacional".

(Emitido a las 8.36 horas)


EMILIANO COTELO:
Haciendo una campaña "por la positiva" y con énfasis en los logros del gobierno del presidente Tabaré Vázquez.

De esa manera se presenta el senador Danilo Astori para las elecciones internas del 28 de junio, en las que por primera vez en su historia el Frente Amplio (FA) tiene tres precandidatos: el líder de Asamblea Uruguay (AU), el senador José Mujica y el intendente de Canelones, Marcos Carámbula.

Los primeros metros de la carrera no fueron del todo sencillos para el ex ministro de Economía. Primero sufrió un revés en el Congreso de diciembre del año pasado, cuando su candidatura quedó tercera y muy lejos de Mujica. Y ahora, desde la semana pasada, tiene que adaptarse a competir con un tercer postulante que cuenta con el apoyo de varios ministros del gobierno muy cercanos al presidente.

A propósito de este nuevo escenario vamos a conversar con el contador Danilo Astori.

***

EC - Noto que no quedó afónico después de los festejos de anoche.

DANILO ASTORI:
Me estoy acostumbrando de a poco a administrar la garganta.

EC - Ah, pensé que decía que se estaba acostumbrando a los triunfos.

DA - Eso también, pero dejémoslo así porque no conviene exhibir un partidarismo tan acentuado.

EC - No le conviene desde el punto de vista electoral; tiene que captar también votos de Peñarol y de otros equipos.

DA - Exactamente.

EC - ¿Fue al estadio?

DA - Sí, por supuesto; y también pude ir al otro día al partido por la Copa Libertadores. Tuve suerte, se dio la agenda de trabajo de tal manera que pude hacer mis espacios para una pasión tan importante como la del fútbol para mí.

EC - ¿Cómo le resulta esto de tener que competir por la candidatura presidencial del FA en un esquema triangular?

DA - Recién estamos comenzando en ese esquema, yo todavía no tengo demasiados elementos de juicio rigurosos como para opinar. No tengo pronóstico acerca del efecto que puede tener esta tercera precandidatura, por supuesto absolutamente legítima -quienes la están llevando adelante están en todo su derecho de hacerlo-, pero habría que ver qué pasa en las próximas semanas, en el próximo mes.

EC - El viernes pasado el politólogo Oscar Bottinelli dio a conocer aquí En Perspectiva sus datos más recientes a propósito de la intención de voto en la interna del FA. Fue una encuesta rápida, realizada entre el 29 y el 31 de enero en todo el país, cuando los candidatos confirmados eran solo dos, usted y Mujica, y había dos probables, Carámbula y Daniel Martínez. El resumen que hacía Oscar era este:

(Audio Oscar Bottinelli.)

"El resumen del FA es: hay un voto firme a Mujica del 34 y medio por ciento, un voto firme a Astori del 30% y hay un voto disputado –podría decirse también un voto potencial para el tercer espacio– del 35 y medio por ciento. Esa es el área de disputa del FA, un poco más de la tercera parte".

(Fin.)

EC - Esos son los números que surgen de la Encuesta Factum realizada a fines de enero. ¿Qué lectura hizo usted de esos números?

DA - Esta es una encuesta, un instrumento, una herramienta de análisis que hay que tener en cuenta como todas ellas. Hay que ver todo esto dinámicamente, las encuestas nos dan resultados estáticos en un momento dado, habrá que comparar esta misma encuesta, con esta metodología, a lo largo del tiempo, en las semanas que vendrán, habrá que comparar estos resultados con otras mediciones de opinión pública. No me atrevo a opinar específicamente sobre un sondeo que además está realizado en una época un tanto inédita para hacer estas mediciones de opinión - últimos días de enero-, momentos en que hay una gran incidencia de estacionalidad. Así que creo muy importante ver qué pasa a medida que se vayan realizando otros sondeos de opinión. Con estos datos no me animo a esbozar una opinión asentada sobre bases sólidas.

EC - Desde la audiencia, un oyente, Héctor, se toma el tema con humor y le pregunta si lo de Carámbula le cayó "como un balde de agua".

DA - Está muy bien. No, lo de Carámbula ya venía gestándose desde semanas antes, incluso en los últimos tramos del año pasado, los días del Congreso ya permitían avizorar que se estaba gestando una nueva propuesta electoral...

EC - ...Da la impresión de que el espacio que Carámbula sale a buscar tiene sus puntos de contacto con el suyo. Más allá de que señala que lo que busca es convocar a frenteamplistas que quizá no estaban motivados para ir a las internas porque no los convencen ni Mujica ni Astori, también es un hecho que con usted tiene una zona en común. Por ejemplo, usted desde que anunció que iba a ser candidato viene haciendo mucho énfasis en que es un frenteamplista de toda la vida, enfatiza la muy buena relación que tuvo con Seregni, etcétera. Esa era una forma de diferenciarse de Mujica, que llegó a la actividad política en el FA después de la dictadura y después de su etapa en la guerrilla del MLN. Pero ahora aparece Carámbula y también explota esa condición de frenteamplista desde el comienzo del FA. Ahí hay una porción del electorado en común.

DA - Puede ser. Creo que los antecedentes de cada precandidato –y no solo en nuestro caso, sino en todos los partidos– constituyen uno de los factores más importantes que el electorado va a tener en cuenta para establecer su preferencia; y yo creo que esto juega. Pero nuestra propuesta no se agota en los antecedentes del FA o la vinculación con Seregni; el énfasis fundamental, absolutamente decisivo, está en las propuestas que estamos haciendo. Y habrá de seguir siendo así. Esperemos que transcurra un tiempo para ver cuál es el espacio electoral que se disputa y a quién se disputa. Repito que en este momento no tengo mucha idea, no solo de cómo va a ser el planteo, sino de cuál va a ser el impacto en la competencia por votos dentro del FA.

EC - Volviendo sobre los elementos de confusión que puede generar la aparición de Marcos Carámbula como tercer candidato, el año pasado el presidente Vázquez jugó muy fuerte a favor de la fórmula Astori-Mujica, en ese orden. Después de la derrota que esa posición tuvo en el Congreso del FA ya no está muy claro cuál es el papel de Vázquez en la campaña, más bien ha dicho "me corro a un costado"; pero pocos días antes de que el intendente de Canelones anunciara su precandidatura tuvo una reunión con el presidente que, según trascendió, le dio el visto bueno para que se presentara.

Segundo elemento, en el acto de lanzamiento de la candidatura de Carámbula estuvieron presentes los amigos de Vázquez que han estado impulsando su reelección y varios de los ministros que habían respaldado la reelección y que son muy cercanos a Vázquez, por ejemplo Víctor Rossi y María Julia Muñoz, a quienes hasta hace un tiempo se los veía como respaldos suyos. Para muchos, Vázquez ahora está repartiendo sus fichas entre dos precandidatos. ¿Eso no le complica las cosas a usted?

DA - No, no lo creo. En cuanto a las posiciones del presidente Vázquez y algunos de sus ministros, no soy yo quien tiene que opinar; en todo caso son preguntas para el presidente y para esos ministros, pero yo no siento que esto haya, en absoluto, complicado nuestro trabajo, que seguiremos haciendo con mucha convicción...

EC - ...Pero usted eligió poner un foco muy nítido en su campaña en su proximidad, su afinidad y su sintonía con el presidente Vázquez. No en vano largó su campaña en La Teja.

DA - Es que no estoy poniendo ningún foco, tengo total sintonía con el presidente Vázquez, no necesito poner focos desde ese punto de vista, porque hemos trabajado muy bien con el presidente durante toda esta primera experiencia de gobierno que para mí ha sido formidable y me siento absolutamente identificado con el trabajo que ha hecho el gobierno. No estoy poniendo un foco especial, las cosas son así. Yo he tenido el enorme privilegio de formar parte de este gobierno y trabajar en un área que me exigía estar en sintonía total y fina con el presidente, y gracias a su apoyo y al de los demás ministros pudimos obtener resultados muy importantes en el área en que me tocó trabajar...

EC - ...Cómo cambiaron las cosas... Usted supo tener diferencias enormes con el doctor Tabaré Vázquez hace 10 años, por mencionar una fecha.

DA - Sí, pero las cosas evolucionan, evolucionamos todos, y por suerte evolucionamos en beneficio del país, del FA, y esa evolución nos permitió llegar hasta el gobierno y obtener los resultados que hemos obtenido.

EC - En definitiva, ¿qué representa su precandidatura en la interna del FA? ¿Cómo la define? ¿Qué es ese espacio?

DA - No entiendo bien la pregunta...

EC - ...Es una de las preguntas difíciles que se vuelven obligatorias cuando está en marcha una campaña por una elección interna. Hay tres precandidatos, y los tres se supone que comparten el programa común que aprobó el Congreso del Frente. Entonces, ¿qué es cada uno de ustedes?, ¿por qué hay tres opciones? ¿Qué es usted?

DA - Cuando señalaba recién que no entendía muy bien la pregunta estaba intentando expresar que yo no puedo ponerle un nombre, una etiqueta a esta precandidatura, sí puedo poner al servicio de ella una consigna, puedo poner un programa, y decir que esta precandidatura representa la intención de seguir el camino de la transformación del país en la orientación que demostró podemos poner en práctica la primera experiencia de gobierno del FA. No puedo ponerle una etiqueta, puedo identificar a esta precandidatura con la intención de seguir transformando a Uruguay en la dirección que el primer gobierno del FA exhibió y demostró poder transitar.

EC - Por trazar un corte grueso, ¿su propuesta es más continuista que la de Mujica?

DA - La palabra "continuista" es muy ambigua. Si por continuismo se entiende seguir el camino ya iniciado de transformación del país, sí. Si por continuismo se entiende dejar las cosas como están hoy y no hacer cosas nuevas, no. Es la continuidad del proceso de transformación, lo cual significará no solo consolidar lo ya hecho, no solo acelerar un proceso de reformas que ya se inició, sino también agregar aspectos nuevos desde el punto de vista programático que marcan tareas pendientes para el próximo gobierno.

EC - Si usted es presidente, ¿el gobierno será más de izquierda que el actual?

DA - Ahí entramos en el terreno de las etiquetas, que no comparto; no ilumina, no permite profundizar el análisis. Va a ser un gobierno de izquierda. Pero eso de decir más de izquierda o menos de izquierda nos lleva a entrar en un terreno muy peligroso desde el punto conceptual porque el acento –ahí sí el foco– se pone en la etiqueta, el nombre, y no en lo que uno proyecta hacer. Así que yo digo: el primer gobierno del Frente fue un gobierno de izquierda y el segundo gobierno del Frente va a ser un gobierno de izquierda.

***

EC - La semana pasada cuando Marcos Carámbula anunció que sería precandidato lo hizo acompañado de varias figuras del gobierno y fue haciendo referencia a ellas, con lo que pareció ir mostrando algo así como un "gabinete en las sombras". Por ejemplo, el ministro Rossi en temas de Transporte y Obras Públicas, la ministra Muñoz en Salud, el actual senador Arana, el ministro Colacce, el titular de la OPP, Rubio, Enrique Rubio, el ex subsecretario del Interior, Juan Faroppa, para temas de seguridad pública. Es un equipo con peso. ¿Usted también va a hacer jugar nombres?

DA - Antes que hacer jugar nombres hay que ganar la interna. Ahora hay que concentrarse en este trabajo con la tranquilidad de que los buenos equipos van a estar. No tengo la más mínima duda de que en nuestro caso vamos a disponer de un equipo de notable nivel en todos los aspectos fundamentales del gobierno. Pero no es el momento de anunciar posibles responsabilidades ni cargos que van a ocupar determinadas personas...

EC - ...De todos modos usted puede anunciar quiénes son sus referentes en algunas áreas críticas.

DA - Si me permite, no voy a hacer nombres, por la razón que acabo de explicar. Cuando llegue el momento, después de dilucidarse esta definición en la que estamos trabajando, podremos aludir a nombres concretos y responsabilidades concretas. Todo tiene que ser en su momento, hecho en su momento. Y así nos vamos a comportar, pero con la seguridad, con la certeza de que en todas las áreas fundamentales de gobierno vamos a disponer de nombres del mejor nivel, que además han hecho experiencia en su mayoría en el primer gobierno del FA.

EC - Pero por ejemplo, en temas económicos, según circuló la semana pasada, el economista Fernando Lorenzo, un hombre que viene del Nuevo Espacio (NE) y que fue director de la Asesoría Macroeconómica con usted cuando usted fue ministro, sería su principal referente en temas económicos, podría incluso ser su ministro de Economía. ¿Qué dice al respecto?

DA - Que desconozco totalmente el origen de esa versión periodística. No salió de mí, yo no he hecho comentarios al respecto y no los voy a hacer por las razones que acabo de explicar.

EC - ¿Cómo recibió la noticia de que el Comité Central del Partido Socialista (PS) se pronunció por su precandidatura? Fue la noticia con la que se abrió la semana pasada, una semana que tuvo de todo para usted, porque tuvo los baldazos de agua en el acto en el Centro, un momento incómodo, tuvo la noticia del surgimiento de la candidatura de Carámbula, y tuvo también este dato de que el PS lo apoya. ¿Usted esperaba ese resultado, teniendo en cuenta las diferencias que usted tuvo con algunos referentes importante del PS, como el senador Gargano cuando fueron los dos ministros?

DA - Ante todo debo decir que la resolución me llenó de alegría y de agradecimiento al mismo tiempo, por la confianza que depositó en mí nada más ni nada menos que el Partido fundacional de la izquierda, el PS, el primer partido de la izquierda uruguaya en la historia de la izquierda uruguaya. Partido con el cual hemos compartido etapas absolutamente fundamentales de la historia nacional, particularmente desde la fundación del FA, Partido que ha aportado al trabajo de la izquierda antes de llegar al gobierno y luego de llegar al gobierno contribuciones fundamentales, hoy mismo ministros socialistas, dirigentes socialistas. En una palabra, cuadros importantes de ese Partido han sido absolutamente esenciales para explicar la experiencia del primer gobierno frenteamplista, y dejo para el final para destacarlo aún más, una estructura militante como muy pocos sectores tienen en la izquierda uruguaya...

EC - ...Ese es un dato no menor, su campaña electoral ahora cuenta con el PS, con un aparato partidario fuerte, que tal vez le estaba faltando, y que se suma a los de AU, la Alianza Progresista (AP) y el NE. Da la impresión de que eso para sus posibilidades es un recurso muy interesante. Pero ¿tiene la impresión de que va a poder contar con todos los militantes socialistas? Por ejemplo, y por tomar nada más que una figura, ¿se imagina al senador Gargano haciendo campaña por usted?

DA - No me corresponde hacer este tipo de comentarios. Yo siento que el PS está apoyando nuestro proyecto político y eso me llena de satisfacción. Hoy mismo voy a compartir con los compañeros socialistas, en una visita que haré a su Comité Ejecutivo, este agradecimiento por la confianza que han depositado en mí, pero no me corresponde hacer análisis del tipo de cómo van a actuar los compañeros socialistas en el futuro. Yo cuento con el apoyo del Partido.

EC - Teniendo en cuenta diferencias como las que usted tuvo con el PS, no solo con Gargano, en un tema de cómo el TLC con Estados Unidos, ¿qué compromisos asume ante el PS ahora que el PS lo apoya?

DA - Yo con el PS he tenido muchas más coincidencias que diferencias, muchísimas más, y siento que esas coincidencias tienen un peso muy grande. No ponemos el acento en algunas discusiones que ya están laudadas, como la que se mencionó en la pregunta, y que no presentan absolutamente ninguna dificultad de trabajo hacia el futuro, más bien ponemos el acento en el programa único que compartimos en el FA y en aspectos fundamentales de la gestión de un segundo gobierno del FA que también compartimos.

Lo que exhibe el PS entre sus principales características a lo largo de su historia es una importante unidad de acción y una disciplina partidaria absolutamente destacable. Yo cuento con eso, con ese PS de toda la vida, con el que he trabajado toda la vida y con el que he tenido muchos más acuerdos que discrepancias.

***

EC - Las consultas que llegan de la audiencia van por este lado:

Gabriel (de Pando): "¿El que gana, gana o define la convención que se elija el 28 de junio?".

DA - Las dos cosas, porque formalmente, de acuerdo con la Constitución, en determinadas circunstancias es la Convención la que define quién es el candidato presidencial. Esas circunstancias son que los candidatos no reúnan la mayoría absoluta de los votantes, en ese caso formalmente tiene que expresarse la Convención. Pero en el FA se ha acordado que el que gana, gana...

EC - ...Aunque sea por un voto.

DA - Aunque sea por un voto, el que gana por un voto gana, y la convención habrá de recoger este acuerdo, que no tiene ninguna voz discrepante en el FA, al menos que yo conozca.

EC - ¿Y el que pierde acepta ser candidato a vice? Concretamente usted, si pierde, ¿acepta ser candidato a vice?

DA - Dos comentarios: la candidatura a la Vicepresidencia –esto también es un acuerdo– la habrá de definir el Plenario Nacional del FA–; en segundo lugar, ni me planteo esa situación, yo estoy trabajando para ganar la interna y estoy absolutamente concentrado en ese objetivo.

EC - ¿Pero si el Plenario Nacional del FA resuelve que usted debe ser el candidato a vice va a acatar lo que resuelva el Plenario?

DA - Voy a reiterar la respuesta que acabo de dar: ni me planteo esa situación porque estoy trabajando para ganar la interna.

EC - Pero es bueno saber si usted aceptaría una resolución como esa.

DA - Yo en este programa me he acostumbrado a reiterar las cosas hasta tres veces, esta es la tercera.

EC - Es una pregunta que está circulando con insistencia dentro del FA a propósito de cómo se define la fórmula.

DA - Y ahora viene la cuarta, esta es la cuarta vez que voy a decir lo mismo.

EC - No va a contestar.

DA - Voy a contestarlo, por supuesto, mi respuesta es esa: estoy trabajando para ganar. Repito por quinta vez: no voy a aceptar opinar sobre el tema que se ha planteado, porque estoy muy concentrado en lo otro.

EC - Yendo a los temas programáticos, mire esta pregunta que llega desde la audiencia.

Nelson: "Si usted es presidente, ¿va a vetar, como Tabaré Vázquez, una ley que incluya la despenalización del aborto?".

DA - Esto es adelantarnos mucho a los acontecimientos. Mi posición sobre el tema es absolutamente clara, yo ya la he compartido públicamente: estoy a favor de la Ley de Salud Reproductiva, he votado a favor de ella, he votado para levantar el veto y tengo esa posición que mantendré en el futuro.

EC - Usted no vetaría una ley que incluyera este tipo de disposiciones.

DA - No sé si se planteará una situación de ese tipo, lo que hay que destacar es mi posición sobre el tema, que es clara y seguirá siendo clara en el futuro.

EC - ¿Cómo es la cuestión del programa en este debate de la campaña interna del FA? El FA tiene un programa común aprobado por el Congreso. Entonces, los tres precandidatos, y en particular usted, cuando hace propuestas, ¿qué tipo de propuestas son?

DA - En primer lugar, son propuestas que se asientan en el programa común, tratando no solo de evitar contradicciones, sino por la positiva llevar las propuestas que en todo programa son de determinado nivel de generalización a una práctica que las torna concretas, que las vincula, entre otras cosas, con la vida cotidiana de la gente –que en definitiva es el objetivo fundamental– y que además marcan énfasis, marcan determinadas áreas en las que se pondrá el acento. Por eso cuando ordeno las propuestas programáticas en la campaña me gusta señalar tres categorías.

Por un lado, la consolidación de lo que hemos hecho, que a mi juicio ha sido muy positivo en este primer período de gobierno, pero que, en términos de consolidación, requiere sostenibilidad. Me refiero al crecimiento de la economía, a los niveles de inversión a los que hemos llegado, que también tienen que profundizarse, a las políticas sociales que se han comenzado a poner en práctica asentadas sobre la base de una economía sana -me refiero a la salud, la educación-. Esta es una primera categoría absolutamente importante.

Una segunda categoría es acelerar algunas reformas relevantes que se iniciaron durante este primer gobierno. El ejemplo típico al respecto es la reforma del Estado, una reforma estructural absolutamente esencial que abarca aspectos muy extendidos, muy amplios de la realidad nacional.

Y finalmente encarar nuevos desafíos. Por eso hoy decía que si continuismo significa no hacer nada nuevo, no es nuestra propuesta, nuestra propuesta es hacer cosas nuevas en el marco del programa del FA.

EC - ¿Por ejemplo cuáles?

DA - Aquí puedo mencionar como ejemplos fundamentales, en primer lugar la mejora en la calidad del gasto público, un tema que está muy pendiente y que está muy asociado a eso que llamamos recién la aceleración de la reforma del Estado.

En segundo lugar, avances en el terreno infraestructural, que es decisivo para el país, Uruguay muestra todavía deficiencias importantes en materia de base infraestructural. Las fuentes de energía son un ejemplo típico, la disponibilidad en materia de transportes es otro ejemplo típico.

Y finalmente la distribución del ingreso, una gran tarea pendiente sobre todo con un gobierno de izquierda. Hemos reducido mucho la pobreza, ha caído la indigencia, pero la distribución del ingreso todavía no ha mejorado a los niveles que entendemos que debe mejorar...

EC - ...Usted ha hecho promesas concretas, ha manejado números concretos con respecto a la pobreza, por ejemplo.

DA - Exactamente.

EC - ¿Cómo puede estar tan seguro, tan convencido hoy de que puede prometer una caída de la pobreza a la mitad?

DA - Es que no son promesas, son compromisos programáticos. No es lo mismo una promesa, en el sentido estricto de la palabra, que un compromiso programático. Un compromiso programático, que es lo que yo estoy planteando, es la meta que uno se propone alcanzar y que ha definido sobre la base de un análisis previo de las posibilidades del país. En este primer período de gobierno el país va a haber crecido 40% en términos reales, su producción va a haber crecido 40% en términos reales. Se ha conocido ya el registro de 2008, que ha sido altísimo. Aun habida cuenta de la incertidumbre que hoy tenemos como consecuencia de la crisis internacional, Uruguay se puede proponer perfectamente bien al menos un 30% adicional, quizá más, pero al menos –esta es una meta responsable– un crecimiento de 30% adicional. Y por favor, sin recurrir nuevamente al Fondo Monetario Internacional (FMI), como propone el doctor Luis Alberto Lacalle en lo que considero una propuesta absolutamente contraria al interés nacional.

EC - Ya que usted lo menciona, el viernes pasado entrevistamos al doctor Lacalle aquí En Perspectiva, y uno de los temas que tratamos fue esa polémica a distancia que vienen manteniendo ustedes dos, que lleva meses, pero que en estos días tuvo este capítulo: FMI sí, FMI no. Usted había calificado como un horror y un error el comentario de Lacalle de que volvería a recurrir al Fondo si era necesario contraer nueva deuda, y Lacalle respondió el viernes que el endeudamiento es un instrumento de política al que no se debe renunciar si se trata de endeudarse para invertir.

(Audio Luis Alberto Lacalle.)

"Tenemos dos puntos de vista distintos con el distinguido compatriota Astori: él dice que es un horror el FMI, yo digo que el BID, el FMI, el BM, la Corporación Andina de Fomento (CAF), el Fonplata son instituciones a las que uno si tiene que recurrir, recurrirá en las condiciones que digo: si es para el gasto corriente, me parece equivocado, si es para financiar una circunstancia difícil en los pagos del país, puede ser necesario, y si es para invertir, me parece que si la tasa y el plazo son convenientes, a veces es bueno, porque uno obtiene un dinero ahora para hacer una obra y lo paga en diferido."

(Fin.)

EC - ¿Qué dice usted?

DA - Que es un horror, después de todo el sacrificio que hizo el país para independizarse de las férreas condiciones que nos puso históricamente el FMI, volver a caer en esos condicionamientos me parece una regresión al pasado que Uruguay no se merece.

Además, el doctor Lacalle incurre en errores muy importantes al analizar la administración de la deuda que hicimos nosotros. Porque yo escuché que el doctor Lacalle señaló que nosotros canjeamos deuda barata por deuda cara. Quiero aprovechar esta ocasión para aclarar que fue exactamente al revés lo que hicimos: la deuda más cara que teníamos era la del FMI, por la sencilla razón de que Uruguay recurrió al Fondo para obtener préstamos de emergencia cuando la crisis de 2002, que son los más caros cuando se obtienen en las condiciones en que los pidió Uruguay. Uruguay estaba pagando entre 7 y 9% por esa deuda, y todas las emisiones de deuda soberana que hizo Uruguay posteriormente para administrar su deuda de otra manera, soberanamente, como lo estamos haciendo ahora, pagaron tasas de interés de entre 5 y 7%. El análisis del doctor Lacalle, desde este punto de vista, es equivocado, que parte de una percepción errónea de la realidad.

Uruguay puede plantearse con relación al futuro consolidar el crecimiento de la manera en que lo hizo durante el primer gobierno del FA, llegar a niveles de inversión de por lo menos 20% sobre la producción, hoy estamos entre 16 y 17%; puede seguir reduciendo la pobreza, hoy tenemos 350.000 pobres menos que en marzo de 2005, se puede proponer tener otros 350.000 pobres menos en el próximo período, y se puede proponer reducir la indigencia al punto tal de eliminarla. Hoy tenemos 80.000 indigentes menos que en marzo de 2005. Uruguay es un país muy rico en producción de alimentos, no pueden quedar uruguayos con hambre en el próximo período, es posible eliminar la indigencia perfectamente bien, son 80.000 personas. Estas son las metas concretas que estamos presentando en el marco del programa del FA en ese primer capítulo de consolidación de lo realizado hasta ahora.

***

EC - Usted decía que en materia programática, además de la consolidación de lo hecho hasta ahora, se propone una serie de avances. ¿Cuáles, por ejemplo?

DA - Los mencionábamos recién. Que conste que estoy poniendo algunos ejemplos, porque sé que disponemos de un tiempo limitado y quiero sintetizar esos ejemplos. Hay otros, pero elijo los principales: mejorar la calidad del gasto público es absolutamente fundamental. Necesitamos mecanismos de calificación y de evaluación que hoy no tenemos, y que tienen que apuntar a obtener mejores resultados de los esfuerzos fiscales que está haciendo la población en aras de procurar mejores condiciones de vida para todos.

El caso de la educación es un caso que he puesto reiteradamente como ejemplo. Uruguay está haciendo un gigantesco esfuerzo fiscal por su educación pública, y obviamente la población espera tener mejores resultados en términos de escolaridad, de presencia docente, de contenidos de la enseñanza; en cada una de las ramas pueden ponerse ilustraciones al respecto.

El tema de la infraestructura es otro tema fundamental. Yo ponía los ejemplos de la fuente de energía, donde tenemos que avanzar notoriamente, el país se ha quedado mucho en esta materia. El tema de los transportes, que hoy le exigen al país un esfuerzo de inversión en apoyo al sector más dinámico de la economía uruguaya, que es el sector de la industria logística. La industria logística está creciendo el triple que la economía en su conjunto, está volando literalmente hablando; el año pasado el Producto Bruto Interno generado por la industria logística creció cerca de 30%. Hay que darle apoyo infraestructural, todo lo que está planificando la Administración Nacional de Puertos para ampliar la capacidad del puerto de Montevideo es un ejemplo típico de nuevas metas en materia infraestructural.

Y finalmente la distribución del ingreso, ahí tiene un papel especial el gasto público, razón de más para procurar aumentar su calidad. La política de ingresos es importante para mejorar la distribución del ingreso, pero el papel del gasto público es esencial. Que no se piense que estamos proponiendo gastar más para entregarle dinero a la gente y creer que eso es mejorar la distribución del ingreso. El papel del gasto público con relación a la distribución del ingreso es abrirle oportunidades a la gente para que pueda acceder con mayor equidad a las actividades que le pueden traer consigo una mejora en la distribución del ingreso...

EC - ...¿Usted está haciendo allí algo parecido a una autocrítica con respecto a una de las herramientas que se emplearon de manera insistente en estos años desde el Ministerio de Desarrollo Social (Mides)?

DA - No, absolutamente no, el Mides hizo, con un enorme nivel de eficiencia, lo que tenía que hacer. En primer lugar, socorrer a los indigentes con el Plan de Emergencia, y luego poner en práctica un Plan de Equidad con características más permanentes, que es lo que ahora nos permite llegar a niveles de combate a la pobreza y a la indigencia que el país no había conocido antes. Y la verdad es que se redujo en 10 puntos la pobreza y a menos de la mitad la indigencia. Lo que digo es otra cosa, ahora tenemos que orientar el gasto público progresivamente hacia la apertura de oportunidades para que el pueblo uruguayo, en su conjunto y con equidad, acceda a esas oportunidades de progreso humano...

EC - ...¿Por ejemplo, cómo? ¿Cómo se utilizaría el gasto público para generar oportunidades de empleo?

DA - Cuando formamos a nuestra fuerza de trabajo especializadamente y con programas especiales que ataquen los núcleos que todavía están mostrando severos problemas de empleo, estamos incrementando nuestro capital humano y haciendo posible que cada vez más jóvenes uruguayos y uruguayas accedan a empleos de calidad y a retribuciones superiores a las que hoy perciben. Eso es esencial para mejorar la distribución del ingreso. Cuando la reforma de la salud asegura cobertura muy superior a la del pasado a toda la población estamos asegurando condiciones de salud para toda la población que son fundamentales para acceder a mejores condiciones de ingreso en la vida. Esas son las herramientas fundamentales, los instrumentos fundamentales con los que tenemos que trabajar, ya no para reducir pobreza e indigencia, algo que es muy importante hacer y se empezó a hacer en el primer período de gobierno del Frente, sino dar un paso más y empezar a afectar positivamente la distribución del ingreso.

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Transcripción: María Lila Ltaif