(emitido a las 7.39 hs.)

JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
"Con los legisladores como espectadores de lujo, la fórmula blanca prometió un gobierno honesto y reclamó respeto al Frente Amplio (FA). Lacalle pidió a diputados y senadores que trasmitan que ya aprendió de los errores y de revolcones del pasado". Este es el inicio de la nota del diario El País que tiene como título: "Lacalle no mirará ni para atrás ni para el costado".

El Observador, en cambio, tiene otro título: "Preservan a Lacalle ante la andanada oficialista y sindical".


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JAE – Diputado herrerista Jaime Trobo, ¿qué saca en limpio después del encuentro de ayer?

JAIME TROBO:
La fortaleza de la fórmula presidencial del Partido Nacional, (PN) que se siente -como bien dijo el doctor Lacalle ayer- representativa no sólo de blancos y de nacionalistas sino de ciudadanos que son de otros partidos y ven la alternativa en nuestro partido, para encarar una campaña que seguramente tendrá de parte de la izquierda el propósito de descalificar. Pero por sobre todas las cosas es una campaña que se realiza en el marco de una legislatura que termina sin que la oposición haya podido ingresar al análisis de los temas legislativos con un sentido positivo, como nosotros hemos querido asumir en toda la legislatura.

De hecho, hoy día -como bien decía también el doctor Lacalle ayer- siguen existiendo cantidades de pedidos de informes sin respuesta, siguen existiendo miradas desinteresadas a los proyectos que el PN presentó en muchos temas de preocupación de la gente. Vamos a redoblar los esfuerzos a pesar de que quedan pocas horas o pocos días de la legislatura para señalar cuál es la actitud positiva del PN. E integra parte del discurso de la fórmula presidencial el hecho de que el país tiene que ingresar en una fase de diálogo y tolerancia cuyo principal exponente va a ser el Parlamento porque es allí donde deben articularse los acuerdos para que en los temas legislativos pueda haber mayorías operativas.

La mayoría que se expresó durante este período ha sido una mayoría avasallante, una mayoría que no tuvo en cuenta que el país no es solamente el 50% y precisamente el propósito del gobierno del PN es ser un gobierno de amplísimas mayorías en todo sentido y no solamente en el sentido electoral.

JAE – ¿Eso es generalizable? Porque hay algunos antecedentes donde el FA y sus legisladores han dicho que querían acuerdos y proyectos con aprobación y consenso de todos los partidos. Pienso por ejemplo en la terminal de contenedores o en el proyecto de negociación colectiva.

JT – Es generalizable porque usted me está señalando apenas dos casos y seguramente un caso fue para la tribuna, para la opinión pública. Se puso el tema supuestamente en discusión o en análisis, cosa que no ocurrió en la realidad, y el propio doctor Larrañaga ayer, en el inicio de este encuentro de la fórmula presidencial con la bancada de legisladores, señaló que aquellos documentos que habían sido firmados antes del inicio de la legislatura que está corriendo en ningún caso se habían cumplido en los términos en los que se había acordado. Y esos fueron documentos que el doctor Vázquez antes de ser presidente había pedido que se firmaran con el propósito de que fueran un compromiso de su gestión de gobierno, muy probablemente como reacción a que de hecho el gobierno se iniciaba sin una participación de la oposición ni en lo más mínimo, inclusive en aspectos vinculados con el mero control en el ámbito de los entes autónomos, de los servicios descentralizados o de las actividades públicas que merecen tener una representación de las minorías.

O sea que más allá del discurso de hecho la realidad ha dado una pauta. El gobierno del FA ha sido un gobierno exclusivista, un gobierno de partido, un gobierno que ha sacrificado los acuerdos políticos fuera de sus votos parlamentarios para acordarlos exclusivamente en su propia interna.

JAE – Y con respecto a la figura o al rol de Lacalle en esta campaña, esto que sintetiza El Observador de preservar la figura del candidato a presidente ante la andanada de críticas del oficialismo y del sindicalismo, ¿es una conclusión válida para usted?

JT – Creo que sí, que el candidato a la Presidencia de la República de la alternativa a la izquierda debe ser preservado como corresponde, en todas sus capacidades, en todas sus virtudes. Quienes estamos participando en forma comprometida de esta empresa, los legisladores, los dirigentes, las personalidades que forman parte de los equipos de gobierno tenemos que hacer el máximo de los esfuerzos para que en el debate el Frente no encuentre exclusivamente la personalidad o la figura de Lacalle para controvertir con él. El partido tiene un gran equipo, el partido tiene un gran candidato a la vicepresidencia, el partido tiene equipos en todas las materias de gobierno que deben –y debemos– estar en toda la línea del debate político no solamente para preservar sino para exponer claramente cuáles son los alcances de la propuesta que hace el PN.

JAE – Claro, porque el sentido de preservar no es defender de los ataques sino más bien hacer actuar a otros dirigentes políticos para defender al PN de cara a la elección de octubre, ese es el sentido.

JT – Ese es el sentido que tiene que tener. Es evidente que la izquierda quiere encontrar algunos espacios para atacar y es mucho más fácil atacar a una persona que a un equipo o a un programa. El Frente precisamente no puede atacar desde un programa porque no tiene. [Tenemos] un programa que en general expresa cosas muy variadas sobre un mismo tema, inclusive sobre temas muy concretos. Entonces vamos a trabajar precisamente en esa línea; preservar al candidato quiere decir exponerlo en sus virtudes y por sobre todas las cosas darle el respaldo que necesita, dar el punto de vista programático y político para que la gente vea lo que está viendo y lo que ha hecho crecer al doctor Lacalle y al PN, que es un hombre en condiciones de dictar líneas de política de importancia desde el gobierno, sobre todo a partir de esa concepción que tenemos de lo que tiene que ser el próximo gobierno, un gobierno de diálogo, abierto y sinceramente patriótico.

JAE – ¿Cuánto inciden las últimas encuestas donde se afirma que efectivamente los simpatizantes, o los que están dispuestos a apoyar al PN han bajado en porcentaje, dos, tres puntos, dependiendo de la encuesta, por lo menos tras los primeros datos después de las internas de junio?

JT – En realidad ese análisis de encuestas no lo hemos realizado en esa visión que usted tiene, en esa sensación de que se ha bajado en uno o en dos o en tres puntos, no me refiero a cifras exactas sino simplemente a comentarios. Lo que estoy diciendo es que obviamente hoy hay otra elección, que supone que hay ciudadanos que definitivamente hoy sí tienen que decidir sobre el futuro del país. Seguramente de acá a principios de octubre va a haber un campo de acción política sobre el ciudadano independiente, y sobre el ciudadano que de repente hoy tiene la opción de votar algún otro partido, que realmente va a tener que concentrarse en la alternativa binaria: es Mujica o es el PN y toda su corriente de opinión y su programa de gobierno. Por supuesto que las encuestas son un dato de la realidad, son un dato cuando se va bien, son un dato cuando no se va tan bien, pero básicamente [sirven] para corregir cuando hay algún error y para afirmar los conceptos cuando las cosas vienen bien.

JAE - ¿Hubo errores en estos últimos días? Por ejemplo el tema de la imagen de la motosierra, el consejo a los empresarios extranjeros que esperen hasta diciembre para invertir en Uruguay, la sindicalización policial y las críticas, la comparación de la tarjeta joven con el Plan Ceibal o la idea de instalar duchas y peluquerías en los alrededores de los cantegriles.

JT – Pueden ser errores de síntesis de conceptos que se manejan, pero creo que detrás de ellos hay una visión profunda y seria sobre lo que tiene que ser la gestión pública y los grandes temas que el país tiene que encarar. Ahí está detrás el tema de la sensibilidad social para hacer que el país crezca en su totalidad, y puedan crecer todos los ciudadanos y todas las familias, ahí hay una visión clara de que el país no puede generar incertidumbre sobre su futuro sino que tiene que afirmar los conceptos de seriedad jurídica, de respeto a la ley, de Estado de derecho, ahí hay conceptos que tienen que ver con que el ejercicio de la autoridad y el mando son una definición que necesariamente está de la mano de la necesidad de la gente de tener más seguridad y un Estado de Derecho vigente. Hay muchas definiciones que están detrás de esas frases que quizás puedan haber sido frases erróneas, pero allí están, están en la campaña y obviamente nosotros vamos a trabajar para que se trabaje sobre conceptos y no solamente sobre palabras.

JAE – ¿Pero eso fue considerado en la reunión de ayer, por ejemplo?

JT – No, la reunión de ayer tuvo el propósito de parte de Luis Alberto Lacalle y de Jorge Larrañaga de dar una pauta clara de cuál es la visión que la fórmula tiene sobre el rol de los parlamentarios y de la estructura partidaria en la campaña que comienza el próximo sábado, en un congreso de juventud ya democráticamente electo por la soberanía joven del PN y que será la instancia en la cual se pondrá el punto de empuje de la campaña electoral.