Vázquez en Bella Unión
Informe de Elena Risso y Juan Andrés Elhordoy
(emitido a las 7.42 hs.)
Tabaré Vázquez defendió en Bella Unión la gestión de gobierno, y aseguró que "seguirá haciendo cambios hasta el último día".
Durante un discurso de alrededor de 90 minutos, el presidente defendió la gestión de su gobierno e hizo foco en la aplicación de las políticas sociales.
En algunos pasajes de su discurso, aludió a las críticas de la oposición y justificó su presencia en un acto público.
(Audio Tabaré Vázquez)
"No somos dioses ni héroes, porque no somos soberbios ni sordos, porque tenemos voz, porque tenemos razones y objetivos, argumentos y resultados. Porque hemos recibido críticas a nuestra gestión. Algunas justificadas, por qué no reconocerlo. Otras no. Porque se ha tratado de descalificar o ignorar lo que hicimos, o se han hecho comparaciones que intentan minimizar al extremo algunos logros bien importantes, reitero, realizando a veces, comparaciones hasta ridículas. Un elefante con una hormiga, o hablar de corteza de pan, corteza de árbol o corteza terrestre como si fuera la misma cosa. Y no lo son, son cortezas. Lo único que tienen en común es que están del lado de afuera, pero no se pueden comparar cosas que no son comparables. Por eso es que estamos aquí. Y seguiremos estando en otros lugares del país y no estamos innovando con estas actividades. Las hemos hecho desde el principio de nuestro gobierno y a los pocos días de ganar las elecciones de 2004".
(Fin del audio)
Vázquez aseguró que seguirá recorriendo el país "defendiendo las acciones del gobierno".
(Audio Tabaré Vázquez)
"Aquí estamos, sí, y seguimos. Analizando, presentando y defendiendo nuestras acciones de gobierno. Parafraseando a Benedetti, defendiendo la alegría. Al pasado, uruguayas y uruguayos, no le pasamos cuentas, pero tampoco lo olvidamos. Nosotros no queremos ser ni vamos a ser repartidores de culpas, pero tampoco somos perchero para que otros nos cuelguen sus culpas, sus miedos, sus frustraciones o sus deudas. Por las competencias que no usaron, las oportunidades que desperdiciaron, o las responsabilidades que no asumieron".
(Fin del audio)
El combate a la pobreza, los avances en salud ocular y bucal, los planes para los sin techo, el Plan Ceibal, las mejoras laborales y salariales para las empleadas domésticas, los trabajadores rurales y los policías, el combate al tabaquismo y al narcotráfico fueron algunos de los temas que Vázquez destacó como relevantes de la obra de gobierno.
(Audio Tabaré Vázquez)
"La mejor medida del progreso de un país no la dan los sectores socio-económicos más altos, sino los más vulnerables y desposeídos. El progreso en Uruguay no se mide en BMW ni en paquetes turísticos al extranjero, ni en trajes Armani o cartera Vuitton".
(Fin del audio)
En otro pasaje de su discurso, el presidente Tabaré Vázquez destacó el valor de la democracia y los avances en el combate a la pobreza y la indigencia que el país viene logrando desde la restauración democrática en 1985.
(Audio Tabaré Vázquez)
"Claro que en estos veinte y pico de años hubo altas y bajas que a veces subió más la pobreza y a veces bajó más. Pero, ¿por qué competir como si fuéramos niños de escuela jugando un partido de fútbol, que si yo hice más y tú hiciste menos, que yo haré más y tú harás menos? Lo que importa es que cuando volvió la democracia en el Uruguay, una pobreza de un 46% a lo largo de veinticinco años, con distintos gobiernos, de distinto signo político, bajó a un 20%. Eso es lo que importa. Alargar, profundizar, ensanchar, andar el sistema democrático, el mejor sistema político que podemos tener las sociedades y los países para vivir".
(Fin del audio)
De todas formas, el mandatario dijo que, al asumir la presidencia, basó su gestión en tres pilares: la atención prioritaria a los uruguayos más necesitados, el Plan de Emergencia y el programa y el plan de gobierno.
En ese sentido, explicó que el Plan de Emergencia "no fue para atacar a la pobreza, sino para atender a la indigencia", y que el Panes ejecutó 6 mil millones de pesos (unos 240 millones de dólares).
(Audio Tabaré Vázquez)
"Se dice por ahí que la plata que se dio en este ingreso ciudadano, se dilapidó, se tiró. Se dice que lo usaron para tomar vino o para comprar celulares. Pero nosotros llevamos el control de la forma, de la manera que se gastaba el dinero de ese ingreso ciudadano. ¿Cómo compró la gente con el ingreso ciudadano? Con el primer cobro del ingreso ciudadano, algunos ciudadanos cobraron con retroactividad al momento de la inscripción, la gente lo destinó en un 61,8% a alimentación. En segundo lugar, utilizaron ese ingreso para el pago de deudas o cuotas atrasadas, un 11%. Y un tercer lugar, un 9,2%, se gastó en ropa".
(Fin del audio)
Por otra parte, Vázquez destacó que la desocupación se ubique en un dígito, "como nos habíamos prometido", y dijo que el 8,2% que hay, según las últimas mediciones del INE, "nos duele en el alma", pero agregó que "los uruguayos pudimos enfrentar una fenomenal crisis internacional con nuestras fuerzas, nuestro trabajo, nuestra inteligencia y nuestra dedicación".
Al terminar, Vázquez reiteró que seguirá defendiendo la gestión de su gobierno. De todos modos, no fue el presidente quien tuvo la última palabra...
(Audio Tabaré Vázquez)
"Por ello, con moderación y el derecho que tenemos, seguiremos defendiendo nuestra gestión de gobierno, aún desde el mismo gobierno. La defenderemos aún desde el propio gobierno, trabajando con honestidad, con decencia, con seriedad, con responsabilidad. Tal como lo dice Mario Benedetti, en defender la alegría. Escuchen a Mario Benedetti y cambien el término alegría por el gobierno y saquen las conclusiones que ustedes quieran, escuchen:
"Defender la alegría como una trinchera, defenderla del escándalo y la rutina, de la miseria y los miserables, de las ausencias transitorias, y las definitivas. Defender la alegría como un principio, defenderla del pasmo y las pesadillas, de los neutrales y de los neutrones, de las dulces infamias, y los graves diagnósticos. Defender la alegría como una bandera, defenderla del rayo y la melancolía, de los ingenuos y de los canallas, de la retórica y los paros cardiacos, de las endemias y las academias. Defender la alegría como un destino, defenderla del fuego y de los bomberos, de los suicidas y los homicidas, de las vacaciones y del agobio, de la obligación de estar alegres. Defender la alegría como una certeza, defenderla del óxido y la roña, de la famosa pátina del tiempo, del relente y del oportunismo, de los proxenetas de la risa. Defender la alegría como un derecho, defenderla de dios y del invierno, de las mayúsculas y de la muerte de los apellidos y las lástimas del azar, y también de la alegría".
(Fin del audio)
Hasta aquí lo ocurrido en Bella Unión en el acto que terminó sobre las 9:30 hs.
Sus palabras ya generaron reacciones a nivel político.
El diario El País por ejemplo titula: "Discurso cayó mal en la oposición. Acto electoral y uso antojadizo en cifras de pobreza"
Tanto el candidato a vicepresidente del Partido Nacional, Jorge Larrañaga, como los presidenciables del Partido Independiente, Pablo Mieres, y del Colorado, Pedro Bordaberry, manifestaron sorpresa y preocupación por el hecho de que el presidente Tabaré Vázquez haya salido decididamente a apoyar al candidato oficialista José Mujica.
Larrañaga sostuvo que la fórmula "debe andar mal" para que Vázquez salga en defensa de la gestión del Frente Amplio. Mieres, a su vez, dijo que Vázquez es "el segundo tutor" de Mujica. "No alcanza con que Astori maneje al candidato: ahora tenemos a Vázquez, que explica lo que se hizo para conseguir los votos que faltan", comentó a El País.
El nacionalista apuntó que, a la misma vez, este discurso presidencial denota "una diferencia con la campaña que hace Mujica, porque (Vázquez) se coloca por encima del candidato de su fuerza política". En cuanto al contenido del discurso, no gustó a Larrañaga. "Fue un acto político preparado desde el poder", dijo, y recordó que el mandatario ordenó a los ministros que dejaran sus cargos para hacer campaña y que, ahora, "él hace lo mismo". Según Larrañaga, fue "un discurso muy extenso" en el cual "defiende su gestión para socorrer a la fórmula oficial".
En tanto, el candidato colorado Pedro Bordaberry sostuvo a El País que en su discurso Vázquez hizo un uso "antojadizo" y "poco serio" de las cifras sobre la pobreza. Subrayó que el gobierno de Sanguinetti (1985-1990) tomó la pobreza en 48% y cuando entregó el mando era de un 18%. "El gobierno colorado bajó un 30% de la pobreza en cinco años. Después de la crisis tremenda del 2002, Vázquez recibió el país con un nivel de pobreza del 33% y lo va a entregar en un 23%, apenas bajó un 10%", dijo.
Este comportamiento de Vázquez "revela que el Frente Amplio está viendo que sus candidatos no dan la talla y empiezan a apuntalarlos por todos lados", aseguró el líder colorado. En ese sentido, agregó que por esa razón la campaña frentista "requiere que el presidente haga actos políticos, que se haga una inversión en publicidad de los organismos del estado nunca vista, y hasta meten al PIT-CNT a ver si pueden torcer el resultado", aseveró el presidenciable.
Por su parte, el candidato del Partido Independiente Pablo Mieres sostuvo que Vázquez hizo "un manejo engañoso" de las cifras sobre pobreza. "Usó los datos de forma arbitraria porque puso cifras a la salida de la dictadura, en el pico de la crisis y las actuales. Entre 1994 y 1998 la pobreza estuvo entre el 14% y 16%, es decir un 25% por debajo de lo que este gobierno logró a pesar de que hubo un mayor crecimiento económico", apuntó. "A pesar del enorme crecimiento, el gobierno no logró llevar la pobreza a los niveles de 10 años atrás", subrayó. Además, dijo que con respecto a los niños en situación de pobreza, la comparación que hizo Vázquez fue con cifras de la crisis de 2002 y no respecto a otros momentos. "No hay que manipular los datos para buscar el éxito", indicó. No obstante, reconoció que este gobierno "hizo cosas buenas en el campo social".