Entrevistas

Larrañaga: "La participación de la oposición no es una regalía del gobierno"

Larrañaga: "La participación de la oposición no es una regalía del gobierno"

El senador nacionalista Jorge Larrañaga manifestó a En Perspectiva que la reunión mantenida con el presidente electo José Mujica tuvo como objetivos "facilitar el relacionamiento" y "aportar equilibrio", pero no se fue "a pedir nada". El ex candidato a vicepresidente sostuvo que Mujica compartió la idea de que la participación de la oposición en diversos organismos públicos "no es una regalía del gobierno sino un derecho constitucional" y agregó que dicha participación no tendrá condicionamiento alguno. "Se trata del contralor que debe existir en un democracia para destruir la propensión a la acumulación de poder", enfatizó. Por otra parte, consideró que para el siguiente periodo pueden darse las condiciones necesarias como para establecer un relacionamiento que genere una mejor calidad del producto legislativo y mayores acuerdos.


(emitido a las 9.00 hs.)


EMILIANO COTELO:
Jorge Larrañaga visitó ayer a José Mujica en su chacra de Rincón del Cerro, en un encuentro en el que se habló entre otras cosas de la posible integración de la oposición a varios cargos de gobierno.

La reunión tuvo características diferentes de las que tuvo la que Mujica mantuvo el viernes en la tarde con el presidente del directorio del Partido Nacional (PN), Luis Alberto Lacalle.

Para empezar, el lugar elegido: a Lacalle Mujica lo recibió en su despacho del Senado, mientras que el mano a mano con Larrañaga fue en su propia casa.

Además, de la reunión con Lacalle no hay registros gráficos, porque no se permitió tomar fotos ni hacer imágenes de televisión. Sin embargo, en todos los informativos de ayer y en los diarios de hoy se ve a Larrañaga y a Mujica sentados bajo los árboles, tomando mate, como dos viejos conocidos.

¿Cómo se entiende esta reunión de ayer cuando la negociación entre el PN y el gobierno electo se iba a canalizar a través de Lacalle? ¿De qué hablaron exactamente Larrañaga y Mujica? ¿De qué forma se concretará la participación de los blancos en el próximo gobierno?

Sobre estos y otros temas vamos a conversar con el doctor Jorge Larrañaga, senador de Alianza Nacional (AN) y ex candidato a vicepresidente de la República.

***

EC - ¿Dónde lo hemos ubicado?

JORGE LARRAÑAGA:
Estamos en Trinidad; hoy me levanté a las seis y pico de la mañana para salir hacia Paysandú. Tengo que llegar, pero ahora detuve el auto para llevar adelante esta entrevista donde creo que ustedes van a estar el próximo lunes.

EC - Sí, el fin de semana nos instalaremos en Trinidad. No sé si nos cruzaremos, vamos a ver.

JL - No, yo vengo antes a Montevideo.

EC - Vuelvo a la pregunta que quedó formulada: ¿cómo se entiende su reunión de ayer con Mujica, si ya había existido el viernes otra entre Mujica y Lacalle, presidente del Directorio?

JL - No son excluyentes ni deben hacerse comparaciones ni lecturas. En la pasada sesión del Directorio yo avisé que seguramente iba a tener una entrevista con el senador Mujica, y hubo aceptación del conjunto del Directorio y conocimiento de su presidente, el doctor Lacalle, de que yo me iba a reunir con el senador Mujica. Entonces debe interpretarse como algo convergente en el ánimo de facilitar el relacionamiento político, con una voluntad de construir, de aportar lo que reclamamos durante la campaña electoral, equilibrio, también ofrecer equilibrio.

EC - Hay quien interpreta que Mujica está dividiendo a los blancos.

JL - No, no es así, esa es una lectura equivocada porque inmediatamente ayer después de reunirme con el presidente electo de tarde me reuní con el doctor Lacalle y le trasladé los resultados de la reunión, como no puede ser de otra manera, y el próximo lunes voy a hacer lo propio con el Directorio del partido. No se pueden prejuzgar intenciones, pero estoy convencido de que no es voluntad del presidente electo –permítame quebrar una lanza por él– dividir a los blancos, porque no lo va a conseguir. Simplemente estamos por distintas vías en función de nuestras representaciones; yo tengo la condición de ser integrante del Directorio, senador de la República, responsable de un sector político que representa a más del 40% del PN, y por lo tanto tengo derecho a reunirme, como lo he expresado.

EC - También es un hecho que usted tiene una muy buena relación con Mujica, mucho mejor que la que tiene Lacalle. Al punto de que alguna gente dice: "Bueno, entonces las reuniones Mujica-Lacalle serán las reuniones oficiales, formales, y en las reuniones Mujica-Larrañaga se tratará la sustancia, se avanzará realmente".

JL - No creo que deban hacerse esas lecturas. Lo importante es el objetivo unánime que tiene el Directorio del partido, que es construir o intentar construir políticas de Estado, dar respuestas a los problemas de los uruguayos. Hemos pasado 90 años en el llano y hemos sabido de aportes enormes al país. Por supuesto que la representación del Directorio del partido está en su presidente, nadie lo puede negar ni yo pretendo hacerlo, pero si hay otros referentes, si puede haber otras instancias en las que colaborar...

Yo ayer llevé un resumen programático de lo que sostuvimos durante la campaña electoral; llevé una iniciativa sobre la pasta base en función de una reunión que había tenido la fórmula del partido en la campaña electoral con las madres de la plaza; llevé una pregunta que surgió de varios compañeros del Directorio del partido sobre cuál iba a ser el relacionamiento futuro del gobierno electo con la oposición. Llevé un criterio que fue aceptado por el senador Mujica de que la participación de la oposición en las empresas públicas, en los entes autónomos, no es una regalía del gobierno sino un derecho constitucional de la oposición, porque además el grito de la oposición alerta más al gobierno de turno que la lisonja del compañero. Por lo tanto esa es la mejor lectura que debe compadecerse con una respuesta. Estamos lejos de todo tiempo electoral, tenemos que ayudar, los políticos no podemos seguir hartando a la gente con peleas que a veces solamente nos importan a nosotros, tenemos que dedicarnos a corresponder con lo que prometimos en la campaña electoral, que son respuestas para los problemas de la gente, que no tienen color político. Ese es el objetivo.

EC - Vamos por partes; usted ya aludió a lo programático. Entonces, ¿cómo será el diálogo entre el gobierno electo y la oposición en torno a esos cuatro capítulos que el Frente Amplio (FA) ofreció, que son educación, seguridad pública, energía y medioambiente? Concretamente, ¿cuál es el objetivo? ¿Se busca llegar a políticas de Estado en esas áreas, o conseguir algunas coincidencias puntuales en esos temas?

JL - Creo que la base –se lo recordé al senador Mujica ayer– debe arrancar en los acuerdos programáticos de febrero de 2005 que se firmaron entre el doctor Vázquez y los representantes de todos los partidos. Estos objetivos programáticos pueden apuntar a la construcción de algunas políticas nacionales, de algunas políticas de Estado. Si se consigue menos, igualmente será importante si tenemos una buena relación en el Parlamento, si hay diálogo, más allá de que puede no haber acuerdos, si podemos construir algunos entendimientos sobre los temas que usted apuntaba. Yo le trasladé también la posibilidad de que la Ley de Educación, aprobada solamente por el FA el año pasado, tuviera algún tipo de aplazamiento como buena lectura de la oposición para ver si podemos profundizar en algunos entendimientos. No podemos cambiar cada cinco años de ley de educación.

EC - Ya que usted se detiene en el capítulo educación y en este planteo que hizo, una precisión: ¿por qué el PN pide que se aplace seis meses la entrada en vigencia de la ley de Educación?

JL - Porque yo creo y todo el partido entiende que no es una buena ley, que no arrancó bien porque tuvo cero respaldo de la oposición, porque es necesario evitar la brecha que se está profundizando entre la educación pública y la privada.

EC - ¿Qué disposiciones de la ley habría que postergar?

JL - Es lo que hay que analizar.

EC - ¿Por ejemplo la nueva integración de los órganos de la enseñanza?

JL - Puede ser alguno de esos puntos, habrá que ver, más allá de que hay algunas selecciones fijadas, más allá de que hay algunas definiciones de este gobierno, de la actual administración que ya están implementándose. Yo le trasladé el punto porque creo que puede ser una buena señal del gobierno electo para discutir. No se trata de no aplicar una ley que aprobó el Parlamento, sino de tener una prórroga en algunos aspectos.

EC - Ayer la ministra de Educación y Cultura, María Simón, fue consultada por esta sugerencia del PN, y dijo: "Me parece que no corresponde suspender nada; al contrario, hay que seguir avanzando. A medida que avanza, mucha gente se está dando cuenta de que había elementos que le parecía que no le gustaban y no la convencían lo suficiente, y ahora sí la convencen".

JL - Es la opinión de la ministra, no es la que nosotros sostenemos y por eso se la planteamos al presidente. El presidente electo podrá discutir, analizar este tema con sus asesores, con sus técnicos, con los futuros integrantes de la educación para emitir una respuesta. Hay que advertir que el gobierno tiene mayorías parlamentarias, pero el 52% de la población no lo votó el 25 de octubre. Entonces hay que buscar construir algunas soluciones que eviten esa suerte de fractura de país partido a la mitad que tenemos desde hace mucho tiempo. Es un papel que quizás impensadamente para muchos puede jugar el presidente electo de los uruguayos.

EC - Ya que estamos hablando de educación y por tomar el tema como ejemplo: en ese capítulo una posibilidad sería que se acordara una política educativa de Estado, pero usted dice que quizás no se pueda lograr eso y que no estaría mal que se lograran algunos entendimientos, por ejemplo por el lado de impulsar y consolidar las escuelas de tiempo completo, que fue un tema en el que hubo coincidencia entre los distintos partidos. ¿Esa sería una salida también?

JL - Le fijo algunos temas en los que podemos tener absoluta coincidencia. Nosotros hablábamos de 500 escuelas de tiempo completo, el senador Mujica también hablaba de escuelas de tiempo completo; ahí tenemos un punto de entendimiento. Ayer hablamos de la descentralización educativa en la cual él está "empecinado" –textuales palabras–; ahí estamos de acuerdo. Estamos de acuerdo en llevar adelante un proceso que conduzca a la creación de una nueva universidad pública en el interior; y también estamos de acuerdo en fortalecer a la UTU, por ejemplo. Estamos de acuerdo en que el producto educativo no es el mejor, más allá de la inversión y del incremento de la inversión educativa. Estamos de acuerdo en que hay una brecha entre la educación pública reservada para la gente de menos recursos y la educación privada para aquellos que tienen más recursos, y que eso no genera inclusión.

Entonces me parece que se puede avanzar más allá de las posiciones a priori. Es lo que se intenta. Y le trasladé, por ejemplo, un documento sobre la pasta base, un tema que impacta en 25.000 personas, en 3.000 jóvenes adictos cuyo daño cerebral y físico es irreversible y que tenemos que enfrentar porque hace a una cuestión humana, a una cuestión de sensibilidad social, a un deterioro del tejido social del país, a una hipoteca de nuestros jóvenes y a una incidencia muy fuerte en el tema de la seguridad ciudadana.

Por tanto creo y tengo la expectativa de que en este tipo de reuniones no digo que se puedan construir unanimidades ni quizás grandes políticas de Estado, pero sí avanzar, avanzar en conjunto, avanzar en acuerdos, avanzar en entendimiento.

EC - ¿Cómo son los plazos para estos trabajos? ¿Cuándo ocurrirán las primeras reuniones? Mujica ha comentado que todavía no tiene nombres proporcionados ni por el PN ni por el Partido Colorado (PC).

JL - Tenemos tiempo, él está abocado ahora a terminar de resolver la integración del gabinete. Lo mismo ocurre con la participación de la oposición en las empresas públicas, en los entes autónomos.

EC - Pero ¿se ha fijado una especie de cronograma? ¿Se va a comenzar a trabajar antes de fin de año, o se va a esperar que pase el período de las fiestas? ¿Cómo es esto?

JL - Arrancamos en un tiempo complejo, el país empieza a pararse. Pero veremos, esas son definiciones que le corresponden al gobierno electo. Hay disposición de los partidos para trabajar en estas áreas, y el trabajo no tiene por qué tener una enorme estridencia. Por eso le llevé  un resumen programático, para ver si podemos ir acercando posiciones. Y me parece que eso también puede ser un avance, no es una iniciativa de un senador, le trasladé un resumen programático de todo el partido de lo que sostuvimos en la campaña electoral.

EC - Todavía no hablaron de fechas, entonces.

JL - No, no hemos hablado de fechas en ese ni en ningún tema, pero sí hemos fijado criterios para ir avanzando.

***

EC - De la audiencia me corrigen, dicen que no subrayé un detalle de la reunión de ayer: que fue una reunión tripartita: Larrañaga, Mujica y Manuela, toda una protagonista la perra de Mujica. En alguna foto de hoy se la ve observándolo a usted muy atentamente, parece que estaba escuchando algunas de sus reflexiones.

JL - Sí, es una perra a la que le falta una manito porque fue agarrada por una disquera. Forma parte del entorno de un lugar muy apacible, muy tranquilo.

EC - Ella es la que sabe lo que hablaron ustedes.

JL - [Se ríe.]

EC - Pasemos a otro tema: la participación de la oposición en puestos de gobierno. ¿Está claro que en el gabinete no habrá representantes de la oposición?

JL - Está claro que nunca hubo un ofrecimiento, yo le dije a Pepe claramente que nunca hubo un ofrecimiento; fue lo que me expresó el doctor Lacalle, lo que me expresó el doctor Pablo Mieres y lo que me han dicho también senadores del PC. Entonces ese tema ni siquiera se trató.

EC - ¿Usted no pidió ninguna aclaración sobre eso?

JL - No, yo le dije simplemente "que quede claro que no ha habido ningún tipo de ofrecimiento del gobierno". A tal punto eso es así que ya está integrado todo el gabinete. Es un tema ya terminado.

EC - Entonces, ¿en qué organismos se dará la participación?

JL - En primer lugar me importó dejar en claro un concepto que me satisface reconocer que el presidente aceptó y va a reafirmar de manera pública: la participación de la oposición en los entes públicos, en empresas públicas y entes autónomos y servicios descentralizados no es una regalía del gobierno, es un derecho constitucional en funciones de contralor de la oposición.

Un segundo concepto importante es que la participación no va a tener condicionamiento alguno, que la renovación de los organismos de contralor se tratará y dilucidará en el Parlamento, porque necesita mayorías especiales de la Asamblea General, y la participación en los entes se trata con el Poder Ejecutivo.

EC - Concretamente, no hay un condicionamiento. Por ejemplo, la participación en los entes no está condicionada a que haya un acuerdo para renovar los organismos de contralor.

JL - No, ya lo había dicho el gobierno electo y ayer me lo reafirmó el presidente electo de manera contundente.

EC - Porque los organismos de contralor –Corte Electoral y Tribunal de Cuentas– vienen con la misma integración desde hace añares y siempre ha sido muy difícil encarar esa negociación.

JL - Tenemos la mayor voluntad de renovación. Quedamos en que la renovación de los organismos de contralor se aborda en el Parlamento y la participación en los entes autónomos se define con el Poder Ejecutivo.

EC - La participación en los entes autónomos tampoco depende de que haya o no acuerdos en esos grandes temas programáticos.

JL - Tampoco tiene esa condicionante, que además es una diferencia importante con la administración del doctor Vázquez. Recuérdese que los acuerdos programáticos de febrero de 2005 eran una suerte de condición para acceder a la integración de los entes autónomos, acceso que después lamentablemente se frustró por lo que hemos conversado con usted y la audiencia y hemos dicho en todo el país, en función del relacionamiento que existió con la actual administración.

Por lo tanto ahí también hay una diferencia, no hay condicionamiento de clase alguna, porque además coincidimos con el senador Mujica en que la participación de la oposición en funciones de control es una alerta para el gobierno. No hay que olvidar que por empresas que manejan decenas, centenas de millones de dólares pasa la mayor parte del presupuesto público que no pasa por la Administración Central.

EC - ¿De qué organismos estamos hablando? Estamos hablando de entes autónomos, de servicios descentralizados; ¿qué más? ¿También de empresas públicas que operan en el derecho privado?

JL - Eso quedó por definirse; sin dar nombres, también quedó en definirse. Por ejemplo: la integración o no de una comisión binacional como la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande o la Comisión Administradora del Río Uruguay hacen al contralor y a la formación de políticas que rozan lo internacional, es importante. También las personas públicas no estatales en algunas áreas manejan aspectos importantes. Pero en fin, eso va a quedar a la definición del gobierno electo.

EC - Todavía no hay un listado de cargos, por ejemplo.

JL - No hay un listado de cargos, nosotros no fuimos a pedir nada sino a precisar conceptos, a establecer definiciones. No se trata de carguetes que se tiran a la oposición para que esta los reparta en función de cuotas políticas, se trata de contralor, del contralor que debe existir en una democracia para destruir la propensión a la acumulación de poder que siempre se tiene, máxime en un gobierno que tiene mayorías parlamentarias. Eso es importante definirlo, porque si estamos hablando de cargos en esa vulgarización, en esa adjetivación que muchas veces termina menospreciando la actividad política; si son carguitos políticos, deroguemos todo y que supergerentes sin control alguno manejen todas las empresas públicas. No creo que esa sea la intencionalidad, porque además en muchos casos requeriría reforma constitucional.

EC - En la reunión que Mujica mantuvo el viernes con Pablo Mieres, presidente del Partido Independiente (PI), le dijo que llegado el momento se le informará a la oposición cuántos lugares le corresponden y que deberán ser luego el PN, el PC y el PI los que coordinen entre ellos cómo se distribuyen esos puestos.

JL - Yo hablé sobre ese tema, le dije: "Mirá, no se puede dar la imagen de que el gobierno electo tira determinada participación a los partidos de la oposición y estos realizan una suerte de tira y afloje en el proceso de definición de cómo se participa". A nuestro juicio tiene que haber –y fue lo que el presidente recibió y quedó en analizar– alguien de absoluta confianza del presidente electo que tenga instancias discretas de discusión y análisis bilateralmente con cada uno de los partidos para ver cómo se avanza en un proceso de integración.

EC - Para usted no es conveniente que esto deban definirlo los partidos de la oposición entre ellos. ¿Habría problemas en esa distribución?

JL - No sería buena imagen para la participación. ¿Vamos a hacer una comisión multipartidaria con participación colorada, independiente y blanca para distribuirnos cuotas de control político? Yo lo he hablado con el propio presidente del PI, Pablo Mieres, ayer lo hablé con el senador Coutinho, del PC, lo hablé con el senador Amorín. Son aspectos en los que tenemos que tener mucho cuidado, porque si no, entramos en un menosprecio de la función pública y de la función política. Se trata de ver cómo ayudamos a mejorar y perfeccionar el sistema democrático del país, construimos un diferencial que me parece imprescindible.

EC - ¿El PN entiende que debe estar en algunos organismos, que el principal partido de la oposición debe estar presente?

JL - Nosotros le trasladamos un pensamiento que es del partido y que es una regla para la oposición: en los organismos de cinco, tres cargos son para el gobierno y dos para la oposición; en los organismos de tres, uno es para la oposición. Ese es el principio.

EC - Y en esos organismos de tres, donde le toque uno a la oposición, ¿qué pasa? ¿Es el PN el que tiene que cubrir ese cargo?

JL - Veremos, no quiero poner piedras en este camino, quiero aportar a construir soluciones. Ese es mi único propósito, no es el protagonismo político ni ser oficial negociador de nada, simplemente contribuir a facilitar. Con ese propósito me reuní con el presidente electo y voy a dar traslado al Directorio del partido el próximo lunes.

EC - Si se repite la situación de hace cinco años, si en el caso del Banco de la República, por ejemplo, el gobierno electo entiende que tiene que contar con cuatro representantes y deja uno solo para la oposición, ¿qué ocurre?

JL - No apuremos caballo cansado en repecho, esperemos. No hagamos preguntas que den lugar a respuestas que después puedan suponer juicios estentóreos que terminen rigidizando las posiciones. Veremos cómo se avanza. El presidente ya recibió un pensamiento que es compartido por nuestra colectividad política, recibió nuestro pensamiento y nuestras sugerencias. Por supuesto, él tiene la palabra, es el presidente electo, es el que tiene legitimidad para ver cómo se conduce este proceso, que tampoco debe hacerse con apuro. El gobierno arranca el 1º de marzo, las venias no pueden enviarse al Parlamento antes del 1º de marzo, entonces no tenemos que andar corriendo en un tema de estas características, se puede analizar con mesura y discreción de manera tal que la participación se asegure. Debe ser un objetivo fundamental del gobierno; la participación de la oposición en los entes públicos no es para solucionar algunos compañeros de tal o cual partido, es algo que le sirve al gobierno y les sirve a los uruguayos.

EC - En esa misma línea, ustedes tenían la preocupación de cómo sería la relación en el Parlamento entre el oficialismo y la oposición, en qué medida se le daría participación a la oposición en la discusión de los proyectos, si volvería a repetirse la experiencia de que el proyecto se discute primero en la bancada del FA, allí se liman las asperezas, se llega a un acuerdo, y después prácticamente así se termina votando. ¿Qué respuesta obtuvo de Mujica?

JL - La repuesta del presidente electo fue clara: el vicepresidente electo, el contador Danilo Astori, va a jugar un papel importante; todos tenemos expectativas de que lo haga para abrir el juego a la oposición. Pero también hay definiciones con respecto a interlocutores que se puedan dar, y ahí el propio senador Mujica y quien habla coincidimos en que un caso especial es el hecho de que su propia esposa va a integrar el Senado de la República, en el que están los principales referentes de la oposición: están el presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PC y principales dirigentes del PC, están el presidente del Directorio del PN y principales dirigentes del PN. Pueden darse las condiciones necesarias como para tener un relacionamiento que fructifique en una mejor calidad del producto legislativo y en mayores acuerdos que a mi juicio se necesitan, porque no podemos seguir con el país partido a la mitad, con el país dividido.

Le dije al presidente: aquí se elige cuál va a ser el relacionamiento del sistema político en los próximos cinco años, si vamos a seguir como hasta ahora dividiendo al país entre buenos y malos, ricos y pobres, del interior y de la capital, entre unos y otros, no creo que vayamos por buen camino. Me parece que en esto tiene que haber coincidencia –y el senador Mujica así me lo expresó– en buscar más allá del disenso, de los perfiles distintos, de las líneas políticas y programáticas diferentes, que habrá que ver cómo sintonizan en el nuevo escenario de la política nacional. Me parece que la gente quiere acuerdos, necesita acuerdos; los políticos somos instrumentos para generar acuerdos, no para generar polémicas ni líos artificiales. Eso es fundamental.

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Transcripción: María Lila Ltaif