Entrevistas

Javier De Haedo: seguridad, vivienda y salud también son responsabilidad de la Intendencia

Javier De Haedo: seguridad, vivienda y salud también son responsabilidad de la Intendencia

"Los temas importantes y graves de los uruguayos los tenemos que resolver entre todos", expresó el candidato a intendente por Alianza Nacional, Javier De Haedo, -citando al presidente José Mujica- al referirse a los cometidos del gobierno departamental. Entrevistado por En Perspectiva, el dirigente nacionalista agregó que, en caso de resultar electo, ahorrará entre 1,5 a 2% del presupuesto para cubrir esos rubros, que se conseguirán bajando la cantidad de empleados de la Intendencia. Asimismo, se refirió a la relación de la comuna con el gremio de empleados municipales, punto sobre el que instó a comprender que "hay un tercero en discordia que es el más importante: el contribuyente". En tal sentido, manifestó dudas con respecto a la idoneidad de la candidata frenteamplista al respecto. "Yo me pregunto legítimamente si Ana Olivera va a ser intendenta o compañera de algunos sindicalistas de ADEOM", apuntó.


(emitido a las 8.55 Hs.)

Ella pertenece al Partido Comunista, que tiene una fuerza importante en ADEOM. Entonces yo me pregunto legítimamente si la intendenta, en ese caso Olivera, va a ser intendenta o compañera de algunos sindicalistas de ADEOM.

Todos tenemos que entender, unos y otros, que hay un tercero en discordia que es el más importante de la mesa, que es el que no está en la mesa, el vecino, el contribuyente, el que les paga el sueldo al intendente y a ADEOM.

EMILIANO COTELO:
La Intendencia de Montevideo (IM) debe ser un modelo a la hora de aplicar la reforma del Estado que impulsa el presidente José Mujica, pero además es necesario generar un nuevo relacionamiento con el sindicato de trabajadores municipales, ADEOM.

Esos son algunos de los planteos de Javier de Haedo, candidato a intendente por Alianza Nacional (AN) en su programa de gobierno.

En ese documento también se propone terminar en dos años con la recolección informal de basura, se introduce una Secretaría Departamental de Seguridad Pública y, si bien se considera demagógico plantear una reducción de los impuestos, se insiste en que la Intendencia puede y debe brindar mejores servicios.

Después de la primera entrevista, en la que presentamos a Javier de Haedo como candidato a partir de su trayectoria y sus credenciales, hoy vamos a volver a conversar con él, sobre todo sobre sus ideas para la capital.

***

EC - En esta campaña usted no solo ha polemizado con el Frente Amplio (FA), también con el Partido Colorado (PC). Hace pocos días los entrevistábamos a usted y a Ney Castillo a raíz de la polémica que se generó cuando usted convocó al voto extrapartidario al Partido Nacional (PN) para que alguno de los dos candidatos blancos pudiera desplazar al FA del gobierno de la IM.

¿Qué dejó ese "tiroteo"?

JAVIER DE HAEDO:
Tiroteo no fue porque se tiró de un solo lado, y no del mío. Para que haya tiroteo, para que haya pelea, tiene que haber dos con voluntad de hacerlo. Yo simplemente hice una propuesta que no es nada original, que es convocar el voto de otros partidos, de votantes de otros partidos. De eso se trata la actividad política, si uno se va a quedar siempre con la pecera que ya tiene, entonces ¿de qué estamos hablando? Y de hecho en esta misma campaña electoral hay departamentos donde desde otras tiendas se apela al voto de las nuestras; creo que es el caso de Salto. Y hay otras formas en estos días de apelar al voto de otros partidos, de votantes de otros partidos, por ejemplo con la estética de la campaña. Cuando se hace una campaña de un partido que se identifica con un determinado color históricamente y se le da tanto espacio en la vía pública a ese color como a los colores tradicionales del otro partido, por ejemplo, o cuando se utiliza un color como el rosado, que es la fusión del colorado y el blanco, son formas de convocar.

EC - Pero ¿qué paso con el tema? Se fue diluyendo en la campaña.

J de H - Tampoco era un tema para que estuviera siempre. No se diluyó de mi lado porque yo en la tercera etapa de mis avisos de televisión hablaba de votar juntos, en un aviso que publicamos en la prensa el domingo también se apelaba al juntos, porque entiendo que hay una tendencia a la baja del FA, eso ya es un dato, todas las encuestas lo señalan. La duda es cuánto, en qué nivel queda, pero va a quedar abajo del 61 de hace cinco años y del 56% de octubre. Y hay una tendencia histórica hacia el alza del PN, que estuvo tercero en Montevideo en seis elecciones en los últimos 44 años y ahora no va a ser el tercero, por lo menos va a ser el segundo. El razonamiento era ese, y ahí está.

EC - Yo recordaba esa polémica porque en una de esas entrevistas, concretamente con el doctor Ney Castillo, él cuestionaba su posicionamiento como candidato y en especial su eslogan (Despertá Montevideo). Según Ney Castillo, los montevideanos son gente madura e inteligente que no necesita que venga un genio iluminado a despertarla. ¿Cuál es el sentido de su lema de campaña?

J de H - Es una mala interpretación, no estoy diciéndoles a los montevideanos que están dormidos. Apelo a ese eslogan de campaña en el sentido de que despierte del aletargamiento en el que estamos después de 20 años de gobierno de un mismo partido, de la resignación, de haber incorporado al paisaje cosas a las que nos hemos acostumbrado. Anoche fui a cenar con Andrés Velazco, el ministro de Economía de Bachelet, que estuvo de visita en Montevideo y dio algunas conferencias, y hablando de todo un poco me decía: "Lo que me ha sorprendido de Montevideo, a la que la conozco desde hace muchísimos años, son los carritos de los clasificadores y recolectores de residuos. Ustedes quizás se han acostumbrado, pero para quien viene de fuera choca mucho, porque teníamos a Montevideo como una ciudad notoriamente más limpia que el promedio de América Latina, y ahora está por lo menos en el promedio".

Es una visión de alguien que viene de fuera, de un observador calificado que ha estado trabajando en la política en su país y que tiene una visión totalmente objetiva. Ese es el tema, despertemos todos los montevideanos ante esa realidad que nos tiene aletargados, que nos tiene acostumbrados. No es ningún genio que habla desde una nube el que dice eso, es una expresión de reaccionar.

EC - Sobre ese punto, en el programa de gobierno dice:

"Montevideo va cambiando, pero lo hace mucho más lentamente de lo que debería, y sobre todo de lo que el progreso exige. Vivimos en una hermosa ciudad, ubicada en un lugar estratégico para el desarrollo humano, pero no lo estamos aprovechando. Existen demasiadas potencialidades que están apagadas, dormidas".

¿A cuáles alude?

J de H - Por ejemplo, en estos últimos cinco años el Uruguay recibió un récord de inversión extranjera directa, desde que hace más o menos 100 años se produjeron grandes inversiones británicas en Uruguay no había habido un período de cinco años con tanta inversión extranjera directa, y Montevideo no se enteró. Hay un montón de proyectos a lo largo de la costa que podrían haber recibido inversiones de cientos de millones de dólares algunos de ellos, pero por falta de capacidad o de voluntad de decisión no se hicieron. Y eso no es solamente para dejar más linda la costa, es para darles trabajo a los montevideanos de todos los barrios, para mejorar la estética de la ciudad, para generar trabajo. Ayer yo recorría el Hotel Carrasco y me decían que cuando esté terminado van a trabajar 400 personas allí, más personas que en Botnia. Los servicios generan más empleo que las industrias por lo general, y hay un multiplicador por seis por cada empleado en otras actividades conexas fuera de ese emprendimiento.

EC - Pero esa es una inversión que se está concretando.

J de H - Sí, pero ¿cuánto tiempo llevó? Llevó 20 años o 15 años. A lo largo de la costa hay muchos otros proyectos que quedaron por el camino, toda la zona del puerto del Buceo, la zona del faro de Punta Carretas, aquí más cerca el proyecto Reconquista, también en la zona de la Embajada de Estados Unidos.

EC - Vayamos a otros puntos del programa, a uno de los temas nuevos que aparecieron en esta campaña electoral departamental: la posibilidad de que la IM coordine servicios con la Jefatura de Policía de Montevideo para mejorar la seguridad pública. Se había discutido poco de esto otras veces, y usted ha sido uno de los candidatos que han hecho propuestas de este tipo. ¿En qué consiste la suya, concretamente?

J de H - Primero, no "uno de los que", soy el que más propuestas hizo sobre el tema seguridad, incluso contra la opinión de otros candidatos de mi partido y de otros partidos que dicen "no, la seguridad es un tema del ministro Bonomi".

EC - Ana Lía Piñeyrúa no fue por este camino notoriamente, pero en el PC Ney Castillo sí.

J de H - Exacto, porque es lo que vemos cuando vamos a visitar cualquier extremo del departamento. Yo hice el programa a partir de cinco encuentros zonales con la gente, y no necesariamente de mi partido ni de mi sector político, gente representante de organizaciones de distintos barrios. Y después de ello, en todas las visitas que hice hasta el domingo pasado, lo primero que le plantean a uno es "ayúdennos con la seguridad", y ellos saben que yo no soy candidato a jefe de Policía ni a ministro del Interior, saben muy bien que soy candidato a intendente, y sin embargo dicen "ayúdennos con la seguridad".

Nos encontramos con que la Intendencia puede hacer cosas por la seguridad que están entre sus cometidos básicos y sus competencias, y no las está haciendo: iluminar y limpiar mejor. Especialmente espacios públicos que están realmente dejados de lado, y por lo tanto malos vecinos han desplazado a buenos vecinos. El ejemplo de la plaza Líber Seregni es lo contrario, un ejemplo de cómo cuando se invierte en una plaza se la vuelve a conquistar para la gente y se desplaza a quienes usan el espacio público para otra cosa. Entonces: iluminación, limpieza, infraestructura en los espacios públicos.

Al principio de la campaña estuve en Bella Italia y no se me borró la imagen: eran cinco cuadras de verde sin una bombita de luz en su entorno, estaban las columnas pero hacía 10 años que no había bombitas, ya ni cables quedan. Yo imaginaba ahí canchas de fútbol, banquitos, toboganes, hamacas, banquetas para que los veteranos vayan a tomar el mate a última hora. Y es un pastizal, hay ratas y hay basurales. Ahí hay cometidos esenciales, pero también hay otras cosas que se pueden hacer desde la Intendencia.

EC - Ustedes hablan de crear una Secretaría de Seguridad Pública.

J de H - Claro, si vamos a hacer cosas junto con el gobierno nacional en materia de seguridad pública, tengamos un asesor del intendente –que de eso se trata, un asesor, un referente– en materia de seguridad que coordine todas las acciones de seguridad con la Jefatura, con el Ministerio [del Interior] y con el INAU. Por ejemplo, yo estuve reunido hace dos semanas con el ministro Bonomi y hablamos de estas cosas: comisiones barriales de seguridad en las que estén la Intendencia, la Junta, las autoridades de los municipios que va a haber ahora, representantes de los vecinos, de la Policía, del INAU, en una mesa, de che y tú, en confianza. No para sustituir procedimientos establecidos de denuncia sino para charlar informalmente y estar todos en la misma, para intercambiar información por el bien del barrio.

¿No sobran 30 o 40 vehículos en la IM? Estoy seguro, me lo dicen los ediles. ¿No se pueden dar en usufructo a la Policía para que haya 30 o 40 patrulleros más en Montevideo? Implicaría un ahorro para la Intendencia, porque tendría menos gastos de taller, de combustible, de neumáticos y de choferes. ¿No se puede trabajar juntos, por ejemplo, en poner cámaras de seguridad a lo largo de la ciudad en arterias importantes para que en un salón ante las pantallas haya alguien de la Policía y alguien de la Intendencia, cada uno cumpliendo su función pero invirtiendo juntos en esa infraestructura, porque capaz que les queda grande a los dos hacerlo?

EC - Algunas de las medidas que usted propone no tienen costo para la Intendencia, por ejemplo esa de cederle vehículos de su flota a la Jefatura. Pero otras sí, usted llega a proponer que la Intendencia le transfiera fondos a la Policía para agregar 800 agentes en el departamento.

J de H - Estuve hablando con Bonomi de ese tema. Existe una legislación vigente, que quizás deba ser ajustada mínimamente, por la cual instituciones públicas y privadas pueden contratar directamente y pagar la remuneración de personas que trabajen en seguridad pública, que tengan el estatus policial, que hayan pasado y se hayan capacitado en la Escuela Nacional de Policía, que no sean funcionarios públicos pero que tengan incluso un adiestramiento ligado al perfil con el cual van a trabajar. Me explicaba Bonomi que esto ya se hizo en el sistema financiero. Y no es 222, es otra cosa. El sistema financiero necesita personal de seguridad con estatus policial, con arma de reglamento, con todas las características de un policía, adiestrado por la Escuela Nacional de Policía, pero con el perfil para cuidar una institución financiera. Otros capaz que pueden tener adiestramiento –lo hablaba con el presidente de la AUF y con los neutrales que me recibieron– en espectáculos deportivos, otros quizás para las zonas por donde andan los cruceristas, que felizmente cada vez vienen más a Montevideo, otros para cuidar espacios públicos, y entonces puedan ser contratados por la Intendencia. Y yo proponía números, porque si hay algo de lo que entiendo es de números: en un presupuesto de 400 millones de dólares, un pequeñísimo ahorro del 2% genera un gran número de 8 millones de dólares. Y 2% se puede conseguir, usted lo puede hacer en su presupuesto familiar, yo, el oyente, si la radio tiene que hacer un ajuste del 2% lo hace muy fácilmente. No es un ajuste del 10%.

EC - Usted propone hacer un ajuste en los gastos de la Intendencia para obtener dinero con el cual financiar este tipo de instrumentos en pro de la seguridad pública.

J de H - Exactamente, en una función que para mí es de la Intendencia, vigilar los espacios públicos es una función de la Intendencia. Hay alguno que dice "con un guardaparque"; yo estuve reunido con las autoridades de Hípica en Maroñas hace algunas semanas y me decían que ponen un guardaparque sin armas y le roban los zapatos, el celular y la campera, todo. La forma de hacer seguridad es con personas armadas, con policías. Y en el entorno de Maroñas, cuando hay espectáculos, cuando hay carreras, hay personal con perros policía especializados en eso. No es un saludo a la bandera, no es poner a un buen tipo de guardaparque con un celular para que llame al 911 si ve un lío, porque antes de que disque le robaron el teléfono.

EC - ¿Sigue pensando en el escribano Guillermo Stirling para poner al frente de esa Secretaría de Seguridad Pública? Ese anuncio que usted hizo contribuyó a la irritación de dirigentes colorados.

J de H - Eso es jugar en la cancha chica, irritarse por eso. Uno nombra a una persona prestigiosa para un tema muy importante, una política de Estado, alguien de otro partido para dar clara la señal de que alguien respetado por todos podría ser un referente en ese tema; allá ellos que se irritan. Yo creo, como dijo el presidente Mujica en el discurso del 1º de marzo, que los temas importantes y graves de los uruguayos los tenemos que resolver entre todos, y entre ellos están seguridad y vivienda. Tampoco es una función primaria de la Intendencia construir casas o dar soluciones habitacionales. Ahí Ana Lía, Ney Castillo y compañía dirían "pero están el Ministerio de Vivienda, la Agencia Nacional de Vivienda y el Banco Hipotecario". Fenómeno, pero la Intendencia tiene mucho para hacer en vivienda. Puede, por ejemplo, buscar una cartera de tierras o comprarle a gente privada que tiene zonas enormes, predios gigantescos donde hay asentamientos regularizables pero que son irregulares, o expropiarlos si no se llega a un acuerdo, para regularizar esa situación. Puede buscar tierras, de la Intendencia o no, para relocalizar asentamientos irregulares e irregularizables. Es un poco de poner cabeza y corazón en el trabajo.

EC - De nuevo, esta discusión, este punto que usted incorpora ahora remite al presupuesto. Hay quienes sostienen en el debate de esta campaña electoral que uno de los problemas es que la Intendencia se ha diversificado mucho en sus objetivos, por ejemplo ha ido a vivienda, a salud pública, etcétera, que son responsabilidad del gobierno nacional, mientras que descuida lo que deberían ser sus prioridades, el aspecto de la ciudad, el estado de las calles, la iluminación, la recolección de residuos.

***

EC - Usted dice en su programa que "sería demagógico plantear la reducción de los ingresos departamentales". O sea, sería demagógico plantear una rebaja de impuestos.

J de H - Sí.

EC - No propone, entonces, rebaja de impuestos. Pero todos los candidatos de la oposición denuncian que la presión tributaria en Montevideo es desmesurada.

J de H - Que sea desmesurada no quiere decir que se puede bajar alegremente, porque si no lo desmesurado sería el déficit. Y yo diría que más que la presión, lo desmesurado es la contraprestación que nos da la Intendencia por lo que pagamos. E incluso si lo hablamos con politólogos que hacen relevamientos de opinión pública, no sé si Óscar [Bottinelli] lo ha hecho aquí, pero yo he hablado con algunos colegas de él y las quejas de la gente, según las encuestas, no son "pago muchos impuestos"; hay un 10% que dice "pago muchos impuestos", pero hay mucha más gente que dice "no me dan en proporción a los impuestos que pago". La disconformidad no es tanto con el quantum de los impuestos, sino con la falta de retorno.

EC - El programa dice: "La IMM puede y debe brindar a los contribuyentes mejores servicios como contrapartida por los impuestos que les cobra". Entonces, ¿cuál es su promesa?

J de H - La promesa es hacer un ajuste en la parte del presupuesto que no es obras e inversiones y servicios directamente volcados a la población, para generar –diría el equipo económico del ministro Astori– espacios fiscales adicionales, no mediante aumentos de impuestos sino reduciendo algunos gastos para poder hacer esas inversiones.

EC - ¿Dónde se puede bajar gastos? Porque hace un rato usted ya hablaba de una reducción del 2% para financiar los servicios vinculados a la seguridad pública que podría asumir la Intendencia.


J de H - Totalmente, y la primera decisión que haría en la asignación de recursos sería que el primer ahorro del orden de 1,5 a 2% del presupuesto fuera para ese rubro.

EC - Pero por lo visto piensa en bajar más los gastos.

J de H - Muchísimo más.

EC - ¿Cómo? ¿Dónde?

J de H - Salarios y gastos de funcionamiento.

EC - ¿Bajar salarios?

J de H - No, bajar el gasto en salarios bajando la cantidad de personas que trabajan en la Intendencia. La Intendencia tiene 8.200 personas y más de 4.000 que trabajan indirectamente por medio de entidades tercerizadas, que son las 4.000 y pico que ADEOM quiere incorporar presupuestariamente. Y ahí es que yo digo: coincido con lo que hizo el gobierno en estos 20 años en Montevideo de sacar afuera algunas funciones. Pero se quedó corto, tendría que haber ido mucho más lejos, es la tendencia moderna en el mundo público y privado. Lo primero que hay que hacer es una auditoría de recursos humanos para saber si esos 8.200 funcionarios son absolutamente todos ellos necesarios y si tienen las calificaciones propias de la función que cumplen. Podremos encontrar que muchos no tienen las calificaciones pero son pasibles de ser calificados mediante un entrenamiento, otros quizás no, y según la edad que tengan esos otros puede hacerse un plan de prejubilación. Yo estoy seguro de que hay muchos posibles prejubilados. Y eso ya implica un ahorro de pique, porque al no estar trabajando no se incurre en los gastos asociados al trabajo de una persona. Y con el paso del tiempo, una vez que la jubilación se concrete y esa prejubilación ya no sea de cargo de la Intendencia, ya será un ahorro total para la Intendencia.

Otro candidato mencionaba en estos días que en estos cinco años hubo más de 2.000 bajas en la Intendencia, pero el número de empleados es el mismo porque se tomaron otros 2.000. Yo no creo que en los próximos cinco años se pueda reducir en 2.000 o 2.000 y pico la cantidad de funcionarios, no me darían los números, salvo que la población de funcionarios de la Intendencia sea muy veterana. Pero con que se reduzca en 1.000 y no se repongan, o se repongan mínimamente aquellos casos de personas jóvenes expertas en informática para facilitar las cosas y hacer expedientes virtuales y no en papel, por ejemplo, ya está. Se puede hacer.

Y después los gastos de funcionamiento. Un 35% del presupuesto son gastos de funcionamiento, donde también hay trabajo incorporado, también hay 4.000 personas que tienen ingresos; hay que ver esos contratos con esas instituciones, cuáles son los márgenes, cuáles son los beneficios, las utilidades. Hay que ver, porque hemos visto casos en los cuales, como por ejemplo en la policlínica Peñarol, que está en conflicto desde hace mucho tiempo, y nos decían las propias funcionarias, las enfermeras, que los sueldos que se pagan son muy bajos, y sin embargo la Intendencia le paga una cifra muy importante a la organización que se ocupa de esta policlínica.

Estábamos hablando de los servicios de salud de la Intendencia. ¿Por qué la Intendencia tiene que tener servicios de salud? Es una buena pregunta. ¿Podría pasarle la pelota a ASSE, por ejemplo? Es un tema que se puede analizar, pero Montevideo tiene 21 policlínicas municipales que en promedio cuestan 100.000 pesos por mes, poco más de un millón de dólares en el año. Es decir, lo que costó la plaza Líber Seregni, por ejemplo, permitiría pagar dos años de policlínicas municipales. En determinados barrios donde no hay un centro de atención primaria del Ministerio de Salud Pública, la policlínica puede cumplir una función.

EC - Ahí no hay cómo ahorrar.

J de H - Ahí no hay cómo ahorrar. Yo estaba justificando por qué puede hacer ese tipo de cosas, que tampoco son cifras siderales, porque usted me decía que hay quienes dicen que la Intendencia se ha dedicado a cosas que le restan recursos para dedicarse a lo esencial. Perfecto, yo creo que lo esencial también es la salud, es una función de la Intendencia contribuir a la atención primaria de los vecinos en zonas totalmente carenciadas que no tienen una institución de ASSE cerca.

EC - A propósito del presupuesto usted no habla solamente de rebajas de gastos, también se fija en los ingresos, mejor dicho, en ingresos que no son tales o ingresos que podría tener la Intendencia. Señala que si usted es intendente "se revisará anualmente la renuncia fiscal", es decir, todas las exoneraciones, privilegios y subsidios que otorga la IM. ¿Cómo es esto? ¿Tiene la impresión de que están mal aplicadas esas exoneraciones?

J de H - No, es la misma práctica que aplicó el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) en el gobierno anterior para ver las perforaciones. Usted entrevistó a muchos expertos en materia impositiva en los últimos años y un concepto que le dijeron fue el de las perforaciones. Hay veces que un sistema tributario queda como un queso gruyere, con agujeros de todo tipo, es decir, tengo el IVA pero resulta que tiene exoneraciones a tal sector, a tal artículo, primera necesidad, etcétera. Lo mismo pasa con determinados tributos de la Intendencia, y hay renuncia fiscal que tiene que revisarse cada año. Como tienen que revisarse cada año –y creo que Fernando Lorenzo, el MEF, está bien encaminado en ese sentido– los recursos que se asignan a cada programa para ver si se ejecutan, si se cumplen, si el programa se sostiene por sí mismo en su validez para renovarlo en cada rendición de cuentas.

***

EC - El economista Javier de Haedo en la campaña electoral fue el principal asesor de Larrañaga en temas económicos, hoy es suplente de Jorge Larrañaga en el Senado y ahora es el candidato de AN a la IM.

¿Por dónde pasaría el "nuevo relacionamiento con ADEOM" al que alude en su programa?

J de H - Pasaría por asumir que cada uno tiene un rol, que el intendente es electo por la soberanía popular para representar a todos los montevideanos, a ninguna corporación, y sin intereses específicos en ninguna organización o corporación, y que el sindicato es el representante legítimo de otro soberano que son los funcionarios, que tienen que relacionarse debidamente, cada uno desde su lado. Muchas veces ha habido en intendentes frenteamplistas una vacilación acerca de si se es intendente o compañero de algunos dirigentes de ADEOM.

EC - Usted ha dicho algo un poco más grueso, ha dicho que si gana el FA, gobernará ADEOM.

J de H - En el caso actual sí, si gana el FA y la intendenta es la profesora Olivera, creo que va a gobernar ADEOM. Ya algunos integrantes del gremio han expresado públicamente su adhesión a la candidatura o su beneplácito, porque dan por descontado que va a ser la intendenta. Ella pertenece al Partido Comunista, que tiene una fuerza importante en ADEOM. Entonces yo me pregunto legítimamente si la intendenta, en ese caso Olivera, va a ser intendenta o compañera de algunos sindicalistas de ADEOM.

EC - ¿Y usted cómo va a hacer para marcar la cancha? Porque no es un gremio fácil, es un gremio en el desde hace años están al frente sectores de los más radicales de la izquierda y del sindicalismo.

J de H - Perfecto, es un tema de cosas claras, cada uno desde su lado. Todos tenemos que entender, unos y otros, que hay un tercero en discordia que es el más importante de la mesa, que es el que no está en la mesa: el vecino, el contribuyente, el que les paga el sueldo al intendente y a ADEOM. Eso es lo clave. Por supuesto, no hay peor sordo que el que no quiere oír. Si alguien se cierra a cualquier tipo de planteo habrá que buscar la forma de que escuche. Yo en lo personal tengo una experiencia no muy extensa pero sí muy concreta y exitosa en materia de relacionamiento con los sindicatos. Cuando fui asesor del MEF en el año 90 hicimos un gran acuerdo salarial secreto, es más, desconocido para la mayor parte del PIT-CNT y para la mayor parte del gobierno del PN, ni siquiera el ministro de Trabajo lo sabía, y al más alto nivel de la Presidencia, don Pepe D’Elía por el PIT-CNT con Juan Manuel Rodríguez del lado del PIT-CNT y yo del lado del gobierno negociamos un convenio salarial para todo el sector privado que en cinco ajustes recuperó una pérdida salarial de 15% que se había dado al inicio del gobierno que había comenzado con una inflación creciente después de la hiperinflación argentina del 89.

Todavía hoy me cruzo con gente que conocí en esa época, Gerardo Rey, que está en la UTE e iba por el sindicato de UTE; Juan José Bentancor, "el Cholo", que era de la Mesa Sindical Coordinadora de ANCAP, después fue diputado y creo que ahora es senador; y tantos otros, Posi, Adourián, del sindicato de la bebida, y hay una relación cordialísima. Así debe ser, ¿por qué tiene que verse siempre como un enfrentamiento? Esos enfrentamientos que la gente anticipa son consecuencia de las etiquetas que la propia gente les pone a las personas y a las organizaciones.

EC - Otro de los temas centrales de esta campaña es cómo mejorar la limpieza de la ciudad en general, y en particular cómo mejorar la recolección de la basura y su tratamiento final. No parece haber grandes diferencias entre las ideas de los distintos candidatos, todos apuntan a modelos similares, difieren en el optimismo en cuanto a los tiempos. Usted, por ejemplo, señala terminantemente que "en un plazo de dos años se prohibirá la recolección informal", y Ana Olivera le responde que ese plazo no es realista. ¿Dónde está el diferencial de su propuesta?

J de H - Primero, hay un común denominador porque la basura no es de izquierda ni de derecha, ni blanca ni colorada ni frentista, ni de centro ni de arriba ni de abajo, es basura, y aquí no hay que votar con ideología ni con la camiseta sino buscando la mejor gestión posible.

Claro, la señora Olivera es la candidata del no, como he dicho varias veces, no ha dado ninguna respuesta por la positiva en su campaña. Como dijo en una entrevista aquí mismo, le llevó 10 o 12 años convencer a una señora que ocupaba una plaza pública para sacarla de allí, como correspondía; se ve que el sentido de la urgencia no es una de las características de la profesora Olivera. Entonces que alguien le plantee que en dos años va a terminar con el sistema actual, ineficiente, de recolección de basura... Ahora el FA dice que el culpable de esto es ADEOM, y no es ADEOM, porque si alcanza un día de paro para que se desborden todos los contenedores quiere decir que hay algo estructural que está mal. Si un día de paro, si un fin de semana no se recoge la basura y la ciudad queda hecha un basural, como es, entonces no es por el paro, es porque estructuralmente está mal diseñado el sistema. Y si yo tuviera que corregir ese pronóstico de que en dos años se puede llegar a que no haya más carritos circulando en Montevideo porque previamente se habrán dado soluciones dignas para el ser humano que trabaja en esa función, tendría que decir que se puede hacer en antes de dos años, quizás en un año.

EC - ¿Cómo?

J de H - Le voy a proponer que haga una entrevista con una ONG que está trabajando en ese tema, por ejemplo, que tiene diseñado un sistema espectacular que me presentaron hace poquitos días y que están presentando a todos los candidatos y organizaciones públicas y privadas. Se puede hacer, simplemente hay que ponerle pienso y buscar la forma de que muchas de las personas que trabajan en esa actividad tengan un camino de salida más digno, con mejor remuneración, con mejores beneficios sociales. Por otro lado, el componente de subsidio que la Intendencia tendría que dar para aportar a la solución del tema es insignificante en comparación, por ejemplo, con lo que pagamos todos los días en azúcar más cara para que Bella Unión tenga una solución.

EC - Si entiendo bien, de los actuales hurgadores algunos seguirían en el rubro limpieza o basura.

J de H - En el rubro de clasificación, en una organización dedicada exclusivamente a la clasificación. Y a otros se los recapacitaría, y a algunos ni siquiera, porque por ejemplo la construcción puede absorber miles de personas, en la construcción trabajan actualmente más de 50.000 personas y está con una cartera de proyectos extraordinaria por delante, que perfectamente podría absorber 5.000, 6.000 o 7.000 personas más en el corto plazo. En un momento en que el desempleo es casi estructural, casi inexistente, es la oportunidad histórica para darles un camino de salida digno a 7.000 u 8.000 compatriotas.

EC - La Intendencia ha pensado en planes de este tipo.

J de H - Sí, pero ya vimos cómo piensa la Intendencia. Si piensa como la señora Olivera va a estar 20 años más. Ayer me pasaron por mail un spot de la campaña publicitaria del doctor Tabaré Vázquez del año 89 en el que aparecía hablando a cámara con un basural atrás, y decía que rápidamente iba a terminar con eso, "delo por hecho". Si hoy el doctor Vázquez fuera al mismo basural, aparecería él con menos pelo y el basural con más basura, porque 20 años después esa es la realidad. No se pueden hacer esas promesas de campaña sin decir cómo se va a hacer. Yo estoy planteando el cómo, y aun en la hipótesis de que no seamos gobierno, son ideas para poner a consideración de la Intendencia.

EC - Otra idea que aparece en su programa es la de involucrar al sector privado en el tratamiento de residuos para generar energía. Eso también ha circulado como una posibilidad. ¿En qué medida ahora sería viable?

J de H - Es viable porque los números dan, porque esa ONG y otras instituciones han hecho cálculos para que parte de los residuos en su disposición final vayan a una planta de generación de electricidad cuya construcción costaría unos muy pocos millones de dólares, seis u ocho millones, y que sería altamente rentable. Porque lo que tiene la basura, aunque a veces no se crea, es un valor económico considerable. Valor económico que hoy es apropiado parcialmente por esos 6.000, 7.000, 8.000 hurgadores y clasificadores informales. Pero ese valor económico es mucho mayor que el que se apropian ellos, porque también se lo apropian quienes están en el paso siguiente del reciclaje, quienes les compran a ellos y a su vez después le venden a una industria. Entonces hay que buscar que la Intendencia –y esta es una función esencial de ella– le ponga orden a todo el sistema para maximizar el valor económico y distribuirlo adecuadamente para que todos anden mejor.

***

EC - ¿Qué pasará con usted después del 9 de mayo?

J de H - Vamos a ver el resultado electoral, pero en principio y en cualquier hipótesis, ganando o no, voy a seguir trabajando en política, en AN, por Jorge Larrañaga y por Montevideo.

EC - ¿En particular Montevideo va a ser un foco de su trabajo?

J de H - En particular Montevideo.

EC - ¿Va a ser referente de AN en Montevideo?

J de H - Eso se sabe después y no antes, pero en todo caso creo que hay un capital invertido –capital humano: estudio, trabajo, recorridas, conocimiento– que no puede tirarse por la borda. Si no, vamos a repetir la historia de que se busca un candidato de apuro tres o cuatro meses antes. ¿Por qué no aprovechar todo lo que estudié y lo que aprendí, en caso de no ser intendente, para seguir trabajando por Montevideo? Además electoralmente tiene sentido, porque es imposible pensar que el PN pueda ganar la elección nacional con una votación magra en Montevideo.

***

Transcripción: María Lila Ltaif


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