(emitido a las 8.30 Hs.)

Este domingo, los uruguayos celebramos los 180 años de una fecha que marca uno de los hitos más importantes de nuestra historia: la Jura de la Constitución de 1830.

El Día del Padre y una jornada de mucho frío y lluvia como la que se registró ayer hicieron que los actos que se llevaron a cabo para conmemorar este acontecimiento –y que aquí en Montevideo estuvieron encabezados por el presidente de la República, José Mujica– pasaran casi desapercibidos.

Por lo tanto, esta mañana, En Perspectiva queríamos hacer un poco de historia, dándole a este aniversario el relieve que requiere. Les proponemos recordar por qué la jura de aquella primera Constitución uruguaya merece ser valorada.

Para eso, buscamos la opinión de dos expertos en esta materia.

El Dr. José Korzkeniak, abogado constitucionalista y ex senador del Partido Socialista, Frente Amplio, valoró el carácter educativo que tuvo aquella primera Carta Magna aunque recordó que no reflejaba el ideario artiguista.

"La Constitución de 1830 tiene un origen no del todo puro. Estaba prevista en una Convención Preliminar de Paz que se celebró entre Argentina y Brasil. Allí se pactó, por mediación de Inglaterra, que Uruguay sería un país independiente. Por tanto, de algún modo, esta Constitución se aparta de la idea de Artigas de un país integrado en un grupo de países, que sería una federación. De todas maneras, el contenido de la Constitución de 1830 es un contenido muy avanzado para la época y que tuvo casi un valor docente, sobre una sociedad todavía en ciernes. No era una nación todavía formada. Era una provincia con arraigos muy fuertes. Pero tuvo un valor casi de docencia. A pesar, repito, del apartamiento de la idea inicial de Artigas de formar una federación. Por consiguiente tenemos que tomarlo como un valor positivo, como un inicio del constitucionalismo uruguayo y como un paso importante en la formación de la nación que yo concibo como un proceso y no como acto instantáneo".

Por su parte, el Dr. Rúben Correa Freitas, también experto en derecho constitucional y ex senador, en este caso por el Partido Colorado, consideró que aquella Constitución que se juró el 18 de julio de 1830 forjó la institucionalidad democrática uruguaya.

"La Constitución uruguaya de 1830 tiene la enorme importancia, en primer lugar, de ser la primera carta política que tuvo el Uruguay independiente. Un código político que fue redactado en forma extraordinaria por grandes constituyentes que se inspiraron en los modelos que en ese momento existían, como las constituciones norteamericana y francesa. Indudablemente la Constitución de 1830 sirvió para que el Uruguay se encaminara hacia la vida institucional. La Constitución del ’30 fue el código político que permitió que el Uruguay, poco a poco, se insertara en el plano internacional como un país libre e independiente y además permitió que el país se encaminara desde el punto de vista institucional, a través de una vida política muy tensa y muy difícil al principio, pero que sin ninguna duda es la base fundamental sobre la que se asienta hoy el sistema democrático uruguayo".

* * *

Imagen de portada: Boceto de la Jura de la Constitución, del artista plástico uruguayo Juan Manuel Blanes (ejercito.mil.uy).