(emitido a las 10.04 Hs.)

EMILIANO COTELO:
"Timerman: Si contamina, cierro Botnia"

Ese es el título de una de las notas que publica hoy el diario La Nación, de Buenos Aires. "Para el canciller Héctor Timerman, la solución al conflicto por Botnia es simple: si la fábrica contamina, se cierra", dice el artículo. "Tras casi siete años de diferencias y un litigio internacional por la instalación de la pastera UPM frente a las costas de Gualeguaychú, el ministro sostiene que el acuerdo firmado la semana pasada entre Argentina y Uruguay no se presta a dobles lecturas".

Por otro lado, aquí en Uruguay, el diario Últimas Noticias, a propósito de la reunión de ayer de Timerman con la Asamblea de Gualeguaychú, tiene otro encare: "Aseguran a piqueteros que el ingreso a UPM será ilimitado". Dice la nota que Timerman les aseguró a sus interlocutores que se podrá ingresar a UPM todas las veces que sea necesario, más allá que el acuerdo firmado por los presidentes establece un máximo de 12 ingresos por año.

A partir de estas notas, el canciller argentino, Héctor Timerman, se ha comunicado con nosotros.

Entiendo que usted quiere realizar alguna puntualización, ¿vedad?

HÉCTOR TIMERMAN:
Quería aclararle a la gente de Uruguay, a los oyentes de su radio y a todos los uruguayos, que no es así lo que yo dije y que por supuesto es una interpretación de quienes estaban presentes en la reunión. Bajo ningún concepto el canciller argentino puede cerrar nada en la República Oriental del Uruguay. Ni siquiera en la Argentina puedo hacerlo, porque no soy autoridad de aplicación. Pero más allá de la Argentina, en Uruguay no tengo ninguna autoridad, ni interés, ni es mi trabajo. Quiero que quede claro que jamás podría. Incluso si contaminase una empresa en Uruguay, yo no tendría ninguna autoridad de ningún tipo para hacer nada. Así que eso quiero que lo descarten desde ya, porque es una ridiculez.

EC - En la nota del diario La Nación aparece citado usted textualmente: "Si Botnia llega a contaminar, cierro la fábrica", eso está entre comillas y se dice que fue dicho en un diálogo con periodistas de La Nación.

HT - No, es falso. ¿Cómo voy a cerrar Botnia? ¿Cómo voy a cerrar una empresa en Uruguay? No tengo ninguna autoridad, no soy nadie en Uruguay.

EC - El acuerdo que firmaron la presidenta Cristina Fernández y el presidente José Mujica no dice nada sobre cuáles son las consecuencias en caso de que el comité científico que trabajará con la CARU realice un control, por ejemplo en la planta de Botnia, y detecte que se están pasando los límites tolerables.

HT - Podemos hablar de las plantas en general, porque el acuerdo dice que hay que controlar ambas orillas, no dice solo Botnia. Dice que va a empezar por Botnia, pero el control medioambiental es en todo el río Uruguay y en todas las empresas que están sobre las márgenes del río; las dos márgenes. Son las mismas reglas de juego para todos.

EC - Coloquémonos en un caso en el que al realizar un control se encuentra que hay contaminación, que se sobrepasan los parámetros tolerados.

HT - Claro, a mí me parece que en ese caso, si los científicos descubren o entienden que una empresa está contaminando, evidentemente la autoridad de aplicación va a tomar las medidas necesarias para que deje de contaminar, para bien de los uruguayos y de los argentinos.

EC - ¿En el caso de la planta de UPM le corresponderá a la Dirección Nacional de Medio Ambiente (DINAMA) del gobierno uruguayo tomar las medidas que corresponda?

HT - Por supuesto.

EC - No necesariamente una clausura, depende de lo que establezca.

HT - No necesariamente una clausura, puede haber algún tipo de inconveniente que sea resuelto con los técnicos de las empresas. Llegado el caso en que se ponga en riesgo la vida humana hay que alertar a la población de que eso está sucediendo y hay que corregirlo.

EC - Los integrantes de la tertulia que están escuchando el diálogo con usted tienen alguna pregunta para formularle.

ANTONIO MERCADER:
Tengo entendido que en la reunión de ayer algunos asambleístas plantearon la idea de que ellos también iban a visitar, iban a entrar o iban a inspeccionar la planta.

HT - No, le aclaro lo siguiente: los únicos dos argentinos que van a entrar en la República del Uruguay a las fábricas que estén sobre la margen son los dos científicos que designe el gobierno argentino, y los dos únicos uruguayos que van a entrar en la margen argentina son los dos científicos uruguayos que designen las autoridades uruguayas. Nadie más.

EC - En la crónica del diario Últimas Noticias de acá de Uruguay se informa que usted les brindó seguridad a los asambleístas de Gualeguaychú respecto a que la cantidad de controles a las fábricas puede superar los 12 que como máximo están previstos en el acuerdo. "El canciller aseguró que si hay sospecha de contaminación se podrá ingresar a la fábrica cuando se necesite y los días que se requieran para efectuar el control, dijo Marchesini, que fue uno de sus interlocutores ayer".

HT - Eso es cierto. Considero que son 12 veces las que se va a entrar a monitorear si no hay ningún problema, pero como con un paciente, si usted encuentra que hay algo peligroso para la vida humana, para la salud de quienes habitan en esta zona, tanto en el Uruguay como en la Argentina, lo correcto es que los científicos entren las veces que sea necesario para controlar eso y anular los efectos nocivos que pueda haber, de ambos lados del río. Eso es algo natural.

EC - ¿Y por qué se estableció el límite de 12 entonces en el texto?

HT - Porque son 12 veces, porque no queremos que alguien piense que puede entrar todos los días ahí a pasear.

EC - Según había trascendido, la posibilidad de que el grupo de científicos permaneciera en la planta había sido una aspiración argentina.

HT - No, bajo ningún concepto. Le voy a dar un ejemplo práctico: yo entro el 1 de setiembre a un establecimiento en la República Argentina; yo no, los científicos, la CARU y la autoridad de aplicación en Argentina, y no hay nada, está bien, está perfecta la empresa; no entro hasta el mes siguiente. Pero si yo entro y descubro que hay un peligro de contaminación para la vida humana, ¿qué recomendaría usted?

ESTEBAN VALENTI:
Entrar de inmediato nuevamente. Sobre todo si es recíproco.

HT - Claro, es totalmente recíproco, no hay nada que se haga en Uruguay que no se haga en Argentina, y no hay nada que se haga en Argentina que no se vaya a hacer en Uruguay. Tengo el máximo de los respetos por las autoridades uruguayas, tengo el máximo del respeto y el cariño por el canciller uruguayo, y jamás haría nada que pusiera en duda ese respeto y ese cariño que tengo por Uruguay.

EV - Tenemos un gran respeto por todo este proceso y por nuestro canciller. Lo que nos deja tranquilo son las normas, la institucionalidad que va a funcionar. Eso es lo que vamos siguiendo, y cualquier cosa que deje dudas sobre eso la iremos aclarando.

HT - Por supuesto. Es más: les pido que me llamen todas las veces que sea necesario, como reflejo del público uruguayo, de la audiencia, en la radio El Espectador, a la que escuchábamos siempre.

AM - Se nota que usted es un hombre de medios.

HT - Si hay alguna duda, si los uruguayos tienen alguna duda, que me llamen, no tengo ningún problema en atender el teléfono y explicar que la soberanía uruguaya, como la soberanía argentina, está respetada absolutamente.

EC - Me queda por saber si a partir de estas publicaciones de prensa, especialmente la del diario La Nación, con la que empezábamos esta charla, usted recibió alguna solicitud de realizar estas aclaraciones de parte del gobierno uruguayo o de integrantes del gobierno uruguayo.

HT - No, ninguna. Pero a las diez y media, once, tengo un pedido de comunicación con el canciller Almagro que pedí realizar para explicarle esto mismo que estoy hablando con ustedes en el caso de que él haya leído el diario La Nación y con lógica se haya preocupado.

EC - En las crónicas de esta mañana se informa que ayer los asambleístas recibieron de su parte una serie de biblioratos con las pruebas que Argentina presentó en La Haya para sustentar sus denuncias de contaminación. La Asamblea de Gualeguaychú va a estudiar toda esa documentación. Pero los activistas quedaron en enviarle a usted una carta con el detalle de todos los eventos de contaminación atmosférica que entienden se han verificado en el aire, contaminación que, afirman, es producto de la actividad de Botnia. "El vocero de los asambleístas dijo que cuando le entregó al canciller ese trabajo realizado por un equipo de la Universidad de Buenos Aires, Timerman se quedó helado porque no podía creer los niveles de contaminación."

HT - No, no, vamos a poner las cosas... Nunca recibí una denuncia de los asambleístas, ellos dicen que me van a elevar una denuncia, y yo dije que con mucho gusto la iba a recibir. Jamás recibí una denuncia. Parece que fueron dos reuniones distintas.

EC - Francamente, el contraste es enorme.

HT - Le doy la palabra del canciller y la palabra de honor de Héctor Timerman de que jamás recibí nada, me dijeron que me iban a hacer llegar algo. Difícilmente me puedo quedar helado por algo que nunca leí ni recibí.

EC - ¿Qué se supo en esa reunión con la Asamblea de Gualeguaychú a propósito de en qué medida se va a mantener liberado el tránsito por el puente Fray Bentos-Puerto Unzué? En principio el 19 de agosto vence el plazo que ellos dieron.

HT - Ese tema no se tocó en la reunión conmigo, porque yo soy el canciller argentino, y ese es un tema que está en la esfera del Ministerio de Justicia.

EC - Pero ¿los asambleístas hicieron algún anuncio?

HT - No, ninguno.

AM - La Nación es un diario que se lee aquí y es considerado muy serio, supongo que en Argentina también. ¿A qué atribuye que haya titulado de esta manera? Porque habría que preocuparse, porque, por lo que usted dice, alguien estaría metiendo cizaña en las relaciones.

HT - Provocaciones.

AM - Provocaciones de La Nación.

HT - Provocaciones en las que yo no voy a caer cuando hable con el ministro Almagro.


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EC: Esta mañana entrevistamos al Sr. Jorge Fernández, presidente del grupo Christophersen, que tiene programadas una serie de inversiones portuarias. Una de ellas, que desde hace años cuenta con la aprobación del gobierno uruguayo, es una terminal de graneles líquidos en el Puerto de Nueva Palmira. Según sostiene el Sr. Fernández, no termina de dársele el último de los permisos porque habría de por medio presiones provenientes de la República Argentina para que Uruguay no avance en la actividad de la logística con líquidos, tanto en el Puerto de Nueva Palmira como en la Hidrovía.

HT: Le voy a decir algo. Primero, no se quién es el señor Christophersen. Es la primera vez que escucho el nombre. Hoy. Recién. Y segundo, la Argentina no presiona al Uruguay y el Uruguay no acepta presiones de la Argentina.

EC: ¿Usted conoce algo de este caso?

HT: No conozco al señor Christophersen. No se quién es.

EC: Pero quizás conociera sí el proyecto.

HT: No.


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