(emitido a las 7.39 Hs.)

EMILIANO COTELO:
El líder de Alianza Nacional, Jorge Larrañaga, recibió ayer dos buenas noticias de parte del presidente José Mujica. Además de explicarle la idea del pasaje de vacantes del ministerio de Defensa al ministerio del Interior, le dijo que en realidad no tiene por qué nombrar 18 coordinadores departamentales –el máximo que estaba previsto en el proyecto de Presupuesto– si no que puede alcanzar con designar a lo sumo cinco o seis, que serían en realidad coordinadores regionales.

Así comienza la crónica de esta mañana del diario Últimas Noticias, que agrega que "Mujica le hizo estos anuncios a la Larrañaga en la parrillada La Estacada, donde el líder blanco almorzaba un churrasco al mediodía de ayer cuando recibió la llamada presidencial. Mujica le dijo que quería charlar algunos temas con él, le preguntó dónde estaba y se anunció: ‘Voy para allá, en cinco minutos estoy’".


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EC – El diálogo es con el doctor Eber Da Rosa, senador de la República por Alianza Nacional e integrante de la Comisión de Constitución y Legislación de la Cámara alta.

El domingo pasado en el diario El País le hicieron una entrevista donde le preguntaban si Alianza Nacional se opondrá en el Parlamento o negociará una salida intermedia a los coordinadores departamentales. Usted contestó: "Así como está, no la acompañamos. Pero si el presidente entiende que esa figura es necesaria para la mejor coordinación se podría justificar que esos coordinadores tuvieran una jurisdicción regional más que departamental, hablo de cuatro o cinco coordinadores en todo el país, por regiones". Da la impresión que el primer mandatario tomó ayer esta idea suya. ¿Cómo corrieron las cosas en estos días entre Alianza Nacional y el presidente?

EBER DA ROSA:
Está por un lado el proyecto, la intención del presidente, que había sido anunciada públicamente a través de varias entrevistas de prensa. Y por otro lado nuestra postura, que era reticente a la idea de crear 18 cargos de coordinadores departamentales.

EC – Usted lo está planteando en términos diplomáticos, más que reticente la postura era de rechazo terminante.

EDR – Exacto. Nuestra intención era plantear alguna idea tratando de buscar la solución al problema y de encontrar una solución intermedia, que es el camino por el cual generalmente se zanjan estas diferencias. Por un lado, recogiendo el punto de vista del Gobierno, en el sentido de que insistía en la necesidad de generar estos mecanismos de coordinación a nivel de todo el territorio nacional en cuanto a la acción del Estado. Y por otro, nuestra visión crítica respecto a la creación de 18 cargos departamentales, que veíamos como una cosa innecesaria y demasiado burocrática para la organización del Estado.

Tuvimos ayer la buena noticia de que el presidente de la República compartió esta idea...

EC - ...¿Pero había habido en estos días algún tipo de contactos?

EDR – No, no hubo ningún contacto.

EC - ¿A partir de su planteo público usted había recibido algún mensaje, alguna llamada?

EDR – No. La idea fue plantear esto como una solución que eventualmente podría recibir un eco favorable de parte del Gobierno. La verdad es que pensábamos que esto se podía dar en una negociación en el proceso parlamentario de la ley de Presupuesto. Nos hemos enterado de la buena noticia de que el presidente compartió la idea rápidamente y le trasmitió al doctor Larrañaga ayer la idea de impulsar esta figura con ese carácter regional que nosotros sugeríamos.

EC – Obviamente, si se pasa de 18 coordinadores departamentales, que era el máximo previsto en el proyecto, a cinco o seis coordinadores regionales afloja uno de los problemas que a ustedes les preocupaba. Usted mismo lo decía el domingo, de esta manera se generaría menos gasto y menos burocracia. Pero los cuestionamientos que venían del Partido Nacional (PN) y también desde el Partido Colorado (PC) iban más allá del tema del gasto y la burocracia. Por ejemplo, se temía por la afectación de la autonomía departamental; se temía porque hubiera detrás de esta iniciativa la idea de generar nuevos liderazgos políticos para el oficialismo. ¿Qué pasa con esas otras aprensiones?

EDR – Hay dos consideraciones a hacer. En primer lugar, que el presidente ha vuelto a reiterar –y así lo dijo ayer ante el doctor Larrañaga– que el Gobierno va a ser muy cuidadoso en cuanto a la forma jurídica a darle a esta figura de los coordinadores regionales, de tal forma de no chocar con las competencias propiamente departamentales de los intendentes establecidas en la Constitución.

EC – Sí, porque se insiste en que este coordinador lo que buscaría es mejorar la eficiencia y la eficacia de los servicios dependientes del Poder Ejecutivo...

EDR - ...A nivel nacional.

EC – Sí, por ejemplo de los ministerios en cada departamento, no se metería con lo que fueran las gestiones de las intendencias o de los municipios, ¿no?

EDR – Exacto. Eso ha sido reiterado y ratificado plenamente por el presidente en la conversación que mantuvo ayer con el doctor Larrañaga. Lo cual también significa para nosotros una señal de tranquilidad en ese aspecto.

En segundo lugar, nosotros advertíamos que el problema mayor es que –más allá de que desde el punto de vista jurídico se fuera cuidadoso y se tratara en todo momento de que no chocara con las funciones propias de los intendentes– crear una institución dependiente directamente del presidente de la República en un ámbito pequeño como el departamental tiene necesariamente un peso político local muy fuerte.

Porque en Uruguay la Presidencia de la República es una institución muy fuerte, con enorme gravitación. A nivel popular es vista como un centro de poder indudablemente importante. Entonces, al establecer 18 cargos de este tipo, uno en cada departamento, temíamos que de hecho –no de derecho pero sí de hecho– esto fuera a impactar o a generar una situación no deseable de poderes paralelos o de competencias dentro del ámbito departamental.

Al tener un carácter regional esto se diluye, ya no tiene ese mismo peso que la gente reconocería dentro del ámbito departamental.

JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
A propósito de su entrevista del domingo, usted dice que esta figura del coordinador no tiene justificación real. Dice que "el mayor problema es la falta de coordinación de los servicios del Estado, la burocracia de la administración central, no de las oficinas en cada departamento, que son pequeñas y donde es fácil coordinar con los gobiernos departamentales". El hecho de ir a una figura de cinco o seis cargos y no de 18 como máximo, ¿cambia algo, se justifica?

EDR – Lo vuelve más justificable, aún cuando sigo pensando que el problema principal está en la burocracia que rodea a los órganos del Gobierno central, a nivel de entes autónomos, a nivel de ministerios. Ahí es donde está el problema mayor en lo que tiene que ver con la ejecución de las políticas, el hecho de darle una gravitación regional apunta a hacer [la gestión] más eficiente si el cometido principal del Gobierno, del presidente, es mejorar la coordinación entre los servicios del Estado y los gobiernos departamentales.

JAE – Este problema mayor que usted identifica ¿cómo se solucionaría?

EDR – Ahí entraríamos en el tan manido tema de la reforma del Estado, tema que no es muy sencillo.

JAE – ¿Pero no sería a través de la figura de un coordinador como está planteado?

EDR – Yo pienso que la solución para la coordinación entre los organismos del Estado a nivel del Gobierno central no pasa por el tema de coordinadores a nivel departamental. En los departamentos por lo general existen oficinas pequeñas, en un ámbito donde todo el mundo se conoce, lo que hace mucho más fácil establecer formas de coordinación, establecer acuerdos; la relación es mucho más personal, más directa, porque son comunidades más pequeñas donde la relación de todos los días es cara a cara.

El problema mayor está concentrado en torno a las burocracias dentro de la capital y dentro del Estado central, donde la relación es mucho más impersonal, donde no existe ese contacto tan fluido, tan personal, que es propio de las comunidades locales.

EC – En la entrevista del domingo en el diario El País, cuando usted se refería a esta idea de crear coordinadores regionales de los servicios del Poder Ejecutivo en vez de 18 coordinadores departamentales, en un momento usted agregaba: "En Uruguay, tarde o temprano va a plantearse la discusión de ir a una distribución territorial más basada en regiones que en departamentos. Es un tema de larga data, muy discutido, quizás sería bueno que el Gobierno diera un primer paso estableciendo coordinadores regionales". ¿Usted está diciendo que deberíamos tener menos departamentos en el Uruguay? Porque hay muchos que piensan eso, que 19 departamentos es demasiado.

EDR – Ahí entramos en un tema bastante más profundo...

EC - ...Sí, le pido simplemente un "telegrama" sobre eso.

EDR – Yo pienso que tal vez, en determinado momento, en el Uruguay se planteen las condiciones para discutir este tema. Esto ya ha sido discutido en otras oportunidades, ha habido experiencias de regionalización, por ejemplo en el régimen de facto...

EC - ...Sí, el Plan Norione por ejemplo...

EDR – ...El Plan Norione en el norte del Río Negro, que permitía una coordinación más fluida entre los gobiernos departamentales a través de la coordinación de un encare regional de los temas. Muchas veces pienso –esto es una opinión muy personal, no involucro al partido ni al sector– que debería darse una discusión sobre este tema, de que hasta qué punto en Uruguay tenemos que seguir basándonos en estructuras departamentales que vienen del siglo XIX, que fueron creadas por leyes del siglo XIX en función de circunstancias geográficas o políticas que tuvieron vigencia en ese tiempo pero que ya no son tan vigentes en el siglo XXI, donde la evolución desde el punto de vista socioeconómico y político de la sociedad ha tenido cambios, transformaciones importantes. Creo que, tarde o temprano, ese es un tema que en el Uruguay debería discutirse.


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EC – Desde la audiencia Luis recuerda que la idea de pasar a coordinadores regionales ya había sido manejada por el secretario de la Presidencia, Alberto Breccia, en la entrevista que hicimos con él la semana pasada aquí En Perspectiva.

Sí, efectivamente en un momento del reportaje Breccia dijo: "El artículo 87 del proyecto de Presupuesto habilita la creación de hasta 18 cargos. Todavía no está claro si se va a nombrar 18 como la ley establece en el último inciso que el Poder Ejecutivo reglamentará está norma en un plazo máximo de 180 días mi idea personal es que pueden surgir que determinada coordinación se realice a nivel de regiones".