(emitido a las 07.36 Hs.)

EMILIANO COTELO:
La cúpula del Frente Amplio (FA), a propuesta de las bases, le ordenó ayer a sus dos representantes en el directorio de ASSE (Administración de los Servicios de Salud del Estado) que a partir de ahora voten juntos.

Fue un mensaje directo al presidente de dicho organismo, Mario Córdoba, que en varias decisiones trascendentes adhirió a las posturas propuestas por el representante de los trabajadores, Alfredo Silva, al igual que el representante de los usuarios, Wilfredo López.

La crónica del diario El Observador dice: "La mayoría de los dirigente del FA, que recibieron ayer al directorio de ASSE en el secretariado ejecutivo, se quedaron con la sensación de que es Alfredo Silva quien domina el organismo, ante el desinterés del presidente en algunas tareas como por ejemplo la designación de jerarcas.

Mario Córdoba, del MPP y presidente de ASSE, votó las polémicas destituciones de varios jerarcas de hospitales públicos que habían sido designados por la anterior administración.

En cambio, el otro representante del FA en el directorio, Ángel Peñalosa, del Partido Socialista (PS), se opuso a esas decisiones, argumentó que no había existido una evaluación de la gestión previa que ameritara los ceses.

La reunión del secretariado ejecutivo fue calificada como `muy dura´ por varios de los delegados de los sectores políticos del FA.

Córdoba y Peñalosa expresaron puntos de vista que fueron muy distintos, según dijeron participantes de la reunión.

En el encuentro, que se extendió por casi cinco horas, los representantes de la Vertiente Artiguista, Asamblea Uruguay, el Nuevo Espacio y el PS, le hicieron fuertes cuestionamientos y preguntas a Córdoba".


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EC – Estamos en comunicación con el senador Rafael Michelini, del Nuevo Espacio, uno de los impulsores de esta reunión.

¿Estaban preocupados ustedes por este tema de los relevos en las jerarquías de hospitales y otras dependencias de ASSE?

RAFAEL MICHELINI:
Sí, la preocupación es inocultable porque el secretariado no se hubiera reunido esa cantidad de horas si no hubiera una preocupación.

La preocupación existe, no hay que olvidarse que la reforma de la salud es uno de los buques insignes del gobierno de Tabaré Vázquez y del gobierno de Pepe Mujica.

EC - ¿Se sacó alguna conclusión luego de escuchar a los dos representantes del FA, a Córdoba y a Peñalosa?

RM – Formal ninguna porque el secretariado seguramente lo tome el próximo jueves o el otro para seguir analizando la situación en términos políticos. Sin duda hay una preocupación, que tampoco tuvo conclusión formal, sobre que en pocas ocasiones pero importantes los integrantes del directorio de ASSE, que son frenteamplistas y puestos por el Gobierno, no votaron juntos.

EC – ¿Qué importancia tiene ese detalle?

RM – Tiene una importancia –hablo por mí y no en referencia a la reunión de ayer- primero, si los representantes del Gobierno votan divididos hay un desgobierno. Porque que la oposición participe, o en algunos casos integrantes sociales participen, es para controlar, generar transparencia y equilibrio. Gobierno tiene que haber. Imagínese UTE, ANTEL, ANCAP, si todos los días hay decisiones completamente distorsionadas. Ese era el primer punto.

Segundo, aunque en ASSE se votara en conjunto el Gobierno es minoría...

EC - ...Es un directorio de cinco, en el cual hay un cargo para los trabajadores y otro para los usuarios del sistema, así que los cargos políticos estrictamente hablando son tres, uno de ellos a su vez para la oposición.

RM – Exacto. Eso el Nuevo Espacio lo planteó en el rediseño institucional. Se va a pensar en los próximos días si habría necesidad de un rediseño institucional que otorgue mayoría al Gobierno, sin prescindir del necesario control de los usuarios, de los trabajadores, y de la oposición.

EC – Usted manifestaba recién la preocupación del FA por el hecho de que los dos representantes del partido de Gobierno votan de manera diferente en el directorio de ASSE. Ahora, la preocupación por esto que ha venido ocurriendo últimamente va más allá del FA, a la oposición le preocupa sobre todo con qué criterios se llegó a la conclusión de qué jerarcas debían ser cesados y con qué criterios se designó a sus sustitutos que en muchos casos no tienen idoneidad técnica, por ejemplo en administración hospitalaria.

RM – La oposición tiene todo el derecho a criticar y cuestionar, en ese sentido son ellos los que tienen que hablar por sí.

Nuestra preocupación es que tenemos una de las principales reformas y nuestros compañeros no se ponen de acuerdo e incluso en algunas circunstancias también hay diferencias con el ministro, obviamente la preocupación para los que gobernamos es mayor.

EC – Usted habla ahora de diferencias con el ministro, ¿en qué asuntos?

RM – Son públicas, yo no voy a ahondar en ellas, pero en más de una oportunidad, por suerte han sido pocas, hay diferencias, eso es inocultable. Nuestra tarea...

EC - ...¿A usted cuál le ha preocupado más?

RM – Hay aspectos de gestión y aspectos de nombramiento. No soy idóneo en el tema, puedo determinar si en una circunstancia o en otra quién debe tener la razón. Si estas diferencias continúan estamos ante un problema importante. Aunque hay una gran parte que se va en salarios, es cierto, administrar recursos humanos también es muy importante.

EC –Al Nuevo Espacio el tema de los relevos en jerarquías de hospitales, ¿de qué manera figura entre las inquietudes?

RM – No es la principal preocupación. La principal preocupación es que los servicios de salud, por diferencias de los integrantes del directorio o por falta de conducción, se afecten. No ha ocurrido, pero el tema es que no se afecten los servicios a la gente.

No estoy en condiciones de determinar si en tal o cuál localidad el que estaba era mejor que el que viene o cualquiera de los dos no está en condiciones y tiene que venir un tercero. Si esa decisión se tomó dividida por parte de los frenteamplistas estoy viendo que hay una preocupación, hay un tema que no estamos sintonizando, hay un jerarca que se puso que no era compartida esa designación por otro jerarca o que el ministerio no quedó conforme del todo. No es el caso de entrar en cada caso en particular, pero hay una preocupación. Somos el Gobierno y el Gobierno no puede estar ajeno a que en ASSE, 600 millones de dólares, se genere una situación de distorsión en la fuerza política.

EC – ¿Para usted quedó esa sensación que menciona la nota de El Observador de que es Alfredo Silva, representante de los trabajadores, conocido por su trayectoria como dirigente de la Federación de Funcionarios de Salud Pública, quien domina el directorio de ASSE?

RM – No en el planteo que yo hice, ni en el planteo de varios integrantes, estaba el tema vinculado a los otros integrantes del directorio. Nuestro planteo es: nuestros dos compañeros frenteamplistas se tienen que poner de acuerdo y además la fuerza política tiene que ver cómo logra una mayoría estable en el directorio de ASSE. Esa es la preocupación.

Después, si tuvo más acierto o menos las designaciones de directores, si todo el Gobierno está de acuerdo ahí serán cuestiones opinables y de evaluación.

JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
¿Cómo se dirime esa diferencia? Porque uno podría pensar que es al revés, en realidad quien tiene una posición desalineada es el otro director, Ángel Peñalosa, y no el presidente Mario Córdoba. ¿Cómo sería entonces el mecanismo para dirimir estas diferencias para que sea solamente una posición la que tome el Gobierno?

RM – Vamos con un primer contacto en el día de ayer, las soluciones vendrán a partir de las próximas reuniones.

Hay que ir a un diseño institucional mayor de siete miembros, con cuatro del Gobierno, independientemente del Gobierno que sea. En el futuro puede ser otro el Gobierno y parece lógico que tenga el derecho a conducir la principal mutualista del país que es ASSE y que el representante de la oposición hoy blanco, quizás dentro de equis años si el gobierno es de otro partido puede ser frenteamplista el de la oposición, más los sociales más los usuarios estén para controlar, estén para aportar, pero no estén a cargo de la conducción del Gobierno de ASSE.

Esos cuatro miembros deberán discutir, ponerse de acuerdo en las políticas a llevar adelante, deben ser idóneos naturalmente, podrán ser los que están más otros dos, veremos...

EC - ...Pero esa es una reforma a discutir para el futuro, ¿ahora puntualmente cómo se resuelve?

RM – Es una cosa para discutir para el futuro pero es un diseño institucional que se puede poner en marcha en un mes o mes y medio...

EC - ...Usted entiende que esto se puede concretar a la brevedad.

RM – Deberíamos tomar cartas en el asunto en vez de entrar en el conventillo de "se hizo esto, se hizo lo otro" ver el tema de fondo. El tema de fondo es que aunque nuestros dos compañeros estuvieran de acuerdo si los otros tres integrantes mañana se votan un aumento de sueldos no hay forma de controlar salvo...

EC - ...Lo curioso es que esto no se pensó cuando se hizo la reforma de la salud, ¿no? Acá estamos ante un descuido en la legislación que se votó, que se armó.

RM – Sí, cuando se hizo la reforma de la salud la oposición no participaba y cometimos un error. No tengo ningún problema como legislador, en su momento lo dijimos y cuando se fue a hacer el acuerdo con la oposición se le trasmitió –por lo menos lo hice yo- al Pepe Mujica y a Danilo Astori en más de una reunión las dificultades donde darle participación a la oposición implicaba estar en minoría en tres lugares: Codicen, BPS y ASSE.

En el Codicen y el BPS es una institucionalidad que tiene muchos años donde por ejemplo en el Codicen los directores de liceos no se nombran a dedo. O sea, hay toda una institucionalidad que evita que alguna de estas cosas pase.

En ASSE es una institucionalidad que no tiene cultura todavía, no tiene años, fíjese que la reforma de la salud fue en 2007 el diseño institucional.

Estamos ante un problema y hay que solucionarlo con reformas de fondo y no en el conventillo si en tal o cuál lugar se puso a tal o cuál, porque usted sabe que ahí estamos en apreciaciones subjetivas o personales y ¿quién tiene la razón?

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EC – Otros puntos de vista críticos dentro del FA, por ejemplo el de Luis Gallo, senador de Asamblea Uruguay, que dijo en estos días "hay una asociación corporativa política entre el MPP los usuarios y los funcionarios en el directorio de ASSE".

El documento que emitió la Vertiente Artiguista con su preocupación por la situación: "los equipos de gestión en la administración pública deben integrarse respetando al máximo los criterios de idoneidad técnica debidamente acreditada tanto para el ejercicio de los cargos de confianza como para la provisión de los cargos que integran la carrera funcional mediante la realización de concursos de oposición y méritos".