(emitido a las 8.47 Hs.)

EMILIANO COTELO:
La información fue publicada en la página en internet de Presidencia de la República ayer de tarde: José Mujica visitó al general en actividad Miguel Dalmao, procesado por el asesinato de la militante comunista Nibia Sabalsagaray ocurrido en el año 1974. El general está internado en el Hospital Militar, donde se le realizó una angioplastia por una obstrucción coronaria. El presidente quiso interiorizarse de su estado de salud, según se consignó desde el sitio web oficial. Mujica estuvo 40 minutos en el nosocomio.

Así empieza la crónica del matutino La Diaria sobre esta noticia, que luego agrega que "según el entorno del presidente, pretendió dar una señal conciliatoria a las Fuerzas Armadas (FFAA) en momentos en que el Frente Amplio (FA) se apresta a dejar sin efecto la ley de Caducidad, lo que ha generado nuevas protestas de grupos militares e incluso supuestos videos en los que uniformados encapuchados amenazan a la Justicia".

Dice La Diaria que "el gesto de Mujica no cayó bien en el Partido Comunista, donde militó Nibia Sabalsagaray, y tampoco en otros sectores del FA. Interpretan que se trata de la misma voluntad conciliatoria que Mujica mostró, por ejemplo, en el caso del ex secretario de la Presidencia Gonzalo Fernández, cuando concurrió a su domicilio, pero entienden que en este caso no corresponde porque se trata de un militar procesado por violaciones a los derechos humanos durante la dictadura".

La nota recuerda que "Dalmao fue jefe de la división de Ejército IV con asiento en Minas hasta el 8 de noviembre de 2010, fecha en que fue procesado con prisión por el juez en lo penal de 10º turno Rolando Vomero".

Estamos con el politólogo Julián González, investigador del Instituto de Ciencia Política de la Universidad de la República, especialista en las FFAA y defensa nacional. No le voy a preguntar por qué Mujica fue a visitar a Dalmao, supongo que usted no tiene esa información de primera mano, pero sí me interesa que usted ubique el contexto en el que ocurre esta visita.

JULIÁN GONZÁLEZ:
El contexto es el de una realidad en la cual todo el conjunto de la sociedad está frente a dos o tres fenómenos que están impactando en las FFAA y también en la sociedad. Tú citabas el tema de la ley de Caducidad, que obviamente es un tema que importa a las FFAA y a la sociedad. Yo agregaría el hecho de que en febrero de 2010 se aprobó la ley Marco de Defensa Nacional, y que a partir de allí entramos en una etapa de reformas profundas que no quiere decir que se vayan a hacer todas de golpe pero que se van a ir procesando. Eso genera inquietud en las FFAA, que son una institución que por un lado tiene un aspecto muy relevante de su cultura institucional en el culto a las tradiciones; la idea de que las FFAA son una institución no sólo permanente sino relativamente inmutable en sus características básicas. Además, habituada a autoadministrarse, autogobernarse, con muy poca incidencia en ese sentido del sistema político y de la sociedad en general...

EC – ...Lo que ocurre con la nueva ley Marco de Defensa Nacional es que ahora ese esquema cambia.

JG – Sí. En estos días se conoció un proyecto de ley de reforma del Código Penal Militar (o del código militar, como se le llama) que fue elaborado en conjunto con el Ministerio de Defensa y la Suprema Corte de Justicia. Esto supone un cambio muy importante en esa área que hasta ahora fue desde siempre un fuero de las propias FFAA. Es decir, todo el sistema de justicia militar está administrado por los propios militares.

EC – Por un lado usted mencionaba el proyecto de ley del FA que procura dejar sin efecto la ley de Caducidad. Por el otro, todos estos cambios institucionales que se están procesando en las Fuerzas Armadas a partir de nuevas leyes.

JG – Esos serían los dos principales...

EC – ...Por otro lado están los juicios mismos. Más allá de que ahora venga el proyecto que deja sin efecto la ley de Caducidad, ha habido mucha polémica y mucho malestar en grupos de militares con algunos de los fallos de las sentencias que se han procesado en la Justicia, ¿no?

JG – Sí, y a su vez ahora ha salido la jueza Mariana Motta a explicitar un poco más el contenido de su fallo. Yo no soy jurista y tampoco conozco el fallo de ella, pero echó un poco de luz con respecto a esa cuestión de que no es tan así como incluso se planteó por dos personalidades tan importantes como el expresidente Jorge Batlle o el exvicepresidente Gonzalo Aguirre. Además, los dos son abogados y...

EC – ...Entonces, ¿qué es lo que están generando esos factores? ¿Qué es lo que usted percibe hoy dentro de las FFAA?

JG – Básicamente generan incertidumbre y ese es un elemento muy importante en las FFAA; enfrentarse a cosas nuevas y desconocidas que no se sabe muy bien hacia dónde van. En general, el oficial militar requiere, por su propia formación, certeza respecto a los rumbos.

EC – ¿Qué puede conseguir una visita como la de Mujica nada menos que a Dalmao?

JG – Habría que agregar que el presidente ha insistido en que él es presidente de todos los uruguayos. Hay muchos elementos de juicio para decir que la sociedad uruguaya está quizás dividida, pero que existen dos grandes bloques. Mitad y mitad, el FA está por un lado y el conjunto de los partidos tradicionales por el otro en este tema de la ley de Caducidad, los procesamientos de oficiales y mucho más. El caso de un general en actividad, además jefe de una división del Ejército y un caso que además golpeó muy fuerte dentro de las FFAA. No es cualquier oficial, no es un oficial retirado, sino que es un caso distinto. Quizás Mujica haya querido dar una señal que también contemple a ese otro 50% de la sociedad, y en particular a las FFAA, que han sentido ese procesamiento como un hecho muy grave.

***

EC – La producción de En Perspectiva consultó más temprano al presidente José Mujica por la posibilidad de una entrevista, a efectos de que explicara la visita de ayer al General Dalmao. La respuesta fue que por ahora prefiere no realizar declaraciones en ese asunto.

***