(emitido a las 7.40 Hs.)

EMILIANO COTELO:
"Vamos muy bien, eso es claro. Es mucha la recepción de la gente, sin hacer actividades masivas de campaña." Esa fue la evaluación del diputado Walter Verri, de Vamos Uruguay (VU), integrante del comando electoral del Partido Colorado (PC), hablando con el matutino La Diaria.

Estimó que hasta ahora, a dos semanas del lanzamiento de la campaña, se reunieron unas 70.000 firmas para habilitar un plebiscito que ponga a consideración de la ciudadanía en 2014 la baja de la edad de imputabilidad. Eso es sin contar lo que pudo pasar este fin de semana, ya que en Salto se superaron las 10.000 firmas y en Paysandú las 5.000, detalló.

Este fin de semana tuvo otras novedades en esta materia: el cruce que se dio al respecto entre Pedro Bordaberry y Jorge Larrañaga.

En el fin de semana se conocieron dos pronunciamientos contrarios a la iniciativa del PC. Uno procedió del Partido Independiente (PI) y el otro de Alianza Nacional (AN).

"Terminemos con el verso de bajar la edad de imputabilidad. El Código de la Niñez y la Adolescencia dice que los menores son punibles desde los 13 años", exclamó ayer el senador Larrañaga al hacer uso de la palabra en una actividad de la lista 250, que orienta el diputado Jorge Gandini.

A partir de esa crónica del domingo del diario El País es que vamos a conversar en este momento con el senador Larrañaga. ¿Hay que entender que hay una posición en contra de la recolección de firmas de Alianza Nacional como grupo del Partido Nacional (PN)?

JORGE LARRAÑAGA:
Hay una posición del partido en lo que tiene que ver con impulsar un proyecto de ley, que presentamos en ambas cámaras en setiembre del año pasado, que procura crear el Instituto de Rehabilitación de Adolescentes Infractores. Además, procura mantener los antecedentes, agravar las penas para aquellos delitos que cometan adolescentes entre 16 y 18 años y penar la tentativa de hurto. Este proyecto es el que el PN pretende que se vote ahora. No estamos a favor de soluciones voluntaristas para el 2015. Lo que queremos son resultados como consecuencia de lo que el próximo jueves se va a dar como pronunciamiento de la comisión bicameral sobre este tema. Hemos dicho claramente...

EC – ...Los acuerdos de la comisión bicameral no incluyen la baja de la edad de imputabilidad a los 16 años, si bien se han logrado otro tipo de entendimientos y han sido varios.

JL – Por supuesto, pero nosotros estamos reclamando que entre los 16 y los 18 años, y manteniendo la arquitectura jurídica del Código de la Niñez y de la Adolescencia, se agraven las penas. Si creamos la cárcel de adolescentes, si mantenemos los antecedentes y agravamos las penas de los delitos cometidos por adolescentes entre 16 y 18 años, estamos estableciendo un régimen de agravamiento de la responsabilidad penal de los adolescentes infractores que sería importante. Es lo que estamos reclamando ahora. No estamos a favor de la recolección de firmas en lo que hace a nuestro sector porque entendemos que es una maniobra demagógica para manipular y aprovechar el miedo de la gente. De la misma forma fue calificada por el doctor Pablo Mieres como "engañosa y oportunista", y realmente nos llama la atención que se genere una suerte de enojo por parte del senador Bordaberry. No tiene argumentos para defender una reforma que es absurda y pretende ofendernos haciéndonos imputaciones sobre nuestra indiscutible condición de nacionalistas, que no tenemos que probarle. Flaco favor le hacemos a la gente cuando dilatamos respuestas del sistema político, porque la población está demandando soluciones en este momento...

EC – ...Uno de los argumentos que se manejan en el PC a favor de la recolección de firmas es que, si bien es cierto que en principio se está hablando de una reforma que en el mejor de los casos entraría en vigor en 2015, el hecho de mostrar una contundente respuesta de la gente y, con el correr de las semanas, mostrar que miles de ciudadanos firman, va a obligar al Gobierno a reaccionar en una materia en la que los pasos vienen lentos. ¿Cómo ve esta otra interpretación acerca de cuáles son las ventajas de la recolección de firmas?

JL – Puede estar también la tesis de que el Gobierno diga que seguimos posponiendo este tema y que se dilucide en 2014. Creo que los extremos están dilatando el tema. El senador Bordaberry se lava las manos con la inseguridad; le sirven las firmas, no la seguridad. Cuando era ministro de Batlle no le preocupaba la seguridad. La descubrió ahora. Me parece que la baja de la edad de imputabilidad como solución es absolutamente burda y técnicamente indefendible. Lo que hay que lograr es un Instituto de Rehabilitación que sea cárcel de adolescentes para evitar que los adolescentes entren por una puerta y se vayan por la otra. Hay que mantener los antecedentes y agravar las penas en los delitos gravísimos en la franja entre 16 y 18 años, pero no puede ser un máximo de cinco años porque nosotros pretendemos que se incremente. Como tenemos antecedentes de haber logrado cosas importantes para el país en materia de seguridad como la Guardia Republicana, el pasaje de militares a la Policía, cuarteles transformados en cárceles, la ley de Procedimiento Policial y la ley de Emergencia Carcelaria, queremos soluciones ahora y es por eso que demandamos al Gobierno. El jueves, creo que está fijada la Asamblea General, se darán cuenta de los acuerdos, no está la baja de la imputabilidad pero estamos reclamando agravamiento de las penas que supone una solución inmediata para el nuevo estatuto de los adolescentes para que la comisión de delitos no sea aprovechada por mayores para la presencia de adolescentes en lo que significa, por ejemplo, el delito de rapiña. Creo que eso es alentar una solución integral ahora y no andar jugando a la política, metiendo en la Constitución nada más y nada menos que el régimen de imputabilidad. No corresponde dilatarlo para 2015.

EC – ¿Qué están pensando en Alianza Nacional a propósito de la conducta de muchos blancos que, como dicen los mensajes que han llegado desde temprano, de todos modos piensan firmar? Son gente preocupada por lo que está pasando y quieren enviar un mensaje al sistema político.

JL – Es natural que haya gente de todos los partidos que quizás, puesta una papeleta que no se sabe bien qué expresa, la gente preocupada y angustiada por la inseguridad firme. No vamos a salir a censurar a aquellos nacionalistas que aboguen por firmar o firmen. Simplemente les decimos que, a nuestro juicio, es una maniobra absolutamente demagógica, porque fíjese que paradoja...

EC – ...¿Es una maniobra electoral han dicho ustedes también?

JL – Por supuesto. Es una manipulación electoral. La reforma del PC propone la baja de imputabilidad, el Instituto de Rehabilitación como servicio descentralizado y el mantenimiento de los antecedentes. Dentro de 60 o 70 días seguramente ya esté la ley aprobada por ambas cámaras y se cree el Instituto de Rehabilitación y se mantengan los antecedentes, como ya se ha publicitado que hay entendimientos entre los partidos. Entonces, dos de los tres postulados de la famosa reforma del PC ya quedarían sancionados. Sin embargo van a seguir juntando firmas por esos dos acuerdos. No me parece. Lo digo con toda sinceridad y sin ningún tipo de enojo, como sí vemos en el senador Bordaberry, que sale a descalificar a Larrañaga y a Alianza Nacional pretendiendo asimilar a los partidos del Frente Amplio y al PI simplemente porque no estamos de acuerdo con su posición. Además, contraría claros principios batllistas que fueron defendidos durante 30 o 40 años por la famosa penalista doctora Adela Reta, que siempre estuvo en contra de la baja de imputabilidad porque entendía que no solucionaba la problemática de los adolescentes infractores.

EC – Parecería que vamos a asistir durante todo este período de Gobierno a contrastes, a marcado de posiciones diferentes y a polémicas verbales fuertes entre usted y Pedro Bordaberry.

JL – Yo no lo deseo. No tengo sarpullido contra nadie de ningún partido, y mucho menos contra el senador Bordaberry, pero la emprende permanentemente contra nosotros. Se enoja y se quiere presentar como el nuevo Chapulín Colorado, campeón de la democracia y de la libertad, y me parece que no es así. Desde la oposición tenemos que tener coraje para oponernos pero también para arrancarle soluciones inmediatas al Gobierno como nosotros hemos conseguido con la Guardia Republicana, con el pasaje de militares a la Policía, con cuarteles transformados a cárceles. Esto supone un adelanto de las posiciones del Frente Amplio, que en el período anterior nos calificaba poco menos que de golpistas por proponer esas cosas. Queremos soluciones ahora. Eso es lo que la gente está reclamando y es lo que pretendemos cumplir.

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