Intendente por 10 días
La intendenta de Lavalleja, Adriana Peña, se tomó licencia y viajó a Europa en misión oficial. En su lugar, asumió su suplente, Alfredo Villalba, un político que no tiene buena relación con Peña. En 10 días de mandato decidió tomar decisiones drásticas para dejar bien claro que aunque sea por una semana y media, él estaba al mando.
Lo primero que hizo fue relevar a 16 directores municipales (de confianza de la intendenta), a los que les dio licencia y en su lugar quedaron quienes le seguían en el escalafón. Luego redactó un decreto por el cual ordena a estacionar sobre la derecha, cuando en Minas es costumbre histórica estacionar del lado izquierdo. Esta fue una iniciativa que tuvo él cuando fue edil y propuso en la Junta Departamental (2005-10) pero que no fue aprobada. Luego Peña decidió darle el aval y ahora salió adelante.
Pero no sólo eso: mandó construir rampas para discapacitados que algunos escolares ya están pintando; autorizó a unos vecinos para que rellenen una calle para que las aguas de una cañada no les llegue a la casa; mandó construir una pista de patín, trasladó un aula de computación de planta alta a planta baja para que acceda más gente; y tomó un Molino Viejo que estaba tapiado, lo mandó limpiar, pintar y poner en orden para que sea un museo.
Todo esto entre tantas tareas que mencionó en el diálogo que El Espectador mantuvo este jueves con el intendente interino de Lavalleja. También habló de plazas reacondicionadas, canchas de baby fútbol que mandó iluminar y reuniones con vecinos minuanos.
Según una crónica del periodista Valentín Trujillo que se publicó este jueves en El Observador, Villalba no podía conciliar el sueño el miércoles pasado a las 4.30 de la mañana y entonces no tuvo mejor idea que levantarse e ir a su novel despacho de jefe departamental. Esto contestó Villalba a propósito de lo que él llama su "hiperactividad":
"Cuando se me ocurren ideas me levanto y empiezo a escribir y busco un hilo conductor. Yo normalmente me levanto a las ocho pero estos días en particular me estoy levantando a las cinco o cinco y media, estoy muy emocionado y entusiasmado, estamos solucionando problemas. Me encanta", comentó Villalba.
Villalba argumentó por qué decidió licenciar a la gran mayoría del gabinete municipal durante sus 10 días de mandato.
"Póngase en el lugar de que usted es el director de Deporte de la intendencia colocado por la intendente Adriana Peña, un hombre de confianza. Y yo tomo la intendencia y le pido a usted que haga determinada cosa en Deporte. Entonces usted para dudar: ¿Lo hago o no lo hago?, ¿Adriana estará de acuerdo o no?. Lo que hicimos fue no exponer y dejar entre la espada y la pared a los directores. ¿Qué hice con esto? Agilizar el tema, no responsabilizarlos, y tratar de salvaguardar la relación entre ellos para cuando vuelva la doctora Peña. Para mí hubiera sido más fácil hacer la plancha 10 días, pero mi tesitura en la vida no es esa, por lo cual opté por lo que entendí que debía ser más rápido efectivo y concreto y que después la gente disfrute los hechos", explicó Villalba.
Consultado sobre cómo era su relación con Adriana Peña, contestó: "al día de hoy, no tengo relación". Y explicó: antes de las internas, Peña lo fue a buscar para su sector y le propuso que no se presentara a las internas.
¿Qué le contestó Villalba? Le dijo que reconocía en Lavalleja algunos dirigentes que eran Nacional y otros Peñarol, y era un simple Tacuarembó F.C. o Rampla Juniors, que daría pelea, pero que sí quería jugar ese partido. Tras las internas, Peña volvió a llamar a Villalba, quien le prestó los convencionales para que sea la candidata por el Partido Nacional. Negociaron y Villalba le pidió ser director general de Servicios Sociales de la IML en función a su trabajo comunitario de toda la vida.
En determinado momento, Villalba con el dinero que ingresó por la cantidad de votos conseguidos, según dijo- compró una bloquera eléctrica y comenzó a enseñarle a muchos ciudadanos carenciados a hacer bloques para sus viviendas, en vez de regalarles los bloques hechos.
Así reaccionó Peña, según él: "Y se enojó. A los 104 días me echó por teléfono y expresó una cantidad de argumentos; me vi obligado a hacer una denuncia penal y se tuvo que retractar. La relación entre nosotros debe existir cuando está en juego la administración y la transparencia de un departamento. Cuando me convocaron a asumir como intendente interino estaba a la orden. Que yo tenga problemas personales, o ella los tenga conmigo, no justifica que ella haya firmado el acta el día lunes a las 9:30 de la mañana, se haya ido sin hacer el arqueo de caja, y la intendencia haya quedado acéfala, con un acta firmada por la mitad, porque yo no había firmado", comentó.
Villalba dijo que no haber esperado que él firmara el traspaso de mando fue una actitud "soberbia" y de "falta de respeto" de Peña. Y comparó esta situación con el escenario de la restauración democrática, cuando el intendente de Lavalleja de la dictadura no esperó que asumiera el intendente democrático.
Peña no vive de la política, sino de una pequeña agencia de publicidad en Minas. Empezó en política con Julián Olascuaga en la lista 25, luego se incorporó a la lista 58 hasta que con 300 votos formó su propio sector: el Movimiento Serrano por lo Posible y lo Imposible. Prometió devolver la plata de los votos que da la Corte Electoral en obras sociales, y para 2004 con 1.700 votos logró un cargo de edil en la Junta Departamental. En la última elección, la lista 44 que él encabezó, obtuvo 4.042 sufragios. Se considera un blanco independiente, aunque en las últimas elecciones, a pedido de Ruperto Long, apoyó a Jorge Larrañaga.
Peña pertenece, sí, a Alianza Nacional, antes integró Correntada Wilsonista.
Con estas baterías de medidas, Villalba dijo que hizo lo que entendía que tenía que hacer fiel a su forma de ser.
"Soy como soy y trabajo a mi ritmo, desde chico tengo esta hiperactividad, el que me conoce no se sorprende. Yo contra Peña no tengo nada, tengo cosas que hacer, trabajar, cumplir con la gente y punto. Yo no miro para atrás, aprovecho la impronta, estoy feliz, loco de la vida, por lo cual vilo por mi salud y la alegría que puedo dar para solucionar los problemas. Porque para eso nos paga la gente".
Y el fugaz intendente de Lavalleja terminó diciendo: "Hago lo que considero que es necesario y no porque se me antoja, sino que consulto, averiguo, porque soy el intendente. El intendente debe aprender, escuchar, y tomar decisiones en consecuencia", dijo.
El Espectador se contactó más tarde con la intendente Adriana Peña desde Madrid, quien salía de la Secretaría General Iberoamericana, donde estuvo presentando antes inversores entre otros destinos turísticos a su Lavalleja. Dijo estar al tanto de las medidas que había tomado su sustituto.
"Cuando llegue a Uruguay voy a hacer una evaluación de todo lo que se ha planteado y tomar medidas en el momento, según lo que podamos encontrar", indicó.
Peña sostuvo que no le tomó por sorpresa esta actitud de Villalba, y por eso alertó a muchos directores de confianza y les sugirió que colaboren con la gestión de 10 días de Villalba.
"Algunas yo me las veía venir. Incluso, una semana antes reunimos al consejo de directores y les planteamos de que hubiera cambios, que en el momento que yo entrara volvía todo a la normalidad. Creo que todos tenían que estar dispuestos de esperar al intendente, a guiarlo sobre qué era lo que estábamos haciendo (esto incluye al secretario particular y a la secretaria general) y sobre este lineamiento dejamos la intendencia el lunes a las 10 de la mañana".
Finalmente, Peña también definió cómo es su relación con Alfredo Villalba: "Tuvimos un problema judicial, y después de eso yo no he hablado con él. Creo que no ha ameritado tener que hablar con él. En esta instancia había quedado todo un equipo de Gobierno que iba a hacer la función de pasar toda la información, de trabajar. Y la verdad que en nuestra Intendencia trabajamos en equipo, hay un consejo de directores que lo integran el secretario general, la intendenta y todos los directores. Por esa razón, no es una persona quien manda (...) se comparten las opiniones, se escucha y se decide entre todos", concluyó.