La reunión fue convocada por las situaciones en las que legisladores frenteamplistas desobedecieron el mandato de la coalición y desembocó en la decisión de suspender el Plenario Nacional que estaba previsto para este sábado.

En el pasado reciente, ya habían ocurrido episodios similares con el debate sobre la ley interpretativa de la Ley de Caducidad y este miércoles con el proyecto sobre el marco legal para contratos público-privada (PPP).

La senadora de Asamblea Uruguay, Susana Dalmás, dialogó con El Espectador y reclamó una solución de fondo al problema con las votaciones divididas en la bancada, incluso cuando está dispuesto un mandato imperativo para acompañar determinado proyecto.

Según la legisladora, su planteo no tiene que ver con medidas de sanciones de un tribunal de conducta, sino con el funcionamiento de la bancada oficialista.

"Estoy con la misma preocupación que los demás frenteamplistas, legisladores, acerca de este problema que hemos tenido y que pone en cuestión la unidad de acción del FA", dijo Dalmás, "consideramos que tiene que haber una discusión política de fondo, que no tiene que ver con medidas a tomar del tribunal de conducta sino una discusión de cómo va a funcionar la coalición de ahora en más. Si hay posibilidades de votar de la forma que cada uno entienda conveniente no vamos a poder accionar como fuerza política. O las reglas que tenemos no son las correctas o vemos como podemos solucionarlo", señaló.

La senadora Dalmás dijo que no le preocupan las diferencias sino como se procesan internamente.

"Las diferencias no nos preocupan, afortunadamente pueden estar en la instrumentación de leyes para llevar adelante los objetivos comunes. Pueden haber diferencias en la instrumentación del día a día, que es el accionar del gobierno", pero "hoy en día somos una fuerza política en el gobierno y hay que decidir como se instrumenta en el corto plazo determinadas acciones que nos acercan a los objetivos que tenemos", declaró la legisladora.

Al cierre de su diálogo con El Espectador, Dalmás recordó que cuando el Frente Amplio era oposición también se dieron diferencias entre los sectores pero generalmente se llegó a puntos de consenso y subrayó que en el Senado ahora importa más mantener la unidad porque la mayoría de bancas se ha achicado (en referencia a la pérdida de la banca de Jorge Saravia).

"Hay divergencias, que antes también existieron cuando éramos oposición y las mismas eran resueltas por nuestros mecanismos, que ahora parece que no son respetados". Por tanto, "esto hay que analizarlo, mas ahora que en el senado tenemos una mayoría muy restringida. A pesar de esta situación tenemos la firme esperanza de que los problemas se solucionen y podamos seguir en una eficiente gestión de gobierno", sentenció Dalmás.

Los ocho dirigentes de los grupos de coalición, conocidos vulgarmente como los "cabeza de lista", que integraron la reunión fueron: Carlos Gamou (CAP-L), Daniela Payssé (Asamblea Uruguay), Eduardo Fernández (Partido Socialista), Enrique Rubio (Vertiente Artiguista), Eduardo Lorier (Partido Comunista), Lucía Topolansky (Espacio 609), Felipe Michelini (Nuevo Espacio) y Gustavo Guarino (Alianza Progresista).