En Diputados se está desarrollando este martes la votación del proyecto de ley de participación público-privada. Durante el debate previo, el diputado del Frente Amplio, Gonzalo Mujica, quien es el miembro informante, leyó algunos incisos de la ley para dejar en claro que su aprobación no supone la enajenación de las empresas públicas.

El proyecto de ley ya pasó por el Senado y fue modificado. En la tarde de este martes se votaba en Diputados y si se aprobara pasará al Poder Ejecutivo para su promulgación.

El Espectador dialogó con Mujica, quien pertenece al espacio 609, quien anticipó su intervención de este martes en el Parlamento: "Voy a leer el artículo 3º en todos los aspectos, donde se marcan las posibilidades y las restricciones que tiene la ley para ser aplicada. Eso es lo más importante de todo, el texto mismo de la ley donde aclara que no puede ser utilizado para enajenar patrimonio público ni para comprometer políticas monopólicas de las empresas públicas, con eso parece que alcanza para darle garantías a cualquiera respecto a aquello para lo cual no va a ser usado el proyecto de ley".

Este gesto está claramente dirigido hacia el Partido Comunista y el Pit- Cnt, que han manifestado su negativa al proyecto. De hecho, el diputado comunista Hugo Dávila va a salir de sala en el momento de la votación y dejará en su lugar a la suplente Elsa Hernández, diputada por Artigas que vino a Montevideo a votar específicamente.

Ya en el Senado Eduardo Lorier había decidido no votar el proyecto. Respecto a esta negativa Mujica dijo lo siguiente:

"No entiendo tampoco por qué hay tanto reparo con esta ley. Fue un proceso muy largo, la ley fue modificada en un 80% en la cámara de Diputados con respecto al proyecto que vino del Ejecutivo y para ese proceso de modificaciones se invitó al PCU a participar. El Pit-Cnt también fue informado en tiempo y forma de la reformulación de la ley que se está haciendo en Diputados. Yo no sé cómo es que han discutido el proyecto de ley", comentó.

La ley establece que son contratos de participación público-privada aquellos en que la administración pública encarga a un privado, por un período determinado, el diseño, la construcción y la operación de infraestructura o alguna de dichas prestaciones, además de la financiación.

El artículo 3, al que hacía referencia Mujica, señala específicamente que quedan fuera de contratación en aquellos cometidos cuya prestación corresponde al Estado en forma exclusiva como por ejemplo los servicios educativos. También señala que queda fuera la explotación de los monopolios establecidos a favor del Estado. Un ejemplo de esto último podría ser el servicio de agua potable de Ose o la telefonía fija de Antel.

La votación.

Este proyecto tiene el respaldo de la oposición. Sin embargo, para el Frente Amplio era importante contar con el apoyo en bloque de la bancada y para ello mandató al Partido Comunista (PCU) para que votara. Los comunistas decidieron que la diputada Elsa Hernández, ingresara a sala en la tarde de este martes en calidad de suplente para votar afirmativamente el proyecto.

La banca del Frente Amplio en Artigas fue para la lista "6091011" en acuerdo de varios sectores. La titular es Patricia Ayala, que el año pasado dejó la banca porque fue electa intendenta de Artigas.

El primer suplente es Hugo Dávila del PCU y la segunda es Hernández de "Compromiso Frenteamplista 711", el sector de Raúl Sendic.

Hernández dijo que está convencida de votar a favor el proyecto de contratos público-privados: "Apostamos al país productivo. Respecto al acuerdo con este Gobierno decidimos apoyarlo porque la única manera de salir es produciendo. La productividad, la única manera de seguir adelante, el gran empuje es de esta manera. Es lo que creemos, siempre pensando en la gente".

Pero Hernández dijo que no la llamaron de apuro para ocupar la banca en lugar del comunista Dávila, sino que desde la semana pasada ya le habían dicho que viniera de Bella Unión a Montevideo, para votar este martes en Diputados
 
"A través de la secretaría de la diputación en Bella Unión me comunicaron la semana pasada que yo venía. Lo único que me impedía venir es que estaba por nacer mi nieta, pero nació este lunes, así que no hubo problema", concluyó.

Así el panorama esta ley va a salir y habrá que ver si la negativa del PCU tanto en el Senado como en Diputados se termina traduciendo en una sanción como de la que ya fue objeto a fines de junio como consecuencia de haberse negado a votar la reforma educativa en 2008, durante la administración de Tabaré Vázquez.