El líder del Herrerismo será candidato al Senado y volverá al Directorio blanco.

Lacalle: "voy a matarme para que gane Larrañaga"

Luis Alberto Lacalle tiene un gran desafío de cara a octubre: recuperar posiciones en una interna que lo relegó. Y retorna a la actividad decidido a dar esa pelea y a llevar a Jorge Larrañaga a la Presidencia. "No tengo media marcha", afirma. Se postulará al Senado, aunque aún no ha definido en qué lugar y volverá a integrar Directorio partidario. Allí, "la cabecera está donde yo me siento, nunca he dependido de cargos para ser quien soy".

(Emitido a las 9.11)

EMILIANO COTELO:
¿Cuál es el futuro político del doctor Luis Alberto Lacalle? ¿Cuáles son sus planes a partir del resultado de las elecciones internas del domingo 27 de junio, cuando en el Partido Nacional (PN) se impuso el doctor Jorge Larrañaga, quien es, por lo tanto, el candidato único a la Presidencia de la República? ¿De qué manera se parará el herrerismo en esta campaña electoral? ¿En qué medida Lacalle se propone integrar el futuro Parlamento? ¿Cómo observa todo el debate que se ha generado en torno al plebiscito por el agua? De éstos y otros temas vamos a conversar con el doctor Luis Alberto Lacalle, en la primera entrevista después del 27 de junio.

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Doctor Lacalle... Feliz cumpleaños porque esta entrevista coincide con su aniversario 63, ¿no?

LUIS ALBERTO LACALLE:
Gracias por el regalo, que ya llegó.

EC - ¿Cuál regalo?

LAL - Ah, yo estaba apostando con la chica que usted no me iba a hacer ningún regalo y acertamos.

EC - Acertaron...

LAL - Tiene todo el día de hoy para mandar un regalo.

EC - Vamos a ver si aprovechamos alguna hora en la tarde. Empecemos por regalarle algunas preguntas, ¿le parece?

LAL - Las preguntas son siempre muy bienvenidas.

EC - Anoche usted reapareció en la actividad política pública, participó en la asamblea semanal de la lista 71 y fue su reencuentro con las actividades después de las internas.

LAL - Quince días después; sí, señor.

EC - ¿Qué hizo en estas dos semanas?

LAL - Fui a una conferencia en Madrid de la Fundación Ortega y Gasset, el miércoles de noche siguiente a la interna, estuve viernes, sábado, domingo y lunes; volví, me fui a Cerro Colorado a arreglar un poco mis cosas en el campo y me vine para acá.

EC - Supongo que habrá tenido tiempo en esas idas y venidas para reflexionar sobre los resultados de la elección interna del PN.

LAL - Sí, señor; reflexionar, leer, estudiar y, como siempre, hacer planes, que es lo que a uno lo mantiene siempre en actividad, hacer planes para el futuro.

EC - ¿Cómo interpreta el triunfo tan holgado que terminó teniendo Jorge Larrañaga, en una proporción de dos a uno sobre su precandidatura?

LAL - Creo que ha sido una muy buena campaña la de Jorge Larrañaga; creo que hubo una muy grande ayuda de ese concepto de que era el que podía triunfar sobre Vázquez; de todas maneras nosotros hicimos las cosas como nos gusta, a fondo; los resultados son esos. En el Directorio la noche del 27 dije lo mismo que había dicho cinco años antes: que estaba al servicio del partido y así estoy.

EC - ¿Qué lecciones dejó para usted ese resultado?

LAL - Experiencia más que lecciones. Que el Herrerismo sigue siendo el sector más duro del PN, creo que es el más sólido; después de una campaña como ésta mantiene su vigor y va a repechar, va a votar muy bien en las elecciones legislativas.

EC - Según fuentes consultadas por El Espectador, la idea inicial del Herrerismo era que la fórmula presidencial del PN quedara acordada la misma noche del 27 de junio.

LAL - No, no era una idea del Herrerismo; perdón, era una idea del doctor Francisco Gallinal, que no pertenece al Herrerismo.

EC - ¿Ustedes la compartían?

LAL - Sí, sí, claro, nos parecía muy buena idea.

EC - El semanario Búsqueda, por ejemplo, escribiendo sobre este tema después del domingo 27 lo planteó en estos términos: "El acuerdo al que habían llegado previamente con Larrañaga había sido distinto de lo que finalmente ocurrió. Es más, las fuentes relataron que hasta estaban planificados cuáles serían los pasos que se darían para designar al candidato a vicepresidente en la misma noche del domingo 27. El herrerismo iba a proponer formalmente en el Directorio al senador Luis Alberto Heber como compañero de fórmula..."

LAL - No, no, no, no les haga caso a los periodistas, Cotelo.

EC - ¿No les hago caso a los periodistas?

LAL - No, empiece por eso, así le va a ir bien. En primer lugar, fue una idea del doctor Gallinal que todos compartimos porque ya el clima de unidad –que creo que ha sido el gran éxito de la elección interna– estaba logrado, fue una idea informal que lanzó en el Directorio, no estábamos en sesión, diciendo: "Sería bueno que nos juntáramos", yo dije que sí y quedó por esa plata en el sentido de que esa noche nos juntaríamos para: "¿Qué te parece fulano, mengano?", "Sí, no", y estando presentes todos estimar las posibilidades. No ocurrió de esa manera.

EC - Pero ustedes impulsaban el nombre del senador Luis Alberto Heber.

LAL - Nosotros no podemos impulsar ningún nombre porque el que impulsábamos era el de Luis Alberto Lacalle, discúlpeme.

EC - Sí, pero para el escenario de Larrañaga ganador...

LAL - No teníamos alternativa, hubiéramos resuelto eso en el Comité Ejecutivo del Herrerismo, donde seguramente Luis Alberto Heber hubiera tenido un gran apoyo.

EC - Se había pensado en la posibilidad de que existiera esa misma noche un abrazo entre Larrañaga y su candidato a vicepresidente, digamos Heber.

LAL - Pero no fue así, salvo que queramos seguir con este tema durante toda la audición. No fue así, nosotros creíamos que era mejor que fuera así, pero no fue así.

EC - No fue así por decisión del otro lado.

LAL - Claro. ¿Qué misterio tiene esto? No le busque cinco pies al gato.

EC - No, no le estoy buscando cinco pies; quiero simplemente lo siguiente: conocer desde su punto de vista cómo se vivieron esas horas de la noche, porque se vio muy fría la relación Lacalle-Larrañaga. Usted intentó abrazarlo al doctor Larrañaga, éste simplemente le dio la mano...

LAL - Yo trato generalmente de abrazar a poca gente; simplemente lo saludé correctamente, como corresponde.

EC - Pero el saludo no fue el que usted esperaba esa noche.

LAL - ¿Qué esperaba? Cuénteme entonces, a ver si puedo cumplir sus deseos en otra oportunidad.

EC - Dio la sensación de que usted buscaba un abrazo con el doctor Larrañaga.

LAL - Mire, si vamos a entrar en el detalle del PN, como es habitual, si sonrió o no sonrió, tomó café frío o caliente, estamos perdiendo de vista lo importante de lo que tenemos que hablar en su audición hoy.

EC - No, yo quería consultarlo si finalmente la fórmula presidencial y la forma como se resolvió...

LAL - Yo dije lo mismo que en 1999: aquí estoy para servir a mi partido y aquí está la mano tendida. Lo que hicieron los otros...

EC - ¿Y quedó conforme?

LAL - No, los otros hicieron lo que hicieron. Cada uno es como es, yo tengo más de 21 años y los otros también; yo actué como he actuado siempre, como un caballero que soy.

EC - ¿Usted consideró un error la forma como Larrañaga decidió terminar armando la fórmula?

LAL - Sí, señor. Así se lo manifesté.

EC - Debió haber sido una fórmula más abierta, que incluyera al Herrerismo.

LAL - Debió ser no, las cosas son como son; yo dije que no era la manera que me parecía la mejor, punto. Y como no estoy dispuesto a pelear dentro del PN sino a ganar las elecciones, no voy a insistir en los temas que separan sino en los que unen, porque va a ganar el PN.

EC - Lo consultaba a propósito de esas cosas simplemente porque hasta ahora no habíamos tenido oportunidad de conversarlas con usted. Ahora sí lo que quiero saber es cómo han evolucionado este vínculo y la relación entre los dos sectores después del 27 de junio, después de que se conformó la fórmula.

LAL - Muy bien, ya ha habido tareas comunes para designar la comisión que va a redactar el programa, ya está trabajando el comando electoral conjunto y el nuevo Directorio, que se va a elegir después del 20 de julio, cuando se proclamen los convencionales, va a ser el centro de articulación.

EC - ¿Cuál es la impronta que el Herrerismo pretende aportar al programa de gobierno del PN?

LAL - Creo que el programa nuestro es mejor que el otro, es más concreto; buscaremos las coincidencias, que creo que van a ser suficientes para mostrar un frente de PN fuerte, audaz, moderno, transformador, y luego cada uno mantendrá el matiz que también es enriquecedor de la opción de la gente. Es decir votar al doctor Larrañaga con un Senado del Herrerismo parece ser una buena opción para mucha gente.

EC - Pero teniendo en cuanta que el resultado de la interna fue dos a uno a favor de Larrañaga, ¿cuándo puede terminar pesando el herrerismo en ese programa común?

LAL - Bueno, no sé si se va a hacer con matemática; creo que los programas se hacen con ideas, pero si alguien quiere hacerlo con matemática tendremos que arrancar las páginas, contarlas y hacer una relación de dos a uno. De ahí va a salir una especie de mamotreto que no tiene sentido.

EC - ¿No han discutido de qué manera incide el resultado en el programa?

LAL - No, porque hay una comisión encargada de eso que va a empezar a trabajar cuando vuelvan de Estados Unidos. Supongo que allí las ideas serán medidas por su virtud, no por el dos a uno, que tampoco es dos a uno.

EC - ¿Pero algún tema en particular que al Herrerismo le interese incluir en ese programa?

LAL - Usted sabe cuál es nuestra tendencia: un Estado fuerte en lo que tiene que estar y liberado de lo que no tiene que estar, vamos a hacer un estudio comparativo de los folletos –quiero recordar que los únicos que presentamos documentos fuimos los precandidatos blancos– y vamos a tratar de que lo nuestro prospere; si no será librado al libre juego del matiz al que hacíamos referencia.

EC - ¿Cuál es el principal objetivo del Herrerismo de cara a octubre?

LAL - Primero ganar en la primera vuelta, si fuera posible, que sería una gran satisfacción; y si no ganar en noviembre y retomar un gobierno activista como fue el de 1990-1995, seguido por diez años de pasividad gubernativa.

EC - La pregunta apuntaba a su sector político, a los intereses de su propio sector.

LAL - Tener la mayor cantidad de senadores y diputados y de intendentes en mayo, como bases políticas desde las cuales realizar la obra que nos gusta hacer.

EC - ¿Y cómo marcará su perfil el Herrerismo? ¿No teme la posibilidad de perder votos, votos propios, votos que tradicionalmente han estado cercanos a este tipo de propuestas, teniendo en cuenta que el discurso del candidato presidencial, Jorge Larrañaga, parece más volcado hacia la izquierda, a captar votantes del EP o dudosos hacia el EP?

LAL - Ustedes usan la palabra temor que yo trato de no usar; yo les temo solamente a la envidia y al odio. Así que temer, no le temo a nada, vamos a luchar como hemos luchado siempre, para tener la mayor cantidad de sufragios. La gente tiene confianza en el Herrerismo, le diría con un pequeño rasgo de vanidad que tiene confianza en mí, porque hace 22 años que me ve actuar –por lo menos la generación actual; otros me ven actuar desde hace mucho más tiempo– y sabe que si alguien es coherente en Uruguay, alguien es franco, alguien tiene perfil, definiciones, es el Herrerismo y es nuestra conducción.

EC - ¿Pero cómo evita esa fuga de votos?

LAL - Usted me la está adelantando, parece que estuviera deseando un futuro.

EC - No, no, estoy hablando de una posibilidad...

LAL - Vamos a ver, hasta usted me va a votar.

EC - ...y queriendo saber de qué manera examinan ustedes esa posibilidad.

LAL - Vamos a hacer como hacemos siempre, haciendo una buena lista, trabajando; nosotros no tenemos otra ley que la del trabajo. Usted lo conoce, prácticamente es copartícipe de nuestra vida política, sabe que nunca damos por perdido nada y volvemos a empezar. Estamos con mucho ánimo, muchas ganas, con mucho apoyo y creemos que dentro del PN votar al doctor Larrañaga con la lista al Senado del Herrerismo va a ser una opción muy muy muy buscada.

***

EC - Según ha trascendido, la lista del Herrerismo al Senado tendrá en los primeros tres lugares a Luis Alberto Heber, Juan Chiruchi y Gustavo Penadés. ¿Usted lo confirma?

LAL - Eso es lo que se ha hablado, vamos a reunirnos a partir de mañana las autoridades, y la Asamblea Representativa el 2 de agosto, que es la que puede proclamar la lista.

EC - La pregunta inmediata a partir de esos tres nombres es: ¿y usted qué lugar va a ocupar, si es que va a ocupar un lugar en esa lista al Senado? Ayer, según veía en las crónicas de prensa, cuando usted llegó a la asamblea de la lista 71 fue recibido por gritos, por cánticos de algunos de los simpatizantes que decían: "Lacalle senador".

LAL - Muy buenos amigos; sí, señor, es cierto. Por suerte tenemos buenos partidarios.

EC - Es todo un tema...

LAL - Hay que resolverlo con serenidad, con reserva, como se hacen las cosas; no a través de la prensa.

EC - ¿Pero usted tiene ya alguna opinión en ese sentido?

LAL - Sí.

EC - ¿Es posible que sea candidato? Porque se ha manejado, por ejemplo, la alternativa de que usted termine encabezando la lista; otra posibilidad es que usted vaya en cuarto lugar, como para incentivar el voto de los herreristas, para que su sector no logre sólo tres sino cuatro miembros en la Cámara Alta.

LAL - ¿Por qué tres, por qué ya dictamina que vamos a tener tres?

EC - Estamos hablando de tres.

LAL - Vamos a tener cinco, si quiere que empecemos a hacer pronósticos.

EC - Entonces puede colocarse en el quinto lugar de la lista, es una alternativa.

LAL - Tiene un lugar usted, entonces.

EC - ¿A usted le interesa la posibilidad de actuar como parlamentario a esta altura de su carrera política?

LAL - Vamos a analizar eso como corresponde, con reserva y serenidad, porque son cosas demasiado serias. Mandar mensajes o sugerencias a través de la prensa no me gusta; se va a enterar usted y se va a enterar todo el mundo el día que esté hecho.

EC - En cuanto a lo partidario, empecemos por el Herrerismo, ¿usted seguirá al frente del Herrerismo...?

LAL - Por supuesto.

EC - ...¿o cederá espacio a los dirigentes más jóvenes?

LAL - No, por ahora no, por ahora no sé si soy el conductor o qué, pero tengo una presencia importante.

EC - Porque una de las lecturas que alguna gente hizo del resultado de la interna del PN es que los blancos quieren renovación en el liderazgo partidario y que ese mensaje incluso debía asimilarse dentro de su propio grupo.

LAL - O sea que en las últimas elecciones tendríamos que haber cambiado todas las veces de generación. Hemos visto todos los resultados: en 1984 paliza al PN, en 1989 paliza al PC, en 1994 empate... No podemos estar a esas alternativas. Además lo que mantiene una posición política, sobre todo cuando no se tienen posiciones de gobierno, como es mi caso, es la adhesión de la gente. Yo no dependo de mí mismo, dependo de la gente; también de mi voluntad, un día podré decir: "Creo que he cumplido con mi tarea", pero ahora tengo una gran tarea, que es que gane el PN, y ganando el PN hacer del doctor Larrañaga mejor presidente aun del que fui yo. Ésa es mi posición porque yo pienso en mi país primero que nada.

EC - Usted va a continuar encabezando el herrerismo.

LAL - Sí, delante del pelotón, cuando hay que salir a tirar, sobre todo en subida; en bajada a veces me pongo un poquito más atrás.

EC - ¿Al mismo tiempo se propone integrar el Directorio del partido?

LAL - Sí, señor, porque creo que se puede contribuir mucho a trabajar allí, es un directorio que va a continuar la tradición de éste, que fue un magnífico directorio, que hizo la unidad partidaria, de la cual me alegro mucho de haber sido partícipe.

EC - Claro, pero para usted es un cambio bastante fuerte pasar de ser presidente del directorio a ser un integrante más.

LAL - La cabecera está donde yo me siento, nunca he dependido de los cargos para ser quien soy. Tengo la suficiente seguridad en mí mismo como para no depender y achicarme o agrandarme según el cargo que me den. Tengo esa tranquilidad de conciencia y esa firmeza de carácter.

EC - ¿Para qué quiere integrar el directorio?

LAL - Para trabajar por mi partido, que es el partido que va a gobernar Uruguay y tiene que ordenarse, tenemos que continuar con el tema de los jóvenes, tenemos que reformar aun más nuestra carta orgánica para adecuarla a los tiempos modernos. Hay mucha cosa que hacer, yo no soy un anciano provecto... Tengo 63 años, nada más.

EC - Usted ha señalado que está dispuesto a colaborar en la campaña electoral para que Jorge Larrañaga llegue a la Presidencia de la República.

LAL - Colaborar no: a matarme para que gane.

EC - Es interesante semejante énfasis.

LAL - ¿Por qué? No me conocen del todo todavía; ahora van a poder escribir otro capítulo.

EC - ¿Qué significa exactamente?, ¿qué piensa hacer de aquí a octubre?

LAL - Correr, juntar, propagandear, hablar, razonar... no sé, lo que he hecho siempre, no va a tener mucho cambio mi vida. En ninguna campaña dejé de trabajar, cuando era candidato al Senado con Zumarán trabajé como un bárbaro, cuando fui candidato a presidente también, en la otra también. No tengo media marcha, por suerte.

EC - En esta campaña electoral se ha instalado un convidado de piedra: el plebiscito de reforma constitucional sobre el agua que impulsó la Comisión Nacional en Defensa del Agua y de la Vida, encabezada por la Federación OSE, el EP y otras organizaciones. ¿Usted firmó para que el plebiscito se concretara?

LAL - No, no solamente no firmé sino que dije que lamentablemente una buena idea había sido liquidada por un texto totalmente estalinista.

EC - ¿Todo el Herrerismo estuvo en esa posición?

LAL - No, cada uno opinó como quiso; ésta es mi opinión personal, como siempre.

EC - Jorge Larrañaga sí firmó, pero lo hizo cuando era simplemente el líder de Alianza Nacional, cuando ni siquiera tendía detrás los sectores políticos que después lo apoyaron en la interna en la búsqueda de la candidatura presidencial y, por supuesto, mucho antes de ser el candidato único del partido. Tan es así que dentro de los grupos que lo respaldaron, por ejemplo Correntada Wilsonista, de Francisco Gallinal, está en otra posición, Gallinal está directamente en contra, no firmó, y Abreu, que ahora es el candidato a la Vicepresidencia, se mantuvo al margen... El PN tiene un tema ahí, ¿no?

LAL - Un tema en el cual, como no es una decisión del directorio, cada uno puede hacer lo que quiere, salvo que el directorio mañana asumiera competencia. Yo estoy en contra, creo que es un mal mensaje para los inversores porque el texto lamentablemente mató una buena idea. La primera conferencia sobre el agua que se hizo en Uruguay la hice yo como presidente de la República, con Wilson Elso como ministro de Obras Públicas, en 1992, cuando ya notamos esta preocupación. Yo creo que una protección legal del recurso especial, dada su especialidad, valga la redundancia, era importante. Pero de ahí a decir que después no se va a pagar y que yo no pueda sacar agua de un aljibe en el campo porque puede aparecer la OSE a controlarme, me parece que es otra cosa.

EC - Yo decía que el PN tiene un tema allí porque, por ejemplo, el escribano Guillermo Stirling y otros dirigentes del Partido Colorado, sobre todo del Foro Batllista, han salido a pegarle al doctor Larrañaga, justamente por respaldar este plebiscito que, entre otras cosas, sostiene, en caso de ser exitoso, en caso de concretarse la reforma constitucional, tendría consecuencias en materia de la credibilidad del país frente a los inversores, etcétera. O sea, hay un punto débil, un punto propicio para el ataque, para la polémica de los adversarios, en este caso colorados.

LAL - Ya aparecerán y ya hay otros temas en los que podremos atacar a nuestros amigos colorados. No se preocupe.

EC - ¿Qué es lo que usted entiende que debe hacer el partido en esta materia entonces?

LAL - Cada uno tiene que hacer lo que se ha comprometido. Yo no firmo ni voto, y voy a hacer propaganda en contra.

EC - Usted va a hacer propaganda en contra de la reforma.

LAL - En contra no, voy a explicar por qué no; en contra queda medio feo.

EC - O sea que va a hacer propaganda por el No a la reforma constitucional.

LAL - Sí, señor.

EC - Usted entiende que el PN debe dejar en libertad de acción a sus sectores y dirigentes.

LAL - Nadie me deja en libertad de acción a mí, ni el PN ni nada, porque la libertad no me la dio nadie, así que eso de dejarme en libertad es un concepto que no admito. Yo soy libre, nadie me deja en libertad.

EC - ¿No hace falta entonces una resolución orgánica en este sentido?

LAL - Si el PN mañana asumiera competencia y dijera: "Che, lo mejor, dadas las circunstancias, es no votar, aconsejamos no votar", es otra cosa, pero como no lo ha dicho yo emito estas opiniones, que son las que me nacen y en las que creo, como siempre.

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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Mauricio Erramuspe