(emitido a las 7.38 Hs.)

EMILIANO COTELO:
Hay un tema que lamentablemente se ha colocado como principal en la agenda política y social de nuestro país durante estos últimos días: el video de Haití.

Hay varias novedades en esta mañana, ya las reseñamos en nuestro panorama temprano. Por ejemplo, lo más destacado es que el presidente José Mujica envió una carta al presidente de Haití, en la que se disculpó por el atropello que algunos soldados uruguayos han perpetrado. El mandatario dijo sentirse avergonzado por la "conducta criminal y bochornosa de unos pocos ante ese joven haitiano". En la misiva, Mujica se comprometió a investigar el caso hasta las últimas consecuencias y anunció que el Estado uruguayo resarcirá a la víctima y a su familia.

Ayer se había presentado ante la comisión de Defensa de la Cámara de Representantes el ministro de Defensa Nacional, Eleuterio Fernández Huidobro, en su primera relación oficial formal con el Parlamento para abordar este asunto.

La ocasión también fue propicia para una conferencia de prensa en la que, según se destaca esta mañana, "con gesto adusto y tras advertir que sería muy parco, Fernández Huidobro levantó la cabeza, miró a las cámaras y reconoció la responsabilidad del Estado uruguayo en lo sucedido. ‘Queremos pedirle disculpas al pueblo y al Gobierno de Haití’, dijo el ministro, y anunció que el Gobierno buscará reparar a la víctima".

En ese contacto con los periodistas, varios de ellos de medios internacionales, Fernández Huidobro también reconoció el perjuicio internacional: "Esto afecta muy mal obviamente a Uruguay, horriblemente mal. Esto le hace muchísimo daño a Uruguay y a las Fuerzas Armadas, que tiene gente que ha dejado su vida en las misiones de paz". En ese sentido, y a modo de defensa, recordó que "35.000 soldados uruguayos cumplieron funciones en los últimos años en las distintas misiones de paz de la ONU y que de ellos solo diez tuvieron algún comportamiento indebido". Según publica hoy El Observador, "con el mismo énfasis Fernández Huidobro intentó despejar dudas sobre la firmeza con que el gobierno encaró la investigación". Dijo que "será exhaustiva y se aplicarán las máximas sanciones imaginables. Queremos saber para qué barra se filmaba el video, la responsabilidad de los mandos, cómo llegó a donde llegó y si hubo dinero de por medio", agregó el exsenador del Frente Amplio (FA).

¿Cómo fue el intercambio con los integrantes de la comisión de la Cámara de Representantes? Vamos a hablarlo con dos voceros de la oposición. Empezamos dándole los buenos días al profesor José Amy, diputado de Vamos Uruguay, Partido Colorado.

¿Qué balance hace de las explicaciones que dio el ministro?

JOSÉ AMY:
En líneas generales, fueron positivas las cuentas que brindó con respecto a las investigaciones y a la llegada, en ese preciso momento en que estábamos en comisión, de la autorización de ONU para la repatriación de los funcionarios implicados en este caso. Todo se dio muy dinámicamente.

Fundamentalmente coincido con respecto al tema del daño. Nunca debería haber sucedido, pero muchísimo menos en la coyuntura en que se dio.

EC – ¿A qué coyuntura alude?

JA – Porque estamos próximos al vencimiento del mandato de Minustah (Misión de Estabilización de Naciones Unidas en Haití), que ocurriría en los próximos días...

EC - ...Sí, el 15 de octubre la ONU tiene que resolver si renueva o no ese programa.

JA – Exacto. En este contexto, Minustah era una misión que tenía un retiro programado. No era una misión para permanecer, como otras a lo largo del mundo en las que Uruguay está desde hace unos cuantos años. En su génesis quedó establecido que era una misión con un retiro ponderado pero programado.

Yo creo que las acciones que se han tomado son correctas en líneas generales. Hay que actuar como se hizo, de manera rápida, me parecen acertadas las expresiones de disculpa del presidente y me parece acertado que se indemnice como es debido a la víctima. Y también las señales que se mandaron a la propia fuerza. Ayer fuimos muy categóricos e insistentes en hacerle ver al ministro que no nos habían parecido para nada oportunas las expresiones de Relaciones Públicas de la Armada. Sobre todo cuando eso contraría la conducta que el propio Ministerio había tomado, que era la de mantener el silencio hasta tanto se avanzara en la recopilación de toda la información que existía, y no aportaba mucho. Y menos...

EC - ...Usted alude a la expresión "broma de mal gusto" o "broma pesada" porque ese fue un término que utilizó el jefe de Relaciones Públicas de la Armada, que calificó de esa manera la forma de proceder de estos marinos uruguayos en Haití. Ayer, Fernández Huidobro anunció que a las tres fuerzas les ha dicho que "no se puede usar esa expresión porque es de por sí oprobioso y vergonzoso por parte de cualquier oficial de nuestras Fuerzas Armadas".

JA – Sí, comparto claramente. Esto no es una broma, ni hay que tomarlo en ese sentido, ni puede ser analizado desde la más mínima posibilidad como una mitigación de algo que es total y absolutamente deleznable. Esto no tiene ninguna otra definición que esa. Esta reñido total y absolutamente con las prácticas habituales del pueblo uruguayo. Además deja muy mal parado a muchos que, por suerte y como bien también decía el ministro, nos han dejado muy bien parados en misiones de paz a lo largo y ancho de todo el mundo, en algunos casos ofrendando la vida, en otros volviendo amputados. Además era una muy buena carta de presentación. Esto indudablemente nos va a complicar para postularnos a futuras misiones de paz y para que Uruguay mantenga, a lo largo de todos estos años, el riquísimo patrimonio que hemos heredado de todos los gobiernos que han hecho de las misiones de paz una política de defensa y una política exterior.

EC – ¿Qué pasa de ahora en adelante? Usted señaló que a grandes rasgos comparte la forma como se está manejando el caso, pero tiene una inquietud a propósito de la posibilidad de otras denuncias.

JA – Sí, desde el viernes nosotros estamos teniendo contacto con haitianos. Con más de uno, porque después de que empezamos a contactarnos con una persona averiguamos que podía no ofrecer las garantías de denunciante total, pero igual recibimos la información y se la aportamos ayer al ministro. Incluso está la información que aportó el diputado Gustavo Espinosa sobre un certificado médico que avalaba la existencia del hecho de la violación en sí, y que tiene que ver con la posibilidad de la existencia de al menos dos videos más y fotografías...

EC - ...¿Usted se refiere a más videos y fotografías referidos a este caso en particular, a este abuso?

JA – Cuando solicitamos que se nos aclarara más en cuanto a los videos y al contenido, se nos dijo que son videos que implican a fuerzas de la Minustah. En el caso de las fotografías serían imágenes en las que aparecen personas con el uniforme de Uruguay, algunos de ellos parados frente a un grupo importante de niños haitianos donde claramente se ve que están fumando marihuana. Esto se lo dijimos al ministro con dos objetivos. Primero, para que en este plan de investigación que encabeza el general Burone en Haití sea tenido en cuenta. Esto es aceptado por el ministro, quien además conoce la información que manejábamos nosotros y ha dado instrucciones explícitas para que esto también se pueda investigar. Y el otro tema es prevenir. Acá yo coincido con el ministro y con un enfoque preliminar que usted hacía, de que no hay que descartar nada. Hay que evitar que se produzca una decantación gradual de futuras denuncias.

EC – ¿Usted dice que hay que adelantarse?

JA – Que vaya a aparecer dentro de un mes otro video, dentro de quince días una foto, dentro de otro mes otro video. Porque a los que son viejos conocedores del Parlamento –no es mi caso ya que este es mi primer período– les ha llamado bastante la atención la cobertura internacional sobre este tema, incluso ayer en la conferencia de prensa con presencia de CNN Internacional, de Al Jazeera en inglés. Y que estemos durante más de un mes en el tapete internacional, destacándonos no por buenas acciones sino por un comportamiento deleznable, indudablemente sepultaría cualquier posibilidad de resarcirnos en el mundo y de poder aspirar a futuras misiones de paz.

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EC – El diputado Javier García, de Alianza Nacional, Partido Nacional, que preside la comisión de Defensa de la Cámara de Representantes, también está en línea. ¿Qué conclusiones sacó usted después de escuchar al ministro ayer?

JAVIER GARCÍA:
Yo creo que ahora hay que trabajar para minimizar lo más posible el impacto que esto ha tenido. Creo que la indignación que tenemos todos los uruguayos con respecto a estos hechos, que es algo palpable, se ha traducido también a nivel internacional.

Primero, me había llamado mucho la atención que el Gobierno uruguayo, después de todos estos días de esta situación indignante, no se hubiera comunicado con el presidente haitiano. Yo le preguntaba ayer al ministro Huidobro si el presidente Mujica se había comunicado con el presidente de Haití para, en calidad de jefe de Estado y de mando superior de las Fuerzas Armadas, ofrecer las disculpas. Porque la solidaridad internacional que nos lleva a estar en Haití, un pueblo de los más sufridos del mundo, el más sufrido de América Latina, también nos debe llevar a pedir disculpas cuando hay una agresión de la cual somos protagonistas. Me llamó poderosamente la atención que el ministro me dijera ayer que no lo había hecho y que le parecía bien la idea, y creo que fue lo que terminó desencadenando el pedido de disculpas en esa nota que se remitió un par de horas más tarde, en la tardecita de ayer.

EC – Sí, hay una carta, cuyo texto leímos más temprano, firmada por el presidente José Mujica y el ministro de Defensa Nacional, Eleuterio Fernández Huidobro, dirigida al presidente de Haití.

JG – Increíblemente no había habido ningún contacto hasta después de la comisión de ayer. Segundo, creo que hay que separar muy bien lo que es el episodio en sí de los ahora llamados contextos. El episodio es grave en sí mismo. Si es utilizado o no para un fin político posterior por parte de gente que no quiere a la Minustah, que existe, eso no puede minimizar la existencia del episodio. Esto fue verdad, existió, es incalificable. Y lo que importa ahora es la reacción que tiene el país frente a esta situación. Ningún colectivo humano de ningún rubro de la vida en sociedad, cuando está integrado por miles de personas, puede garantizar que cada uno de los miembros de ese colectivo vaya a tener buena conducta, eso no es garantizable. Pero la seriedad de ese colectivo se demuestra [al ver] en qué medida enfrenta, condena y sanciona un apartamiento de la buena conducta o un acto indigno como este, porque eso quiere decir que está del otro lado de la línea.

Entonces, esta reacción que hemos tenido desde Uruguay me parece que va en la línea correcta. Yo soy oposición al Gobierno, pero no oposición al país. Por lo tanto, digo que ahora debemos trabajar lo más fuerte posible para que este hecho quede como lo que es: un hecho de conductas individuales aisladas que no nos compromete como país.

EC – Usted dijo que es un hecho aislado, pero hay una preocupación latente en cuanto a que este podría ser un caso de varios.

JG – A mí no me constan y yo solo me refiero a lo que me consta. Bueno sería que yo, como presidente de la comisión de Defensa y como legislador, dijera "podría...". No, yo solo me refiero a lo que tengo constancia y conozco. Si puede o no puede ser lo verá el futuro, mediato o inmediato, pero no lo sé.

EC – ¿Usted no tiene información a propósito de otros testimonios, como videos que circularían por internet?

JG – No, en absoluto. Si existen me enteraré en el correr de los días o de los meses, pero en este momento no tengo ninguno.

Ahora, saliendo del episodio puntual, de la indignidad que significa y de la forma en que hay que sancionar la conducta individual, me pongo en el otro plano, el del daño al país. Esto es muy injusto, porque Uruguay tiene una larguísima tradición en misiones de paz; datan del año 1935, no es de hace dos días. Primero participando como observadores, y a partir de la década del 90 con contingentes. Han pasado más de 30.000 uruguayos y uruguayas, y sin embargo los episodios que comprometen malas conductas o episodios de este tipo, incalificables, no llegan a los dedos de una mano. Entonces, que se empañe esa tradición y ese trabajo por unos pocos es aún más indignante. Por lo tanto, tendrán que caer sobre estas personas las máximas sanciones, con todas las garantías del debido proceso que se merece el que tiene un Estado de derecho. Deberán caer para demostrar que esto es un episodio que no nos compromete como país. Hay uruguayos que han muerto en Haití brindando ayuda humanitaria y hemos sido reconocidos por la comunidad internacional entera por ello. Por lo tanto, ahora el trabajo de todo el sistema político, sin hacer política menor, debe estar centrado en reestablecer esa imagen que está seriamente dañada.

EC – ¿Y la oposición qué puede hacer? Se lo pregunto ya que usted se encuentra en ese lugar.

JG – Yo estoy en conocimiento de esto desde el miércoles pasado, porque el ministro de Defensa me llamó y me puso en conocimiento de la denuncia y del video. Y la semana pasada, apenas empezó a saberse la existencia del video, yo había señalado que había un trípode de decisiones que había que adoptar para dar esta señal inmediata. La primera es que a estas personas que participaron en estos actos se los traiga al país. Se me explicaba que Naciones Unidas no liberaba su repatriación hasta tanto no terminara su investigación, que Uruguay no podía traerlos forzosamente porque eso podía ser considerado como una obstaculización a la investigación. Creo que es una explicación correcta. El ministro nos informó que esa autorización ya había sido brindada en el mediodía de ayer. Así que a pesar de lo que dicen los diarios hoy, por lo que nos informó el ministro, que tenía el documento en la mano, ayer al mediodía estaban autorizados para ser repatriados.

Segundo, el pasaje a la Justicia tanto militar como civil penal. Será ella la que estudie la eventualidad de la existencia de delito. El régimen jurídico que impone la participación en las misiones de paz  se da a través de diferentes convenios. Uno de ellos establece que el juzgamiento por actos de este tipo debe hacerlos la Justicia del país contribuyente, es decir el que contribuye con fuerzas. En este caso Uruguay es contribuyente, por lo tanto se dará el pasaje a la Justicia penal y a la Justicia militar. El ministro nos informó que la Armada había pasado el caso a la Justicia militar y que él lo iba a hacer hoy a la Justicia penal.

Y tercero creo que hay que dar inmediatamente de baja a estas personas. No son personas dignas de vestir el uniforme que nos representa a todos, porque empañan ese uniforme. Debemos dar una señal de que en nuestras Fuerzas Armadas no puede haber integrantes que hagan esto. Y tiene que servir también como mensaje y como señal muy fuerte hacia el resto de la sociedad, específicamente a las Fuerzas Armadas.


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