(emitido a las 7.42 Hs.)

EMILIANO COTELO:
El ministro de Economía y Finanzas, Fernando Lorenzo, se reunió ayer con el senador y líder de Alianza Nacional, Jorge Larrañaga, para analizar la situación que Uruguay vive en estas horas con Francia, luego de que el viernes el presidente Nicolas Sarkozy acusara a Uruguay de ser un paraíso fiscal y además lo amenazara, junto a otras jurisdicciones, con la posibilidad de ser apartado de la comunidad internacional.

Se trató de la primera de una serie de reuniones que el ministro Lorenzo piensa mantener por este mismo asunto con otros dirigentes. Concretamente, figuran en la agenda el senador nacionalista Luis Alberto Heber y el senador colorado Pedro Bordaberry. Con ambos los encuentros tendrán lugar luego de que Lorenzo regrese de Brasil, adonde viaja hoy en una comitiva oficial que acompaña al presidente José Mujica.

El senador Larrañaga está en línea telefónica en este momento.

Usted había sido informado el viernes de los pasos que pensaba dar el Gobierno cuando conoció el discurso del presidente Nicolas Sarkozy al cierre de la cumbre del G20.

JORGE LARRAÑAGA:
Sí, habíamos tenido información por parte del presidente del Directorio [del Partido Nacional], el senador [Luis Alberto] Heber, quien se había comunicado con el presidente José Mujica. Desde antes de la declaración de Sarkozy teníamos una reunión pactada con el ministro de Economía, que mantuvimos en el día de ayer, para analizar la situación que el país tiene frente a este Foro de Transparencia de evaluación entre pares, que determina un conjunto de obligaciones en el marco de la cooperación en el intercambio de información.

EC - ¿Usted dice que la reunión del día de ayer ya estaba programada de antes?

JL - Sí, había sido marcada antes de que detonaran las declaraciones del presidente de Francia. Pero obviamente estaban atadas a la situación que estaba subyacente antes de las propias declaraciones del presidente francés.

EC - Y ahora que se reunió con el ministro Lorenzo, ¿en qué medida cambió su panorama? ¿Cuáles fueron las conclusiones que sacó?

JL - La conclusión es que el G20 sigue cambiando el arco de exigencias. Tengo la sensación de que ya no es necesario el tema de los doce tratados con doce países, como en su momento se expresó, para salir de esta lista del G20. Creo que se necesita un doble nuevo condicionamiento. Primero, la titularidad de los bienes en el país. Segundo, la firma de tratados con países relevantes. Y los países relevantes no son otros que Argentina y Brasil. Acá no se puede tapar el sol con un dedo...

EC - ...¿Quién está tapando el sol con un dedo?

JL - Los que lo estén haciendo. Desde el Gobierno se expresado poco menos que toda la responsabilidad de este tema la tiene el presidente de Francia. Más allá de que las declaraciones del presidente de Francia son inaceptables, coloniales, imperiales, propias de un mandatario que está en una zona con una enorme crisis que amenaza con reventar. Porque a lo de Grecia se le puede sumar lo de Italia, además han manejado espantosamente mal la situación de la crisis y las políticas fiscales, ha habido una ausencia de decisiones políticas, con marchas adelante y marchas atrás, y no tienen autoridad como para transformarse en fiscales del mundo.

Pero más allá de todo –y a confesión de parte relevo de prueba–, si usted entra en la página de la Presidencia argentina se da cuenta, desde hace ya unos cuantos días, de una reunión entre la señora presidenta de los argentinos y el presidente de Francia sobre el tema del G20. También de la aceptación por parte del propio canciller argentino con respecto a haber recibido el encargo de la presidenta Cristina Fernández sobre trasladar al G20 su lucha por las guaridas fiscales.

Además, en la conversación de ayer con el ministro de Economía nos enteramos de que quien trasladó formalmente la problemática de Uruguay al G20 es el Brasil. Entonces no podemos hacernos...

EC - ...¿Eso fue reconocido por el ministro de Economía, Fernando Lorenzo?

JL - Eso lo conversamos ayer y creo que salió también en algunos otros portales, esa información está. Tenemos un problema que encarar en la región. Nada más ni nada menos que el presidente pro tempore del Mercosur, el presidente Mujica, representante del Uruguay, está acusado por un grupo de países de [estar al frente de] paraíso fiscal. Se impone un sinceramiento con los socios del Mercosur, no podemos seguir jugando distraídamente. ¿Cómo se puede aceptar que, por un lado, el canciller Almagro exculpe a la Argentina y al Brasil y el vicecanciller diga exactamente lo contrario?

EC - Cuando lo entrevistamos ayer aquí En Perspectiva y le planteamos la inquietud de la oposición en cuanto a que Argentina y Brasil podían estar detrás del discurso de Sarkozy del viernes, el vicecanciller Roberto Conde respondía: "Eso no me consta, pero lo que sí veo claro es que Argentina y Brasil usan al G20 para presionar a Uruguay en busca de los acuerdos de intercambio de información tributaria".

JL - Sin duda. Yo creo que tenemos un enorme problema, porque el mundo internacional, los países en desarrollo acuciados por las crisis, con la necesidad creciente de tener excusas para buscar recursos de cualquier manera, empiezan a sindicar listas de países. Fíjense qué contrasentido: todas las exigencias que se le plantearon a Panamá fueron cumplidas por Panamá, e increíblemente Panamá figura en la lista en el discurso del presidente de Francia.

Tenemos un problema país importante, grave. Además se nos va a plantear, inexorablemente, estar en el marco de la cooperación. Lo cual significa estar en el conjunto de países que conservan los estándares que exige ese fondo de evaluación entre pares que se llama Fondo de Transparencia, que es una organización cercana a la OCDE y que está en el G20. De lo contrario, vamos a estar expuestos a sanciones de muchos países en cuanto a nuestras exportaciones. Esto es real, esto es indiscutiblemente así. Un país como el nuestro, gobernado por el Frente Amplio (FA), va a tener que resolver los pasos sobre si acepta o no la imposición colonial e imperial de prepotencia de un conjunto de países que le quiere imponer al Uruguay...

EC - ...Usted habla de "imposición colonial e imperial", pero por el razonamiento anterior en esa jugada está incluyendo a Argentina y a Brasil.

JL - Lo que pasa es que Argentina y Brasil son indiscutiblemente los que están detrás de esto.

EC - Estarán o no detrás del discurso textual que pronunció el presidente Sarkozy, pero usted insiste en que están promoviendo que a Uruguay se lo emplace a llevar adelante este tipo de acuerdos.

JL - Pero es que no lo dice este senador, lo reconoció el canciller [argentino Héctor] Timerman ayer, cuando aceptó que había recibido la orden de la presidenta argentina de luchar contra las guaridas fiscales, lo cito textual...

EC - ...Entonces, ¿qué es lo que hay que hacer? ¿Cuál entiende usted debe ser la respuesta del Gobierno para manejar esta situación? No sólo la crisis diplomática con Francia, sino el conjunto de problemas.

JL - La crisis diplomática con Francia es una cosa de la cual todavía Francia no se enteró. Si usted entra a los portales de los periódicos franceses, no existe.

EC - Sí, el tema no existe en la prensa francesa.

JL - No existe en la prensa francesa, ni en las funerarias, ni en las deportivas, esta es la realidad. Acá nos van a exigir dos condicionantes claras. Primero, la titularidad de los bienes. Esto pasa por el tema de la modificación o no de las sociedades anónimas al portador, del tema de los depósitos y de si todo esto se ampara bajo el régimen de secreto tributario. Y segundo, la firma de tratados con países relevantes. Y más allá de lo que hemos firmado y de los que podemos firmar, si no se firma con Argentina y con Brasil no vamos a salir de este lío...

EC - ...El Gobierno sostiene que tenemos que firmar con Argentina y con Brasil, pero agrega que el tema de estos acuerdos hay que inscribirlo dentro de una larga lista de asuntos que debemos negociar y mejorar en la relación dentro del Mercosur, que este no puede ser un asunto aislado.

JL - Correcto, pero yo le estoy describiendo simplemente cuáles son los problemas que tenemos.

EC - Y yo le estaba preguntando sobre cómo entiende usted, desde la oposición, que debe manejarse esta situación.

JL - Eso es harina de otro costal. Primero, me parece que el presidente Mujica, como presidente del Mercosur, está en el peor de los escenarios. Debe convocar al Mercosur a la brevedad para sincerar esta situación con toda claridad. ¿Cómo se sale? A mí me parece que con un tratado multilateral de doble tributación y de intercambio de información entre todos los países del Mercosur. Esa es la solución. ¿Que va a ser compleja? Va a ser compleja. ¿Que puede recibir el respaldo de los partidos de la oposición? Bueno, vamos a ver. El FA tiene mayorías parlamentarias, veamos las condiciones...

EC - ...¿Pero usted entiende que está bien la idea de negociar estos temas a cambio de otras demandas que Uruguay tiene pendientes, que formula y no tienen solución en la relación con Argentina, con Brasil y con el funcionamiento del Mercosur?

JL - Las estrategias no deben confesarse en forma pública, pero es evidente que hay que revisar todo el funcionamiento del Mercosur. ¿Cómo es posible que sigamos aceptando transar por intercambio de información y todo el resto del Mercosur siga funcionando como está funcionando? Me parece un verdadero contrasentido. Creo que aquí tenemos dificultades de toda índole. La oposición ha intentado e intenta ayudar al país, no se puede expresar lo contrario.

EC - En las últimas horas la senadora Lucía Topolansky, por ejemplo, ha sostenido que las declaraciones que han hecho varios líderes de la oposición en el fin de semana implican un "sabotaje" a la estrategia que el Gobierno viene siguiendo para el mejoramiento de la relación con Argentina y con Brasil.

JL - Entonces que se lo diga en primer lugar al vicecanciller Conde, que dijo algo similar. Pero además que se lo exprese al canciller Timerman, que lo aceptó contundentemente. Que se lo diga a la página oficial del Gobierno de Argentina, que si usted ahora entra ve la reunión de Sarkozy con su señora y la presidenta de los argentinos, hablando sobre lo que iba a acontecer dos o tres meses después, en la reunión de la semana pasada del G20. No somos nosotros los que estamos saboteando al Uruguay por argumentar la tesis de que todo el mundo sabe que la Argentina y Brasil están detrás de todo esto.

EC - Para terminar, en la reunión de ayer, y en este contexto tan enrarecido desde todo punto de vista, ¿quedó abierto un canal para que efectivamente el Gobierno dialogue con la oposición a efectos de definir una estrategia de negociación de estos temas?

JL - Yo creo que se impone, me parece que es prioritario. Ayer yo fui simplemente a escuchar, porque entre otras cosas tendrá que ir el presidente del Directorio del Partido Nacional (PN) y tendremos que analizar dentro del PN los pasos que vamos a dar.

También me parece que una vez agotada la ronda de información por parte del ministro de Economía con todos los referentes políticos de todos los partidos -PN, Partido Colorado, Partido Independiente- se impone que el presidente Mujica convoque a los referentes de todos los partidos para darle un estado de situación, de primera mano, con el objetivo de ver cómo nos conducimos. Porque todo esto puede tener consecuencias gravísimas para el país. Esto no termina en un incidente diplomático donde llamamos al embajador, conversamos con él y repudiamos las declaraciones del presidente Sarkozy. No, el problema lo tenemos en el vecindario, el problema lo tenemos con nuestros socios comerciales, quienes asistieron al G20. Y si bien en la declaración no está la lista de los países que después mencionó el presidente de Francia –tenemos los documentos, ayer recibimos toda la información en la materia– es evidente que esa lista salió consensuada. Por algo la leyó el presidente Sarkozy en su alocución como anfitrión de la reunión.


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