Cancillería aún no otorgó reunión a embajador británico
La Cancillería uruguaya aún no ha otorgado la audiencia pedida por Gran Bretaña por la prohibición uruguaya de que buques con la bandera de las Islas Malvinas ingresen al puerto de Montevideo.
Además, el representante uruguayo en el Reino Unido, el embajador Néstor Moreira, fue convocado para conocer de primera mano los motivos por los que Uruguay no permitirá el ingreso, para su aprovisionamiento, de buques de bandera de Malvinas. Es la tercera vez que este hecho ocurre en administraciones del Frente Amplio, una de ellas a pedido expreso del Gobierno argentino.
La polémica se instaló por la reciente prohibición que afectaría a unos 34 buques, pero en el pasado reciente hubo otras decisiones adoptadas en igual sentido.
El pasado 21 de setiembre de 2010, el Gobierno de José Mujica le prohibió, por segunda vez en el Gobierno del Frente Amplio, el ingreso al puerto local de un buque de guerra británico en tránsito hacía las islas Malvinas.
En cumplimiento de un pedido del Estado argentino en 2006 de quitar apoyo a busques británicos, la decisión afectó a la fragata de la marina HMS Gloucester D-96 que buscaba abastecerse en nuestro país.
El buque había zarpado el 20 de agosto de 2010 desde Portsmouth el destructor HMS Gloucester de la Marina Real y se trataba de un destructor Tipo 42, con capacidad para 280 hombres y mujeres que tenía como objetivo "proteger los intereses británicos alrededor de las Islas Malvinas y Georgias del Sur, en el Atlántico Sur", según la agencia de noticias Mercopress.
En ese momento, el gesto fue elogiado por la presidenta Cristina Fernández, que ese mismo 21 de setiembre se lo agradecía a Mujica a través de un video difundido en su cuenta Twister.
Pero esta situación se había vuelto a dar en el Gobierno de Tabaré Vázquez, enfrentado a Argentina por la instalación de la exBotnia. Fue el 11 de diciembre de 2007, al día siguiente que asumiera por primera vez Cristina Fernández, y en medio de un diferendo duro, que Uruguay tomó esa determinación.
En ese momento, el Gobierno argentino se mostró "muy satisfecho" por la decisión del entonces presidente Tabaré Vázquez de no permitir que un buque de guerra británico se abastezca de combustible en el puerto de Montevideo, en su trayecto hacia las Islas Malvinas.
En ese momento la agencia de noticias Télam, citando fuentes oficiales de su país, explicó que la resolución uruguaya fue en respuesta a un pedido de la cancillería argentina, cursado el viernes 7 de diciembre de 2007, ante la noticia de que un buque de guerra británico haría una parada en el puerto de Montevideo.
Se trataba del buque de guerra británico "HMS Nottingham", un destructor Tipo 42 que es utilizado como elemento "disuasivo" para "mantener" la soberanía británica sobre las islas.
Como resultado, el buque de guerra británico no pudo abastecerse de combustible y quedó claro el apoyo uruguayo a los reclamos argentinos de soberanía sobre las Islas Malvinas.
El buque formaba parte de la presencia británica en el Atlántico Sur e iba a permanecer en las Islas Malvinas alrededor de siete meses.
Al comunicado de la Embajada de Gran Bretaña en Uruguay se sumó un pedido de entrevista que su representante realizó al Canciller Luis Almagro.
Según pudo saber El Espectador, por el momento no hay audiencia concedida.
El tema sería abordado por los presidentes en la Cumbre del Mercosur, que comienza este martes en Montevideo, dado que la resolución de impedir estos aprovisionamientos forma parte de una resolución de Unasur que tiene un año.