Entrevistas

Germán Cardoso (PC): proyecto de desarme "es una herramienta de acción concreta que va a contribuir enormemente"

Germán Cardoso (PC): proyecto de desarme "es una herramienta de acción concreta que va a contribuir enormemente"

Por un lado, el Gobierno prepara un proyecto de ley que penaliza el porte y tráfico de armas. Por otro, en mayo de 2011 el diputado del Partido Colorado (PC) Germán Cardoso presentó un proyecto de ley que sanciona con entre tres y 24 meses de prisión la tenencia de armas por parte de personas que tengan antecedentes penales o que estén sujetas a un procedimiento penal aún sin clausurar. En Perspectiva entrevistó a Cardoso, quien explicó que el proyecto que presentó al Parlamento "se encuadra dentro del marco de acción de la delincuencia que ha llevado al acorralamiento de los trabajadores, de los comerciantes y de la gente honesta, que como respuesta se ha armado para defenderse". Además, dijo que "es una herramienta puntual de acción concreta que va a contribuir enormemente a contener el delito". El legislador aclaró que si bien "la gente tiene derecho a defenderse", su sector no alienta "que se arme". El integrante del sector Vamos Uruguay informó que "más del 50% de los delitos que son cometidos en el país hoy con armas de fuego se hacen con armas provenientes del mercado ilegal", y opinó que es "fundamental que la policía, en su función de proteger al resto de la sociedad, desarme de una buena vez por todas de manera eficaz a la delincuencia". Cardoso expresó que considera posible unificar ambos proyectos y que celebra "que se esté elaborando en el mismo sentido, con alguna diferencia de matiz, un proyecto de estas características en el Poder Ejecutivo".


(emitido a las 8.40 Hs.)

EMILIANO COTELO:
El ministro del Interior, Eduardo Bonomi, sostiene que hay que "rebajar la cantidad de armas que existe en el país".

El lunes pasado en el diario El Observador, Bonomi se detuvo en un proyecto de ley que está preparando el Gobierno y que penaliza el tráfico y el porte de armas, algo que entiende sería muy útil para evitar asesinatos, sobre todos aquellos que se dan entre familiares o personas que se conocen de antemano, de los cuales ocurrieron varios en los primeros días de este año. Y después de fundamentar esa iniciativa agregó: "Que se hagan cargo de las muertes entre conocidos quienes llamaron a armarse". El periodista le preguntó si aludía en particular al senador Pedro Bordaberry. "Fue uno de los que más llamaron a armarse", respondió el ministro.

La reacción del líder de Vamos Uruguay (VU) se conoció el mismo lunes de mañana, vía Twitter. Allí Bordaberry salió en defensa de la posición de su sector y, junto con varias críticas y reclamos de renuncia al ministro Bonomi, recordó que desde mayo del año pasado está demorado en el Parlamento un proyecto del diputado Germán Cardoso que penaliza la tenencia de armas para aquellas personas que cuenten con antecedentes penales o que tengan un procedimiento penal sin clausurar.

¿Qué ha pasado con ese proyecto? ¿Hay alguna posibilidad de compatibilizar ese texto con el que promueve el ministro del Interior?

Para ocuparnos del tema, estamos en diálogo con el diputado de VU, Partido Colorado, Germán Cardoso.

El proyecto que usted presentó penaliza la tenencia de armas pero solo en dos situaciones muy concretas: en caso de personas que tengan antecedentes penales o que estén sujetas a un procedimiento penal aún sin clausurar. ¿Por qué eligió este camino?

GERMÁN CARDOSO:
Es un proyecto de ley que se encuadra dentro del marco de acción de la delincuencia que ha llevado al acorralamiento de los trabajadores, de los comerciantes, de la gente honesta, que como respuesta se ha armado para defenderse, y a partir de estas situaciones se han dado hechos de violencia que ninguno desea. Ningún miembro de esta sociedad naturalmente está a favor de que sucedan hechos violentos, pero tenemos que ser absolutamente conscientes de la realidad que nos toca vivir y de lo que está pasando en el Uruguay de hoy, y sobre esa base tomar medidas y soluciones prácticas.

Esta fue la herramienta que en mayo del año pasado –parecería que el ministro Bonomi no se ha enterado– presentamos, este proyecto de ley que regula la penalización para las personas que tengan antecedentes penales, que estén inscritas en el registro de antecedentes por un período no mayor de cinco años o que tengan causas judiciales abiertas al momento de ser detenidas. Es un proyecto que va en el sentido de la protección de la vida, que apunta de manera clara y contundente a desarmar a la delincuencia en aras de proteger a la población honesta, a la gente de bien.

EC - ¿Cuánto entiende que una disposición normativa como esta puede aportar a la protección efectiva de la gente?

GC - Sucede que más de la mitad de los delitos, más del 50% de los delitos que son cometidos en el país hoy con armas de fuego son cometidos con armas provenientes del mercado ilegal, es decir, por gente que no está autorizada a portar armas y que las ha obtenido en el mundo delictivo. Entonces nos parece fundamental ser muy firmes allí y que el Estado, que la policía en este caso, en su función de proteger al resto de la sociedad, desarme de una buena vez por todas de manera eficaz a la delincuencia. Porque a partir de las armas de fuego y la tenencia de ellas se comete una inmensa cantidad de delitos, la enorme mayoría de los delitos que suceden en el Uruguay hoy. Elaboramos este proyecto para penalizar a estas personas, cuando se las individualiza, con de tres a 24 meses de prisión.

EC - Hay hechos de violencia protagonizados con armas por personas que no tienen antecedentes penales o que no están procesadas. Ese tipo de situaciones no quedarían prevenidas con un castigo como el que usted propone con esta ley.

GC - No, desde luego, este proyecto no prevé todas las situaciones que se den en la sociedad, a nuestro juicio es una herramienta puntual de acción concreta que va a contribuir enormemente a contener el delito. Para juzgar y penar a las personas que utilizan armas y cometen delitos sin cumplir con lo que reglamenta la ley para tenerlas, existen diversos mecanismos jurídicos, en ese sentido no tenemos que innovar en la materia.

EC - Se lo pregunto porque el ministro Bonomi ha declarado que el Gobierno procura un desarme más amplio de la población que el que usted promueve. Cuando lo entrevistamos aquí En Perspectiva el 19 de enero, Bonomi explicaba que, por un lado, se propone convertir en delito la tenencia de armas sin permiso, que hoy solo es una falta.

(Audio Eduardo Bonomi.)

"... pero el proyecto que elaboramos, que en este momento está en estudio en Presidencia de la República en la Jurídica, no abarca solo la tenencia, abarca también la venta, el tráfico, y considera eso delito. Hoy se va a la feria y se compra un arma, es muy fácil, y se evaden todos los requisitos que actualmente hay que cumplir para poder tener un arma; la compra en la feria y se terminó. Eso es lo que queremos evitar. Se entiende que hay gente que tiene razones para tener un arma; en ese caso tiene que cumplir con determinados requisitos que son estrictos y capaz que se hacen más estrictos. Quien tiene esa necesidad la justificará y podrá tener un arma. Pero no con la facilidad que hay. Además se considerará una falta tener un arma arriba, portarla, llevarla con uno, porque eso facilita que se cometa determinado tipo de delitos."

(Fin.)

EC - ¿Qué piensa usted de un proyecto de ese tipo, como el que ya hace algunos días maneja el ministro?

GC - Que el ministro del Interior, el principal responsable de la seguridad pública de este país, diga que hoy en cualquier feria se puede obtener un arma y no pasa nada suena patético. Que mande la policía a las ferias y que requisen las armas. A esta altura, luego de más de dos años de gestión, está probado el fracaso total y contundente de la aplicación de las políticas de seguridad y sobre todo de lo que él tiene que hacer, que es brindar seguridad, tranquilidad y convivencia pacífica a toda la sociedad y el país. Que haga precisiones de esta naturaleza... Parecería que estuviera hablando un vecino más y no el principal responsable de aplicar el derecho y proteger a todos los uruguayos mediante la conducción de la Policía nacional. Naturalmente estamos de acuerdo en proponer más leyes, en ser más severos con la delincuencia.

EC - Usted mismo señalaba hace unos minutos que muchas veces el delincuente opera con un arma que obtuvo de manera irregular, por ejemplo en un robo o que compró en el mercado negro. El proyecto apunta a que la venta de ese tipo de armas, por ejemplo en una feria, sea un delito, en eso enfatizaba el ministro.

GC - Por supuesto que allí estamos de acuerdo, pero lo que me parece más cuestionable es que el ministro diga, con la tranquilidad con que lo dice, que en cualquier feria se obtiene un arma de fuego. Más allá de la tipificación delictiva, que estamos de acuerdo en endurecerla, en ser muchísimo más severos en el control de estas situaciones, de cualquier manera la policía hoy debe ir a esas ferias, si el ministro lo está diciendo en los términos en que lo dice. Estamos ante un problema muy serio, que es el recrudecimiento de la inseguridad, pero fundamentalmente de la violencia, las estadísticas lo están dando. En una sociedad de 3,5 millones de habitantes como la nuestra nos parece poco creíble, poco sostenible que la situación esté fuera de control como está. Estamos en una curva del aumento delictivo, fundamentalmente de los delitos relacionados con la violencia, un aumento del orden del 40 y el 50%.

Hay que ser claros y contundentes. El ministro todos los días hace anuncios que son puro humo, para la tribuna, parecería que quiere hacer parecer que está innovando en la sociedad uruguaya con cosas que ya son aplicables y que existen. En las últimas horas ha hablado de quitarles la patria potestad a los padres de menores que cometen delitos. Esa es una herramienta jurídica que existe en el Uruguay desde el siglo XIX y está vigente. Entonces, ¿en qué está innovando el ministro?, ¿de qué está hablando? A esta hora lo que nos queda por concluir es que el ministro habla de humo permanentemente, genera situaciones de noticia y de iniciativa, que se está estudiando tal situación o tal otra, cuando lo que pretende es desviar la atención, porque su función al frente del Ministerio del Interior (MI) es patética a esta altura. Habla y ataca a la oposición y a los medios de comunicación para hacerlos responsables del recrudecimiento de la actividad delictiva, y él mismo se contradice notoriamente.

EC - ¿En qué se contradice, por ejemplo?

GC - El ministro Bonomi es un fiel representante de la premisa que ha impuesto el presidente Mujica: "Así como te digo una cosa, te digo la otra". Fue el propio ministro Bonomi quien el 1º de octubre del año 2010 al Canal 12 dijo textualmente: "No me animo a decirle a la gente que se desarme ni me animo a decirle que se arme. La policía tiene que mejorar la seguridad pública, hay situaciones que todavía no hemos podido controlar, y si las personas tienen autorización para tener un arma la habrán obtenido de acuerdo con la reglamentación vigente, y yo no me animo a decirle que no la use. No me animo a decirle a la gente que se desearme, o no me animo a decirle que se arme".

Entonces, si el propio ministro –es textual lo que le acabo de leer, Canal 12, 1º de octubre del año 2010–, meses después de esto, sale a atacar y a decir que tienen que hacerse responsables quienes de alguna manera han incitado a que la gente se arme o a que tenga armas en su poder, cuando el máximo responsable de la seguridad pública de este país ha hecho las declaraciones que hizo hace algunos meses, como le he leído, esto habla a las claras de que el rumbo y conducción de la seguridad no tiene dirección clara en este país. Un día se hacen declaraciones en un sentido, otro día se hacen declaraciones en otra.

EC - ¿Cuál ha sido la posición de VU Uruguay en esta materia, en cuanto a armarse o no armarse? ¿Usted en particular cómo se ha movido?

GC - Creemos que la gente tiene derecho a defenderse, no estamos alentando que la gente se arme, sino que comprendemos una situación que es clara, que es muy compleja y que se da a partir de los hechos de violencia a los cuales están siendo sometidos miles de trabajadores, miles de comerciantes y cualquier ciudadano, peatón, gente inocente común y corriente que se ve involucrada de manera involuntaria en hechos de violencia que se dan a lo largo y ancho de todo el país todos los días. Ayer una persona de 80 años en Malvín murió de un infarto a partir de un hecho delictivo que se dio, no por el hecho delictivo en sí, sino por el susto o la complejidad de la situación. Y así podemos citar infinidad de hechos. Esto hace a que la gente responda naturalmente, que quiera defender sus bienes, su familia, protegerla, su trabajo.

EC - Pero eso después tiene consecuencias como las que hemos visto. Por ejemplo, un padre que termina matando a su hija por creer que es un delincuente que ha ingresado a su casa en horas de la noche. O estos enfrentamientos intrafamiliares o entre conocidos o vecinos en una feria que se han dado.

GC - Por supuesto, estamos totalmente de acuerdo. Nosotros no incitamos a la gente a que se arme, sí decimos que comprendemos la situación que está viviendo la sociedad del Uruguay de hoy. Y a partir de determinados hechos se dan otros, como bien dices tú. Lo ideal sería que la policía fuera contundente en la lucha contra el delito y que no existieran los niveles de violencia y rapiña que existen hoy para que la gente no tuviera que tomar los recaudos que está tomando. Y no los está tomando porque se lo digamos o se lo dejemos de decir, lo hace de forma natural, responde a una reacción inherente al ser humano de querer defenderse, querer proteger a su familia, a sus hijos, su trabajo, sus pertenencias, que ha logrado con enorme sacrificio.

EC - ¿Usted en particular cómo hace, cómo se mueve en esa materia? ¿Tiene un arma?

GC - Sí, yo tengo un arma. Por supuesto, no la uso, no la he tenido que usar, pero es una decisión personal. Con esto no estoy incitando a nadie a armarse ni a dejar de hacerlo, es una decisión que he tomado legalmente, cumpliendo con los requisitos que marca la ley. Y así lo he hecho, porque la convivencia en sociedad está regulada por el Estado de derecho, por las normas jurídicas, y todo lo que se hace al apego de hechas está aceptado por la sociedad.

EC - ¿Y esa arma usted la tiene en su casa o habitualmente se mueve con ella? ¿Cómo es?

GC - La tengo en mi casa para defender a mi familia.

***

EC - Volviendo a su proyecto, ¿qué ha ocurrido con él en el Poder Legislativo desde que lo presentó?

GC - Lamentablemente, lo que ha ocurrido con la mayoría de los proyectos de ley que presenta la oposición: no ha tenido tratamiento parlamentario. Está en comisión desde que fue presentado y no ha sido sometido a estudio, ni a discusión, ni a debate. Es más, presumo que el ministro del Interior ni siquiera está en conocimiento de este proyecto de ley, lo cual también habla a las claras de la gravedad en la que estamos inmersos en la conducción de la política de seguridad. No hay estudio, no hay conocimiento de los proyectos, de las iniciativas. Nosotros siempre hemos estado abiertos al diálogo. De hecho, si desde la oposición, más allá de la visión crítica de la situación –que tenemos todo el derecho del mundo a tener–, presentamos un proyecto de ley, estamos puntualmente dando a público conocimiento una herramienta constructiva que a nuestro juicio va en aras de mejorar la situación de seguridad pública y de violencia que se da en los delitos en el Uruguay que nos toca vivir.

EC - ¿Ve alguna posibilidad de unificar su proyecto con este otro que según se adelanta está elaborando el Poder Ejecutivo?

GC - Por supuesto que sí, y yo celebro que se esté elaborando en el mismo sentido, con alguna diferencia de matiz, un proyecto de estas características en el Poder Ejecutivo. Desde luego que estamos dispuestos a analizarlo, conversarlo, intercambiar, como lo hemos estado siempre. Otro de los ataques permanentes del ministro que responde a su inoperancia en la gestión de la política de seguridad y la justifica es la apelación a la oposición y a los medios de comunicación diciendo que no hay propuestas. Nosotros hemos sido el sector político que más propuestas ha presentado, les presentamos 50 medidas concretas en materia de seguridad pública al expresidente [Tabaré] Vázquez y a la exministra [Daisy] Tourné en el año 2008, que están a disposición de quien las quiera estudiar, interpretar.

Y a partir de que asumimos en esta legislatura, en el año 2010, hemos presentado una infinidad de proyectos que contienen esas 50 medidas que pusimos a consideración del Gobierno anterior. Por ejemplo, está a estudio del Parlamento, en las comisiones, a disposición del ministro Bonomi y de todo el Gobierno, la creación de un nuevo instituto nacional penitenciario separado de la órbita del MI, para que las cárceles reeduquen, rehabiliten, porque allí también se explica gran parte de la reincidencia delictiva y la violencia que nos toca vivir en el Uruguay de hoy. La baja de la edad de imputabilidad, hacer responsable penalmente a partir de los 16 años por los delitos de homicidio, rapiña, violación, secuestro, propuesta que el Gobierno se ha negado a tratar, lo cual significó que hayamos tenido que salir a recolectar firmas en un esfuerzo significativo. Hemos presentado decenas de proyectos de ley que están en el Parlamento a estudio, no se puede decir que no hay propuestas. Se falta a la verdad una vez más, y se apela al mecanismo más facilista para justificar lo que a esta altura es una gestión patética del ministro Bonomi.

EC - Teniendo en cuenta el clima en que ha quedado sumida la relación entre VU y el ministro Bonomi, ¿todavía es posible pensar en intercambio, en cooperación, en diálogo, en negociación para sacar adelante determinados proyectos? Ustedes están exigiendo lisa y llanamente la renuncia del ministro.

GC - Vendrá otro ministro, no vamos a dejar al país sin ministro del Interior. Lo que estamos reclamando de manera drástica es un cambio en el rumbo y dirección de las políticas de seguridad, que está probado que ha sido un fracaso absoluto en el tiempo que llevamos de Gobierno. No nos vamos a negar jamás a dialogar, a contribuir a dar nuestras opiniones. De hecho, ya están materializadas en lo que le señalaba recientemente, en los proyectos de ley que hemos presentado y que están a disposición del Parlamento nacional. Tenemos un grupo de compañeros técnicos que trabajan permanentemente en el análisis de las estadísticas del delito, en los cambios en la legislación que se deberían introducir para colaborar con lo que definitivamente tiene que lograr el Gobierno, que es la convivencia pacífica de la sociedad, pacificar una sociedad que se ha vuelto cada vez más violenta y que en los últimos ocho o 10 años, como las estadísticas están demostrando. Con negar esa realidad, con atacar a la oposición, con atacar a los medios de comunicación que dan a público conocimiento lo que está pasando en Uruguay en materia delictiva no se va a ganar nada. Y esa es la actitud destructiva, a nuestro juicio, que el ministro Bonomi ha asumido en los últimos tiempos.

EC - Pero en particular con respecto al tema del desarme, de iniciativas que propongan un mayor desarme de la sociedad uruguaya, por lo que decía, usted está dispuesto a considerar algunas de las medidas que impulsa el MI. Por ejemplo, ¿le parece bien que se tipifique como delito la tenencia de armas sin permiso y le parece bien que se sea más restrictivo en la concesión de esas licencias para tenencia?

GC - Me parece rebién, no bien, recontrabién, estoy absolutamente de acuerdo.

EC - Se lo pregunto, porque eso implicaría que muy pocas personas y por razones muy especiales podrían tener armas, no cualquiera. Por ejemplo, el caso suyo podría quedar afuera de esa hipótesis.

GC - En la medida en que la ley así lo marque, por supuesto que estaremos dispuestos a someternos a lo que marque. Y estamos absolutamente de acuerdo en votar, intercambiar opiniones sobre una iniciativa de estas características, a lo que hay que sumar el esfuerzo y la acción de la policía en la lucha frontal contra el delito para abatir los índices delictivos, porque de nada servirá desarmar a la gente honesta en la teoría y que la delincuencia siga en un virulento accionar. Eso es lo que pretendemos con nuestro proyecto de ley. Y a partir de lo que dijo el ministro en las declaraciones a su medio que usted me hizo escuchar, que mande la policía a la feria, porque el ministro no puede decir campante y sonante que en cualquier feria de Montevideo se compran armas en el mercado ilegal. Si está en conocimiento de eso está incurriendo en una omisión de sus deberes al frente del cargo que desempeña, lo cual habla a las claras de la dirección de la sociedad de este país con un ministro que no da garantías absolutamente a nadie, que reconoce que sabe las cosas que están pasando pero parecería que habla de delitos, rapiñas, homicidios, venta ilegal de armas como quien habla de aspirinas o de caramelos.

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Transcripción: María Lila Ltaif