Martha Montaner (PC): "Los hombres del PC apostaron a que una mujer liderara, y yo estoy dispuesta a liderar"
Por primera vez en la historia, una mujer ocupa el cargo de secretaria general del Partido Colorado (PC). Se trata de Martha Montaner, quien ya ha sido diputada por Tacuarembó en tres legislaturas. Esta odóntologa pediátrica de 52 años, que también fue secretaria general del Comité Ejecutivo Departamental de Tacuarembó durante 15 años, permanecerá en ese puesto por un año, ya que es rotativo entre los integrantes de Vamos Uruguay (VU) desde que el líder del sector, Pedro Bordaberry, instauró este sistema. En conversación con En Perspectiva, Montaner expresó que su designación "ha sido una actitud muy importante de cambio y de renovación" que apuesta "a acciones concretas que demuestran que el PC ha sido el primero en hacer eso".
(emitido a las 8.39 Hs.)
EMILIANO COTELO:
La del jueves pasado fue una sesión muy particular la del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Colorado (PC). La sala de reuniones estaba repleta, con la presencia, incluso, de algunos representantes de otros partidos. Y, sentados a la mesa, los principales referentes colorados actuales junto a los expresidentes Julio María Sanguinetti y Jorge Batlle. No era para menos: ese día por primera vez en sus 175 años de historia, una mujer era investida en el cargo de máximo nivel dentro del PC.
Martha Montaner, una odontóloga pediátrica de 52 años, madre de tres hijos y con 12 años de experiencia ya como diputada, asumió este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, como nueva secretaria general. Lo hará por un año, a ella le ha tocado en este 2012 asumir ese cargo, que es rotativo entre integrantes de Vamos Uruguay (VU) desde que el líder del sector, Pedro Bordaberry, instauró este sistema.
Esta mañana está con nosotros en los estudios de El Espectador.
Usted no es nueva en política. Este es su tercer período como diputada por Tacuarembó. Ingresó por primera vez en 1995.
MARTHA MONTANER:
Sí, en política es mi tercera legislatura, la cuarta legislatura la perdí en el 2004, cuando el PC atravesó una situación difícil, por 21 votos. También tuve el gusto y el honor de ser la secretaria general del Comité Ejecutivo Departamental de Tacuarembó durante 15 años, de ser convencional nacional, de ser elegida titular del CEN.
EC - Tiene toda esa experiencia atrás, sin embargo parece bastante claro que a partir de su nombramiento como secretaria general del PC adquiere de golpe una visibilidad a nivel nacional que seguramente no tenía. ¿Su vida cambió mucho a partir del jueves pasado?
MM - No; obviamente, como tú decís, la visibilidad, y la gente quiere saber. Nos mantuvimos en política e hicimos las cosas que hicimos pese a ser mujer y del interior. Porque son dos condiciones que aún hoy encuentran dificultades y algunas trabas. Los hombres del PC apostaron a esto, a que una mujer esté al frente, una mujer con trayectoria, con cierta experiencia, como lo indican los años que me he dedicado y los años en que he representado y estado en el Parlamento. Los hombres del PC apostaron a que una mujer liderara, y yo estoy dispuesta a liderar, conjuntamente con el CEN. Creo que ha sido una actitud muy importante de cambio, de renovación, apostando, más allá del discurso y de los eslóganes, a acciones concretas que demuestran que el PC ha sido el primero en hacer eso.
Escuchaba que el nombre de Mónica Xavier se está manejando en la interna para las elecciones de mayo del Frente Amplio (FA); espero que los hombres del FA apuesten a una mujer como apostaron los hombres del PC. Porque estamos en condiciones de estar en estos cargos y en estos roles, no solamente de visibilización nacional, sino, en el caso de ser secretaria general del PC, el cargo de mayor representación dentro de la institución PC.
EC - Además de lo que usted misma ha hecho, tiene una larga historia familiar vinculada a la política y en particular al PC. Usted es hija de Jaime Montaner, que fue diputado por Tacuarembó, luego ministro de Ganadería entre 1967 y 1971 durante el gobierno de Jorge Pacheco Areco- y más tarde senador elegido en 1971 por la Unión Nacional Reeleccionista, el movimiento político que impulsaba la reelección de Pacheco. Por otro lado, desde hace más de 20 años lidera en Tacuarembó la Agrupación 2215, precisamente el sector que fundó en su momento su padre. ¿Cómo ha jugado en su carrera esa huella familiar?
MM - Fue determinante. Sinceramente, fue determinante, porque yo desde muy pequeña, desde muy niña viví la política en mi casa, mi padre vivió la política en un escenario familiar, como se vive en el interior. En el interior del país no se sale de la casa y se va a un despacho o a una oficina, es la casa puertas abiertas, eso lo sabe todo el mundo, ahí entra y sale. La familia no éramos los cinco, mis tres hermanos y mis padres, éramos una familia ampliada permanentemente, si se entiende por familia la convivencia, los lazos, los vínculos.
Fue determinante porque en mi casa me desalojaban de mi dormitorio porque la Negra Alba Roballo, con quien compartí la mesa, con la que compartía las charlas, esa mujer que me fascinaba, iba a descansar antes de ir a los actos. La hotelería en el interior en esa época no tenía el auge y la ebullición que tiene hoy, la casa del caudillo, del referente de la ciudad era donde se hospedaba y se quedaba la gente. Compartí con Alba Roballo, con Zelmar Michelini, con Flores Mora, con Vasconcellos. La vida y el leitmotiv de esa gente era la política, era el batllismo, eran sus expresiones y sus convicciones. Y después de verlos en mi casa los veía como unos gigantes en los actos políticos, en aquella época el PC llenaba plazas, calles.
En Tacuarembó se realizaba la "avalancha", que era una columna de gente que caminaba 10 cuadras repletas, porque generalmente la clase social frente a la cual estaban mi padre y el PC eran los trabajadores, la clase media, la clase humilde, y mi padre decía: "No tenemos autos para hacer caravanas, pero vamos a hacerla a pie, porque el voto y la voluntad de la gente se expresan de esa manera". Así crecí, en medio de esas manifestaciones multitudinarias al frente de las cuales iban mi padre, Alba Roballo, Flores Mora, Zelmar Michelini. Los caminos de la vida después determinaron otros lugares.
EC - De todos modos, en el discurso que hizo el jueves cuando asumió como secretaria general puso énfasis en que accedió a los lugares que ha ocupado en la política por mérito propio. El camino que abría su padre en Tacuarembó le generó todo un ambiente, pero después fue usted misma que logró esa posición.
MM - Sí, pese a ser mujer ocupé todo eso.
EC - ¿Cómo fue eso?
MM - Mi padre fue un vínculo habilitarte, pero mi padre después murió, cuando yo llego muere mi padre. Entonces pese a ser mujer pude llegar, porque como mujer siento que para poder ser y llegar tuve que derribar varias barreras. En primer lugar es difícil, el partido y el sistema político están concebidos en un escenario muy masculinizado; te puedo nombrar cuatro o cinco protagonistas en mi vida, te nombré una mujer, Alba Roballo, y muchos hombres. Quiere decir que en este ámbito había una mayoría de hombres. Los partidos estaban concebidos en agendas, en horarios que a veces para la mujer, por su actividad de madre y otros roles que tenemos en la familia, se hacen difíciles de hacer coincidir.
Aparte en el interior yo pasé situaciones realmente difíciles para mí y para mis hijos. Porque en aquella época al subir a las tribunas, al tener exposición mediática, para mis hijos era una mujer diferente en el medio y me preguntaban si eso estaba bien o estaba mal.
EC - ¿Era para tanto?
MM - Sí, yo digo que la política me fortaleció porque tuve que pasar pruebas difíciles. Y obviamente que incide, entra, invade, en un sistema que estaba preestablecido, en que los roles no ahora, estoy hablando de 25 años atrás eran totalmente diferentes y definidos de una manera diferente. Y el hecho de ser mujer, no era solamente por ser la hija de Jaime Montaner; al contrario, yo tenía que salir a los barrios, levantar adhesiones, explicar por qué una mujer estaba en política, entender a la gente, ganar su confianza, establecer el vínculo con el votante, presentar una propuesta y decir qué realidad quería transformar y por qué estaba ahí teniendo una profesión y un posgrado. Hice el posgrado de Pediatría Odontológica la primera vez que se hizo en el Uruguay, con el doctor Rossetti, que venía de Argentina, y fue una innovación. Y trabajaba mucho. Entonces por qué yo estaba desalojando de mi vida algo que me había costado tanto y que me gustaba tanto para que la política empezara a invadirla de esa manera. Era una necesidad. Por eso hoy solo concibo la política haciéndola con la gente, porque ¿de dónde levanto yo la inquietud, de dónde levanto la realidad? Voy a mi departamento y vengo con un baño de realidad política.
EC - ¿Cuántos días en Tacuarembó, cuántos días en Montevideo?
MM - Mi periplo es: de jueves a domingo estoy en Tacuarembó recorriendo el departamento, el domingo de tarde viajo a Montevideo, el lunes comienzo con el CEN, luego seguimos con reunión de bancada, después martes y miércoles Cámara, plenario, comisiones, y después viajo a Tacuarembó por la ruta 5.
EC - Sus primeros ingresos a la Cámara de Diputados fueron por el Foro Batllista (FB) en 1994 y 1999. En 2008 se alejó del Foro y un año después se vinculó a VU, del cual hoy es integrante. ¿Cómo se define políticamente?
MM - Yo me defino políticamente batllista, porque el batllismo me da algo muy importante: la libertad y la justicia social. Son principios y valores, no es una ideología que me encorsete y no me deje evolucionar o que por ser rígida no me permita comprender los cambios de dinámica que se van produciendo en una sociedad. O se me cae la ideología que profeso, en la que me formé, o con mi ideología no puedo ir dándole respuesta a la dinámica de la sociedad.
Me defino como una mujer colorada, batllista, estoy más regida por principios y por valores. Y sí, estuve en el FB, mi maestro fue Julio María Sanguinetti, por quien profeso un gran cariño, una admiración intelectual tremenda. Por ahí salió que yo tuve discrepancias y me independicé; sí, discrepé cuando me dijo que él no iba a ser candidato, para mí era una persona que tenía, que tiene una visión muy clara de la realidad, hace un análisis muy bueno de todo lo que es la política. Me independicé porque no estuve de acuerdo con esa decisión que él había tomado. Creí que era de honestidad intelectual decírselo, y lo hablé con él, y sigo diciendo que es uno de los grandes hombres que tuvo este partido. Después de estar independiente sí, me incorporé a VU. Por un gesto de Pedro Bordaberry que lo levanto y lo digo siempre, y si me lo permitís lo voy a decir acá.
EC - ¿Cuál gesto?
MM - En la elección municipal del 2005, después que habíamos pasado la noche en el 2004 el PC, veo que un hombre acá en Montevideo, un departamento que estaba hostil para el PC, levanta las banderas en la elección municipal como candidato a la Intendencia, en una actitud no especulativa, porque sabía que no iba a ganar, la levantó en el momento más difícil. Yo creo en esas personas, en esas actitudes en que hay realmente una convicción más allá del éxito que se pueda obtener en la apuesta.
EC - Llamaron la atención en el discurso que pronunció el jueves las referencias que usted hizo y que acaba de reiterar aquí a sus primeros contactos con la política en los años 60 en Tacuarembó, y las figuras que conoció. Usted decía que por allí pasaban por ejemplo Amílcar Vasconcellos, Manuel Flores Mora y destacaba especialmente a Alba Roballo y Zelmar Michelini. Esa inclusión de dos nombres de notorios batllistas que después dejaron el PC y se pasaron al FA, ¿fue casualidad? ¿Con qué objetivo la hizo?
MM - Con el objetivo de recordar cómo fue mi formación política y quiénes me impactaron en su momento, quiénes fueron los arquitectos del alma y el espíritu batllista que llevo. Por supuesto, mi padre, pero esas figuras, yo los escuchaba hablar reiteradamente de lo que era la libertad; yo soy una mujer muy libre, me siento libre.
EC - Al mismo tiempo, me llamó particularmente la atención que no mencionara a Jorge Pacheco Areco, con quien su padre trabajó tan de cerca.
MM - Jorge Pacheco Areco no estaba en esas campañas. Recuerde que vino después de la muerte de Gestido, y eso fue en la campaña electoral de Gestido; Jorge Pacheco Areco era un vicepresidente y los vices no hacían esas recorridas ni esas giras. Era esta gente que se movía, era un grupo de gente maravillosa, que por cierto me enriqueció muchísimo y me hizo ver un partido... Después, por supuesto, cuando estudiamos José Batlle y Ordóñez, etcétera, lo vamos entendiendo como estadista y como el forjador y el formador de esta República y de este país. Pero Jorge Pacheco Areco no andaba en eso, era un vicepresidente que creo que ni se esperaba llegar a la Presidencia.
EC - Pero directamente no apareció en su discurso.
MM - No, no apareció porque yo me referí a esa experiencia de convivencia.
EC - En cambio sí destacó las gestiones de Julio María Sanguinetti y Jorge Batlle, presidentes después del regreso a la democracia. No habló de la presidencia de Pacheco.
MM - Con Jorge Pacheco Areco tuve un paréntesis en mi vida, no conviví con él cuando era chiquita, cuando vivía en la casa paterna, y después mi padre cuando es ministro se traslada a Montevideo, nosotros seguimos estudiando en Tacuarembó, va y viene pero nosotros seguimos; ahí él ya estaba más apartado, en una actividad ejecutiva, desempeñando cargos, ya no en campañas. Estas figuras aparecen en las campañas políticas, Jorge Pacheco Areco más bien tiene ese contacto con mi padre directamente cuando él está al frente de la cartera de Ganadería y Agricultura, está como senador, está más alejando de la esfera familiar. Entonces lo trasmití como una vivencia. Y luego mi vivencia fue cuando retomo en persona, no por intermedio de mi padre, la política, la vivo en forma directa, como protagonista, con Sanguinetti y Batlle. Ese es el motivo.
***
EC - ¿Qué puede hacer una mujer en el cargo de secretaria general del PC? Tengo acá un mensaje de un oyente, Ignacio, que dice: "Con todo respeto, me parece que es una movida para la tribuna".
***
EC - Fue el jueves, Día Internacional de la Mujer, cuando el CEN de su partido por unanimidad la nombró Secretaria General. ¿Desde ese cargo efectivamente va a asumir el liderazgo, o sus responsabilidades van a estar más vinculadas a la representación, a lo protocolar?
MM - No, firmemente voy a asumir el liderazgo. Voy a asumir el liderazgo, por supuesto, obviamente que con el CEN. Acá estamos en un colegiado en el PC, una despersonalización del poder cuando se hace rotativa la secretaría, pero este año yo soy la secretaria general del PC y voy a liderar. Y como voy a liderar tengo propuestas y agendas ya pensadas que ya estoy ejecutando y poniendo en acción.
EC - ¿Qué dice, por ejemplo, ante opiniones como esta de Ignacio, un oyente que plantea: "Con todo respeto, me parece que la movida de Pedro es solamente un gesto para la tribuna. Poner a una desconocida es a la vez un gesto de simpatía con el electorado femenino y una suerte de renovación, pero da la impresión de que es una jugada fríamente calculada. ¿Cuál es el verdadero poder que tiene esta señora?"?
MM - Esta señora, que no tiene poder y que puede ser muy desconocida para mucha gente, hace 25 años que milita en el PC, ganó tres legislaturas sin cuota política, perdió la cuarta en el período más difícil para el PC, en el 2004, por tan solo 21 votos, fue por 15 años la secretaria general del PC en el departamento de Tacuarembó, fue convencional nacional, fue elegida miembro del CEN. Es una humilde señora, servidora del PC, de la República y de la democracia.
EC - Hay otras opiniones (que discrepan con Ignacio). Por ejemplo, Teresa de Rodó dice: "Si así fuera, sería un buen desafío demostrar lo contrario. No voto al PC, pero bien por esa oportunidad".
Gonzalo de Piriápolis señala: "¿Movida para la tribuna, o es que el partido está presentando a sus hombres y mujeres?".
MM - Creo que es una muestra de renovación. Acá la renovación no lleva nombre, lleva procedimientos, lleva formas distintas de actuar, de modernización. Los partidos modernos tienen agendas de género hechas no solo por mujeres, hechas por hombres y mujeres, y los hombres del PC apostaron a una mujer para que liderara. Creo que es algo muy interesante, y me parece que no es una movida. ¿Por qué tenemos que pensar que lo de las mujeres es histriónico, es un montaje y una movida? Sería un montaje, una movida, si fuera una recién llegada a la actividad política, pero si el partido mira a hombres y mujeres y trayectorias y selecciona a una persona que tiene trayectoria, ¿por qué es una movida?, ¿porque es una mujer? Vaya discriminación, con respeto a aquellos con quienes estamos intercambiando.
EC - ¿Cómo hará para marcar ese perfil propio teniendo en cuenta que usted viene de un sector, VU, y un partido en definitiva tan marcado hoy por Pedro Bordaberry, en quien se concentra la atención?
MM - Pedro Bordaberry es una realidad, tiene en la interna un 72%, pero como dice Bertrand Russell, hay puentes para cruzar y puentes para quemar, y yo voy a cruzar todos los puentes, voy a tender puentes primero en mi partido entre los distintos sectores con los cuales me llevo espléndidamente bien. Si no soy una recién llegada y tengo una historia quiere decir que transité por otros caminos. Hablábamos recién del Foro, Proba es uno de los sectores que también forman parte del partido, en su esencia está constituido por hombres de Proba, hombres de la 15, está Uruguay es Posible con Iglesias. Para legitimar una actividad no se necesita una exhibición mediática; por supuesto que es imprescindible para que nos conozcan, pero la legitimación está en la trayectoria y en el hacer y el quehacer. Con esto el PC dio muestras de una coherencia total con su historia. La primera oportunidad de voto a la mujer la dio el PC en el año 38. Las primeras senadoras fueron coloradas; las primeras diputadas; la primera ministra, Alba Roballo, era colorada; la segunda ministra fue Adela Reta. ¿Por qué no hoy la primera secretaria general del PC?
EC - Usted ha dicho que tiene propuestas para este período de un año en el que ejercerá la secretaría general. ¿Cuáles son, por dónde va a estar ese perfil? Por ejemplo, anuncia que uno de los primeros pasos que dará será pedirle una audiencia al presidente de la República, José Mujica.
MM - Como no podía ser de otra manera.
EC - En realidad ya se encontró con él el sábado en Tacuarembó, en el palco oficial el día del desfile de la Patria Gaucha.
MM - Con el Pepe fui compañera de banca parlamentaria, con el Pepe y Lucía, vamos a sacarnos esta ropa de etiqueta y vamos a mostrarnos como somos.
EC - Para usted es "el Pepe".
MM - Es el Pepe, porque yo fui compañera en la Cámara de Diputados con el Pepe y Lucía en los años 1994, 1995, tenemos una trayectoria de ser compañeros en un plenario durante cinco años, eso nos da ciertos vínculos y un acercamiento. En la Patria Gaucha le dije: "Pepe, ¿me vas a recibir?".
EC - Ya gestionó la entrevista.
MM - Claro, lo hice formalmente en mi condición de secretaria general y él como institución presidente, pero también lo hice en un dialogado que nos permite la cercanía que tuvimos en esa legislatura con él y con Lucía.
EC - ¿Qué le va a plantear en esa reunión?
MM - Fundamentalmente tengo dos cosas: ya no podemos esperar más, hay que instalar la universidad tecnológica, y debe ser en el interior, como lo planteó el PC. Porque ahora agregamos lo de tecnológica en los acuerdos multipartidarios, pero la universidad del interior fue el sueño desde Rodó y Batlle, hace exactamente 100 años, cuando se extendieron los liceos al interior, a todos los departamentos y a todo el país. La educación secundaria se extiende a impulsos de Batlle y de Rodó, ese fue el primer desafío, que no se pudo lograr, para pensar después en la universidad. Luego vino el proyecto del escribano Cersósimo en el año 71, universidad del interior propuesta por el PC. En el 2009, en el programa de gobierno de VU estaba establecida la instalación de una universidad del interior. En el 2010 la bancada de VU presentó por medio del diputado Fernando Amado la universidad del interior. Y ahora en el acuerdo multipartidario cuando el presidente habla de una universidad tecnológica, el PC puso como una determinación que no se negociaría sino en el interior.
Yo que soy una mujer del interior conozco las dificultades, acá hay una fractura social y hay una acción antidemocrática, porque no hay las mismas oportunidades para los jóvenes del interior que para los que nacen acá en la capital. Esto quiere decir que no les damos las mismas oportunidades a aquellos porque territorialmente nacen en otro lugar. Y si a eso le sumamos que son hijos de la educación pública, por eso no tienen recursos, por supuesto que les va a ser más difícil trasladarse, instalarse, aparte del desarraigo emocional. Yo viví todo eso.
EC - Con respecto a lo que ya se acordó, ¿cuál es el plus que pide el PC?
MM - Que sea en el interior y atendiendo las diferentes realidades productivas y sociales para que se instalen las tecnicaturas que se vayan a desarrollar. Por ejemplo, el tema lechería en los departamentos por excelencia lecheros, como por ejemplo Colonia, San José y Florida; el tema turismo en departamentos como Rocha y Maldonado; el tema de la madera en Río Negro, Tacuarembó y Rivera; el tema ganadería que sea en Tacuarembó, Durazno, Colonia. No se puede esperar más, la educación no puede esperar más, un joven y un niño educado es un ciudadano realizado. Tenemos una deuda con la sociedad, la educación pública debe adquirir calidad, que es el único instrumento hasta hoy reconocido como legítimo para la movilidad social, para sacar a la gente de la pobreza y ponerla en otro camino, en la senda del desarrollo.
EC - ¿Qué otros temas van a estar en esa reunión con el presidente?
MM - Voy a pedirle que la cuota femenina, desde mi visión de mujer y de género, no sea solamente por el 2014, que trabajemos juntos para que la mujer no tenga que dar examen una sola vez, que se extienda por otro período.
EC - Usted está aludiendo a que la ley que se aprobó en esta materia prevé que la llamada cuota se aplique por primera vez y casi a título experimental en las próximas elecciones, las del 2014.
MM - Sí. ¿Por qué la mujer tiene que pasar por experiencias? ¿Nos tienen que tomar examen otra vez?
EC - Así se aprobó, así negociaron ustedes mismas en su momento. ¿Qué pasó?
MM - Fue lo que pudimos, fue lo que se pudo. Pero ya en este momento la tendencia es no solamente mundial, también regional, la mujer está demostrando que está capacitada para estar al frente no solamente como presidenta, al frente de un país, también de Petrobras, del Fondo Monetario Internacional. Estoy nombrando organismos internacionales, pero en las comilones barriales, cuando recorro el departamento. Por ejemplo cuando sacamos el liceo de Curtinas gracias a lo cual hoy puedo dormir tranquila porque 370 jóvenes de ese medio que no tenían futuro hoy lo tienen era impresionante cómo trabajaban las mujeres. Resulta que las mujeres servimos para todo, o sirven, pero tienen que dar una prueba más, entonces se les va a tomar examen en el 2014. No, es muy injusto.
EC - Con que la ley abarque más que el 2014 por lo visto no alcanza, porque con la ley tal cual está formulada ya varias de sus colegas, tanto legisladoras como dirigentes no parlamentarias, están preocupadas, temen que su aplicación dé lugar a maniobras que las terminen relegando. Usted está participando en esas reuniones, sabe de qué estoy hablando.
MM - No, yo no estoy participando.
EC - Pero habrá escuchado cuál es la inquietud.
MM - Sí, tienen la inquietud de que en la parte de la reglamentación y después en la instrumentación y la implementación se busquen algunas formas para que la mujer quede relegada y no salga, que se abran listas y la tercera no pueda llegar, etcétera.
EC - ¿Alcanza con que no se aplique solo en 2014, o además hay que modificar esa ley?
MM - Hay que apostar. Quien duda de cómo están las leyes está dudando de la legitimación del Parlamento. Al menos mi partido ya dijo que la ley va a ser así, ya lo establecimos, esa ley de cuotas estuvo para las internas, para las convenciones no se recibía absolutamente ninguna lista que no tuviera la proporción que estipulaba la ley de cuotificación. Así que yo despejo esos fantasmas, sinceramente.
¿Por qué más allá del 2014? Hay una explicación: porque si las mujeres somos el 53% o el 52 y algo, como arrojó el censo, en cuanto a expresión demográfica y tenemos una subrepresentación parlamentaria de 14,6, quiere decir que cuando decimos que el Parlamento representa a la gente, a la sociedad, esta sociedad no está representada. Si las mujeres somos el 52% y somos un 14,6% que las representamos es una representación que no se compadece con la realidad. Estamos buscando que esta ley se mantenga hasta que haya un equilibrio lleguemos a lo que se llama una democracia presencial.
***
EC - ¿Qué otras medidas piensa tomar, qué otros pasos va a dar?
MM - Le he pedido una entrevista también al presidente del Directorio del Partido Nacional, Luis Alberto Heber. Lo hablé también en la Patria Gaucha, estaba todo el mundo en la Patria Gaucha.
EC - Un éxito la fiesta de la Patria Gaucha.
MM - Un éxito del tradicionalismo.
EC - Van a tener que conseguir otro lugar.
MM - Sí, la Patria Gaucha es un museo viviente.
Queremos hablar sobre la fórmula del balotaje departamental. Creemos que es necesario que la gente tenga una forma libre de expresarse, sobre todo en Montevideo, pero en todos los departamentos. Más allá de lemas accidentales apostamos a un balotaje departamental porque entendemos que hay un porcentaje importante de personas que no están de acuerdo en este momento con la administración municipal por ejemplo en Montevideo. No están de acuerdo en aspectos como la limpieza, en esta calle nomás vemos las volquetas, el estado de las veredas, no se precisa profundizar en el tema.
Estas personas tenemos que buscar una manera de llegar a un acuerdo que tenga el respaldo de la institucionalización, que sea una medida institucional como es el balotaje departamental, que sea una medida que tengas reales chances y perspectivas para que ese porcentaje que no se pudo expresar o que no tuvo chances pueda hacerlo de la misma manera que lo hace el Frente cuando vemos que hay sectores, partidos, como el Partido Comunista y Asamblea Uruguay, tan diferentes entre sí en sus concepciones, que se unen para darle una chance electoral y de victoria a la gente que apuesta a ellos. Lo mismo nos va a pasar a nosotros, por eso voy a tener una entrevista con Heber, el presidente del Directorio, para ver cómo podemos conversar esto, porque no son arreglos entre cuatro paredes, esto lo tiene que resolver la gente.
EC - Usted anuncia además que el CEN va a salir de Montevideo, que va a andar por el interior del país.
MM - Totalmente.
EC - ¿Qué importancia tiene?
MM - La descentralización es la integración, si estamos centralizados capitalinamente no conocemos ni entendemos nada de lo que está pasando en las otras regiones del país con características tan diferentes. Que la gente venga acá tiene dificultades y costos, ¿quién tiene que ir? El partido, porque tiene que escuchar a toda la gente. Yo siempre digo: la descentralización es la justicia en un país, porque trae la integración. Les voy a proponer a los compañeros que de las cuatro sesiones que el CEN va a tener por mes una se haga en el interior del país.
***
Transcripción: María Lila Ltaif
Contenidos relacionados:
Acto de asunción de Martha Montaner al frente del Partido Colorado