Un centenar de personas, entre las que también hubo representantes del mundo de la política y el cuerpo diplomático, se congregaron en la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen de Montevideo, una de las más grandes y antiguas de la capital uruguaya, para pedir por el alma de Chávez al cumplirse un mes de su fallecimiento.

La presencia más destacada fue la del ex presidente Vázquez, reconocido católico, quien participó de la misa junto al embajador venezolano en Uruguay, Julio Chirinos.

Según señaló a Efe el embajador Chirinos esta ceremonia forma parte del "aluvión de solidaridad" recibida por el Gobierno y el pueblo de Venezuela "en nombre del presidente Chávez" por parte de Uruguay desde su muerte.

Así, Chirinos recordó que además de los actos realizados en su memoria, hoy mismo la Junta Departamental de Montevideo realizó un "emotivo homenaje" oficial y que el sábado habrá otro acto en Pueblo Bolívar, a las afueras de Montevideo en memoria del comandante.

"Por más que Uruguay es un país desde hace muchos años con una separación grande entre la Iglesia y el Estado y un país que la mayoría de la gente considera laico, pero hubo una gran presión para la realización de la misa", recordó.

El diplomático apuntó que los más interesados fueron miembros de la comunidad venezolana en Uruguay y que la embajada se limitó a organizar y convocar a la misma.

El pasado mes de diciembre, cuando la salud del fallecido presidente Chávez empeoró, el actual presidente uruguayo José Mujica, sucesor de Vázquez al frente del Gobierno y también del movimiento Frente Amplio, convocó a una misa para pedir por su sanación, pese a tratarse de un ateo confeso.

EFE