Ambos estuvieron cara a cara durante 40 minutos. El Papa lo esperó en la puerta y le agradeció su visita.

Le obsequió un grabado con el proyecto original de la Plaza de San Pedro, a lo que Mujica respondió "tengo tantas cosas en mi casa que no sé donde lo voy a poner, de pronto en el cuartito de las herramientas" le dijo, según reveló más temprano el enviado de El Espectador, Mauricio Almada.

El presidente afirmó que a la Iglesia se la critica por una cosa u otra, pero no se le reconocen los aportes y esfuerzos por mitigar las diferencias sociales y se definió como admirador político de esa institución:

"Siempre se le hace críticas a esta institución por esto y por lo otro pero es raro reconocer lo que se ha aportado. Los sacerdotes de la Iglesia supieron ser, desde la época de Artigas, los depositarios de la cultura en una sociedad primitiva que emergía. Cuando algunos queríamos cambiar el mundo muchas veces acampamos en un establecimiento monitoreado por curas franciscanos. Ha habido una apertura muy grande por toda América Latina y hemos encontrado sacerdotes que ha dedicado su vida a la lucha por la igualdad y al equidad, tratando de mitigar las diferencias sociales, soy admirador político de la iglesia católica".

En diálogo con los medios de comunicación, Mujica sostuvo que habló con el Papa, entre otros temas, sobre Colombia y el proceso de negociación por la paz, algo frente a lo cual ambos están preocupados.

Mujica se ofreció para cualquier tarea humana que el Papa entienda, pueda ayudar.

El presidente informó que hablaron también de filosofía y el Papa le agradeció que no haya impreso en Uruguay un Gobierno que busque la polarización del país.

Ante los medios, el mandatario explicó que no vino cuando asumió Francisco porque era una fiesta de la comunidad católica y él no es creyente.

No obstante ahora tomó la decisión de hacer la visita por su manera de pensar y por la importancia para América que representa el sumo pontífice en particular para la comunidad cristiana.

Mujica dijo que el Papa "sigue siendo un hombre austero como toda su vida, no vive como otros Papas y creo que van haber cambios muy, muy importantes en la vida de la Iglesia".

El mandatario describió al Papa como un hombre que "si lo dejan va hacer una revolución hacia la sencillez".

"El Papa sigue siendo un hombre austero como toda su vida, está viviendo no como otros papas, creo que van a haber cambios muy importantes en la vida de la Iglesia".

Foto: EFE