El expresidente llamó a la integración ya que "nadie, por poderoso que sea, puede resolver por sí solo los problemas y tensiones del mundo actual.

Vázquez disertó este viernes en una panel denominado "Relaciones Estados Unidos-Latinoamérica", organizado en Washington por el Woodrow Wilson Center, del cual es miembro.

Destacó que no pueden desconocerse los avances de los últimos años en América Latina, : un  continente sin conflictos bélicos, con más institucionalidad democrática, crecimiento económico y menos pobreza, y con un fuerte renovado impulso a favor de la integración.

"Que no es fácil, instantánea ni milagrosa, pero que es necesaria y posible", aseguró. Tal vez es por eso, dijo, que no ocupa ya lugares destacados en la agenda de los gobiernos extra región.

"Pareciera que como no somos un problema, dejamos de ser una prioridad". Se preguntó al respecto si para EEUU la región pasó de ser "patio trasero a ser terreno baldío o campo ajeno".

Vázquez sostuvo que América Latina "no sólo no es enemiga de EEUU sin o que además puede ser una contraparte responsable y fecunda" de ese país. Para el expresidente nadie "por más poderoso que sea", podrá resolver por sí solo los problemas y las tensiones del mundo actual: "terrorismo, conflictos bélicos, crimen organizado, pobreza, desigualdad y degradación del medio ambiente".

En tal sentido, dijo, "no sólo EEUU es una oportunidad para Latinoamérica, Latinoamérica es una oportunidad para EEUU", aunque siempre sobre bases recíprocas.

El expresidente, probable candidato del Frente Amplio en 2014, dijo: "Creo que ya es tiempo de dejar de pasarnos cuentas (lo cual no quiere decir olvidar el pasado ni renunciar lo que somos) y hay condiciones o por lo menos necesidades favorables para definir una agenda común cuyo cumplimiento permita resolver entre todos asuntos importantes para todos porque ya no hay tiempo para ejercicios retóricos y tampoco hay margen  para soluciones a solas".

La misma, dijo, debe ser "sin exclusiones". En ese sentido hizo referencia a la cuestión cubana. Y se preguntó por qué EEUU sigue insistiendo con aislar a la isla.

"Podrán invocarse cláusulas democráticas, pero sí de cláusulas democráticas hablamos, en el mundo hay varios gobiernos que no las cumplen", apuntó. Esta agenda deberá abarcar "las aspiraciones e intereses de todos". Marcó algunos puntos que debe contener:

Por un lado, "gobernanza democrática", que en Amércia Latina significa integración. En segundo lugar, la economía y el comercio "son los temas que importan a la ciudadanía de nuestros países, porque son los que determinan las condiciones y la calidad de su vida cotidiana.  En la otra vida, si es que existe y se cree en ella,  estos asuntos son irrelevantes".

Al final de su intervención, Vázquez aclaró que su exposición fue a título estrictamente personal. "No hablé ni en nombre de la fuerza política a la que pertenezco ni del actual gobierno uruguayo, al cual voté y apoyo".

El expresidente culminó afirmando que "a pesar de algunos diagnósticos académicos y pronósticos periodísticos sobre el  futuro, lo cierto es que aún  no tengo los planos del mismo. Recorro  el presente como es, como soy en términos de identidad política y responsabilidad ciudadana y, consecuencia de ello,  como uno más entre  los  uruguayos comprometidos con su país y su tiempo".   
Un Uruguay que quiere construir un porvenir razonablemente mejor sabiendo que no está solo en el mundo.