(emitido a las 7.50 Hs.)

ALEJANDRO ACLE:
La inauguración de la planta desulfurizadora de Ancap fue celebrada ayer por todo lo alto por el Poder Ejecutivo. El presidente, José Mujica, la definió como una obra de todo el pueblo uruguayo y lamentó que la oposición no estuviera presente.

Lo cierto es que la presencia de la presidenta argentina, Cristina Fernández, a la cual además se le entregaron las llaves de la ciudad de Montevideo, molestó a buena parte del sistema político que le dio la espalda al acto. Solo dos dirigentes de primera línea de la oposición estuvieron presentes ayer en la refinería de La Teja. Uno fue Walter Zimmer, intendente de Colonia, del Partido Nacional, el otro fue el diputado nacionalista Álvaro Delgado.

Estamos en comunicación en este momento con el diputado Delgado, integrante de Aire Fresco y de la Comisión de Industria de la Cámara de Diputados.

¿Cuáles fueron las razones que lo llevaron a asistir a este acto de ayer?

ÁLVARO DELGADO:
Ayer, es verdad, estaba solo el intendente Zimmer y como legislador quien habla, nosotros fuimos invitados, integramos la Comisión de Industria y Energía, y no es la primera vez, todas las obras que nos parecen positivas, que hemos venido apoyando, las hemos acompañado. Esta era la inauguración de la planta desulfurizadora que implicaba no solo mejorar la calidad de los combustibles a normas internacionales bajando casi un 90 y pico por ciento la cantidad de azufre que tiene y además mejorando la calidad ambiental de los uruguayos a través de la extracción del azufre de los combustibles.

Me pareció una buena obra, los primeros estudios empezaron en 2004 con las primeras consultorías, las primeras licitaciones empezaron en 2006, las obras 2008-2009, se inauguran ahora. O sea, abarca varios gobiernos, y estas son las políticas en materia energética, las inversiones energéticas que sin duda atraviesan varios gobiernos. Nos va a pasar que seguramente muchas de las obras que se inicien en este gobierno sea un gobierno del Partido Nacional el que le tenga que inaugurarlas, así que nos parece normal manifestar a través de la presencia lo que ha sido un seguimiento de la obra que por lo menos a nivel parlamentario hemos hecho y compartido y estamos avalando en nuestra presencia en la inauguración de lo que es la planta desulfurizadora, obra uruguaya, hecha por Ancap, que vamos a financiar los uruguayos todos, y que va a ser en beneficio del Uruguay. Así que en ese sentido es que estuvimos ahí en esa primera parte que era la inauguración de la obra desulfurizadora. Lo otro ya tenía otras connotaciones y por eso en la otra parte no estuvimos.

ROMINA ANDRIOLI:
¿Por qué cree que fue el único que asistió a la inauguración de la planta en representación de la oposición junto con el intendente Zimmer?

AD – No sé, es una actitud que por lo menos tenemos en política: las obras, como las ideas, son buenas o malas en función del efecto que tienen y no en función de quién las hace. Lo que es bueno nosotros lo vamos a aplaudir y apoyar y a estar independientemente de quién lo haga y lo que es malo lo vamos a criticar y vamos a proponer siempre alguna solución alternativa o una propuesta que nos parezca mejor. El presidente estuvo haciendo referencia a que no había gente de la oposición, se equivocó, hizo referencia a que no había expresidentes. Es verdad, no había expresidentes ni del Partido Nacional ni del Partido Colorado, tampoco el expresidente [Tabaré] Vázquez, pero nosotros hicimos lo que entendimos que teníamos que hacer.

RA – ¿Pero usted lo habló con sus colegas del Partido Nacional, por ejemplo?

AD – No, no fue una decisión de partido ni de bancada legisladora, recibimos la invitación y fuimos sin dudarlo, como estuvimos la otra vez en la inauguración de algunos otros emprendimientos que nos parecen buenos para el país, y que los apoyamos, es la manifestación de haber estado. Una cosa es la inauguración de la planta desulfurizadora que apoyamos, avalamos, compartimos y ayer evidenciamos presenciándola y otra lo que tiene que ver con, dicho con mucho respeto, el show de Cristina, con la entrega de las llaves de la ciudad a "la compañera" Cristina Fernández, quien al Gobierno, no al pueblo, al Gobierno, tantos problemas ha generado, de relacionamiento, comerciales, que hemos sufrido todos los uruguayos, muchos trabajadores uruguayos, trabajadoras uruguayas y empresas uruguayas...

RA – Usted en esa parte del acto se retiró.

AD – Sí, no compartimos la entrega de las llaves, y no era ni siquiera protocolar, porque protocolar hubiera sido entregarle las llaves en la Intendencia de Montevideo como se hace habitualmente y no ya un gesto casi de pleitesía entregárselas directamente en Ancap para que no tuviera que trasladarse. Me pareció que no era adecuado, no era oportuno, no era conveniente, y no era el momento para hacerlo.

Pero además, si uno ve el momento en el cual lo hizo, yo obviamente lo leí porque ya me había retirado, pero cuando hablo, entre comillas y con respeto, del show de Cristina, implica a la intendenta de Montevideo [Ana Olivera] hablar de "la compañera" Cristina Fernández, ni siquiera referirse a la presidenta; al discurso de la presidenta Cristina Fernández hablando de la política uruguaya, equivocando términos, haciendo comparaciones que no son comparables; hablando de la inversión argentina cuando en realidad era una inversión absolutamente de Ancap y de todos los uruguayos, hablando de ejemplos uruguayos y de política nacional. Y por supuesto además si algo faltaba, eran 50, 60 o 70 muchachos de La Cámpora, con camisetas de La Cámpora, en un acto hiper protocolar, todo regulado, con estrictas medidas de seguridad, hasta detector de metales, hasta sectorizada la gente donde tenía que estar sentada, irrumpen ahí a hacer cánticos sobre el gobierno peronista y sobre la presidenta Fernández y sobre [Néstor] Kirchner, que no es el Uruguay, nosotros no estamos acostumbrados a eso ni eso ocurre cuando un presidente, sea del partido que sea, de otro país, ni se lleva la barra, ni irrumpe la barra, ni mucho menos habla de política interna de otro país. Creo que esa parte del acto estuvo de más y nosotros no lo compartimos y nos retiramos, con respeto, para no avalarlo. Avalamos sí lo importante, no lo anecdótico, lo importante para Uruguay, que es la planta desulfurizadora.

RA – Yendo a ese punto que yo le planteaba antes, el presidente Mujica dijo ayer: "Hubiera querido de todo corazón que el sistema político entero de Uruguay estuviera aquí y se diera cuenta de que esta refinería no es para la izquierda ni para la derecha, es del pueblo uruguayo, no la hizo este gobierno, no la hizo el otro". ¿Usted comparte esta expresión del presidente?, ¿cuál es su valoración sobre la actitud que tomaron los dirigentes de la oposición al no asistir?

AD – Yo no voy a hablar por los demás, voy a hablar por mí. No me sentí aludido porque yo estaba ahí, y no es la primera vez que lo hago. Es una actitud política que tenemos, que hemos adoptado, lo que nos parece bueno, independientemente de quién lo haga, vamos a estar. Ojalá en el futuro los demás cuando le toque gobernar a otro partido o al nuestro hagan lo mismo. Es una actitud por lo menos de cómo encaramos la política, lo que es bueno no importa quién lo haga, es bueno y punto, si es bueno para Uruguay lo vamos a avalar. Pero no hay que confundir las cosas y es lo que intenté hacer, en la planta desulfurizadora sí, pleitesía de la presidenta Fernández y todo lo conexo con eso, no. Me parece que era una señal de madurez política, de actitud política, estar presente y apoyar una obra que es buena para Uruguay.

AA – La intendenta Olivera cuando explicó por qué entregaba las llaves aparte del concepto de que las entregaba por protocolo dijo que era por una vocación de "integración regional", o sea, quizás no haciendo tanto énfasis en el pasado y en los problemas de relacionamiento que ha habido, sino como una apuesta hacia el futuro. ¿A usted le parece que este paso concreto, el de la cooperación para la construcción de la planta, es un paso en ese sentido?

AD – La presidenta Cristina Fernández se equivocó cuando dijo que es una obra de una inversión argentina, de 360 millones de dólares...

AA – Se equivocó en el monto y en el origen.

AD – Fue una obra para la que invertimos los uruguayos, sale de los fondos de Ancap que nosotros financiamos con impuestos. Lo que hubo fue un llamado a ofertas donde se presentaron ofertas españolas, de otros países y también una oferta evangelista argentina que es subsidiaria de YPF que fue la que terminó haciendo el proyecto; que es más, el proyecto estuvo demorado, en el medio estuvo la estatización de YPF. O sea, la obra es uruguaya, para los uruguayos, y una empresa argentina fue contratada para hacer la parte tecnológica y lo que tiene que ver con la implementación de los módulos de deslufurización.

RA – ¿Pero el hecho de que la mandataria argentina venga a nuestro país no lo ve como un gesto de acercamiento, una valoración política en ese sentido?

AD – Por eso yo empecé diciendo que no me parece mal, son gestos que en política internacional yo los comparto. No me parece mal que si una inversión de esta magnitud, que cambia el nivel de calidad de los combustibles uruguayos, y el medio ambiente uruguayo, es hecho por una empresa argentina contratada por la empresa uruguaya, me parece que el gesto de invitar a inaugurarla en conjunto es un gesto de buena vecindad, de buen relacionamiento y eso no discrepo en absoluto. Discrepo con todo lo demás, con la parafernalia, con la pleitesía, con todo ese "show de Cristina" el cual parte de los que estaban ahí tuvieron que ver y soportar.

Le agrego una cosa más, nosotros participamos en el acuerdo multipartidario de energía por el Partido Nacional, hicimos un plan estratégico a 20, 25 años, nos parece que las políticas energéticas deben ser políticas de Estado y en ese sentido estamos trabajando. También en eso se enmarca, porque fue parte de lo que estaba en ese acuerdo, por lo menos ir avanzando en esa línea, fue parte de nuestra actitud de estar presente ayer en la primera parte del acto.

***