Mujica: "La ONU languidece y se burocratiza por falta de poder y autonomía"
El presidente José Mujica dijo en su discurso en la Asamblea General de Naciones Unidas que la ONU "languidece y se burocratiza por falta de poder y autonomía", y apuntó a que "donde se deciden los recursos Uruguay no entra ni a servir café". La oratoria del mandatario tuvo una fuerte crítica al consumismo, a la ambición humana, y a la degradación del medio ambiente.
Mujica comenzó destacando que Uruguay "ha resurgido en el mundo globalizado, tal vez aprendiendo de nuestro dolor. Mi historia personal, la de un muchacho, porque alguna vez fui un muchacho, que como otros quiso cambiar su época y el mundo. Mis errores en parte son hijos de mi tiempo, obviamente los asumo, pero hay veces que me grito con nostalgia: ¡¿quién tuviera la fuerza de cuando éramos capaces de abrevar tanta utopía?!", dijo el mandatario.
Mujica sostuvo que no vive "para cobrar cuentas o verberar recuerdo" y confesó sentir "angustia" por el porvenir. "Es posible un mundo con una humanidad mejor, pero tal vez hoy la primera tarea sea salvar la vida", apuntó.
El presidente se mostró preocupado por la "sociedad consumista": "Parecería que hemos nacido sólo para consumir y consumir, y cuando no lo hacemos cargamos con la frustración, la pobreza y hasta la autoexclusión (...) Nuestra civilización montó un desafío mentiroso y así como vamos no es posible para todos colmar ese sentido de despilfarro que se le ha dado a la vida".
El mandatario sostuvo que carga con los siguientes desafíos: "cargo con los millones de compatriotas pobres en las ciudades, con la vigilancia electrónica que no hace otra cosa que sembrar desconfianza, con el deber de luchar por patria para todos y para que Colombia pueda encontrar la paz, con las culturas originarias aplastadas, con los restos del colonialismo en Malvinas, con los bloqueos inútiles a Cuba".
En este sentido, Mujica hizo referencia a la alienación en la que están sumergidos los seres humanos en estos tiempos. "Arrasamos las selvas, las selvas verdaderas, e implantamos selvas anónimas de cemento, enfrentamos al sedentarismo con caminadores, al insomnio con pastillas, a la soledad con electrónica, y que somos felices alejados de un aletargo humano. Aturdidos huimos de nuestra biología que defiende la vida por la vida misma, como causa superior, y la suplantamos por el consumismo funcional a la acumulación".
Luego se refirió al papel de la política, "la eterna madre del acontecer humano, que va engrillada la economía, y al mercado".
"De salto en salto la política no puede más que perpetuarse y como tal delegó el poder y se entretiene aturdida luchando por el gobierno. Desbocada marcha la historieta humana, comprando y vendiendo todo, e innovando, para poder negociar, de algún modo, lo que es innegociable. Hay marketing para todo, para los cementerios, los servicios fúnebres, las maternidades, para madres y padres, abuelos y tíos, para secretarias, los autos y las vacaciones, todo es negocio".
Posteriormente se refirió al "capitalismo productivo", y aseguró que "está medio prisionero en la caja de los grandes bancos que en el fondo son los grandes, son la cúspide del poder mundial".
"La economía globalizada no tiene otra conducción que el interés privado. De muy pocos. Y cada Estado mira su estabilidad continuista".
Mujica planteó que el mundo "requiere a gritos" reglas globales que respeten los logros de la ciencia "que abunda" pero, afirmó, "no es la ciencia la que gobierna el mundo".
"Se precisa una larga de agenda de definiciones (...) Cómo se financia la lucha global por el agua y contra los desiertos, y cómo se recicla y se presiona contra el calentamiento global. Cuáles son los límites de cada gran quehacer humano. Sería imperioso lograr consenso planetarios para desatar solidaridad hacia los más oprimidos".
"Castigar impositivamente el despilfarro y la especulación. Movilizar las grandes economías, no para crear descartables con obsolencia calculada, sino bienes útiles, sin frivolidades, para ayudar a levantar a los más pobres del mundo. Bienes útiles contra la pobreza mundial, mil veces más redituable que hacer guerras, es volcar un neo keynesianismo útil a escala planetaria para abolir las vergüenzas más flagrantes que tiene este mundo", amplió.
Mujica destacó a la ciencia "que se empeña por la humanidad no para hacerse ricos".
"Con ellos, con los hombres de ciencia de la mano, primeros consejeros de la humanidad, debemos establecer acuerdos para el mundo entero. Ni los estados nacionales grandes, ni las trasnacionales, y mucho menos el sistema financiero, deberían gobernar el mundo humano. Sí, la alta política entrelazada con la sabiduría científica, allí está la fuente. Es ciencia que no apetece el lucro, pero que mira el porvenir y que nos dice cosas, que no atendemos".
El "triunfo de la ambición humana" marcan un futuro con guerras y degradación del medio ambiente.
"Continuarán las guerras y por tanto los fanatismos, hasta que tal vez la naturaleza los llame al orden y haga inviable nuestra civilización. Tal vez, señores, tal vez nuestra visión es demasiado cruda, sin piedad, y vemos al hombre como una criatura única, la única que hay arriba de la tierra capaz de ir contra su propia especie. Vuelvo a repetir lo que algunos llaman la crisis ecológica del planeta es consecuencia del triunfo avallasante de la ambición humana, ese es nuestro triunfo. También nuestra derrota".
Respecto al rol de Uruguay en la ONU, Mujica dijo que somos el país de América Latina con más soldados en misiones de paz, "en términos absolutos". "Uruguay siempre está en los lugares que le asignan, sin embargo donde se deciden los recursos no existe ni para servir el café", destacó.
"La ONU languidece y se burocratiza por falta de poder y autonomía", apuntó.
"La especie debería tener un gobierno para la humanidad que supere el individualismo y bregue por recrear cabezas políticas", "estamos vivos de milagro. Cuidemos la vida. Entendamos que la especie es nuestro nosotros", finalizó.
Fotos: EFE.