La reunión de mandatarios, prevista inicialmente para diciembre pasado en Caracas, fue suspendida por "problemas de agenda"; de algunos presidentes. Luego fue reprogramada para el pasado 31 de enero, pero volvió a ser aplazada, esta vez por problemas médicos de la argentina Cristina Fernández.

Al respecto el canciller paraguayo, según declaraciones a la agencia de prensa oficial de su gobierno, dijo que Venezuela, que hoy ocupa la Presidencia pro témpore del Mercosur, está realizando consultas para definir una fecha que coincida con la agenda de los jefes de Estado.

Son varios los temas trascendentes que los jefes de Estado deben discutir en esta cumbre. Por un lado, la definición concreta de la oferta que el bloque presentará en forma conjunta a la Unión Europea para la firma de un Tratado de Libre Comercio, lo que pondría fin a casi 15 años de conversaciones. Días atrás el canciller Luis Almagro afirmó que la oferta está casi pronta, y que de ella participarán todos los países del bloque.

Por otra parte, en la cumbre pendiente se producirá el retorno de Paraguay al bloque, luego de más de un año y medio de suspensión, motivada por el derrocamiento de Fernando Lugo. Ese país deberá en ese sentido asumir la presidencia pro témpore del Mercosur. Al respecto, Almagro visitará Asunción la próxima semana, en lo que será la primera visita a Paraguay de un canciller uruguayo en cinco años.