Las disposiciones corresponden al tramo argentino de los ríos Paraná y Paraguay e implica una limitación a la carga comercial fluvial en barcos que no sean de bandera argentina.

De aplicarse, la medida afectará en forma contundente a Paraguay, ya que el 80% del comercio exterior de ese país entra y sale a través de esa vía  mediante su propia flota mercante. Es una medida similar a la que Buenos Aires aplica desde noviembre pasado y que perjudica directamente al puerto de Montevideo.

Al  participar recientemente  en un encuentro de transporte fluvial en su país, el subsecretario de Puertos y  Vías Navegables argentino, Horacio Tettamanti, había adelantado que se proyecta impulsar nuevas medidas para "aprovechar las necesidades logísticas del interior brasileño y de Paraguay, para hacer valer la llave de ser la salida la mar a través del Paraná";.

El funcionario admitió que "habrá crecientes tensiones con Brasil, con Paraguay y con Bolivia";, de forma similar a las que surgieron con Uruguay.

"No con sus ciudadanos y gobiernos, sino con los intereses económicos allí instalados, porque defendemos nuestra soberanía fluvial";.

Tetttamanti aseguró que la idea es dar más carga a los barcos con bandera argentina.

El diario ABC de Asunción publica que los empresarios guaraníes ya han pedido a su Gobierno que responda en forma enérgica a una medida que califican como "vergüenza"; .  

Señalan que responde a la pérdida total del negocio de la Hidrovía por parte de Argentina, ya que por un tema de costos y seguridad los armadores locales, regionales e internacionales optaron por moverse bajo bandera paraguaya.

De implementarse, esta medida afectará además la intención uruguaya de fomentar la utilización por parte de exportadores paraguayos y bolivianos de las terminales de Montevideo y Nueva Palmira.