Campaña electoral

Germán Coutinho: Bordaberry "es la persona indicada para ser el presidente de Uruguay en los tiempos que se vienen"

Germán Coutinho y Pedro Bordaberry. ©Nicolas Celaya/AdHoc
Germán Coutinho y Pedro Bordaberry ©Nicolas Celaya/AdHoc

Este fin de semana se proclamará oficialmente a Germán Coutinho como candidato a vicepresidente por el Partido Colorado. El intendente de Salto fue elegido en medio de una fuerte polémica interna en donde los sectores minoritarios reclamaron estar representados en la fórmula. Previo a la proclama En Perspectiva entrevistó al candidato para conocer cómo trabajan junto a Pedro Bordaberry de cara a octubre. En el diálogo sostuvo que "mientras los otros cerraban rápidamente fórmulas y no avanzaban en el programa, nosotros no cerrábamos fórmula, pero ya teníamos pronto nuestro programa".

(emitido a las 9.05 hs.)

ROMINA ANDRIOLI:
El próximo sábado, el Partido Colorado (PC) reunirá a su Convención Nacional. Lo hace varias semanas después que sus competidores para las elecciones de octubre y con un objetivo concreto: proclamar oficialmente a Germán Coutinho candidato a vicepresidente.

Recién el viernes de la semana pasada Batllistas de Ley (BL) confirmó que apoyará al intendente de Salto, aunque dejó en claro que la molestia por su designación aún existe. En ese sector se esperaba que la fórmula representara a todo el partido y cuestionaron el proceso seguido por Vamos Uruguay (VU).

Superada, aparentemente, esta crisis, la fórmula colorada enfocó todas sus baterías en la campaña, confiando en lograr un buen resultado en octubre que le permita llegar al ballotage.

¿Cómo atraviesa este proceso el compañero de fórmula de Pedro Bordaberry?

Vamos a conversarlo con él mismo, Germán Coutinho, candidato a vicepresidente por el PC.

Acaba de retornar de Buenos Aires, donde junto con Pedro Bordaberry participó en una serie de actividades. ¿Qué fueron a buscar en Buenos Aires y qué consiguieron?

GERMÁN COUTINHO:
Fuimos con el mismo criterio con que hemos salido desde que empezó a salir el equipo que conformamos con Pedro. Con los mismos criterios que cuando estuvimos en Estados Unidos, en ese vínculo político con representantes demócratas y republicanos y con nuestra colectividad uruguaya allí, y también el escenario de la inversión. Lo mismo en España cuando estuvimos con Rodríguez Zapatero y Aznar, con uruguayos que están allí y también el escenario de la inversión. En el mismo sentido del encuentro político con Alfonsín, una persona responsable, con quien intercambiamos muchas cosas y nos nutre de insumos de todo lo que puede ser el presente y futuro para la región. También con Macri, conversamos de todos los tiempos políticos y también fuertemente de, por encima del relacionamiento o la hermandad entre Uruguay y Argentina, profesionalizar un protocolo de cómo relacionarnos. También la parte empresarial, la cena con Eurnekian, en la que hablamos de Uruguay, de la inversión, del contexto. Y también por supuesto la parte política, nos encontramos con uruguayos que nos quieren ayudar, con uruguayos que en otros tiempos ayudaron fuertemente.

Y dentro de un mes vamos a volver, vamos a abrir una sede central y una departamental en Buenos Aires. Eso nos va a permitir conectarnos con mucha gente. Hay mucha expectativa, estamos muy entusiasmados con lo que fue nuestra visita por la capital Argentina.

NICOLÁS BATALLA:
¿Qué tan posible ven eso de captar votos de uruguayos residentes en Argentina, visto que siempre han constituido una base frenteamplista importante? Hay elecciones que se han ganado o casi, por ejemplo la elección de 2004, con esos votos que cruzaron el charco.

GC - Sí, fue lo que nos trasmitieron nuestros compatriotas. Nos vinimos muy entusiasmados, vimos en ellos un entusiasmo, y en lo que nos trasmitieron también. Nos decían que en el 2004 aquello era solamente venir a votar a una fuerza política, más allá de lo que había sucedido en otras épocas, tanto en el 80 como en el 90, cuando se venía también a participar en la elección y en la fiesta de lo que es una elección a través de nuestro partido. Eso en el 2004 no sucedió, es tal cual usted lo cuenta. Ya no fue tan así en la elección pasada, más allá de que sí en un número importante, y ahora hay otra expectativa de participación, otra expectativa de retorno, otra expectativa para ayudar.

RA - ¿Ven que hay frenteamplistas radicados en Argentina, en Buenos Aires concretamente, que antes vinieron a votar al FA y que se han cambiado al PC? ¿Qué es lo que captan allí?

GC - El entusiasmo de volver a venir a votar, de ser parte y de juntarse con nosotros. Fue lo que nos trasmitieron dirigentes históricos, que de eso saben mucho, para nosotros era casi una primera experiencia. Y después uruguayos que viven allí por diferentes circunstancias, que casi no estaban involucrados en el tema y que están dispuestos a ayudarnos y a hacer el esfuerzo de ser parte de todo esto. Así que nos vinimos muy motivados. Y que también están conmovidos viendo el esfuerzo que estamos haciendo, sin parar, de trabajar para el 26 de octubre meternos en el ballotage. Es lo que nos está pasando en todas partes.

NB - ¿Por qué no se reunieron con el oficialismo argentino? ¿No los quisieron recibir o no estuvo planteado por un tema de afinidad?

GC - No estuvo planteado porque allí también está la parte oficial. Estamos casi en sesión permanente con Argentina en un relacionamiento de gobierno a gobierno. Y no queremos ser parte ni para uno ni para otro escenario. Puntualmente lo nuestro era una gira política partidaria con esa perspectiva que le trasmitía, y en ese día a día el gobierno argentino nos hubiera puesto en una agenda que no es la nuestra.

NB - ¿Hay una afinidad especial por ejemplo entre Bordaberry y Macri?

GC - Creo que también con Alfonsín hay una historia de intercambios, manejos y de responsabilidad y tradición. Fue algo también impactante. Lo de Macri sí con ese pragmatismo, ese recorrer Buenos Aires, verlo de la manera que lo vemos. Me parece que sí, hay una afinidad de pensar en el presente, en el futuro, es muy difícil que Macri haga referencia hacia atrás, es muy pragmático. En todo eso seguramente nos sentimos identificados.

RA - ¿Cuál entiende que tendría que ser la relación con el país vecino?

GC - Muy profesional. Los países por encima de todas las cosas que se manejaban, de amistades, ideologías, intercambios, tienen intereses. Yo lo vivo permanentemente con Concordia. Si tengo uno de los amigos políticos, y en este caso oficialista, que es peronista, es el intendente de Concordia, pero cada vez que tenemos que hablar de determinados temas de Salto y Concordia, allí él va a luchar por todos los temas que le correspondan, cuando aparece ley de pesca, cuando aparece el acuífero, cuando aparecen un montón de temas con respecto a su ciudad y yo con respecto a la mía. Siempre hay que tener buenas relaciones, pero cada uno ahí tiene que saber que defiende lo de su localidad.

NB - Llamó la atención que durante esta visita usted y Pedro Bordaberry fueran a los estudios de ESPN e hicieran la propuesta de crear una zona franca audiovisual. ¿En qué consiste ese planteo?

GC - Eso ya está en nuestro programa. Fuimos a mirarlo, a palparlo, a tocarlo. Es el estudio único y más grande de América Latina, no queríamos dejar de conocerlo, ver cómo es, porque lo imaginamos en algún momento en alguna zona franca o en Uruguay. Lo decían los propios empresarios que están allí: "Estamos pasando momentos de inflación y estamos a una hora o a pocas horas de no tener inflación o de estar en otro escenario que nos dé la oportunidad de producir eso mismo que está pasando allí". Uno se encuentra con un mundo americano, están los periodistas colombianos, los periodistas de todo el escenario y de allí va al mundo. ¿Por qué eso no puede suceder en Uruguay? Entonces fuimos a ver lo que ya está en nuestro programa y lo que vamos a intentar promover. La verdad es que nos genera una expectativa importante lograr eso en el Uruguay.

RA - ¿En qué consistiría más precisamente el proyecto?

GC - En la producción de audiovisuales.

RA - ¿Qué tipo de inversiones entienden que se pueden atraer, o desarrollos de proyectos locales?

GC - En este caso es lo mismo que se está trasmitiendo a nivel deportivo, de eventos, con todo lo que es la tecnología, archivos, todo lo que allí sucede de productos televisivos de una cadena mundial como es ESPN que lo hagan en Uruguay. Que lo mismo que hoy está instalado en la Argentina, tanto en San Isidro como en Buenos Aires, se pueda hacer desde algún lugar del Uruguay.

NB - El sábado que viene el PC reunirá su Convención Nacional con el objetivo de proclamarlo candidato a vicepresidente. Algo que era bastante difícil de imaginar hace cinco años, cuando aún no se había convertido en intendente de Salto, y más difícil aún cuando junto con Pedro Bordaberry decidieron impulsar VU. ¿Cómo se conocieron ustedes dos?

GC - Hace 15 años Pedro va a integrar el equipo en el Ministerio de Turismo y yo estaba sumándome al equipo del escribano Malaquina en la Intendencia de Salto, entre otras cosas Juventud y Deporte, Prensa, Desarrollo, también era representante de Salto para el exterior y era el coordinador de todo el turismo. Por lo tanto empezamos a coordinar Uruguay Natural, la creación de destinos, y cada vez que el trabajo era destino termas, lo hacíamos juntos. Ahí empezamos a transitar esos cinco años de trabajo, de gobierno. Después creamos juntos el grupo político que fundamos acá en el 2003, Batllistas para Siempre. A partir de ahí también trabajamos en esas primeras elecciones, y más allá de que él casi me apoyaba solo a mí acá, no nos fue muy bien. Después estuvimos cinco años sin participar en la actividad política, durante los cuales salimos a recorrer el Uruguay, ninguno tenía cargo, pudimos fortalecer los vínculos, empezamos a involucrarnos en temas, apareció el asado, apareció el deporte, aparecieron las diferentes actividades sociales, al no tener responsabilidades políticas, y fundamos VU.

Después todo lo que se vino. Fuimos senadores juntos, yo después gano el gobierno departamental y me vengo para Salto. Fueron 15 años a lo largo de los cuales fuimos procesando determinadas etapas, y hoy sentimos que ha sido un buen proceso, que estamos más compañeros que nunca.

RA - ¿Diría que son amigos hoy?

GC - Somos amigos, nosotros, nuestras familias. Pero yo siento que en verdad, como lo digo fuertemente, me sumo a un equipo que encabeza él y que esa amistad no termina en fórmula. Desde que se fundó VU, fui el primer presidente del sector, secretario general, gané la Intendencia para nuestro sector, la primera intendencia. En las elecciones de jóvenes aportamos 10.000 jóvenes de aquí, en la interna ganamos en Salto con casi el 50% de los votos. Pedro termina ganándoles a Vázquez y a Lacalle Pou, que son nuestros futuros adversarios, juntos en el departamento, casi 20.000 votos. Me parece que aparte de ser el amigo y de hacer la fórmula más fuerte en espalda con espalda y en que jugamos de memoria y seguramente vamos a intentar que eso sea una ventaja, he hecho todos los deberes.

***

NB - Desde la misma noche en que Bordaberry ganó la interna, algo que además era previsible en la interna del PC, su nombre estaba sobre la mesa como posible candidato a vice. Pero en junio, no hace tanto, usted afirmó que se bajaba de la eventual candidatura, y alegó que había recibido presiones, aunque después finalmente terminó aceptado. ¿Qué lo hizo cambiar de parecer?

GC - Primero, que nosotros, al igual que hace cinco años, festejamos en Salto lo que fue una gran victoria de Pedro. Por encima de las encuestas, por encima de que parecía que era algo que iba a pasar, que iba a suceder, ganar una elección interna en el PC dos veces seguidas con un sector que se presentó dos veces es todo un esfuerzo que nos genera una satisfacción importante. Es recorrer absolutamente todo el Uruguay y haber conformado un grupo político como el nuestro con unas características realmente importantes. Hacía cinco años Pedro ya había visitado Salto y lo habíamos celebrado acá. Lo mismo hizo en esta ocasión.

Y en aquel momento, cuando estábamos festejando, estábamos celebrando, habíamos decidido una hoja de ruta, que era 19 asambleas en todo el país para resolver el compañero, y –más con los porcentajes que se habían dado– se empezó a manejar mi nombre, eso inmediatamente generó acciones y reacciones de un montón de compañeros de todos los sectores que decían: "Si es Germán" o "si es de VU, nos bajamos, nos vamos". Todo eso me generó rápidamente una reacción, dije: "No, miren que no estamos en ese tema, eso no es lo que estamos hablando", atiné a eso. Pero es parte del pasado, mi expectativa está en lo que va a ser la convención del sábado. Salimos a recorrer el país en cuatro días, a conversar con todos los sectores, para dejar rápidamente de ser el candidato a vicepresidente de VU para ser el de todo el PC, para poder conversar y lograr que lleguemos de la manera que vamos a llegar el sábado, todos juntos a votar la fórmula.

Por suerte nunca pararon de trabajar los equipos técnicos. Por lo tanto mientras los otros cerraban rápidamente fórmulas y no avanzaban en el programa, nosotros no cerrábamos fórmula, pero ya teníamos pronto nuestro programa, que venimos presentando en cada acción. Un poco fue por allí. Sabíamos que era algo natural de la política, que todos tenemos expectativas, no fue la única fórmula que se cerró con dificultad, creo que nadie ha votado nada por consenso. Pero estamos pasando a la etapa del sábado, que es la que nos empuja, nos inspira. Pedro está haciendo un esfuerzo conmovedor recorriendo, caminando por los barrios, hay una agenda lindísima, nos van a faltar 78 días para meternos en el ballotage, y ahí tenemos que poner todas nuestras energías.

RA – BL anunció la semana pasada que lo apoyará como candidato, pero reiteró que la fórmula debió haber reflejado a todos. De hecho ningún dirigente de ese sector estuvo cuando usted fue presentado como candidato. ¿Qué piensa de ese hecho político?

GC - Me quedo con la cantidad de reuniones de todo el tiempo que tuvimos con el senador Tabaré Viera, después con el senador José Amorín, con el conformar los equipos de comando como los estamos conformando, con todos los dirigentes en todo el país. Me quedo con ese escenario.

RA - ¿Entiende que debió ser otra quizás la actitud de BL en este aspecto?

GC - No, esto ya es parte del pasado. Yo también dije ese día "agradezco a todos los representantes de todos los sectores del país de VU que en la recorrida me nombraron y me ofrecieron". Eso me empezó a gustar, me dio orgullo, me dio ganas, empecé a sentir que era un desafío lindo, y por lo tanto sabía que es algo natural en la política. Ellos tenían la aspiración de que un dirigente del sector integrara la fórmula, eso no se concretó y es comprensible que no estén contentos.

Pero también dije que iba a salir a conversar, a recorrer, a articular, a intentar convencerlos de que vayamos todos por lo mismo, y siento que es de público conocimiento que eso está logrado, es etapa superada en todos los sectores del PC, que estamos todos encolumnados atrás de Pedro, atrás de un programa, y que nuestra aspiración, después de dos elecciones, es nuevamente posicionarnos en el ballotage.

Hay una motivación distinta. En el 2004 todos sabíamos que era imposible trasmitir que seguiríamos en el gobierno. Habíamos actuado con mucha responsabilidad en el gobierno, entre lo partidario y el país habíamos optado por el país. En el 2009 fue hasta dónde nos recuperábamos, con un esfuerzo tremendo, pero también teníamos que administrar la ilusión, no generar desilusión, porque sabíamos que no íbamos a poder llegar al gobierno. En este caso es distinto.

NB - De todos modos, ¿cómo entiende que puede jugar ese episodio en la campaña?

GC - A mí los temas de esa característica me fortalecen. Si tenía la responsabilidad de intentar acompañar y sacar esto adelante, ahora tengo el triple de responsabilidad. Creo que lo asumí, lo asimilo y voy a intentar demostrarles a todos que fue una buena decisión que yo integre la fórmula, y que sea una fórmula del interior, una fórmula que se estire por todo el país y una fórmula que demuestre con trabajo, con esfuerzo, con responsabilidad, con seriedad, con honestidad, con todo, que era la fórmula de mi partido para ir al ballotage y para ganar la elección.

RA - En campaña es habitual que las fórmulas presidenciales se dividan el accionar. ¿Qué papel tendrá usted hacia octubre? ¿Bordaberry le ha pedido algo en particular?

GC - Es lo que decía, jugamos de memoria. Yo igualmente me vengo a integrar al trabajo que encabeza él. En primera instancia, al estirar la fórmula al interior me parece que él va a poder potenciar mucho más y trabajar mucho fuertemente en Montevideo, recorrer Canelones, y yo intentaré armar equipos de trabajo con mis compañeros de todos los sectores en los otros 17 departamentos. Eso es lo que hemos estado trabajando y organizando. La próxima semana vamos a arrancar una gira nacional, que vamos a hacer en conjunto, vamos a ir por todos los departamentos con todos los que nos quieran acompañar. Va a arrancar el 15 en Río Negro y el 16 en Soriano, y después vamos a estar en todos los departamentos. Pero principalmente sí, Pedro va a poner el foco de atención en Montevideo y Canelones y nosotros vamos a trabajar en el interior. Porque la tarea de intendente es una tarea de primera línea, que nos permite conocer las realidades, trabajando y enfocando fuertemente el contexto de todo lo demás.

RA - ¿Va a buscar capitalizar esa alta aprobación como intendente en Salto en votos para su partido?

GC - Sí. También vamos a intentar capitalizar nuestro candidato, en el momento justo, con experiencia comprobada, que fue capaz de trabajar en los momentos más difíciles del país, que con una valentía tremenda fue quien empezó a liderar el resurgimiento del partido ya en mayo del 2005 como candidato en Montevideo después de haber votado el 8% en Montevideo y el 11% a nivel país. Allí tenemos un potencial. También un equipo de programa de todos los sectores de primera línea que nos está haciendo un programa posible, inteligente, sentido y que estamos pudiendo trasmitir con simpleza a todos los uruguayos. Hay un gran equipo detrás de ese programa, pero también sabemos que no todos los mejores uruguayos son de nuestro partido ni están trabajando en nuestro programa, por eso también el intercambio de mano tendida para involucrar a más uruguayos. Así que creemos que el potencial, por encima del respaldo de la historia, del partido, de un partido que vuelve a tener chance, va a ser un diferencial importante, que tenemos el mejor candidato.

NB - ¿Cómo se define políticamente: colorado, batllista, bordaberrista?

GC - Colorados y batllistas somos todos desde hace un buen tiempo. Se hace difícil hablar de uno mismo, pero yo me defino en estos 44 años sin ninguna duda, tengo el empuje o el manejo de esta nueva realidad política y este nuevo escenario político y eso me parece importante. Pero soy un batllista práctico, sencillo, preocupado por dar soluciones a los problemas cotidianos de la gente, lo veo acá en el día a día. Convencido de tanto mercado como sea posible para mejores precios, para todo, pero también tanto Estado como necesite la gente para poder ayudarla. Estoy orgulloso de este país, un país que en forma ininterrumpida casi en 93 años ha marcado –hoy casi no discute– que es un gran país. Pero claramente soy colorado y batllista, batllista y colorado, sin andar en el escenario de tener que decirlo en todo momento. Y claramente me identifico con el "pedrismo", siento en Pedro una inspiración de que es el uruguayo que está pronto y que es la persona indicada para ser el presidente de Uruguay en los tiempos que se vienen.

RA - Un oyente, Gonzalo de Pocitos, dice: "El PC tiene su misión en la historia del país a través del batllismo. Sin embargo aún no se ha visto en la campaña un mensaje claro con esos valores". ¿Qué responde a esta crítica?

GC - Yo siento que en todo lo que han sido nuestras presentaciones de programa hay mucho batllismo. Y en cada uno de los escenarios también lo hemos estado trasmitiendo. En el recorrer y el buscar la participación hay mucho batllismo. En poner una persona del interior en la fórmula, que vive en el interior y que expira hasta las realidades desde el norte, me parece que hay mucho batllismo. Y en cada una de todas las medidas. No solamente en "Para volver a vivir en paz", sino en los trabajos de los que estamos buscando la eficiencia de nuestras empresas en el Estado hay mucho batllismo, fijándose en que no se peleen por ver quién hace la obra más grande, sino de qué manera van a llegar con eficiencia y a mejores costos para poder trasmitir eso. Hay batllismo. En lo que le decía, tanto Estado como necesite la gente, tanta competencia para poder llegar con mejores precios. En todo lo que vaya procesando el Uruguay hay batllismo. Somos hinchas de nuestras empresas del Estado, estamos buscando que tengan equipos técnicos y personas responsables que las puedan administrar y manejar de la mejor manera posible y las defiendan. Siento que todo el tiempo está involucrado el batllismo en nuestro partido y en nuestro candidato a presidente.

NB - El hecho de haber estado estos años como intendente lo ha puesto en la vereda de enfrente, de algún modo, de su compañero de fórmula en algunos temas en que usted si se quiere ha estado un poco más cercano al gobierno. Es el caso por ejemplo del ICIR (Impuesto a la Concentración de Inmuebles Rurales), el impuesto que la Suprema Corte de Justicia terminó declarando inconstitucional, que tenía a Bordaberry como uno de sus detractores –incluso su familia fue una de las que presentaron acciones ante la Suprema Corte de Justicia–, mientras que usted estaba del otro lado, con el Congreso de Intendentes, impulsando una solución al problema de la caminería rural. ¿Cómo sobrellevan esas diferencias políticas?

GC - Como fue en su momento. Pedro fue senador, con todas las cualidades que mostró, y el mejor senador: cero falta, proyecto, interpelaciones a la altura de lo que todos los uruguayos terminamos elogiando, aportando desde la oposición, criticando y haciendo lo que tenía que hacer. Y yo hice mi tarea como intendente.

NB - ¿Pero tienen evaluaciones distintas de lo que ha sido el gobierno de Mujica?

GC - No, en ese momento y desde diferentes puntos yo le he podido trasmitir y me ha podido trasmitir diferentes temas. Por ejemplo, lo que ha sido la presidencia de Mujica con el Congreso de Intendentes, realmente nos puso en segunda línea de gobierno. Y Pedro Bordaberry en su visita al Congreso lo trasmitió, que hay un camino a seguir con el Congreso de Intendentes, que le va a dar la misma jerarquía. El hecho de ser intendente de un departamento en el interior brinda mucha experiencia, porque uno convive todos los días con las dificultades cotidianas que tiene la gente, que son muchas y a veces son intrasmisibles. Entonces ese fortalecimiento me parece importante. Elige un intendente como candidato a vicepresidente, creo que ahí está clara la importancia que tenemos.

Y con respecto a lo que usted decía, nosotros siempre fuimos hombre de nuestro partido y lo que manifestó nuestro partido, nuestros parlamentarios nunca salimos en sentido contrario. Lo que sí hicimos siempre fue defender los destinos, si va a haber determinado destino, el Congreso Intendentes definía que ese destino tuviera el camino que tenía que tener, que era claramente el apoyo en su momento a la caminería. Pero no así específicamente a lo que podía suceder. Pero creo que el Congreso y el presidente Mujica hizo grandes aportes, entre ellos varios que son de público conocimiento y fundamentalmente lo que fue la presencia de directores, ministros y un montón de gente, que jerarquizó el congreso y hay que seguir jerarquizándolo porque es una gran institución.

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Transcripción: María Lila Ltaif