En este sentido, indicó que todavía "falta mucho" por negociar en torno a este acuerdo, pero subrayó que algunos de los asuntos que están sobre la mesa son el "movimiento de personas" y las "telecomunicaciones".

"Educación no está y salud no está. Todos los Estados se reservan para sí las regulaciones en materia de educación. Las normas educativas las aplica cada uno de los Estados. La educación aquí (por Uruguay) es libre y hay competencia. Hay pública y hay privada, pero la reina es la educación publica, y eso pasa en todas las partes del mundo", dijo el canciller.

Del mismo modo, Nin Novoa afirmó que en las negociaciones del TISA "no va a haber una discusión sobre los servicios educativos desde el punto de vista comercial" dado que es un derecho universal.

En abril pasado, miles de trabajadores uruguayos marcharon por el centro de Montevideo en contra de la adhesión del país al TISA, una reivindicación que también estuvo presente en el paro de 24 horas que realizaron miles de funcionarios públicos uruguayos el pasado 26 de junio.

Una de los motivos de las reivindicaciones sindicales de abril fue el "secretismo" con el que consideran que se están llevando a cabo las negociaciones del acuerdo, del cual no han trascendido muchas informaciones y que comenzó a tener presencia en la prensa tras una filtración de Wikileaks en 2014.

Actualmente, la página oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores de Uruguay tiene colgado un documento en el cual apunta algunos detalles del TISA, tales como la importancia que puede tener para Uruguay, sus objetivos y sus participantes. EFE