Se trata de propuestas que apuntan a promover estándares constructivos que garanticen la accesibilidad e inclusión de las personas no videntes a los espacios públicos, dotando a la vía pública de instrumentos necesarios para que el tránsito peatonal sea seguro y sin exclusiones.

En ese sentido Barrutta propuso implementar texturas táctiles de suelos (TGSI), agregar a toda columna del nomenclátor la "huella táctil"; en lenguaje braille y que a  toda nueva construcción o reparación de veredas o carteles del nomenclátor se le incluya la textura táctil de suelos y/o la correspondiente huella táctil en lenguaje braille.

La curul dijo que "la integración es una obligación que atañe al Estado y a la comunidad toda, debido a esto deben evitarse aquellos obstáculos que coarten en su contenido esencial del derecho a libertad de circulación y movimiento de personas no videntes";.

Aseguró que las propuestas tienen como objetivo una mayor inclusión social, implementando facilidades táctiles que garanticen la accesibilidad y el desplazamiento seguro.