El oscuro negocio de la cal
Mas allá de que ni la Ley que dio origen a Ancap, ni los estatutos de Cementos del Plata hasta el año 2012 permitían desarrollar el negocio de la cal, nuevos datos revelan notorias oscuridades del mismo.
Por ejemplo, en el año 2015 Brasil recibió más cal que la exportada por Ancap. Las denuncias no coinciden: ese año Ancap exportó 38.840, en tanto la Aduana brasileña registra 41.277. Es decir unos 2.477 toneladas que a precio promedio da una diferencia de unos 800.000 dólares. Pero además, de acuerdo a los registros de exportación una planta apta para producir 150 toneladas diarias, en realidad produjo 161 los 365 días del año incluidos fines de semana, feriados y paradas técnicas.
Y por si esto fuera poco... en el 2013 se firmó contrato con Pleno Verde para transporte de esa cal a 85 dólares la tonelada. Aunque el precio de venta fue en promedio de 90 dólares. Sin olvidar que Ancap recibió multas por unos 10 millones de dólares por diversos incumplimientos. Las preguntas surgen solas: ¿cuál fue la ganancia del ente? ¿Cómo se controló el cumplimiento de los contratos? ¿Quién firmó esos contratos?