Para Nin, la forma de solucionar la "polarización" que vive el país caribeño es mediante un referéndum revocatorio del presidente, el cual está previsto en la Constitución. Al respecto, reconoce que existe una "alteración institucional", ya que dice que Venezuela no está "aplicando los mecanismos constitucionales previstos" por la normativa de ese país.

Por otro lado, el canciller se refirió al enfrentamiento entre el Secretario General de la Organización de Estados Americanos y el presidente venezolano Nicolás Maduro. Para Nin, la disputa "ha llegado a un nivel casi personal" y recalcó que lo que hace Almagro es "cumplir con su rol".

El ministro dijo que en Venezuela ya se juntaron unas dos millones de firmas para comenzar el proceso de referéndum. Para convocar a votación, se debe alcanzar cuatro millones de firmas. Para revocar al presidente, una vez conseguidas las firmas, se debe alcanzar más votos de los que tuvo el presidente cuando fue electo. Si eso sucede, quien asume el gobierno es el vicepresidente, el cual es electo por votación si se decide en 2016, y por el gobierno si el referéndum revocatorio se da en 2017. Al respecto, el canciller uruguayo dijo que "no se puede dilatar la confirmación de las firmas para tratar de que el referéndum sea en el 2017".