Según los datos recogidos el déficit no se produce por la caída de la recaudación, que por el contrario creció un 2.3% en relación al año anterior, sino por el incremento de los gastos del Estado.

Según Astori, el ajuste fiscal permitiría incrementar la recaudación en unos 500 millones de dólares. Pero veamos algunos datos que revelan el comportamiento fiscal de los organismos públicos.

Las intendencias de todo el país acumulan un déficit global de unos 600 millones de dólares. Un tercio corresponde a la Intendencia de Montevideo.

Si bien las empresas públicas lograron detener los abruptos déficits obtenidos hasta el 2014, todavía subsiste allí una situación de inestabilidad financiera que podría terminar en un aumento de las tarifas públicas.

El BPS declaró un déficit de 390 millones de dólares y a ellos se deberá sumar la solución que se alcance para resolver el problema de los llamados "cincuentones";. Y además, según el propio gobierno, subsiste el problema que significan los 400 millones de dólares anuales de déficit en la Caja Militar.

En medio subsiste la caída del PBI; los pagos de la deuda externa estimados en algo más de 13.000 millones de dólares hasta el 2019. Y el déficit continuado en nuestra balanza comercial, aproximado a los 2.000 millones de dólares anuales.

Hace unos años, los economistas neoliberales decían: "Alguien tiene que pagar el almuerzo";. Ahora veremos quién será.

La columna de Carlos Peláez