Investigación

Espionaje militar en democracia

Casa Castiglioni .
Casa Castiglioni

Los archivos incautados en la casa del coronel ® Elmar Castiglioni " uno de los líderes del Foro Libertad y Concordia - en octubre del año pasado revelan la actividad interna de los servicios en democracia por lo menos hasta el 2009, informa hoy el periodista Samuel Blixen en un extenso informe publicado por el semanario Brecha.

"Ese espionaje derivó en un operativo de desestabilización del gobierno cuando se dieron a conocer las conversaciones interceptadas entre el prosecretario Costa y el diputado colorado Jorge Barrera, en que el primero le advertía al segundo que el Fmi se proponía "matar"; al gobierno, ahogándolo financieramente en un contexto de virtual "corralito"; bancario"; – asegura el informe.

Agrega que de los documentos incautados surge que la inteligencia militar mantuvo un sistema de espionaje sobre personalidades políticas, partidos políticos, sindicatos y organizaciones sociales durante todo el período que va desde 1985 hasta, por lo menos 2009 (aunque la fecha es tentativa), aplicando los mismos criterios de la dictadura.

Entre los más conspicuos "objetivos"; de la inteligencia militar en democracia aparecen en las carpetas del coronel Castiglioni el general Liber Seregni, Tabaré Vázquez, Carlos Julio Pereyra, Germán Araújo, Julio María Sanguinetti (y su hijo Julio Luis, al frente de una carpeta rotulada "Cangrejo Rojo";), el contralmirante Eladio Moll, el coronel Pedro Montañez, Gustavo Penadés, Azucena Berrutti, la fiscal Mirtha Guianze, el pastor Emilio Castro, Rafael Michelini, Macarena Gelman, Jorge Setelich, Jorge Vázquez y los jueces penales Alberto Reyes y Rolando Vomero, además de Leonardo Costa y Jorge Batlle (sometido a escuchas ya en 1983).

Los archivos robados o copiados de Inteligencia militar estaban guardados en 65 cajas ubicadas en la casa de Castiglioni (foto) y se llegó a ellas después de una rápida intervención del Fiscal Carlos Negro y la jueza Beatriz Larrieu, quienes recibieron una denuncia de Javier Miranda, entonces a cargo de la Secretaría de Derechos Humanos de presidencia de la República y hoy presidente del Frente Amplio.

Esta incautación se suma a otra realizada por orden de la ex Ministra de Defensa, Azucena Berrutti, quien en una unidad militar ubicó algo mas de 1.000 rollos de microfilmaciones con archivos de la dictadura.

En esos archivos hay nombres de delatores e informantes. Blixen dice: "Se ha argumentado que dichas listas son irrelevantes porque se identifican mediante seudónimos; pero no sería demasiado difícil ubicar la verdadera identidad de quien estaba infiltrado –u operaba como informante– en el directorio del Partido Nacional; o quien asistía, en el local del MLN Tupamaros, a las charlas sobre seguridad que se brindaban a un escogido grupo de militantes.

Por lo pronto, se sabe que un tal Ricardo Fierro (si ese es su nombre verdadero), empleado de la Intendencia de Montevideo y afiliado a Adeom, estaba encargado, en noviembre de 1990, de vigilar estrechamente al entonces intendente Tabaré Vázquez para determinar su rutina en función de los objetivos de una "operación Tabaré";.

La columna de Carlos Peláez