En la primera parte de la sección, los invitados comentaron los incidentes que se produjeron el domingo 27 en la previa del partido que provocaron la suspensión del clásico. Brenta afirmó que una de las señales las dio la cantidad de gente que concurrió (más de 18.000 personas en un estadio de 60.000 espectadores), ya que el público que podía ir pensó "yo no voy a participar de esto". En alusión a los actos violentos, Pascale dijo que "la tolerancia, la convivencia pacífica y el respeto ya no existen" y las situaciones violentas revelan "el estado de anomía y anarquía social" que estamos viviendo. También agregó que "vivimos en un mundo de fantasía en que se equivocan en los diagnósticos, en las soluciones y no se animan a hacer las cosas que hay que hacer".

El segundo tema que debatieron los tertulianos fue las definiciones que tomó el Frente Amplio (FA) en su Congreso: impulsar el voto uruguayo en el exterior, que no prescriban ni puedan ser amnistiados los crímenes de lesa humanidad y de guerra y la prohibición a servicios informáticos públicos y privados de dar información que viole la intimidad de los individuos, además de estimular el desarrollo de viviendas con énfasis en lo social por encima del lucrativo.

Por último, opinaron sobre la muerte de Fidel Castro y lo que puede pasar luego de este hecho. Una de las conclusiones fue que los cambios no van a ser tan drásticos a lo que ya viene sucediendo, en relación a la normalización de las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Cuba. Garchitorena puntualizó que el momento en que se pueden "abrir otras posibilidades" va a ser cuando muera Raúl Castro porque en esa instancia, el poder va a salir de la familia y tendrán que ver qué harán los cubanos para sucederlos. En este punto, Pascale dijo que tres factores van a ser claves cuando ese hecho suceda: "la familia Castro –los hijos de Fidel y Raúl-, el ejército –quien es el que tiene el poder- y el exilio cubano".