Fuego al capital
El Instituto Cuesta Duarte reclama una reforma tributaria de segunda generación. "Lo que sigue sin estar gravado fuertemente son las rentas al capital", según el miembro del Instituto Daniel Olesker. Sostuvo que aumentando levemente las tasas actuales se podría pasar de 600 a 1.000 millones de dólares al año de recaudación solo en ese concepto.
No hay ninguna razón para que existan diferencias entre la renta al capital o la tierra, dijo Olesker, y sostuvo que medidas como esta balancearían el presupuesto y se podrían atender las promesas electorales.
Para el economista "el dilema presupuestal" -el dinero que se necesita-, unos 1400 millones adicionales, podrían cubrirse solo con la inercia en los cambios impositivos" de segunda generación que plantean.
"El Fonasa y el salario mínimo redujeron la pobreza", explicó, pero dijo que el sistema de salud "ya no puede cumplir con esa función". La evolución del salario mínimo acompañó a la inflación, de acuerdo al análisis del Cuesta Duarte, por lo que tampoco ha permitido seguir reduciendo la pobreza.
"El mercado interno fue más importante para el crecimiento hasta el 2015 que el mercado externo", señaló. Olesker reclama más "medidas anticíclicas" para mejorar la economía del país. Sostuvo que las inversiones no han sido suficientes y "pasado un quinto del período de gobierno no se ha invertido un quinto de lo previsto".
El enlentecimiento del consumo y la inversión pública "no ayudó a que la economía salga del estancamiento". Reconoció que todo apunta a la nueva planta de UPM y sus obras complementarias para apoyar una salida de la llamada "estanflación". "Sin inversión interna pública y sin consumo asalariado, su efecto es absolutamente menor", estimó el economista.
Para Olesker el Turismo, por ejemplo, tiene efecto real sobre la economía. "El efecto de empleo del turismo es muy importante y no es derivado de la inversión extranjera directa. Cuando la temporada es buena, los departamentos involucrados tienen un buen año luego", señaló, y afirmó que "es un mito que Uruguay sea un país pequeño que tiene que vivir de la inversión extranjera directa".
En 2005 el principal problema era el desempleo, hoy, reflexionó Olesker, es el enlentecimiento de algunos sectores industriales. "Uruguay exporta 83% de productos primarios y 17% de productos industrializados. De ese 17%, el 90% tiene como destino el Mercosur", afirmó.
El bloque regional es destino del 28% de las exportaciones: 20% de ellas a Brasil, 5% Argentina y 3% a Paraguay. Alertó que un Tratado de Libre Comercio con China "liquidaría" el sector industrial "ya que promocionaría la exportación de productos primarios como soja y celulosa, los principales productos que hoy vendemos" al principal país asiático, finalizó el exministro de Desarrollo Social.
El documento realizado por el Instituto Cuesta Duarte, dijo, "tiene cuatro mensajes fundamentales: Uno es el dilema presupuestal, sobre el cuál ya se le entregó al gobierno y no fue tomado en cuenta. El segundo está relacionado a la inversión pública. El tercer mensaje habla de las políticas de empleo en sectores industriales en problema. El cuarto componente trata los aspectos tributarios".