El gobierno pidió guardar "secreto" sobre la licitación de la regasificadora
El gobierno pidió al Parlamento guardar "secreto" sobre la información referida al proceso licitatorio que terminó favoreciendo a la constructora brasileña OAS en las obras de la planta regasificadora. La solicitud fue realizada por Gas Sayago, el consorcio formado por UTE y Ancap para la gestión del emprendimiento.
La información está referida a las ofertas que se presentaron para hacerse con la obra. Según el diputado nacionalista Pablo Abdala, al proceso se presentaron 18 firmas, de las cuales cinco fueron preseleccionadas. Pero, según indicó, los informes enviados son relativos solo a las dos que Gas Sayago eligió para la negociación final.
Se trata de Contreras-SACEEM y de OAS, la brasileña que resultó adjudicataria de la obra del gasoducto que debía conectar el barco regasificador con la infraestructura terrestre de la planta por un monto de US$ 64 millones.
Abdala sostuvo que, luego de un análisis "milimétrico", se puede concluir que "no resultó tan barata".
Según el diputado, OAS presentó una propuesta US$ 7 millones más cara en costos generales, mano de obra y en el tramo terrestre del gasoducto. Allí, según expresó, cotizó US$ 1,5 millones más por kilómetro.
La diferencia a su favor, dijo, fue una cotización sensiblemente inferior en lo que refiere al tramo subacuático del gasoducto.
Lo llamativo, señaló, es que esa fue precisamente la parte que la brasileña no pudo encargarse. OAS no tenía ningún tipo de experiencia en ese tipo de obra, y fue obligada por Gas Sayago a subcontratar a otra empresa.
Abdala pedirá este miércoles la autenticación, ante la Justicia de Brasil, de un documento en el que la Policía Federal de ese país considera "creíble" la versión que señala que OAS le pagó una coima de US$ 3 millones a Fernando Pimentel, ministro de Industria durante el gobierno de Dilma Rousseff, para interceder a su favor ante las autoridades uruguayas en la licitación de la planta.
La revelación fue hecha por el propio Pimentel en el marco del "acuerdo de delación premiada" por el cual en ese país un acusado puede obtener una reducción de su pena por aportar información.
Si bien los investigadores señalan que aún no se pudo comprobar que, efectivamente hubo sobornos, aseguran que los hechos relatados por el ex jerarca tienen todas las características de ser verdaderos.
Fuente: Ecos y Rompkbzas