Ramos destacó el inicio de un debate sobre este asunto a partir de las manifestaciones del exdirector del Banco República, Pablo García Pintos, quien admitió que utilizó los fondos provenientes de las tarjetas corporativas para realizar sus aportes al Partido Nacional.

Consultado en La Mañana de El Espectador Ramos se mostró contrario a la idea de prohibir el aporte privado a los partidos, "en todo caso habría que ver cómo se limita". Y alertó que si se concreta esa limitación aparece el riego de que la alternativa esté en el salario de los militantes, "porque ahí tendríamos un Estado compañero".

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